Secreto revelado|계시 된 비밀

-Lalice...

-¿Sí?

-Me estas asfixiando.

Lisa hizo una mueca apenada mientras se alejaba de el.

-Lo siento. Es que...¡No te rías! -se quejó indignada mientras le pegaba un manotazo en el hombro-¡Chuky realmente da miedo!

-¡Pero es un maldito muñeco! Lo notas desde lejos, Liz. Además los efectos especiales son horribles.

-¡Pues para mi es muy real! -frunció el entrecejo adorablemente mientras se colocaba un paso más lejos de Jungkook en aquel sofá-no me hables, Jungkook. Me he enojado contigo.

-¡Oye! Ni se te ocurra. -advirtió el,volviendo a acortar la distancia.

Lisa en cambio,volvió a alejarse.

Y así fue por unos segundos más hasta que la rubia llegó al otro borde del sofá. Y Jungkook aprovechando ese momento para acorralarla,coloco una de sus manos en el respaldo del sofá y la otra en el brazo de este.

-No me digas que te enojaste Lalisa-la observó con un puchero adorable-solo la elegí para tener una excusa para besarte de nuevo. ¿Sabes?

Lisa se ruborizó. Ahora se sentía una tonta por prestar más atención a esa estúpida película que al chico a su lado.

-No necesitas un motivo para hacerlo... -susurró ella tan bajo que casi parecío un susurro inaudible

Dicho esto lo miro a los ojos. Lisa no podía creer que lo había dicho. Oh Dios, Jungkook le hacia decir cosas que antes ni siquiera se le pasaban por la cabeza. Su "amigo" la estaba transformando en algo nuevo. Algo que Lalisa jamás pensaba ser o decir. Y eso le fascinaba.

-¿De verdad? -Jungkook eliminó poco a poco el espacio entre ellos mientras miraba de manera tentadora sus labios. Sus ojos brillaban divertidos.

-¿Que ocurre si te digo que lo es? -susurró Lalisa contra su boca.

Sintió el corazón desbocado al sentir como Jungkook rozaba sus labios con los de ella,producto de sus nervios y la tensión en el ambiente.

Dicho esto, Jungkook acortó la casi inexistente distancia que habia entre ambos y unio sus labios con los de ella en un beso feroz. Al mismo tiempo que sus brazos rodeaban su cintura para que así no hubiera-ni siquiera un poco- de espacio entre ellos.

La lengua de Jungkook ingresó a la boca de Lalisa sin pedir permiso.

Y Lisa no se quejó a esto. Más bien se maravilló de las sensaciones placenteras que le estaba haciendo sentir. No estaba segura,pero había creído gemir entre los labios de su ¿amigo? ¿Amigo con beneficio?

Lisa ahuyentó esos pensamientos cuando Jungkook alejo sus labios de los de ella para bajar a su cuello. Comenzando a dejar un camino de besos desde su mandíbula hasta su clavícula de manera apasionante y dulce al mismo tiempo.

"Me lleva el diablo" Pensó Lalisa. Loca de placer.

Pero fue en ese momento en el que solo era ellos dos, que oyeron el ruido de la puerta siendo abierta. Lalisa empujo a Jungkook al instante intentando hacer una pose casual.

Estar sentada rígida mirando al frente como traumada no era una de ellas. Pero eso le había salido en el momento.

-Buenas noches, mis niños. -saludó la madre de Jungkook con su uniforme de enfermera aún.-mi turno término más temprano hoy... ¿Estan bien? -pregunto extrañada al verlos agitados, rojos y algo despeinados.

Pero la resolución cayó en ella rápidamente cuando vio los labios de ambos. Rojos e hinchados.

Una sonrisa traviesa y emocionada cruzó por su cara. Era raro pensar en su hijo enrollandose con Lisa,puesto que esta última era la hija que jamás tuvo. Pero aún así le agradaba.

-¿Hicieron una maratón o que pasó aquí? Se ven realmente agitados-remarcó esta última palabra con una sonrisa maliciosa y divertida

La cara de ambos estallaba de colores.

-M-Mam-á no digas e-estupideces.

Dijo Jungkook. Mordió su lengua al ver la ceja alzada de su madre. Sí. Ya le había transmitido con la mirada un "No soy estúpida Cielito, deja de fingir" Así que terminó por encogerse de hombros apenado.

-Aun no cenaron ¿verdad? -pregunto luego de un silencio tenso-pediré pizza entonces.

Dicho esto se encaminó hacia la cocina como si nada de lo que pasó hubiera sido así. Lisa respiro con un poco de tranquilidad al verla irse.

Jungkook le dió un beso tierno en la mejilla mientras le susurraba un "tranquila". Lisa pensó que si eso de lo decía otra persona, no estaría relajada para nada.

Pero con como se trataba de el, lo hizo.

~~•~~

La cena pasó increíblemente normal para ambos. Lalisa comenzó a recordar cosas que hacia de pequeña en la casa, como aquella vez en la que su gato había entrado sin querer y Sook casi se muere del susto. O la vez que Lisa se había quedado a dormir y Sook vino por detrás asustandolos a ambos. Sin lugar a dudas esa casa era demasiado importante para Lisa. Las memorias de sus momentos más felices se encontraban alli dentro, algo que hubiera querido que también sucediera en lo que antes era su hogar, pero no todo era posible.

Una vez que terminaron de cenar y lavar los platos, ambos fueron a la habitación de Jungkook. Sook advirtió de manera sutil que si escuchaba algún tipo de ruido subiría de inmediato. A ambos se les coloreo la cara de vergüenza otra vez, pero asintieron.

-¿Donde dejaste la bolsa de dormir?-pregunto Lisa buscando la misma por debajo de la cama.

-La he guardado en el sótano. -respondió el pelinegro

-¿¡Qué!? ¿Porqué?

Jungkook se encogió de hombros.

-Ya dormiste una vez a mi lado, creí que te gustaría volver a hacerlo...

Al decirlo, Jungkook miro hacia el suelo. Quizás ya no se sentia tan seguro ahora que Lalisa lo miraba con el entrecejo fruncido.

-Bien.-dijo ella fin,sorprendiendolo. Se acerco un paso hasta el y dejó un casto beso en sus labios-dormiré contigo. Pero solo dormir ¿okay? -aclaró a lo que Jungkook asintió rápidamente con una sonrisa-Iré a tomarme una ducha.

Dicho esto fue directo a la misma mientras apilaba el pijama que se pondría luego.

Jungkook se recostó en su cama para esperarla al mismo tiempo que revisaba su teléfono. Y a la vez que hacia esto, oyó el agua de la regadera del baño, claro signo de que Lalisa ya estaba duchandose.

Todo estaba bien.

Pero en ese mismo momento, el teléfono de la rubia comenzo a vibrar por... ¿tercera o cuarta vez en el día?

Funció el ceño dudando en revisar quien era o no.

Los segundos comenzaron a pasar y la pantalla dejó de brillar al fin. Acto seguido Jungkook miro el aparato entre sus manos como si estuviera endemoniado.

Hace semanas que ya habían vuelto del campamento. Y en todas esas semanas que Lisa hizo a Jungkook el tipo más feliz de mundo, el teléfono de la misma sonaba y sonaba. Jungkook sospechaba de ello,pero Lisa ignoraba esos llamados insistentes excusándose con la idea de que debía reparar el teléfono. O que no era nadie importante, como aquella vez que ella le había un rodillazo en su parte.

-Lalisa. Tu teléfono esta sonando.-intentó decirle el pelinegro

Pero no la oyó. Ella seguía cantando una canción llamada "Playing With Fire".

Jungkook viendo que no la había oído para nada, finalmente decidió hacerlo.

Se acercó rápidamente y observó en el panel de noticiaciones quien demonios llamaba.

"Bob"

Y un mensaje.

"Lalisa maldita sea contestame. Alicia esta realmente preocupada." -22: 13

"De acuerdo Panpriya. Tu lo quisiste asi" -23: 16

¿Qué?

-¡Kookie! ¿Haz visto mi... ?

Una Lalisa con el cabello húmedo y despeinado con su pijama ya puesto miro a Jungkook desde el umbral de la puerta. Jungkook apretó los dientes.

Lisa funció el ceño al verlo con su teléfono en la mano.

-¿Eso es mío? -inquirió acercándose

Pracricamente le arrebató el teléfono de las manos.

-¿Bob? -pregunto sin esperar el-¿El Bob que yo conozco?

Lalisa miro al suelo mientras mordía la parte interna de su mejilla.

-Quizás si...

-¿Porque te esta llamando? ¿Todos estos dias cuando el teléfono sonaba en el campamento era él?

Lisa lo miro con ojos ausentes. Delatándose.

-¿Porqué te esta llamando? -susurró acercandose a ella con alerta-¿Hay algo que yo deba saber, Liz?

Lalisa hizo silencio sintiendo sus dedos cálidos en su mentón de forma cariñosa. Ignoro ese lindo cosquilleo mientras abría la boca para hablar.

-¿Que hacías husmeando en mi teléfono en primer lugar?

No lo dijo enojada, más bien calmada...confundida.

Jungkook iba a responderle notando que había evitado sus preguntas, pero fue interrumpido de repente cuando su madre entró a la habitación con rostro de espanto.

-Mamá cuantas veces te he dicho que toques la pu...

-¿Lalisa...? ¿Pero que...? -lo Interrumpió mirando de manera confundida a la rubia

-Tía Sook. ¿Que ocurre?

Por primera vez en toda su vida,la mencionada miro de manera enojada a Lalisa.

Esta al verla asi sintió algo extraño en la boca de su estómago. Algo malo había ocurrido.

-Lalisa Manoban. Acabo de hablar con tu madre...

El rostro de Lalisa fue una de espanto al oirla. Jungkook no entendía absolutamente nada.

-¡Y acaba de decirme que no tenía idea de que nos visitarias! -farulló totalmente sorprendida y asustada. -¿Y que huiste de Tailandia?-agregó mirándola a Lisa como si fuera incapaz de eso. Como si no lo creyera-¿¡Eso es cierto!?

Lisa ahogo un gemido mientras se asomaba a la ventana de la habitación queriendo huir de las miradas de madre e hijo.

Suspiro cerrando fuertemente los ojos.

-Lo siento...-susurró con angustia-pero tuve que hacerlo.

Sabía que ese momento llegaría.

Pero no tan pronto.

Y en ese mismo instante, Lisa supo que su momento feliz había terminado.