Capítulo O16

Decisiones| 결정

-¿Cómo es eso de que te dió donde está Jimmy?

Jungkook miro enojado a Jin al oirlo nombrar a su...cosa.

-¡Acordamos olvidar que mi pene tenía identidad!

-Lo siento, me resulta muy gracioso-se carcajeó burlón

-Bueno ya. Jimmy no lo merece. Pero tú sí.-acotó NamJoon

Los tres estaban en la esquina de una cuadra esperando por Jisoo, quien había ingresado a una tienda de ropa para ver que se pondría para la cena de esa misma noche con el objetivo de darle buena impresión a los padres de Jin.

Ella estaba realmente nerviosa,pero estaba dando un paso gigante junto a su novio y estaban felices por eso.

-¿Qué?¿Por qué yo si?-inquirió el menor incrédulo

Jin codeó con disimulo a NamJoon cuando abrió la boca para hablar, quien por cierto se quejó,pero al final entendió el gesto.

No debía mencionar a Lalisa para nada.

-No he dicho nada-levantó las manos en señal de paz-en fin, iré a molestar a Jennie. Con permiso.

Dicho eso se esfumó de ahí. Jin suspiro viendo que su novia aún no salía de la tienda de ropa. Volteó a ver a el menor.

-¿Porque estas aquí Jungkook? -preguntó al fin

-JiMin desapareció. Tae también. Hobi no contesta mis llamadas y YoonGi no me soporta más de 20 minutos sin querer tirarse por la ventana-dijo él-por lo solo me quedas tú y Nam para platicar. O bueno, ahora solo tú.

-¡Omma Jin te dará un consejo!-NamJoon gritó por última vez a lo lejos mientras Jin rodaba los ojos

-Como sea-ignoró a el rapero-¿Platicar qué, Kook?

-Tu tienes una relación con Jisoo hace un año.-dijo el sintiendo vergüenza por sacar a relucir ese tema-Jisoo es muy temperamental y lo sabemos, por eso yo me preguntaba...

-Oh. Ya veo a que te refieres. -lo interrumpió mientras sonreia-al fin te has dado cuenta de que Lisa esta enojada contigo.

¿Al fin se había dado cuenta?

-¿¡Tú lo sabías!?

-No es como si hubiera sido un secreto-aclaró-pero sí, lo sabía.

-Aish ¿Por que no me lo habías dicho?

-Tenías que descubrirlo por ti mismo, Kook. Así funciona esto.

-Bien-dijo entre dientes resignado-Entonces...¿Como puedo hacer para que Lisa me perdone?

-Bueno. Es complicado.-admitió haciendo una mueca- Lisa no suele ser refunfuñona, por lo que pienso que realmente has dicho o hecho algo que la hizo sentir mal-alzo una ceja hacia el-¿Sabes que podría ser?

Jungkook se encogio de hombros mientras negaba con la cabeza. Jin suspiro resignado.

Era un cabeza hueca. No entendía como era su amigo aún.

-Primero debes saber en qué lo arruinaste ¿bien? Luego pedirle disculpas por todas las maneras posibles hasta que ella ceda o sienta que realmente lo sientes-le aconsejó. Jungkook asintió intentando no olvidarlo-Si esta en sus días procura no molestarla porque generalmente suelen mandarnos a Japón de una patada gracias a su mal humor. Ya me pasó.-rió al recordar a Jisoo-y hay muchas maneras de pedir perdón, ya sea una canción, un poema y hasta cartas.

-¿Cartas?¿Como tú con Jisoo? -sonrió

-Exactamente. -le devolvió la sonrisa-No fue fácil...creeme, pero tome valor de donde no lo tenía y simplemente lo hice. Le conte mi día a día por cartas así como remarque en cada una de ellas lo loco de amor que me tenía. Tuve mis altibajos e inseguridades y lo acepto,pero jamas me rendí. Tiempo despues le confese quien era y aquí estoy... a un par de horas de presentar frente a mis padres a la futura madre de mis hijos.

Jungkook lo miro con curiosidad sintiendo la profundidad de sus palabras en si mismo. No había ni un atisbo de duda en sus palabras. El realmente sabía lo que quería en su vida y eso era Jisoo.

-Jinnie,realmente la quieres...

Él asintió.

-Con mi vida, Kookie. -dijo y lo miro de nuevo-a lo que voy es...que rendirte no tiene que ser tú primera opción jamás. Ten seguridad en ti y sé insistente. No pierdes nada con intentarlo. Quizás al final del camino algo realmente bueno te puede suceder.

Jungkook miro detenidamente a Jin sintiéndose confundido. Algo le decía que ya no estaban hablando de como hacer que Lalisa lo perdonara.

-¡Amor!-gritó Jisoo de repente acercándose-¡No sabes lo que...!

Jisoo no pudo terminar la frase cuando Jin estampo sus labios con los de ella. Ella se sorprendió por ese gesto pero no se negó a sus besos para nada. Jungkook los miró desde la distancia con una sonrisa.

Y tomó la decisión.

El tampoco se rendiría.

[...]

Las semana pasó y todo el mundo comenzo a estar enloquecido por el campamento, ya que debían entregar sus autorizaciones sin falta porque que de lo contrario eso repercutiría en sus notas. Algunos se quejaban y otros estaban mucho más que emocionados,como también había gente a la que sencillamente les daba igual.

Jungkook intento en todo ese tiempo acercarse a Lisa. Sin embargo ella siempre tenía algo que hacer. Limpiar el piso, revisar el teléfono, estar con TaeHyung (este dato Jungkook no lo pasaba por alto) ver una mariposa y muchas cosas más.

Todo era la excusa perfecta para alejarse de Jungkook.

Este último estaba realmente por mandar todo al demonio ya que Lisa parecía no querer ceder jamás, pero recordo perfectamente las palabras de Jin luego de unos segundos. Rendirse no era una opción.

Lisa era su mejor amiga. Y lo tenía que escuchar.

-¡LALISA MANOB...!

Ella colocó un dedo entre sus labios indicando que hiciera silencio. Jungkook lo hizo pese a que Lisa le había cortado el valor de tajo.

-La tía Sook esta durmiendo.-explicó

Y hablando de la madre de Jungkook, ella no notaba para nada el infierno que pasaba su hijo, ni los momentos incómodos llenos de tensión que ambos tenían en la cena o a la hora de dormir tambien.

Lo curioso fue que ese día en particular Lisa estaba de buen humor. Jungkook siempre supo que Lisa era especial,algo rara.

Pero ese día tuvo ganas de mandarla a un manicomio.

Ella le sonrio mientras empacaba sus últimas prendas a la valija.

-¿No estas emocionado?

Jungkook no supo que decir.

-Algo.-dijo al fin desprevenido por su pregunta. Lisa rodo los ojos.

-¡Aburrido! -le saco la lengua. Jungkook la miro sin poder creerlo.

¿Porque actuaba así? ¿Como si no lo hubiera evitado todo ese tiempo?

Fue cuando entonces y de repente, la bocina del autobus se oyó desde las afueras de la casa.

Ambos sujetaron sus valijas y bajaron las escaleras para luego saludar a la madre de Jungkook, quien les deseo el mejor viaje de todos mientras firmaba la autorización de su hijo.

-¿Quien firmó tú autorización Lisa?-pregunto la madre por simple curiosidad. Lisa se puso tensa de repente.

-Ya lo arregle personalmente con la escuela, ya sabes. -intento parecer casual, pero no lo consiguió demasiado.

-Oh, de acuerdo-sonrió esta-¡Lindo viaje mis niños!

Ambos salieron de ahí e ingresaron al autobús rápidamente.

El viaje fue de seis horas y el vehículo fue un completo caos en todo momento. Papeles iban y venían al igual que comida. Muchas personas no respetaron la regla de seguridad de mantenerse en su asiento con los cinturones puestos, por lo que se los podía ver levantados.

Lisa se habia sentado al lado de Jennie, quien tenía los auriculares puestos, ignorando a los idiotas que se hacían llamar compañeros. Jungkook por su parte se había sentado al lado de Hoseok, que a cambio de Jennie reía sin parar junto a sus amigos, sin estar para nada quieto en su asiento. El resto estaban juntos compartiendo risas.

Y asi el viaje paso. Tanto Jungkook como Lisa no se movieron de sus lugares. Ambos tenían mejores cosas en que pensar.

Cuando al fin lograron llegar luego de horas y horas de sufrimiento y martirio, todos salieron del autobús como salvajes. Esperaron a que les entregarán sus valijas (que duró alrededor de dos horas más) y cuando al fin pudieron estár listos comenzaron a caminar por el bosque lleno de piedras, ramas y bichos en dirección hacia donde pondrían su campamento.

Jisoo al ver a una lagartija casi pide que le alcancen un respirador. Rosé y JiMin estaban por ahí jugando piedra,papel y tijeras. El resto de los chicos hablaban o se corrían entre ellos en el camino, solo para no morirse de aburrimiento.

Cuando finalmente llegaron,se instalaron en un terreno llano cubierto de pasto, en donde mas tarde colocarian las carpas y podrian dormir allí adentro tranquilamente.

-¡Al fin! No siento las piernas-mascullo Rosé tirándose en el suelo

-¿Alguien tiene algún calmante para Jisoo?-preguntó Jennie -Porque se está muriendo de la paranoia.

Y en efecto, la misma estaba tirada en el suelo intentando encontrar el aire. Era una dramática, pero por otro lado todas le daban la razón si a su agotamiento se refería. Habían caminado demasiado entre piedras. Temían que se le hicieran ampollas en los pies o algo por el estilo.

-No preocupes más de la cuenta a Jin. Sabes lo sobreprotector que es. -le recordó Lisa a Jisoo mientras se recostada al lado de Rosé.

Y fue en ese momento, que la profesora tutora de sexto año se acercó a las chicas con semblante serio.

-En cinco minutos habra una fogata esperandolas.

Lo único que faltaba. Genial.

~~•~~

Una vez que todos se reunieron en la fogata, un hombre robusto con tan solo ramas y hojas tapando sus caderas, se colocó delante de la gran llamarada mientras cerraba los ojos con verdadera pasión.

-Hoy es un día especial-comenzó a decir-no sólo porque ahora mismo podemos conectar con nuestro ambiente si no...

-¡Lo único que el ambiente conecta conmigo son los estúpidos mosquitos! -chilló Jennie rascandose los brazos con sus uñas

Todos la callaron. Ella miro hacia el suelo refunfuñando.

Luego de una charla motivacional acerca de la naturaleza, comenzaron a tocar tambores y cosas algo espeluznantes, similares a los rituales de sacrificio.

Pero poco a poco el ambiente se fue destensando, los mosquitos ya no eran algo relevante y la naturaleza daba igual.

-Ahora mismo dos personas bailarán alrededor de la fogata, bajo la luz de la Luna. ¿Algún voluntario?

Todos hicieron silencio.

-¡Tú!

El hombre señalo a Lisa de repente,quien estaba mirando hacia otro lado perdida en si misma, pero al notar que todos la miraban abrió los ojos como platos.

Y como no, después señalaron a Jungkook por estar durmiendo en el hombro de NamJoon.

Una vez frente a todos,ambos no sabian que hacer. Una de las profesoras, quien estaba a un lado de aquel hombre, parecía la misma madre naturaleza incitando a ambos amigos a "liberarse" y "ser uno con la naturaleza". Por no decir que parecía un mal chiste también.

Finalmente luego de unos largos segundos Lisa se encogio de hombros y comenzó a dar pequeños saltitos al compás de los tambores.

-¡Bien hecho niña! ¡Libera tu espíritu de naturaleza!

Lisa rio al oírla. La verdad era que comenzaba a divertirse. Tenia que hacerlo. Luego de unos segundos miro a sus amigos, quienes alzaban las cejas sorprendidos. Volvió a mirar a Jungkook.

-¡Se uno con la naturaleza Kook! -le gritó

Y comenzó a bailar alrededor de la fogata. Dando saltos y más saltos. De vez en cuanto hacia un paso de baile profesional y volvía a su rutina. Jungkook se quedó unos segundos pasmado, para luego seguirle la corriente y comenzar a saltar como ella. Haciendo el ridículo, pero realmente importandole poco si era con ella.

-¡Miren alumnos! ¡Esto es pura conexión con su entorno y en ellos mismos!

Y vaya que lo era.

A Jungkook se le escapo una sonrisa,mientras entre las llamas de la fogata, pudo ver como Lisa le sonreía de oreja a oreja sin despegar la vista de el.

Luego de eso poco a poco todos se sumaron a ese extraño baile. Se oían risas, murmullos y más risas.

Lisa decidió descansar un poco en un tronco. Jungkook la acompaño al verla allí.

-Estas loca para bailar así, Lalisa.

-Pero aún así me seguiste la corriente.

-Ya te lo dije una vez... No puedo negarme a nada que venga de ti.

Lisa asintió sin mirarlo a los ojos. Un silencio comodo comenzo a crearse entre ellos.

-Tan mal no estuvo este primer día-opinó la tailandesa mirando a todos los jóvenes alrededor de la fogata

-Quizás tengas razón. -concordó

Lisa apoyo la cabeza en el hombro de Jungkook mientras que con sus brazos rodeaba su cuello y lo atraía para sí. El pelinegro se sorprendió por ese gesto.

Se aclaró la garganta.

-Hay algo que esta rondando en mi mente hace días...-dijo, intentando evitar las mariposas en su estomago-¿Como lograste obtener la autorización de tus padres?

-Hmm... -Lisa se separó de el rompiendo todo contacto comodo-¿Haciendolo?

Lisa se levantó excusándose de que tenía algo que hacer, sin embargo Jungkook noto que algo le estaba ocultando. Se incorporó al igual que ella sospechando de su actitud.

-Yah,Lisa. ¿Como lo hiciste?

-Quizás...-mordió su labio nerviosa- quizás... ¿falsifique la firma?

El rostro sereno de Jungkook cambio por completo a uno de terror y furia.

-¿Qué?-exclamó más allá de lo sorprendido-¡Te pueden expulsar si te descubren!-ya estaba alterado-¿Que mierda tienes en la cabeza Lalisa? ¡Dios!

Lisa cambio su rostro pasivo a uno más furibundo al oirlo decir eso. Y eso solo significaba una cosa: problemas.

-No lo harán. -afirmó con violencia-lo prometo.

-¿Pero y si lo hacen? ¿Como se te ocurre siquiera pensarlo?

-¡Bien! ¡Dejalo estar por el amor de Dios! -gritó de vuelta perdiendo los estribos-¡estoy bien! Nadie lo sabe. ¡Es lo unico que importa!

-Pero...

-Solo callate ¿si? -pidió-ya lo arruinaste.

La mirada decepcionada de Lisa fue lo único que pudo ver antes de que se diera media vuelta.

Jungkook paso sus manos por su cabello de manera frustrada.

Luego gritó una maldición mientras pateaba el suelo.

Y sencillamente el también explotó.

-¡No entiendo que es lo que tanto te enfurece de mí, maldita sea!

Ella se dio media vuelta para verlo frente a frente. Levantó la cabeza en alto mientras se acercaba a el a pasos enormes. Su dedo tocó su pecho de manera acusadora.

-Intenté hacer las paces contigo.-escupió con ira-Intenté olvidar aquello que tan mal me tenía para poder estar contigo y divertirnos, como antes. -siguio golpeando su pecho-¿Y ahora tú comienzas a gritarme por una estúpida e insignificante firma falsificada?

-¿Que no entiendes que eso es grave? -pregunto-solo quiero ayudart...

-¡Pues no lo haces! -grito de vuelta casi rogando con la mirada que dejara de hablar-¡No me ayudas para nada Jungkook! ¡Solo haces que me arrepienta de haber venido a Corea solo para verte a ti, maldito idiota!

Para ese punto las lágrimas de Lalisa ya amenazaban con salir y no parar hasta dentro de un par de horas. Lisa estaba enojada con el, por ser la clase de chico que siempre la apoyo, pero a su vez la que a veces podía arruinarlo todo con unas simples palabras. Y también enojada con ella misma, porque quería mentirse a toda costa. Repetirse una y otra vez que no estaba empezando a ver a Jungkook como algo mas y que solo era producto de sus locas hormonas.

Decirse eso una y otra vez hasta que se lo creyera.

Pero muy adentro suyo, sabía que no era así.

Se estaba enamorando de su mejor amigo.

Y eso le daba miedo. O mejor dicho, la tenía aterrada de maneras que ni ella misma conocía.

Jungkook por su parte,no podía creer que el -realmente- estaba haciendo llorar a Lalisa. A su Lalisa.

Él, quien prometió protegerla y quererla siempre pasara lo que pasara.

Él,quien prometio que nadie la lastimaria, sin darse cuenta que más tarde ,el mismo sería eso de lo que tanto se empeñaba en protegerla.

Un hueco enorme se instaló en la boca de su estómago sin que pudiera evitarlo.

Lisa se dio media vuelta intentando que el no la viera así de sensible, aunque siendo claramente en vano.

Seco sus lágrimas y murmuró de espaldas a él:

-Perdona. No sé que Diablos me pasa.

Lisa salió de ahí rápidamente intentando aclarar sus pensamientos antes de que siquiera Jungkook pudiera decir algo, dejando a el mismo con algo amargo dentro.

La fogata y las risas de estudiantes y maestros era lo único que se oia, pero nadie pudo darse cuenta de que había dos almas rotas a punto de revelarse.

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