[ ♡ Día 03: ′′Mierda. Escondete en el baño...′′ ♡ ]

NARRA; PAMELA ″PAMMY″ WOODS.

INTERIOR – HOTEL – HABITACIÓN DE HUÉSPEDES – DE MADRUGADA.

Luego de salir del club nocturno ambos nos dirigimos hacia un hotel en el que nos quedaríamos para pasar la noche [No mal piensen porque no es lo que están pensando, pervertidas...]. Eran casi las tres de la mañana y mi estómago comienza a gruñir. Ryan se rió y luego me llevo hacia la habitación en la que me iba a quedar.

Ambos entramos en la habitación y yo me dirigí hacia la cocina con ganas de comer algo antes de irme a dormir. Me quito los tacones y los pateo en el camino, dejando que mis talones se relajen después de estar en esos tacones durante horas. Saqué los pinches de mi cabeza, aflojando la tensión en mi cabeza.

Frotando mi sien con los ojos cerrados, tarareé un suspiro de alivió mientras caminaba sobre las frías lozas del piso de la cocina. Abriendo el refrigerador, saqué el helado y dejé el recipiente en el mostrador antes de sacar una cuchara del cajón.

Me enderecé y abrí el delicioso helado de chocolate, pero entonces algo llamo mi atención, cuando miro hacia mi lado veo una botella de vino tinto y me recordó a Ryan, así que cojo una copa de cristal y sirvo el vino tinto en la copa.

Entonces regreso a la cocina y le entrego la copa de vino tinto a Ryan quién me dió las gracias con una de sus hermosas sonrisas que hacen que mi corazón se encoja.

Ryan y yo nos dejamos caer en el sofá y comencé a comer el delicioso helado mientras Ryan comenzaba a beber del vino tinto
mientras hablábamos.

— Nada como un helado de chocolate a las tres de la mañana — dije mientras me metía otra cucharada de helado en la boca.

—

Sí, sono mejor en el momento — me dice Ryan.

— Así que... Pamela — comenzó a decir Ryan.

— Hmmm... — ladeó la cabeza hacia un lado indicándole que continuará.

— ¿Por qué estás pensando en trabajar en publicaciones? — Ryan me pregunta con interés reflejado en sus ojos.

— Bueno, me encanta leer — le respondo como si fuera lo más obvio del mundo.

— Eso tiene sentido — Ryan se ríe entre dientes mientras respondía.

— ¿Cuál es tu libro favorito? — le pregunté.

— Los principios de la economía de Alfred Marshall — respondió Ryan mientras toma un sorbo de su vino tinto.

— No, no lo es — le contradije.

— Sí, lo es — respondió Ryan.

— No, quiero decir... quiero decir, ficción. Como... como un libro de verdad — le expliqué.

— No hago ficción — me dice Ryan.

— Quiero decir, ¿has visto como me visto? — le pregunté.

— ¡Eres pagana! — me dice Ryan con una pequeña sonrisa tirando de sus labios.

— ¿Pagana? — le pregunté levantando las cejas.

— ¡Te estás volviendo pagana! —dijo Ryan mientras señalaba mi vestido y como estaba actuando.

— La ficción es un escape de la realidad, es una forma en la que, como, puedes vivir cien vidas, o incluso mil — le expliqué a Ryan.

— No quiero vivir mil vidas — respondió Ryan y yo ruedo los ojos.

— ¿Bueno? Y yo prefiero ver como se seca la pintura — le dije sarcásticamente.

Entonces Ryan accidentalmente movió su brazo y derramó la copa de vino por su camiseta, el líquido se esparció hasta sus pantalones.

— Yo, um, eso no fue... eso no se suponía que sucediera — dijo Ryan.

— Solo tenemos que remojarlo antes de que se manche. ¿Me puedes dar tus pantalones y camiseta? — le pregunto a Ryan.

— Pamela... — murmuró Ryan.

— ¡Dame tus pantalones y camiseta! ¡De lo contrario, se manchará! — dije y escuché a Ryan suspirar.

Veo como Ryan lentamente se fue desabotonando la camiseta blanca que ahora estaba manchada de vino tinto. Se fue quitando los botones uno por uno hasta quitarse la camiseta en cámara lenta.

Respiré profundo intentando contener las ganas de mandar todo a la mierda y saltarle encima a Ryan y hacerle de todo.

Mis ojos verdes casi se salen de sus órbitas cuando veo su torso desnudo con todos sus músculos, bíceps y abdominales bien marcados que hasta parecen dorados. Su cuerpo parecía esculpido por los mismísimos dioses griegos.

Ryan sonrió de lado al notar mi mirada sobre él.

— ¿Te gusta lo que vez? — me pregunta Ryan pícaro.

Yo sentí mis mejillas arder ante tenerlo frente a mí y sin camiseta.

— No... — dije mintiendo.

Ryan se rió y se pasó una mano por su cabello castaño marrón oscuro antes de proseguir a quitarse los pantalones hasta quedar solo en boxers.

‹′′¡Oh Dios mío! ¡Estoy en el paraíso!′′› Pensé en ese momento.

Entonces se volteo para recoger su ropa del suelo y oh Dios mío... Su culo... el maldito está bien nalgón.

‹′′¡Ahora sí puedo morir en paz!′′› Pensé en ese momento.

Entonces se acercó a mí y me entregó la ropa y yo me quedé embobada mirando su cuerpo tonificado.

— Será mejor que cierres la boca antes de que comiences a babear — bromeó Ryan.

Ahí fue cuando reaccioné y rápidamente entre corriendo al baño para lavar la ropa tras escuchar la risa de Ryan.

Una vez que termine de lavar su ropa, salgo del baño y se la entrego.

— No tenías que hacer eso — me dice Ryan y cuando iba a responderle, se escucharon unos golpes en la puerta.

Yo me sobresalte.

— ¡Pamela! Pamela, abre la puerta — dice una voz familiar.

Él rostro de Ryan palidece un poco y de hecho me siento mal por él. Nathan no lo encontrará en mi habitación, independientemente de lo que haya venido a buscar.

— ¿Es ese Nathaniel? — pregunta Ryan.

— ¡Abre la puerta! — grita Nathan golpeando de nuevo la puerta.

— ¡Escóndete en el baño! — le digo a Ryan.

Yo miro a Ryan de nuevo, tratando de memorizar su hermoso rostro antes de que Nathan lo mutile. Ryan se escondió en el baño y entonces ahí es cuando fui a abrirle la puerta a Nathan para confrontarlo.

— ¡Hey! — saludé a Nathan cuando abrí la puerta.

Nathan entró a la habitación y me hizo a un lado antes de abrir la puerta del baño, revelando a Ryan allí parado en boxers.

— ¡Hola, Nathaniel!, no te ví. ¿Cómo has estado? — dice Ryan forzando una sonrisa cuando lo ve.

— ¡Maldito Ryan! — le grita Nathan haciendo puños sus manos.

— Creo que es hora de que me vaya... — dice Ryan sonriendo nervioso.

— Tu no irás a ninguna parte — le dice Nathan molesto mientras lo estampa contra la pared, listo para molerlo a golpes.

C O N T I N U A R A...

Y aquí les dejó unos Gifs de Ryan y su culo.

[#DefinitivamenteTimothyGrandaderosTieneUnBuenCulo, #MeLoLigue, #AlMenosLeViElCuloYLosAdbominales]