Capítulo 19: Rojo
Loey había estado esperando esto durante mucho tiempo.
Hizo todas sus tareas y trabajos, entregó todo, cerró su registro de prácticas en el día, hora y segundo preciso para liberarse y evitar que algo le saliera de último minuto—en parte como recomendación de Chen y Xiumin, y por una cosa muy importante: Hyun venía de visita para su reporte anual.
Era increíble que ya hubiera pasado un año desde que llegó ahí a la Academia y se separaron—aunque no fuese una separación si se habían visto en tantas ocasiones entremedio, incluida la práctica-misión que hicieron juntos, se entendía lo que dijo. Estaba realmente emocionado, incluso si sabía que Hyun no venía para verlo a él (como tal), y que no podía estar ahí más de 24 horas, eso era suficiente para pasarlo juntos.
Después de la vez de su cumpleaños donde se vieron por la realidad aumentada, Loey no había tenido otro momento de sentirlo tan cerca (y la realidad aumentada no fue real... «o sí, no sé, quién sabe»), ya eran meses desde su práctica-misión, necesitaba verlo, sentir que de verdad estaba ahí, en serio.
Hyun le dijo que primero iría a hacer su reporte y después podían encontrarse en su casa. Como él ya estaba de vacaciones, ausentarse de la Academia no era problema.
"Espera a mi llamada," le dijo en su última conexión, y eso estuvo haciendo. Ahora que Chen y Xiumin se habían ido para descansar sus vacaciones en la Nueva Tierra, no tenía nada más qué hacer aparte de esperar.
Esperar... por Hyun.
"Siempre voy a estarte esperando."
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Dentro de la sala donde Hyun daba su reporte de misión con todos sus superiores acomodados en círculo sobre la mesa tal como el año anterior, hubo un silencio sepulcral.
Hyun había hecho lo necesario: dijo cuánto hizo en esos últimos meses desde la vez anterior que se vieron. Mostró su bitácora que día a día siempre estaba llenando, sin perder un solo detalle de las cosas. Con toda nota de exploración hasta la última junto a Loey, donde se enfrentaron a los antropomórficos y revisó su muestra de agua con resultados negativos, cada superior se quedó leyendo lo escrito.
Tuvo que omitir hablar sobre el positivo de la sangre de Loey, por supuesto. A sabiendas de cómo tomó la decisión de desechar hasta la última gota de muestra, Hyun pensó que no estaba mal ignorarlo. Era lo mejor, no sabía qué iban a hacer si descubrían que Loey tenía eso que tanto estaban buscando.
Incluso si le habían dicho que era para un bien mayor, que necesitaban con urgencia ese detalle en masas acuáticas, él no sabía cuál era esa urgencia y por qué se sentía tan mal pensar que estuviese dentro de Park; solo... no podía arriesgarlo.
En el mutismo sepulcral que dejó sus malos resultados, de cada superior trajo un suspiro. Él recuperó su aliento.
"La misión está pronosticada para máximo cinco años, eso me han dicho cuando me embaucaron en esto, y aunque sé que aún no se ha cumplido el periodo, porque con este se vuelven dos de la búsqueda," continuó, y las miradas de cada individuo en la sala regresaron sobre él, con la de TaeYeon de junto. Él no la vio, si lo hacía, quizá encontraba algo que le estaba ocultando, siempre había sabido leerlo, no estaba Loey en la Academia por nada ahorita. "Pero comienzo a creer que tal vez la inteligencia fue muy optimista con el pronóstico, porque ya lo estoy dando todo por perdido."
"¿Cómo puedes decir semejante blasfemia?" La Coronel Kim reclamó y su brazo de metal resonó en el vidrio de la mesa por su puño caído. A su lado, el Teniente Coronel Bang asintió de brazos gruesos cruzados, y como él casi todos con molestia, duda e incredulidad.
Nadie sabía cómo era estar en su lugar. Nadie, porque no habían estado en la devastación del espacio, solos, mientras veían cómo poco a poco sus opciones se agotaban, que no había ninguna pista que seguir ni un mísero rastro. Le estaban pidiendo todo sin darle recursos, y aunque Hyun ya tenía la prueba de que sí había eso...
No podía dárselo. Era lo único que lo había mantenido cuerdo en su soledad, lo único que lo mantenía vivo. Loey... no podía ser, tenía que haber otra forma.
Si se rendían de buscarlo...
"Es que no creo que encontremos algo más. He agotado todas las formas, todos los modos y no hay nada. Hasta ahora, lo que F.I.R.E. busca suena a una fantasía, y con todo respeto, no creo que de verdad haya—"
"¿Crees que las vidas de las otras personas que fueron en su búsqueda solo se desperdiciaron?" El Coronel Kwon masculló con cierto seseo atravesado por sus dientes de tiburón, la negación de cabeza que él trajo fue su respuesta.
La General Kwon agitó la inquietud añadiendo:
"¿O piensas que esas personas que encontraron lo que F.I.R.E. busca fueron un cuento? ¿Algo que inventamos nosotras y nosotros? Cuando es bien sabido cómo hasta hay registro de ello. Dieron la vida por nosotros, ¿y tú osas llamarle fantasía?"
"General—"
"No solo osa llamarles de esa forma, también a nosotros nos juzga," el General Jung siguió, con sus anchas manos sobre la mesa estampada. "Como si estuviéramos locos, mandándole en una misión suicida, inacabable. No sé ni por qué me sorprende, sabía que no debimos confiar tanto en usted, Capitán Byun, si es solo un rojo."
Su silla se cayó por la fuerza, al ser el siguiente en poner las manos en la mesa, de pie, vio cómo todos se alzaban al mismo tiempo. La Coronel Kim con sus uñas largas a la vista, el Teniente Coronel Bang con un mazo a la mano, el Coronel Kwon con dientes de fuera, la General Kwon con su daga, y el General Jung... quedó en su silla, de frente a él con esa sonrisa sardónica que no pudo imitar. Lleno de rabia, de enojo, mientras su respiración subía y bajaba su pecho uniformado, sin traer ninguna arma por más que lo amenazaran todos, se preguntó... quién era aquí la persona de la que debían desconfiar.
"¿Acaso he dicho algo que no sea cierto, Capitán?"
"No, General Jung, tiene toda la razón, no hay por qué dudar de su palabra," TaeYeon finalmente surgió. Se paró, y aunque ella era buena con su propia arma, no la vio por ningún lado. Hyun no pudo ignorar la ofensa por más que TaeYeon dijera aquello, todavía molesto como para bajarle la mirada al General, dejó que su Mayor interviniera por él, puesto un brazo frente a su cuerpo como protección o tal vez solo para tapar su figura en contra. "Aunque no creo que esa fuese la forma de expresarnos, todo lo que han dicho es cierto, y aquí mi Capitán tiene la misma idea. Él solo no ha sabido expresarla, no es que quisiera ponerlos en duda. Solo que le han exigido mucho más de lo esperado, y ustedes saben, con los pocos recursos que recibimos para averiguar el rastro que F.I.R.E. busca..."
"¿Está diciendo que requiere algo más del Sistema, Mayor Kim?" La General Kwon se incorporó mejor en todo su 1,80, y aunque la vio guardar su daga para ajustarse los lentes al rostro, nadie más bajó sus armas.
"Sí, tal vez si pudieran darnos algo más con lo que trabajar..."
"Tenemos algo de eso," continuó al limpiar sus lentes con el borde de su chaqueta. "No es algo que dimos desde un inicio, porque apenas lo hemos recibido. No hace mucho la inteligencia registró algo de lo que ya creíamos completamente perdido de la antigua exploración que originó esta búsqueda."
"¡Bien! ¿Y qué ha sido?"
"Un rastro del mapa anterior que esa tripulación tenía," el General Jung prosiguió, junto al asentimiento de TaeYeon. Hyun no pudo expresarse de la misma manera, aunque vio todo con ojo crítico, quedó en medio con su ceño, interrogativo. No le gustaba hacia dónde estaba yendo esto. "No está completo, claro, porque si no, ya les habríamos dicho que se dirigieran al punto que buscamos. Pero hay un rastro. Viene desde la base del Sistema y se pierde en la Tercera Galaxia Alfa-A, creemos que fue ahí donde pudieron haber sufrido un desperfecto que dañó todo el sistema para recuperarlo, pero tal vez nos acerque a lo que buscamos."
"¿Y van a darnos el mapa para que yo lo analice y salga a explorar?" Aventuró, un poco más grave ante su remitente enojo. TaeYeon lo miró con advertencia, casi como si dijera que cuidase sus palabras. Ya no iba a ser tan sencillo que ella saliese en su defensa, no si iba una segunda vez a cagarla. Él lo sabía; nada quitaba su molestia.
"Sí, quizá, si tan solo admite su fallo, Capitán. Después de todo, que su Mayor se disculpe no es suficiente, nos ha hecho una ofensa a todas y todos los aquí en esta sala. Creo que merecemos oír su disculpa directa. Es claro que nosotros no nos equivocamos, usted se ha equivocado, ¿no es cierto?"
Eso lo hirvió mucho más. Casi a una de sentir que le iba a salir humo de las orejas, Hyun... miró cómo TaeYeon le imploraba dejar de pelearse, casi al recordarle cuál era su lugar en la sala, por eso...
Suspiró, relajó sus hombros y cerró los ojos. Antes de volver a abrirlos y ver a todos, recto.
"Lamento mi comportamiento y actitud anterior. Tienen razón, mis comentarios han sido desatinados, espero puedan disculparme, saben que no soy perfecto. Me puedo equivocar, como todos."
No bajó la cabeza, aunque debía. En esa venia de disculpa que nunca otorgó como obvia muestra de lo poco que lo sentía, esperó. La sonrisa del General Jung le dijo cuánto le había gustado, y aunque no era lo que todo el grupo a su alrededor deseaba, asintió. Cada uno tomó otra vez su lugar, él como el último. Fuera las armas, regresaron a la normalidad de su junta.
"Me parece correcto que volvamos a lo propuesto. Le entregaremos el mapa registrado por la inteligencia de la antigua exploración, Capitán Byun," la Coronel Kim retomó, con él que esta vez sí asintió como agradecimiento. "Queremos que revise cada uno de los puntos marcados en lo que cuenta de aquí al siguiente reporte anual, si acaso encuentra algo que nos sea de gran importancia antes de eso, sabe que debe comunicárnoslo de inmediato."
"¿No sería mejor ir a buscar los últimos lugares registrados por el mapa?" TaeYeon atinó a preguntar, con la obvia negativa de más de tres de sus miembros en la junta.
"Puede que la exploración haya tenido varios desvíos en su viaje y uno les hizo desaparecer del mapa, pero aún deseamos averiguar qué pudo ser eso, y si acaso un rastro anterior nos dé otra pista," el Coronel Kwon añadió, con la comprensión de TaeYeon, por más que pensase igual, no reclamó. Era lo adecuado, se lo pedían así, él solo acataba.
Como en todo.
"Exacto, esa es la forma de pensar de un Capitán del Sistema," Bang agregó, con su fuerte convicción. "Es cómo nos enseñaron. Aunque te tarde una eternidad, debes darlo todo por el Sistema."
"¿Incluso si es un caso perdido?" Él se atrevió a murmurar, TaeYeon le pinchó debajo de la mesa.
"Dígale eso a la gente que va a matar si se rinde ahora," el General Jung finalizó, él solo le clavó la mirada. "¿Quiere que más muertes estén bajo su nombre, Capitán?"
Hyun miró a TaeYeon ante aquel golpe fatal, y en cuanto vio cómo ella evadió su mirada, supo que estaba solo en esto. Tenían razón, por más brusco que fuese, no podía evadirlo.
Pero él tenía ahí su respuesta, bajo su propio techo. Si podía acabar con este sufrimiento así tan rápido, ¿por qué no lo hacía?
A Hyun le temblaron las manos.
"No," se retiró tan pronto lo declaró.
No dijo nada más. Sus superiores estuvieron de acuerdo, y agradecidos, dieron por finalizada la reunión. Él salió de inmediato, casi como si la sala lo fuese a asfixiar.
Sabía que las palabras dichas en ellas lo ahogaban, tenía algo que recordar en medio de todo, pero ahora no pensó mucho.
Cuando llegó a su casa dentro de las residencias del Sistema, movido por la mera intuición, se dejó caer frente a la puerta.
Ahí mismo, sin poder abrir porque sus piernas se vencieron antes de tomar la perilla, sintió sus manos temblar mucho más sin ver cómo afianzarse de algo, e hiperventiló. Él sabía qué era esto, pero su cabeza no lo estaba registrando del todo, necesitaba ponerse en modo supervivencia si se le estaba yendo el oxígeno.
Tenía un ataque de pánico provocado por las estúpidas palabras oídas en esa junta, por la impotencia de no poder actuar, decir o alzar la voz como quería.
"¿Quiere que más muertes estén bajo su nombre, Capitán?"
"Capitán."
"Es solo un rojo."
"Rojo."
"Rojo."
"Rojo."
"Corre. Corre, Hyun, corre. Por favor, corre."
"¡HYUN!"
Palabras inentendibles salían ahora de sus labios, con su aliento dentro y fuera, sin ningún control, Hyun se golpeó la cabeza y buscó callar, callar todas las voces, la repetición, los gritos, sobre todo los gritos de su nombre y más, pero era imposible. Se marcaron en su memoria a fuego, y conocedor de que él los ocasionó, no hubo forma de eliminarlos.
"Capitán Byun Hyun, registro una alteración de su ritmo cardiaco, ¿necesita asistencia médica de la—?"
"¡Cállate! Cállate, ya, ya," la inteligencia de su casa quiso ayudar, pero ni él supo recibirla. Mientras se pegaba a la puerta y rasguñaba el material con sus manos en búsqueda de dolor o algo que fuera real para regresarlo a la actualidad, recordó: "Zzar."
«Amo», su inteligencia emocional se oyó entre todos los gritos, y él balbuceó, suficiente para que ella lo entendiera. «Tranquilo, amo, aquí estoy. No pasa nada».
Sacudió la cabeza, eso no era cierto. Todo pasaba, su mente lo abarrotaba con imágenes del fuego, la explosión, los gritos, el llanto y los miles de cuerpos desfilando muertos frente a su...
«Shh», la imagen fue cambiada por lo que estaba ahí rodeándolo. El piso frío y de cristal debajo, podía sentirlo bajo sus piernas, la puerta sobre su palma, y la pared en la que casi se recargaba era real. Regresaba a él, igual que su ritmo cardiaco. «Respire hondo».
Cuando oyó la instrucción, lo hizo. Uno adentro y otro afuera. Lento, el oxígeno volvió a su cuerpo, y al abrir los ojos, descubrió a su inteligencia emocional junto a él en su forma de perro. Se había acurrucado en su regazo, estaba allí, en su pecho, y sentía cada latido de su corazón al igual que su pelaje holográfico que él se permitió acariciar después de exhalar.
«¿Mejor?», asintió, casi con una sonrisa suya.
"Gracias," desapareció al poco rato, y la perdió solo porque dentro del Sistema se suponía que ya no estaba. Se ponía en modo hibernación, al menos era posible llamarla en casos de emergencia. Eso casi había sido una.
Cuando se puso en pie, finalmente entró a su casa. Se suponía que debía hacer algo para evitar tener un ataque de nuevo, mas, la verdad este casi lo había desfallecido. Hyun se echó en su sillón de la sala y de ahí no se paró hasta la madrugada.
Lo hizo solo porque su brazolector le envió una alarma de cómo no podía permanecer más tiempo en el Sistema. El deber llama. Ver tal notificación en la oscuridad le trajo muchas otras, miles de ellas en forma de mensajes y llamadas perdidas.
"¿Qué...?" En cuanto se sentó, vio que eran de Loey, todos y cada uno preguntándole dónde estaba y si todo estaba bien, o qué ha pasado. Él maldijo, gracias a su crisis olvidó que iba a verlo. Claro que él no lo buscó, pero... "Ugh."
Peinó su cabello hacia atrás. Tampoco era como si él estuviera ahí para esto.
Endureció su corazón y como gran borde que se le reconocía, ignoró a Loey en todos sus mensajes y llamadas. Ya era tarde, no creía tener manera de contestar y recibir algo ahora. Debía salir del Sistema, mejor era enfocarse en su trabajo. Si no quería que se repitiera lo que hoy vivió, tenía que hacerlo.
Salió lo más temprano posible del Sistema.
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Sé que este es un capítulo muy corto a comparación de todos los otros ya escritos, pero es con toda intención. A veces en la historia habrá estos capis cortos para ayudar a pasar a otro arco de la trama.
Hay algo ahí que pasa con Hyun, y que pronto lo estaremos viendo también con Loey, pero ahorita solo toca esperar y pensar qué podrá ser todo esto 👀
💥 ¿Ustedes qué piensan? ¿Ideas sobre el problemita de Hyun?
💥 ¿Cómo creen que continúe la misión ahora? ¿Qué es eso que el Sistema tanto busca para ponerse en contra de Hyun?
💥 ¿Y cómo piensan que estará Loey ahorita?
Muchas gracias por leer hasta acá. Espero que les vaya bonito. Nos estaremos leyendo pronto en otro capítulo 💙
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