🌸 CAPITULO VEINTISIETE
treasure hunt /   búsqueda del tesoro
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PASÓ UN DÍA DESDE la dinámica que los estudiantes tuvieron, donde ganaron Su Ho y Young Mi al ser los únicos que quedaron de pie. Esos momentos fueron tensos antes y durante el juego, especialmente porque Su Ho no dejaba de mirar con enojo a Seo Jun por cargar a Ju Gyeong, y Seo Jun lo miraba de la misma manera porque Su Ho se atrevió a seguirle el juego al cargar a Young Mi. Habían pasado la línea de lo tolerable, hicieron cosas que no serían perdonables y el enfrentamiento el resto del viaje recién estaba empezando.

Young Mi estuvo fuera de sí durante las siguientes horas luego del juego, incluso salió corriendo una vez Soo Ah y Tae Hoon pudieron soltarla luego de celebrar. Quería estar sola, le lastimaba ver a Seo Jun con Ju Gyeong, además que quería evitar a Su Ho por un tiempo. ¿En serio fue capaz de hacer ese contacto físico con ella? Entendía que fue para seguirle la corriente a Seo Jun porque él hizo lo mismo con Ju Gyeong, pero decir que fue incómodo para ella es poco. No se conocían de nada, incluso Young Mi le tenía cierto miedo pero respetaba que sintiera cosas por Ju Gyeong.

Ju Gyeong, su mejor amiga y con quién Seo Jun buscaba sacarle celos lo más que pudiera. Ella sentía cosas por Su Ho, era demasiado obvio y Young Mi temía que ella pudiera malinterpretar todo lo que el chico Lee hizo durante el juego, no quería lastimarla justo como Seo Jun la estaba lastimando a ella al ver a la persona que gustaba, estar con otra persona.

Intentó acercarse más a Ju Gyeong una vez puedo recuperarse de su pequeña crisis mental. La chica parecía actuar normal frente a ella y esperaba que se sintiera de la misma manera, de todas formas estaría a su lado el tiempo que fuera necesario hasta asegurarse que no sintiera rencor alguno. Incluso llegó a entrar al juego que alguien sugirió, a pesar que ella por voluntad propia no quería.

—¡Ahn Hyun Kyu! Te hiciste encima antes.

—Estás bromeando, ¿no? -El chico de lentes colocó su mano en el detector de mentiras y este marcó que estaba mintiendo, así que todos lo golpearon con sus respectivos martillos de juguete que cada uno tenía.

—Kim Si Hyun -Fue el turno de Hyun Kyu de elegir–. Soy la mejor diosa del universo.

—¡No! -Dirige su mano hacia el detector, el cuál marca que mintió dándole una descarga eléctrica.

—¡Mintió! -Todos la golpearon con los martillos.

—¡Lee Su Ho! -Señala Si Hyun al pelinegro que no había participado hasta ese momento–. He dado mi primer beso.

—¡Tres, dos, uno! -El chico se queda un segundo en silencio pensativo pero no responde, así que lo golpean con los martillos–. Él nunca jugó al juego, rayos.

—¿Amor o amistad? -Su Ho le pregunta a Seo Jun, quién por desgracia, se encontraba en el círculo del juego.

Young Mi observó al chico expectante a su respuesta, el chico Han coloca su mano sin esperar ni un segundo más para responder la pregunta que le hicieron.

—Amor -El chico dijo la verdad, según el detector de mentiras.

—¡Qué cursi! Cómo es cursi, golpéenlo -Soo Ah exclamó y el resto obedeció, golpeando al chico Han. Young Mi no iba a desaprovechar una oportunidad como esa, así que fue la primera en golpear repetidas veces a Seo Jun con el martillo que tenía en la mano sin importarle medir su fuerza al hacerlo.

Fue el turno de Seo Jun y le preguntó a Soo Jin.

—Soy guapo, ¿verdad? -La señala con su martillo.

—Sí -La chica responde pero el detector decide que era mentira, así que el resto la golpea.

—¿Yoo Tae Hoon o Eighteen? -Soo Jin le preguntó a Soo Ah, la chica sonrió con nerviosismo.

—Mi amor por Yoo Tae Hoon, por supuesto -El detector de mentiras decide que estaba diciendo la verdad y todos celebran por el amor de la pareja. Young Mi no pudo evitar sonreírles con tristeza, estaba en la etapa de soltera enamorada que sentía un poco de envidia de las parejas felices.

Igual todos los golpean por su amor empalagoso. El juego no estaba yendo tan mal como Young Mi, incluso se estaba divirtiendo un poco si omitimos el hecho que Seo Jun estaba tan cerca a ella pero no la miraba ni siquiera de reojo.

—¡Hay alguien que te gusta! -Soo Ah le pregunta a Ju Gyeong.

—Sí -La chica coloca su mano en el detector y este indica que es una mentira, por lo que la golpean con sus martillos.

—¿Por qué mentiste y dijiste que había alguien que te gustaba? -Reclaman sus amigos.

Ju Gyeong gira el detector de mentiras hacia Tae Hoon.

—Hubo un momento en el que quisiste romper con Soo Ah -Le dice al chico, quién deja su martillo a un lado para responder totalmente decidido de su respuesta.

—No -El detector de mentiras dice lo contrario y todos se quedan en silencio por lo incómodo que fue eso.

—Inténtalo de nuevo -Exige Soo Ah–. Hubo un momento en el que quisiste romper conmigo.

—Oh, no. Dije que no -El chico vuelve a negar bastante nervioso y el detector de mentiras vuelve a dar el mismo resultado negativo–. ¿Ves? Dije que no.

—Inténtalo de nuevo. Hubo un momento en el que quisiste romper conmigo -Soo Ah alzó su voz.

—¡Absolutamente no! ¡No! ¡Nunca! -Le responde con la misma intensidad de la voz.

—¿No? No lo creo. Parece que deberías decir que sí.

—Estás equivocada.

—¿Es eso cierto?

—Soo Ah, es un juego tonto, puede equivocarse -Young Mi intenta apaciguar las cosas entre la pareja pero no parece tener resultado.

—¿Es lo que crees? -Soo Ah se levanta mirando a Tae Hoon bastante enojada.

—No -Soo Ah le pisa la mano a Tae Hoon, haciendo que el detector de mentiras siguiera pasándole choques eléctricos–. ¡Cortemos!

—¡Soo Ah! -Sus amigas gritan al mismo tiempo cuando la mencionada sale corriendo, evidentemente afectada por el juego.

Ahora parece que la pareja más amorosa de la escuela había terminado, además que las amigas de Soo Ah deberían pasar horas de horas consolando a la pequeña pelinegra después de terminar su rompimiento por un tonto juego para niños. Y así fue durante esa noche luego de haber jugado, las chicas que compartían carpa con Soo Ah tuvieron que escucharla llorar toda la noche sobre los lamentos de su relación y cómo no se había dado cuenta antes sobre las intenciones de Tae Hoon sobre terminar su amorío.

Young Mi le repitió una y mil veces que debían conversar eso con tranquilidad, que no debían dejarse guiar por un tonto juego. Estuvo largos minutos brindándole razones para que fuera más racional, así Soo Ah terminó estando de acuerdo pero dejó en claro que no estaba preparada para tener esa conversación con Tae Hoon, que debía pensarlo. Así que Young Mi no pudo hacer mucho más por su amiga, más que asentir y decirle que estaba bien.

Al día siguiente, el profesor Han juntó a todos porque tenía una actividad sorpresa para todos y debían estar presentes para decir las reglas. Lo que estaba peor es que fuera en medio del bosque.

—Bien, niños. ¿Cuál creen que es la parte más importante del viaje? -Pregunta el profesor a los estudiantes que estaban frente a él.

—Hablarle casualmente al profesor.

—Juego de pelotas -Respondieron muchos al mismo tiempo.

—La parte más importante del viaje es la búsqueda del tesoro.

—Eso es aburrido -Muchos vociferaron en desacuerdo.

—Los escondí bien. Así que vamos a disfrutar del paisaje.

—¡No es como que fuéramos niños de primaria! -Hyun Kyu dice entre los demás.

—No tenemos 8 años, tenemos 18 -Apoya Si Hyun delante del chico de lentes.

—¡El premio por el primer lugar es una tarjeta de regalo de 50 mil wons! -El grito del profesor cayó el bullicio de todos los estudiantes que estaban en desacuerdo con el juego "infantil".

Todos se dispersaron por el bosque en busca del famoso tesoro que debían encontrar, incluso Young Mi fue arrastrada por Soo Ah a pesar que no tenía ánimos de jugar ni de estar parada pero tampoco podía hacer mucho para oponer resistencia. Estaba pensando seriamente en pedirle al profesor Han que regresaría al autobús para poder sentarse el resto de lo que durara el juego, no le interesaba pasarse mirando el mismo árbol por horas, se sentía muy deprimida que ni siquiera le importaba.

Soo Ah encontró un sobre que debía dar una pista, aunque nadie entendió absolutamente nada. "Solo conoces la profundidad del amor en el dolor de la separación" Young Mi quiso ponerse a llorar en el momento que Soo Ah leyó esa frase en voz alta, no dejaba de pensar en Seo Jun y la situación de ambos, se sentía demasiado sensible. Tuvo que poner la excusa que un insecto se le metió al ojo para poder justificar sus lágrimas con ganas de salir de un momento a otro. Es más, la frase también le afectó a Soo Ah por su breve separación con Tae Hoon, así que eran dos chicas con el corazón roto intentando seguir con sus vidas.

Bueno, lo de Soo Ah duró poco porque en un descuido que Young Mi intentaba borrar rastro de sus lágrimas, la pequeña pelinegra corrió al encuentro de Tae Hoon. Young Mi se gira al escuchar a lo lejos alboroto, por lo encuentra a Soo Ah y Tae Hoon abrazados demostrando que se habían reconciliado, ella no puede evitar sonreír abiertamente porque la relación de ambos era muy bonita. Dejando de lado que fueran demasiado amorosos en público, se notaba a kilómetros que se amaban demasiado.

Así como Seo Jun y Young Mi se querían, o se quisieron alguna vez.

Ahora su sonrisa de felicidad se volvió a una de nostalgia, todo le recordaba a Seo Jun y eso cada vez dolía más. No solo dolía en el corazón, dolía en lo muy profundo de su alma.

Busca con la mirada al chico pero no puede encontrarlo por ningún lado, ni a sus amigos que siempre estaban con él como si fueran goma de mascar. Se le hizo raro verlo desaparecer de un momento a otro, tampoco había señales de Ju Gyeong desde que Soo Ah arrastró a Young Mi hasta las profundidades del bosque. ¿Dónde estaban? A caso... ¿Estaban juntos? De solo pensarlo, la punzada en su cuerpo y las lágrimas volvían a aparecer pero no quería terminar con su estabilidad emocional en ese momento, así que se convenció de que no era así y que solo era una muy mala coincidencia.

Soo Ah ahora estaba pegada a Tae Hoon y eso quería decir que Young Mi volvía a estar sola, ni siquiera Soo Jin estaba cerca. Era extraño para Young Mi, no había visto a Soo Jin desde la primera actividad que tuvieron en grupo y donde ella ganó con Su Ho, fue como si la tierra se la hubiera comido y eso es completamente raro, puesto que Soo Jin estuvo hablando con ella sobre los tantos planes que podían hacer juntas para no aburrirse.

Young Mi camina por el bosque alejándose de sus amigos en busca de Soo Jin pero no estaba por ningún lado, incluso estuvo preguntando a algunos de sus compañeros si la habían visto pero todos coincidían en la misma respuesta: Nadie vio a Soo Jin.

Había perdido la cuenta de cuanto tiempo llevaba caminando en busca de su amiga pero fueron largos minutos, sus pies empezaban a doler y estaba sedienta. Se apoyó de un árbol para poder respirar y descansar un rato, no sabía donde se encontraba pero tampoco estaba alejada de sus compañeros para no perderse. Podía ver a lo lejos un campo de trigo dónde habían un par de personas buscando el famoso tesoro que el profesor Han había escondido en alguna parte del extenso bosque.

—¡Young Mi! -Un compañero suyo que reconocía solamente por el nombre de Kim Jong Ho apareció corriendo y bastante agitado, cómo si hubiera corrido por largos minutos a toda velocidad.

—¿Qué sucede? -Le pregunta confundida. El chico se apoya del mismo árbol que ella y se inclina para tomar grandes bocanadas de aire.

—Se... están... peleando -Dijo el chico en cada bocanada de aire a penas y Young Mi se reincorporó tomando una posición más firme.

—¿Peleando? ¿Quién se está peleando? -El chico agita su mano intentando recuperar el aire–. Kim Jong Ho, ¿quién está peleando?

—Su Ho -Traga en seco y se esfuerza por terminar de hablar–, y Seo Jun.

Fue suficiente para el chico decir el último nombre para que Young Mi saliera corriendo por el mismo camino en el que Jong Ho había llegado.

—¡Espera! -Grita el chico y la pelinegra se detiene de golpe–. Están en el campo de trigo.

—Gracias.

Young Mi corre hacia el campo de trigo lo más rápido que puede a pesar que se encontraba a aproximadamente más de un kilómetro de distancia a donde ella estaba antes, sumando el hecho que ya venía cansada de haber caminado en busca de Soo Jin, no fue obstáculo alguno para ir hacia la pelea entre su mejor amigo y el chico que gustaba de Ju Gyeong. Tenía miedo que alguno de los dos terminara matando al otro, cuando se enfrentaban no había nadie que los pare y eso le dejó muy en claro la vez que se pelearon en la cafetería, con la única diferencia que ahora sería muy difícil que alguien los separe debido a que el profesor Han se encontraba demasiado lejos.

Acelera sus pasos e incluso da pasos largos para llegar más rápido, puede ver a lo lejos figuras moverse en el extenso campo de trigo mientras otros grupos de compañeros caminaban no tan lejos de ahí pero no eran conscientes de la pelea que se estaba dando en el interior.

Ahn Hyun Kyu y tres chicos más llegaron a la escena antes que Young Mi, la chica pelinegra se abrió paso entre ambos para encontrarse con la escena de Su Ho sobre Seo Jun.

—¿Eres humano? -Pregunta Su Ho sosteniendo a Seo Jun de la camiseta.

—¿Eres ciego? ¿Cómo qué clase de ser me ves? -Seo Jun hace rodar a Su Ho, haciendo ahora que él estuviera encima del chico Lee.

—¡Sabes que ella me gusta!

—¿Es por orden de llegada? ¿Qué pasa si ella te gusta primero? -Su Ho levanta su pierna y expulsa a Seo Jun por encima de él, aterrizando de espaldas con fuerza.

—¿Por qué tiene que ser Lim Ju Gyeong? -Su Ho exclama con enojo.

—¡Tampoco sé por qué es ella!

No se sabía si podría romperse un corazón más de lo que ya estaba, pero Young Mi volvía a sentirse adolorida y con ganas de llorar, por quinta vez en menos de dos días. No aguantaba mucho tiempo más pero sus piernas tampoco reaccionaban para irse de ese lugar, sabía que quedarse a verlos discutir por Ju Gyeong solo la lastimaría más, como si fuera posible.

Seo Jun jamás se dio cuenta sobre la presencia de Young Mi, por lo que tampoco notó su ausencia cuando la poca dignidad y sentido común de la pelinegra, la ayudaron a salir corriendo del campo de trigo. Solo corrió sin pensarlo, necesitaba salir de ese lugar que a pesar de encontrarse en medio del aire libre, se sentía ahogar. Tenía que llegar a dónde nadie pudiera verla deshacerse en lágrimas hasta cansarse, cómo ya antes lo estuvo haciendo en la oscuridad de su habitación.

Toda esa tarde, Young Mi había desaparecido de la vista de sus amigos por largas horas. La pelinegras estuvo escondida en el bosque no tan lejos del campamento para no perderse, se la pasó llorando y cuestionándose si había algo mal en ella, y sobre todo, qué era lo que Ju Gyeong tenía y ella carecía. Fueron largas horas llenas de autotortura en las que Young Mi se las pasó sentada en el césped y hojas secas mirando el cielo, fue por pura suerte que nadie la haya visto en ese estado porque no quería darle explicaciones nadie. Al menos no en ese momento porque sabía que cuando volviera a aparecer, sus amigos le preguntarían sobre donde había estado pero ya tendría tiempo para eso.

Ya era de noche, los pequeños insectos que habitaban el bosque ya hacían acto de presencia y Young Mi ya se había cansado de estar en el bosque aunque su tristeza seguía presente. Sus compañeros no estaban cerca ni en sus carpas debido a que se había organizado una actividad dónde se presentarían algunos talentos como baile y canto, así que ella tenía el pase libre para movilizarse donde quisiera sin ser vista.

Parecía un zombie, incluso arrastraba sus pasos mientras se dirigía hacia las carpas en busca de algo. Llega a una de las carpas de los amigos de Seo Jun, rebusca entre las cosas de los chicos y encuentra lo que más estaba buscando debajo de toda la ropa en el interior de la maleta, lo toma con una mano y luego abandona la carpa sin ser vista por nadie ni preocupada por si alguien estaba cerca, ni le importaba.

No estaba tan lejos del lugar donde se estaba dando la actividad de talentos, así que decide detenerse un segundo para mirar a lo lejos como sus compañeros se encontraban muy felices frente al escenario que habían armado. Todo estaba muy lindo, si la situación fuera diferente, no había duda que Young Mi se encontraría con sus amigos a disfrutar del espectáculo e incluso, se atrevería a subir al escenario a cantar algo. Pronto ve como empiezan a aplaudir y Seo Jun se levanta de su lugar, Young Mi frunce sus cejas confundida y decide acercarse un poco más para ver lo que estaba por ocurrir. Seo Jun sube al escenario y toma una guitarra, la música empieza a sonar así como él toca el instrumento que tenía en mano y canta.

La letra de la canción era de amor, Young Mi se quedó al lado del árbol más cercano observando como su amigo cantaba con tanto sentimiento cómo si sintiera la letra de la canción en lo profundo de su alma y es que, a pesar que al principió recordó algunos momentos que pasó con Ju Gyeong, terminó por recordar los momentos que pasó junto a Young Mi. Su mejor amiga, aquella chica que le había roto el corazón sin siquiera saberlo después de la pelea del karaoke al irse con Alex y luego juntarse con Jae Hyun. Seo Jun se sentía traicionado, dolido y triste por parte de Young Mi, así que actuaba de forma indiferente con ella y se había alejado por completo porque estaba segura que ella prefería tanto a Alex y Jae Hyun por encima de él.

Seo Jun desvía la mirada por un segundo viendo la figura de su mejor amiga detrás de un árbol que sin importar la poca luz de la zona, pudo reconocerla con rapidez. Ella le corresponde la mirada pero pronto se aleja del lugar, retomando su camino de perderse en el interior del bosque.

Una vez terminada la actividad de talentos, varios de los estudiantes se quedaron cerca para seguir pasando el rato entre ellos pero Seo Jun salió al bosque en busca de Young Mi, sentía que había algo mal en ella y peor aún de verla ingresar a ese extenso laberinto de árboles de noche. No podía evitar sentirse preocupado por ella, le tenía mucho cariño y era la persona más cercana que había en su vida.

Fue por obra del destino que Ju Gyeong también saliera al bosque para devolverle a Su Ho una campera que Tae Hoon le había entregado.

Young Mi estaba caminando por los tantos caminos de cemento que habían por el bosque que eran seguros, ya no se metería hasta las profundidades del bosque porque sería difícil regresar al ser de noche. Tenía la botella de vidrio en una mano y ya le había dado varios sorbos mientras caminaba, por suerte nadie la había visto y mucho menos un profesor, sería de mala suerte meterse en problemas y rogaba para que no sea así.

Seguía su camino con tranquilidad y dando pequeños sorbos cada cierto rato, hasta que se detuvo al ver a dos personas bastantes conocidas para ella. Bajó la botella con lentitud y agudizó su mirada para confirmar de quienes se trataba y cuando lo hizo, solo pudo volver a sentirse decepcionada. Seo Jun y Ju Gyeong estaban juntos, la chica se encontraba sentada sobre una roca mientras él estaba agachado frente a ella acariciando su rostro con ambas manos. Young Mi se quedó quieta viendo esa escena a lo lejos, una lágrima se deslizó por su rostro pero no se tomó el tiempo para borrarla, en cambio volvió a tomar un largo trago de la botella que quemó su garganta y siguió con su camino.

No quería seguir viendo todas las señales de que Seo Jun jamás estaría con ella porque estaba interesado en alguien más.

Estuvo por largos minutos caminando lamentándose en voz baja sobre su desastre amoroso, hasta que se detuvo en un pequeño tronco que servía como asiento y no estaba tan lejos del campamento pero tampoco tan expuesto a la vista. Era el lugar perfecto para sentarse y que nadie la viera, apenas logra sentarse porque todo empezaba a darle vueltas y la vista era nublada, tenía que parpadear muchas veces para lograr ver mejor.

—¿Tan mal soy, señor grillo? -Le pregunta al insecto que se encontraba en algún lugar del bosque emitiendo su típico sonido–. ¿Es que no soy lo suficientemente bonita ni agradable para nadie? ¿Es eso? -Vuelve a tomar un largo trago. El contenido de la botella estaba mucho más abajo de la mitad–. ¿Por qué siempre me rompen el corazón, señor grillo?

Las lágrimas volvieron a hacerse presente, esta vez, ella no se limpió ni una y dejó que todas salieran.

—Nadie me quiere, señor grillo.

—¿Young Mi? -Escuchó a lo lejos y la chica torpemente volteó la cabeza–. ¿Qué haces aquí? -Se acerca a ella con rapidez.

—Tú no eres el señor grillo -Señala a Seo Jun, sus palabras eran arrastradas y casi imposibles de entender por el efecto del alcohol. El chico mira la botella que tiene Young Mi y se lo arrebata–. Eso es mío, árbol. Devuélvemelo.

—No -Young Mi se levanta y estira su mano para alcanzar la botella pero Seo Jun lo aleja–. Mira el estado en el que estás, no te lo devolveré.

—Lo harás.

Intenta volver a alcanzar la botella pero Seo Jun lo aleja de nuevo, más la inestabilidad de Young Mi, fue suficiente para que la pelinegra se enredara con ambas piernas y terminara cayendo pero en el transcurso de su caída y su intento de sostenerse de algo para evitarlo, toma la chaqueta de Seo Jun haciendo que ambos cayera al césped. Seo Jun cayó encima de Young Mi, ambos soltaron un quejido de dolor al aterrizar, especialmente la pelinegra que se había golpeado la cabeza y por amortiguar la caída del chico.

—¿Estás bien? -Seo Jun se reincorpora levemente pero aún seguía encima de ella, Young Mi tenía los ojos apenas abiertos y levantó su dedo pulgar indicándole que estaba bien. Él sonríe de lado y luego la analiza al estar tan cerca a ella, solo fueron dos veces en las que estuvo así y en esas dos ocasiones, sintió ganas de besarla. Dirige su mano para quitarle los mechones de cabello del rostro para verla mejor–. ¿Por qué estuviste bebiendo?

—¿Por qué no? Me rompieron el corazón, señor grillo -Encoge sus hombros con indiferencia–. ¿Por qué nadie me quiere, señor grillo? El chico que me gusta no me quiere de la misma manera en la que lo quiero.

—Entonces es un idiota.

—Oh, sí que lo es -Young Mi ríe con gracia y Seo Jun sonríe–. Es el chico más idiota que he conocido pero lo quiero -Trago en seco–. Me he enamorado de ese idiota -Suspira antes de seguir hablando–. Duele estar enamorada de él, ¿sabe por qué, señor grillo?

—¿Por qué?

—Porque está enamorado de otra chica -Responde inmediato y Seo Jun no podía estar más confundido. Pensaba en cualquier chico que tuviera en su vida menos en él mismo, no podía ser eso–. ¿Es que a caso ella es más bonita que yo? ¿Es más agradable? ¿Por qué ella y yo no?

—No creo que haya chica más bonita que tú -Acaricia su mejilla con suavidad y Young Mi mueve su cabeza en busca de más contacto físico con la mano de él–. En todo caso, ese chico es un idiota y ciego porque no sabe lo que tiene en frente.

—Estoy de acuerdo, señor grillo -Young Mi abre los ojos por completo y entre su mirada borrosa puede ver el rostro de Seo Jun, lo reconoce de inmediato y ríe con gracia confundiendo al chico una vez más–. Esto es muy gracioso.

—¿Por qué? -Seo Jun ladea la cabeza y Young Mi deja de reír pero su sonrisa se mantiene ahí, dirige su mano hacia la mejilla de él para asegurarse que sea real.

—Te pareces.

—¿A quién?

—Al idiota que me gusta -Seo Jun abre sus ojos más no poder sorprendido por la respuesta de la chica, le cayó como balde de agua fría porque era lo último que esperaba escuchar algún día.

La sorpresa fue más cuando el contacto físico aumentó y las caricias de mejillas se quedaron en segundo plano, ahora Young Mi se atrevió a hacer algo mucho más intimo que si no fuera porque estaba con una botella de alcohol encima, nunca en la vida se atrevería a hacer algo de esa magnitud. Seo Jun se quedó con los ojos abiertos sin saber cómo reaccionar mientras tenía a Young Mi de frente, porque a partir de ese momento, todo cambiaría para ambos pero aún era incierto si sería para bien o para mal.

Porque Eun Young Mi se había atrevido a besar a Han Seo Jun.

y llegó el momento más esperado por
toda latinoamérica unida

AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA

beso de seo jun y young mi, beso de
seo jun y young mi, pero no presuman
que hubo beso de seo jun y young mi.

aaaaaa hasta yo me emociono