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La flamante rubia, poseedora de la belleza y carácter insidioso atribuidos por su genética, meneó sus caderas, combinando el flameo de su vestido negro formal que provocaba un movimiento casi hipnótico para las miradas masculinas, a medida que se acercaba a nuestra ubicación, es decir, a nuestro sector íntimo que contaba con dos asientos individuales y uno doble más de los cuales este último par se hallaba enfrentado a nosotros y los individuales se encontraban ubicados detrás nuestros observando a cada ventana de los lados del avión, a expensas de que alguien los ocupe.
Su figura en proceso de desarrollo y su cara angelical le regalaban un aspecto más inofensivo, como quien nunca sería capaz de matar ni a una mosca, y más aún con su media coleta alta y el característico color rosado de sus labios; la personificación de un querubín era lo más apropiado para caracterizarla si tuviese alguien que juzgarla por su apariencia en ese momento, apenas conociéndola. Sin embargo, quien alguna vez osó sentenciar alguna vez de manera sabia: Las apariencias engañan. Y Tobias y yo sabíamos que Elinn sólo vestía como una niña bien, ya que ella no tenía ni siquiera una pizca de la bondad que pretendía emanar. Jamás había demostrado un gramo de empatía ni benevolencia.
Ella misma era capaz de matar incluso a una mosca... Dos moscas ahora, si hablamos con literalidad.
Ante su saludo con aires de superioridad y una supuesta amabilidad que se le escapaba de su tono, me limito a ladear la cabeza y a bufar en silencio, o al menos, eso intentaba, puesto que no deseaba parecer tan descortés a cada minuto, y menos cuando se trataba de un viaje de trabajo que implicaba diversión a la vez. De todas formas, reflexioné sobre la importancia de ambos polos y qué influía más en la formación de la personalidad y fue allí cuando hallé la conexión con Elinn. Entonces ¿es más importante el parecer que el ser? No si eres una Leviels, una dicotomía caminante. No importa lo mucho que te esfuerces por lucir dócil y serena si en el interior eres pura catástrofe y no te empeñas en ocultarlo; como una deliciosa manzana roja: sutil y delicada por fuera, pero que esconde un parásito en su interior que la condena a la descomposición por la eternidad.
Si Tobias hubiese tenido la mínima cortesía de anticiparme este nuevo escenario, la conversación conmigo misma y tal reflexión serían distintas ahora.
—No pensaba romper la racha de no verte la cara de desgraciada tan pronto, Leviels— pronuncié aquel apellido con tal exasperación que era capaz de quemarme por dentro. —¿Se puede saber qué diablos haces aquí?
Elinn se adentra con confianza en su ademán y se sienta precisamente frente a mí, en uno de los asientos dobles que se contraponía al que Cardinal y yo ocupábamos. La rubia cruza una pierna por encima de la otra y, con un gesto de suma arrogancia, chasquea los dedos con la intención de captar la atención de una de las azafatas que trabajaba en nuestra zona.
—Pues, vengo a trabajar, mi cielo— ella reclina su asiento levemente unos ángulos hasta quedar en un estado de comodidad absoluto. —¿Acaso Cardinal no te ha comentado la nueva modificación del tour?
Le dedico una mirada rápida a Cardinal, quien aún permanecía estático cerca de la entrada a este sector privado, y éste evita el contacto visual al concentrarse en los movimientos y las actitudes de Elinn, como si la estuviese estudiando sin tener un conocimiento previo de ella. Me arrimo unos centímetros en mi lugar buscando su mirada perdida en la joven rubia que me confrontaba mientras por mi mente se recitaban poesías de puro insulto hacia su persona.
—Compórtate, Elinn— se limita a pronunciar.
No tenía caso. La sumisión que ejercía Tobias sobre estas hermanas me sobrepasaban, me sacaban del juego sin siquiera dirigirme la palabra. No obstante, destacaba que Tobias se estaba comportando lo suficientemente extraño como para empezar a sospechar que todo esto escondia una gran verdad, algo más difícil de digerir y que requería de toda la cordura del mundo para asimilarla. Tobias se caracterizaba por ser un hombre con instintos dominantes; su ambición y su manía perfeccionista no daban lugar a actitudes sumisas con personas ajenas a sus proyectos o a su vida. La raíz de todas estas incongruencias en su discurso se revelaban como una cuestión más intensa de lo que parecía en cada manifestación como ésta. En conjunto con el juicio y la nota de Michael Berg en mi despacho, la totalidad de los eventos y la conducta con la que procedían dichos sucesos resultaban en sí mismos el justificativo perfecto para que Tobias y yo actuemos bajo la vigilancia de la ansiedad y la posibilidad de perder todo si pisamos un obstáculo o si no seguimos el plan al pie de la letra.
Lo que hacía preguntarme a la vez: ¿Acaso Tobias también estaba metido en algún problema similar al mío? ¿Estaba siendo amenazado por alguien más o... incluso el exitoso y corrupto abogado de la parte demandante, Michael Berg?
Con brusquedad me incorporo y me aproximo a su ubicación. Sin más preámbulos, decido llegar al meollo de esta nueva "modificación", ya que no iba a permitir que este escenario se vuelva corriente en los próximos días en Estados Unidos durante el tour.
—¿En qué estabas pensando, To... Cardinal?— digo al fin, cuidando mis palabras. —Más te vale que tengas una buena justificación porque sino te juro que...
—Tranquila, bebé. Sé que fue imprudente de mi parte el no avisarte sobre este arreglo de último momento— comenta abrazando un poco mi figura, mientras me observaba fijamente con un destello muy particular en su único ojo verde dentro de aquel disfraz. —Pero supuse que iba a hacerte un gran favor si te delegaba las tareas... Ya sabes. Pretendía que te desempeñes el mayor porcentaje en la fotografía como ya lo has hecho antes con Ghost y que te desvincules del estrés innecesario del papeleo y la organización del tour. Deseaba que estés tranquila.
Nuevamente parte de su defensa dejó detrás de sí un halo del pasado que componía una idea que en su momento nos había causado muchos problemas. Esa noción de la famosa "delegación de obligaciones" fue lo que había dado inicio a mi improvisada investigación con Lennart, en la cual hallamos una importante conexión entre Elinn y Cassidy, su antigua asistente, y lo que enfatizó una posible amenaza proveniente del abogado de los ex Ghouls.
Dejé escapar un pesado suspiro, saturado de estas incontinencias en el discurso de Tobias, entretanto echaba la cabeza hacia atrás, a modo de una manifestación casi involuntaria de mi intolerancia frente a estas circunstancias. Sin embargo, lo volví a observar con detenimiento y, otra vez, allí estaba esa expresión de desolación, de pura desesperanza. Consternado por la exteriorización que acababa de presenciar de mi parte, bajó sus manos a las mías y las sujetó con fuerza, implorando que por favor retenga y contenga mis emociones a flor de piel.
Al fin y al cabo, lo único que deseaba era que esté tranquila, pero ¿Cómo iba a lograr eso si aún continúaban desencadenándose estos dilemas? Esta falta de comunicación que no sólo nos mantiene fuera del proyecto como un todo, sino también, y con mayor grado de disyuntiva, nos alejaba y generaba que ambos transitemos por caminos distintos.
—Sabes que es casi imposible para mí estar tranquila cuando una Leviels se encuentra trabajando con nosotros— suavizo mi tono y no permito quebrantar este pequeño momento de conexión. De verdad quería entenderlo con todas mis fuerzas. —Es hermana de Cassidy, Cardinal. Ella forma parte del lado demandante de todo este caos judicial... Sé sincero conmigo, ¿De verdad quieres esto?
Después de un gran período de tiempo estando al lado de Tobias y sus personajes de Ghost, ya era una habilidad propia el poder reconocer su semblante más humano, incluso si estuviese portando una máscara de algún personaje en particular, como lo era ahora Cardinal. Sabía, entonces, que Cardinal y Papa Emeritus III escondían una persona avasallante, de aquellas que son pura emoción en sus expresiones y que, esta vez, quien se ocultaba detrás de todas esos ropajes papales, no iba a poder mantenerse en la penumbra por mucho tiempo.
—Tengo que hacerlo, Eva... Ella era mi única opción— exclama con una peculiar duda en su tono. —No tenía mucho tiempo para entrevistar a otras asistentes.
—Tienes que hacerlo, pero no quieres. Ya me has dicho todo con eso— sentencio. —Cariño, nadie te obliga a hacer esto. De verdad hubiese preferido mil veces que me dejes a cargo de todo a mí únicamente y no que elijas a alguien que podría apuñalarte por la espalda en cualquier oportunidad— él ladea la cabeza. —Comprendo que es demasiado tarde para lamentaciones y para exigirte más respuestas de las que me puedes dar ahora, pero, ¿por qué dices que debes hacerlo? ¿Cuál es esa motivación?
Retornó su centro de atención a mi rostro y se dejó llevar por un breve silencio que nos empezó a consumir al finalizar mi cuestión.
Aquel detalle que había percibido en si expresión se había manifestado nuevamente y esta vez parecía más vivo que nunca. Esa faceta de Tobias comprendía tal poder recargado de emociones que tenía la potencia de poseer a Cardinal hasta mimetizar sus expresiones como si lo encarnase a la perfección, así como una marioneta viva y que tenía conciencia propia.
Aquellos ojos verdes, uno de ellos obstruido por un lente blanco, destellaban el resplandor desolador que había podido captar hacía pocos minutos atrás. Un esplendor que nada tenía compatibilidad con una connotación positiva; una sensación que se escondía detrás de una apatía.
Su mirada parecía gritarme ayuda.
—Créeme, es lo mejor para los dos por ahora— suaviza acariciando mi mano con la intención de darme ánimos.
•••
¡Hola a todxs!
Espero que anden muy bien y que la cuarentena no les esté consumiendo la mente como en mi caso(?
Les quería comentar que estoy de a poco volviendo a retomar este fic porque me urge terminarlo para poder seguir con otros que también empecé (relacionados o no con esta historia).
También quería agregar con respecto al punto anterior que estoy haciendo un fic erótico (al menos lo estoy intentando) sobre Tobias que se titula "Lady Forge". No se alteren cuando no encuentren similitudes con la realidad porque literalmente todo es obra mía, a excepción de Tobias en sí mismo❤️ y sus amigos of course.
Sin más que agregar, espero que les haya gustado el capítulo de hoy (aunque fue un poco corto) y lean "Lady Forge" para más placer(?
Gracias por todo el apoyo❤️
A.M
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