El plan|계획

-Oh Jesús...

Jungkook se levantó de aquella cama con una migraña terrible. Gimió sintiendo todos los músculos de su cuerpo adoloridos. Seguido de eso se sentó al borde de esta y cerró los ojos intentando recordar algo.

¿Qué había pasado anoche?

Se dio cuenta al rato de que no llegaría a ningun lado pensando en eso,así que entrecerro los ojos mientras miraba a su alrededor.

Era un lugar espacioso. La luz del sol se filtraba por las ventanas y daba de lleno en la habitación, de modo que estaba bien iluminada y se podía ver todo con claridad. Las cortinas era rosa pastel y las frazadas de aquella cama en la que había dormido Jungkook eran del mismo color. Las paredes en cambio eran blancas. Había un placard y un escritorio con una computadora arriba de este. Seguido de muchos peluches coloridos en un estante.

-Esta no es mi habitación...-concluyó en voz alta con extrañeza

Hasta que de repente una voz hablo a su izquierda.

-Buenos días.

Jungkook volteo de inmediato viendo la contextura pequeña de Mina a su lado,sentada en una silla. Llevaba pantuflas de oso y un pijama blanco con puntos negros, acompañado de un peinado que consistía en una coleta alta y desordenada con un café entre manos.

-¿Qué es esto?

Jungkook no entendía nada.

No había pasado la noche con ella...

¿o si?

-Estas en mi casa-le respondió-anoche fue una locura sin lugar a dudas. ¿Quieres una pastilla?

Jungkook sin rechistar aceptó la pastilla y el vaso de agua que ella ofrecia. Ingirió la misma de un trago y luego de eso miro a su amiga en busca de respuestas.

-¿Recuerdas algo?

-Mmh, algo así.-respondió vacilante la castaña

-¿Me dices? Porque yo no recuerdo nada. Y hablando de eso... ¿Como llegué hasta aquí?

Se miro a si mismo frunciendo notoriamente su ceño. Estaba realmente asustado ya que literalmente su cabeza estaba en blanco.

¿Y si había hecho algo la noche anterior de lo que se podía arrepentir?

-No ocurrió nada de lo que te puedas arrepentir.-le aclaró haciendo que el alma de Jungkook regresara a su cuerpo. Termino de beber su agua sintiendo seca la boca-a excepcion de que nos besamos.

El pelinegro casi escupe el agua. Mina se quejó de que arruinaria su tapiz de piso. Jungkook ignoró eso y abrió los ojos como platos al oir su confesión. Luego de eso poso su mirada en ella nuevamente sintiéndo el pánico expandirse por cada celula de su cuerpo.

-No...no,no,no-negaba repetidamente lamentandose- e-esto es un error Mina,eres genial pero...

Mina lo interrumpió.

-¿Qué tanto balbuceas?-frunció el ceño viendolo-¡Tu no me gustas tonto!

Mina soltó una carcajada luego de ver el rostro de Jungkook. Este se tiró en su cama respirando hondo. Demasiada presión y apenas comenzaba el dia.

-¿Entonces no nos besamos?-pregunto confuso

-Sí,claro. Pero aún así no me gustas. Si mal lo recuerdo vi a el chico que me gustaba con mi ex-mejor amiga y quise demostrarles que no era un fracaso. Y bueno,surgio nuestro beso. Aunque basicamente te usé.

-Oh...

-Lo siento. Estaba demasiada borracha como para siquiera pensar...

-Descuida, lo entiendo.-dijo con una mueca.

Realmente no le importaba,mientras nadie haya visto ese beso, claro.

Ambos se quedaron unos segundos en silencio metidos en sus mundos. Hasta que Jungkook volvió retomar su conversación.

-Entonces...¿Amigos? ¿Fingimos que nunca pasó ese beso extraño?

-Sip.-dijo ella sin rodeos

Jungkook suspiro aliviado.

-Bien. ¿Algo más que recuerdes?-y agregó luego de unos segundos-¿Mis amigos?

-No lo sé. Creo que nunca les avisamos que vendrías hacia aqui...nisiquiera yo lo sabia-se rio sola-pero revisa tu telefono,quizás encuentres algo, ya que ha sonado toda la condenada mañana.

Dicho eso se fue de la habitación anunciando que tenía que preparar el almuerzo.

Jungkook tomo el consejo de Mina y agarro su teléfono desbloqueandolo.

Había mínimo 25 llamadas de los chicos y 15 de las chicas. No incluyendo a Lalisa, algo que lo desilusiono de sobremanera.

Todos le dejaron mensajes en su buzón de voz. La mayoría insultandolo o casi pidiendo a gritos que diera señales de vida, incluyendo amenazas. Fruncio los labios al oirlos. Sé oian realmente preocupados y furiosos.

Luego de oírlos todos,le envió un mensaje a JiMin diciendo que estaba en perfecto estado y que esperaba verlos en la escuela en un rato.

El contestó al instante con un "Ok."

Jungkook frunció el seño.

JiMin estaba...¿enojado?

-¡Jungkook! ¡Baja!

Mina gritó desde algún lado del primer piso de la casa. Jungkook se sintió raro estando en esa situación,como si fuera un huésped intruso. Pero decidió bajar de todas formas.

-¿Tus padres no estan aquí?-pregunto el mientras se sentaba en una de esas comodas sillas blancas. La casa de Mina era muy moderna.

-No-respondió ella-trabajan a esta hora. En fin, ¿Te conformas con las sobras de una desastrosa torta? Es lo que encontre en la heladera.-le explico haciendo una mueca

Jungkook se encogió de hombros restandole importancia. Acto seguido agradeció por la comida una vez entregada y comenzó a ingerirla.

-Oye... tengo curiosidad sobre algo-le dijo Mina luego de un rato, dejando su plato vacío a un lado-me siento mal por el hecho de que te usé para mi beneficio...y si bien el chico del que estaba enamorada no cayo mágicamente a mis pies, quiero hacer algo por ti a cambio.

Jungkook la miro confundido sin saber a qué se referia.

-¿Quien es tu chica?-pregunto al fin

-No es mi chica.-intento reír para no mostrar su incomodidad-es mi mejor amiga. La conozco desde pequeño.

-Aww-Mina tapó sus mejillas con sus manos-¡Eso es super tierno! Moriré de diabetes. -bromeó haciendo que Jungkook riera-continúa.

-Bueno, ella no me ve de esa forma. Ni por asomo. Y ahí termina mi hermosa historia de amor.-le dijo con sorna

-¿Cómo se llama?

-Lisa-respondió el-pero dejemos de hablar de ese tema ¿Si? Intento olvidarme de ella y enfocarme...ya sabes ¿en mi?-preguntó dudoso

-¿Olvidarlo? Nop.-nego con convicción levantándose de su asiento-Amigo, tu eres guapo y tienes una personalidad encantadora. Si esa tal Lisa no se fija en ti...¡Es una tonta!-concluyó golpeando su mesada.

-No lo hará. Estuve toda la vida junto ella, si no pensó en mi de una manera diferente en ese entonces ahora no...

Mina le quito el pedazo de torta de las manos. Jungkook la miro sin entenderla.

-¡Eso mismo es el problema!-gritó de repente haciendo respingar a Jungkook-Tú estuviste siempre disponible para ella. Lo único que necesita esa chica es notar tu ausencia...y ahí veremos como reacciona.

Mina ya estaba formando una sonrisa ansiosa y maliciosa en su cara. Jungkook no entendía a que se refería.

-¿Eh?

-A partir de hoy seré tu nueva conquista.