Dragon Ball Z: Legado Familiar ch 7
CAPÍTULO SIETE: MEDITANDO Y OTRA VEZ ENTRENANDO
GOHAN POV:
Me encontraba parado encima de una pequeña montaña, específicamente en una loma que está muy cerca de un lugar en el que no me gusta ir ni por error por los muy malos recuerdos que trae y que con el paso del tiempo no ha cambiado mucho, mejor dicho, sigue con las claras marcas y cicatrices que dejo esa dura pelea que tuve hace tantos años contra ese maldito.
-Ka... me... ha... me...- susurré al mismo tiempo que me puse a recordar ese momento crítico.
Flash back:
-¡HAAAAA!- grité con todas mis fuerzas al lanzar un Kame Hame Ha con todo el poder que tenía en esos momentos usando solamente mi brazo derecho cuando era un joven haciéndole frente a Cell que también lanzó esa técnica para contraatacar.
Nuestros dos ataques al chocaron entre sí formando una gran esfera de energía junto con un sismo tan devastador que parecía a punto de partir el mundo en mil pedazos.
Los dos forcejeábamos fuertemente por tratar de destruir al otro, y por ese forcejeo, el planeta literalmente se puso a temblar y yo llevaba todas las de perder al encontrarme gravemente herido y aún con la ayuda de mis amigos y el apoyo de mi padre desde el otro mundo no podía superar el Kame-Hame-Ha de Cell. Todo parecía estar perdido, hasta que...
-¡VEGETA!- había exclamado viendo hacia atrás al señor Vegeta que lo había atacado por la espalda distrayéndolo un momento, esa fue mi oportunidad.
-"¡AHORA, GOHAN!"- me ordenó papá al percatarse de que era nuestra única oportunidad.
-¡AAAAAHHHHHH!- volví a gritar del esfuerzo al usar todas las fuerzas que me quedaban y mi Kame-Hame-Ha superó al de Cell tomándolo por sorpresa y de a poco se empezó a desintegrar soltando un grito de agonía sufriendo como el maldito monstruo que es.
Me le acercaba a paso lento rugiendo hasta que no quedo ni una sola célula de él, mi ataque llegó hasta el espacio exterior perdiéndose en su infinita oscuridad y después de unos segundos me detuve flotando en el aire respirando agitado por del esfuerzo para luego caer al piso sonriendo de la alegría y dicha por haberle ganado y salvar la Tierra librándola de sus garras.
Fin del flash back
Entonces se estarán preguntando: si yo gane esa pelea y salvé al mundo y probablemente al universo entero ¿Por qué me mortifico al volver a este campo de batalla? Pues eso tiene algunos buenos motivos.
El primero es porque debido al gran exceso de confianza que tuve cuando me transformé en un súper saiyajin fase 2 al haberme enfurecido como nunca, en vez de haber derrotado a Cell enseguida, solamente me dediqué a hacerlo sufrir como se lo merecía y divertirme por todo el daño que le provocaba. Lo que lo llevó a querer auto-destruirse para acabar con la Tierra, conmigo y con los demás por lo que mi padre se sacrificó para salvarnos a todos... si tan solo le hubiera hecho caso a él en esos momentos, no habría tenido que dar su vida por segunda vez.
Lo segundo es que esa batalla sacó le peor de mí. Siempre he sido alguien pacífico que no le gusta la violencia, o sea no tener que pelear a menos que sea absolutamente necesario, pero esa vez... cuando partí en pedazos a los Cell Jr. no solamente lo hice por ayudar a mis amigos, sino también porque lo disfruté, así es, me gusto matarlos de esa forma tan salvaje y sin compasión alguna.
Lo disfruté aún más cuando le tocó a Cell. Creo que nunca antes ni después gocé de hacer sufrir a alguien de esa manera, por más malo y terrible que pudiera llegar a ser ese alguien.
Cielos ¿Qué clase de persona tiene que ser alguien que le gusta el sufrimiento ajeno? ¡Me había comportado casi igual que Cell o Freezer que les gustaba hacer sufrir a los demás! Y a pesar de tantos años, esa experiencia todavía me sigue dando un mal sabor de boca.
Si estoy aquí en este lugar que me trae tan malos recuerdos es por la charla que tuve con mi padre cuando me fue a buscar en la escuela. Ya he dicho como un millón de veces que no me gustaba pelear al menos de que no hubiera más opción alguna o cuando me enojo de verdad, pero como le dije a él, tampoco puedo negar que en algunas ocasiones disfrutaba mucho de la emoción de un verdadero combate y si ese tipo extraño sea quien sea es alguien malo y resulta tan poderoso como lo dijo Dende... tal vez no vaya a pasar mucho tiempo antes de que yo vuelva a la acción.
Además, aún recuerdo muy bien las palabras que el Androide 16 me dijo antes de morir...
Flash back:
-Gohan... escúchame...- comenzó a dialogar -no es pecado luchar por la justicia. Al contrario, eso es una buena obra... recuerda que existen oponentes que jamás entenderán con las palabras. Solamente tienes que soltar la furia que se encuentra en tu espíritu... entiendo cómo te sientes, pero ya no tienes por qué seguir soportándolo- cada una de sus palabras llegaban a lo más profundo de mi ser.
-Ju, ju, eso fue un buen consejo- el maldito de Cell se le acercó -déjame decirte, que lo estoy haciendo a mi manera.
-Gohan...- a pesar de lo que iba a ocurrirle a continuación, pudo sonreírme con una honestidad superior a la de cualquier ser humano -protege a los seres vivos... y a las plantas de este mundo... que tanto ame... te lo encargo- fue lo último que me dijo antes de que Cell lo aplastara.
Fin del flash back
-"No es pecado luchar por la justicia. Al contrario, es una buena obra. Recuerda que existen oponentes que JAMÁS ENTENDERAN CON LAS PALABRAS"- estas últimas palabras son las que más resuenan en mi mente porque 16 tiene toda la razón.
Siempre va a aparecer alguien tan cruel que no quiera cambiar por las buenas y que seguirá disfrutando hacer maldades; es ahí cuando los seres que luchan por la paz y la justicia tienen que entrar en acción y hacer hasta lo imposible para detenerlo.
Y sí, yo siempre he puesto de mi parte en ese sentido cuando era el Gran Saiyaman, pero esto solamente lo hacía cuando era más joven y detener a criminales comunes y corrientes y no de forma precisamente muy seria que digamos.
¿En qué me deja todo esto ahora? También le dije a mi padre que yo ya no era necesario porque él, Vegeta, mi hija, Uub, Trunks y Bra estaban presentes para salvar al mundo de cualquier emergencia por lo que yo ya no soy necesario, pero como él me dijo, si la situación se complica tendría que poner de mi parte en ayudarlos.
Ese es mi problema, yo... esto es demasiado vergonzoso, he perdido mucha condición física. Al igual que mi hermano, desde hace mucho tiempo que no entreno para mejorar y volverme más poderoso, al contrario al igual que él me estoy volviendo menos fuerte con el paso del tiempo tal y como me pasaba durante los años desde que derroté a Cell hasta que apareciera Buu, ¡Incluso peor que cuando Freezer fue revivido! Y aunque el Señor Pícoro me trató de ayudar al entrenarme poco después de eso para así tener el poder necesario para proteger a mis seres queridos, de nuevo le perdí el interés y dejé eso de lado.
También tiré a la basura todo lo que hice al entrenar con la Espada Z luego de sacarla de la piedra en el planeta Supremo y que el viejo Kaiosama hiciera el "esfuerzo" de aumentar mis poderes dándome al estado Místico para luchar contra Majin Buu, logrando en esos momentos, volverme más poderoso que papá cuando se transformaba en un súper saiyajin fase tres.
Creo que aún tengo ese estado, solo que al igual que mi cuerpo, se ha ido deteriorando con el paso del tiempo. Tiempo... es otra cosa con la cual no cuento demasiado, porque no puedo entrenar para volverme más fuerte a la vez que también atiendo mis asuntos de oficio escolar, ¿Qué debo hacer al respecto?
-Tiempo...- me crucé de brazos teniendo la cabeza gacha y luego vi el viejo campo de batalla. Cómo voy a conseguir el tiempo para... un momento -"Tiempo... ya sé... ¿Cómo no se me ocurrió antes?"- pensé sonriendo al ocurrirse una buena idea y luego me fui volando con la esperanza de lo que se me vino a la mente fuese la solución a todo lo que me acompleja.
FIN DEL GOHAN POV.
-...- luego de que Gohan se fuera, la pantalla se mueve de un lado a otro tratando de encontrar a alguien, pero no encontró a nadie causando que se forma un gran signo de interrogación y sonara una pequeña alarma como la una persona contestando mal una pregunta en un programa de concursos (NA: de seguro pensaron que el segundo sujeto misterioso iba a estar espiando a Gohan como lo hizo con los demás ¿Verdad? XD)
Enfocándonos esta vez en la familia de Vegeta, este junto con sus hijos estaban entrenando en la cámara de gravedad aumentada un millón de veces gracias a las continuas exigencias del príncipe saiyajin y después de las quejas de Bulma al haber hecho el esfuerzo sobre humano de terminar tal artefacto de la tecnología más avanzada que pueda existir.
Pero ese esfuerzo no es nada comparado con lo que su esposo e hijos estaban haciendo en estos momentos al sudar tanto la gota gorda como la gota de sangre.
-9,985... 9,986... 9,987... 9,989...- contaba el príncipe de los saiyajines al hacer lagartijas usando una sola mano, mejor dicho, usando un solo dedo subiendo y bajando apoyándose en el dedo índice derecho teniendo su brazo izquierdo detrás de su espalda y cada una de sus gotas al chocar contra el piso de la sala hacía que esta temblara un poco, pero a pesar de todo eso, se ejercitaba sin tener que estar transformado en un SSJ.
-5,979... 5,980... 5,981... 5,982...- su hijo Trunks también contaba, pero no haciendo lagartijas, sino levantando y bajando una gran mancuerda con ambos brazos y a cada uno de los lados tenía mil kilos, y al igual que su padre, sus gotas de sudor al chocar contra el piso estremecían la sala.
-¡HIIIIAAAA!- exclamó la hija menor del rey del orgullo dando al dar varios puñetazos al aire con la mano derecha y después varias patadas con su pierna izquierda. En sus extremidades tiene unas grandes muñequeras de 300 kilos cada una y ni ella ni su hermano estaban transformados.
-9,999... y 10,000- al haber terminado de contar Vegeta se sentó en el piso respirando muy agitado pero rápidamente su gran orgullo le hizo ponerse de pie para no parecer débil frente a sus hijos -¿Ya terminaron o van a seguir perdiendo el tiempo...?- se pasó una mano por la frente.
-Ya casi papá... 5,998... 5,999... ¡Y 6,000!- Trunks después de terminar de contar con cuidado bajo su mancuerda porque si las deja caer bruscamente literalmente podría crear un fuerte terremoto y destruir la sala que a su madre tanto trabajo le costó construir.
-¿Qué hacemos ahora papá...?- Bra se quitó las muñequeras y dejó en el piso igual de cuidadosa. A pesar estar tan agitada como ellos mantenía todo su entusiasmo haciendo que su padre volviera a sonreír como es, o sea de forma orgullosa a máxima expresión.
-Ahora traten de atacarme...- la chica exclamó feliz y dio un pequeño salto haciendo que el lugar temblase violentamente, mientras que su hijo mayor lo miró algo pálido por tal petición.
-Pe-pero papá, si apenas podemos ejercitarnos ¿Cómo podríamos siquiera tratar de...?- iba a protestar, pero se calló por la mirada molesta que recibió de su parte.
-No se los estoy pidiendo, ¡Se lo estoy ordenando! Así que comiencen y espero que me ataquen con toda la intención de lastimarme y sin contenerse- dicho esto se alejó un poco de ellos para ponerse en guardia -además, si no son capaces de aguantarme el paso de esta forma, solo transfórmense en súper saiyajines para que dejen de estar quejándose.
Así que Trunks botó un suspiro de resignación y miró a su hermana que seguía emocionada. Dieron un asentimiento y se transformaron en súper saiyajines fase uno para que les costara menos trabajo moverse. Mientras que él tiene el cabello casi igual al de su contraparte del futuro tal y como se lo mostró a Goten en esa ocasión, el de ella tomo una forma muy parecida al de su padre teniendo como agregado un gran mechón en el lado derecho de su cara logrando causar un sismo que se sintió por fuera de la sala de gravedad.
-¿Eso es un terremoto?- se extrañó la madre de Bulma tomando Té con ella y su marido porque todas las instalaciones de la Corporación Cápsula se estremecieron ligeramente.
-No es un terremoto, mamá, solamente son Vegeta, Trunks y Bra entrenando- explicó su hija como si fuera lo más normal del mundo para luego darle un sorbo a su Te.
-Espero que la sala de gravedad resista, ya que costó mucho trabajo crear una aleación metálica que fuera lo suficientemente fuerte como para resistir una fuerza de gravedad aumentada un millón de veces- al señor Brief le preocupó la integridad de su compañía, pero también tomo Té.
-Empiecen- Vegeta dio permiso a sus hijos para luchar, pero no estaba transformado en SSJ.
Quien ataco primero fue su hija que trató de darle un golpe a la cara, pero él se agachó esquivando por poco el puño derecho de ella que le rozó el cabello y le pegó en el estómago sacándole el aire. Trunks le trató de dar una patada en el costado, pero flexionó su pierna derecha deteniéndole con su rodilla, pero enseguida su hijo mayor también quiso pegarle en el rostro, así que en vez de agacharse se echó para atrás esquivándolo también por poco, sin embargo, Bra le lanzó un ataque de energía, y como estaba demasiado cerca, no podía esquivarlo así que cruzó sus brazos delante de sí y la energía al chocarse ante estos produjo una pequeña explosión que hizo temblar más fuerte todavía la sala de gravedad y el resto de la C.C.
-"Gr... ese ataque fue más fuerte de lo que creí"- pensó molesto mientras se descubría y sus brazos humeaban un poco, pero al ver al frente sus hijos ya no estaba- ¿Pero qué ra...?
-¡Acá estoy, papá!- su hija lo tomó por sorpresa apareciendo a su espalda y le trato de dar una patada por el costado izquierdo. Movió hacía atrás su codo chocándolo contra el pie de ella, pero antes de que pudiera hacer otro movimiento Trunks le dio una sorpresiva patada en el cachete derecho mandándolo a volar a una de las paredes de la sala, pero se hizo bolita y dio unas volteretas en el aire y apoyó sus pies en esa pared impulsándose para adelante creando un pequeño cráter en ella dirigiéndose a sus hijos rugiendo molesto y ellos se pusieron en posición de defensa, pero justo cuando estaba frente a ellos, desapareció sorpresivamente.
-¿A dónde se fu...?- esta vez a Bra iba a preguntar en dónde se había metido.
-Es hora de darles una cucharada de su propia medicina- le tocó tomarlos por sorpresa al ponerse detrás de ellos concentrando energía en cada una de sus manos para lanzarles un ataque de energía a quema ropa.
Sus hijos reaccionaron rápido y se inclinaron hacía adelante eludiendo por poco los ataques de su padre que dieron contra otra pared creando una explosión, y aun estando en posición horizontal, flexionaron sus piernas derechas y al mismo tiempo le dieron una patada doble a su padre en el abdomen sacándole el aire y no le dieron chance siquiera de reponerse porque se pusieron de cabeza y otra vez le dieron una patada cada uno, solo que esta vez, en sus hombros mandándolo contra el piso haciendo que se chocara duramente contra este de espaldas volviendo a crear otro cráter y que rugiera nuevamente del dolor. Ambos de nuevo se le acercaron para agredirlo, Trunks con su puño izquierdo y Bra con su rodilla derecha, pero...
-¡YA BASTA DE ESTUPIDECES!- exclamó ya colérico Vegeta al extender para adelante las manos deteniendo en seco los ataques de sus hijos haciendo que el cráter se volviera más ancho y profundo mientras su cabello se volvía amarillo y sus ojos azules indicando que se estaba transformando en un súper saiyajin haciendo que todo la Corporación temblara de forma mucho más violenta y de un brusco empujón los apartó dejándolos anonadados por eso.
-Parece que Vegeta y nuestro nietecitos se están divirtiendo mucho- comentó sonriendo la madre de Bulma para luego darle una mordida a una galletica.
-"Esto ya no me está gustando para nada"- pensó preocupada su hija al mismo tiempo que se ponía de pie y se encaminaba a la sala de gravedad.
-Espera hijita, ya van a traer más galleticas- le avisó su mamá pensando que ella se había ido a buscar más bocadillos a la cocina.
-¡Es hora de terminar con esto!- exclamó un colérico el rey del orgullo y extendió la mano derecha listo para lanzar una de sus técnicas más reconocidos: El Ataque Bing Bang.
-¡Espera, papá!- le pidió su hijo mayor, pero fue demasiado tarde. Para no recibir tal técnica tan devastadora se movió a la izquierda y su hermana a la derecha esquivándolo por poco y la esfera de energía se dirigió a la máquina que producía la gravedad dando como resultado...
-¡BOOOOOMMMMM!- una fuerte explosión que destruyó por completo no solamente la sala en dónde ellos entrenaban, sino también una gran porción de toda la Corporación Capsula haciendo que temblara a tal punto de que casi se derrumbara asustando no solamente a los que estaban dentro de ella, sino también a los que estaban fuera por los alrededores.
-Bah, otro de los experimentos de la Corporación Cápsula...- murmuró un transeúnte no asustado, sino de forma desaprobatoria y molesta para luego seguir su rumbo como si no hubiera pasado nada de nada.
-¡¿PERO QUÉ FUE ESO?!- preguntó Bulma no aterrada, sino furiosa y corrió a toda velocidad hacía la sala de gravedad, o lo que queda de ella, porque estaba totalmente destruida con escombros y bigas retorcidas humeando y en el medio de todo estaba su esposo y sus dos hijos cubiertos de polvo y moviendo algunos restos que les cayeron encima y tosían un poco -¡¿Se encuentran bien?!- quiso saber esta vez sí muy preocupada al acercárseles.
-Sí mamá... estamos bien cof... cof- aseguró su hijo mayor tosiendo y arqueó la espalda hacia atrás tronándosela. Tanto su ropa, como la de su hermana y la de Vegeta estaban hechas girones.
-Pero papá destruyó toda la sala, mamá- le dijo Bra señalando de forma acusadora a su progenitor que solamente se limitaba a sacudirse el polvo que lo cubría.
-¡VEGETAAAAAA!- con un grito digno de la peor bestia del averno, se puso roja de la ira y se le formaban grandes venas en la frente haciendo que sus hijos se volvieran pálidos del miedo cuando se abrazaron sudando a chorros como cataratas temblando como gelatinas.
-¿Qué?- fue la simple y cínica pregunta que salió de la boca del príncipe de los saiyajines encabronando más a su mujer que botaba humo de la nariz como si fuera un toro a punto de arremeter.
-¡TE DIJE QUE TUVIERAS CUIDADO AL ENTRENAR EN LA SALA DE GRAVEDAD!- le siguió gritando endemoniadamente su esposa, pero él seguía sin inmutarse.
-No es mi culpa que no sea capaz de aguantar los ilimitados poderes del saiyajin más poderoso del universo- le siguió diciendo con toda simpleza y descaro su marido acompañado de su ENORME orgullo enfureciendo más a su fiera, corrección, su mujer que gruñía como una animal salvaje.
-¡PUES ENTONCES ARRÉGLATELAS POR TI MISMO, YA QUE NO PIENSO VOLVER A CONSTRUIRTE OTRA SALA DE GRAVEDAD!- dictada esta sentencia final, le dio la espalda para alejarse a pasos pesados murmurando unos insultos.
-Qué mujer tan impaciente- siguió diciendo cínicamente Vegeta, pero luego se dio cuenta de que sus hijos se trataron de alejar de la escena a hurtadillas de manera muy caricaturesca -¡Ustedes dos no se van a ir a ningún lado!- su grito los dejó tiesos como un bloque de hielo y lentamente dieron media vuelta para ver como se les acercaba -tengo que decirles algo.
-Pa-papá yo... este...- su hijo mayor no sabía que decir para salvar su pellejo.
-Es que no-nosotros...- su hermanita estaba igual que él y se asustaron más cuando su padre levantó sus dos manos y cerraron sus ojos pensando que los iba a golpear.
Su gran sorpresa fue que les palmeó los hombros y cuando abrieron los ojos la sorpresa de los dos aumentó más al ver como él les sonreía de forma satisfactoria.
-Lo que hicieron ahora es lo que siempre deben hacer al momento de entrenar, atacarme con toda la intención de lastimarme y sin restricciones- les alagó sin dejar de sonreírles, suficiente para quitarles la angustia y soltaran un suspiro de alivio.
-¿Pero entonces no estas molesto cuando te golpeamos duramente?- Bra puso ojitos de borrego.
-Claro que no, ya les dije que esa es la forma en como tienen que hacerlo. Solo me molesté porque me tomaron por sorpresa- trató de justificar la actitud que puso cuando se transformó en un SSJ.
-Pero la sala de gravedad... se destruyó por completo y mamá esta tan furiosa que no va a hacernos otra- a Trunks le seguía dando cierto temor lo que Bulma les podría decir más adelante.
-Es solo por el momento, ya verás que en unos días a tu madre se les bajará esos humos que tiene- afirmó su padre mostrando que todavía le vale gorro el enojo de ella -pero ya no perdamos más tiempo y sigamos entre...- no pudo seguir hablando porque tanto su estómago como el de sus hijos rugieron como leones enjaulados indicándoles una sola cosa.
-Mejor comamos primero, papi- le pidió la chica sobándose la barriga.
-Está bien y luego volveremos a entrenar y que lo hagan con los ánimos de ahora- accedió sin miramiento alguno porque para un saiyajin cuando se trata de comer nada está por encima ni siquiera el entrenamiento.
-¡SÍ!- después de que la chiquilla exclamará esto, se retiraron del destruido lugar pasando sin pena alguna por encima de los escombros y pasando por lo que alguna vez fue la entrada de la cámara.
Y ahora sí, el segundo sujeto misterioso volvió a las andanzas observándolos detenidamente.
-Ese Vegeta con la misma "delicadeza" de siempre- trataba de no partirse de la risa -Ummm... ya me suponía que entrenar con una gravedad aumentada un millón de veces era algo muy difícil, pero ellos lo hicieron mejor de lo que esperé...- se puso a pensar frotándose la quijada, pero luego sonrió -ya quiero que llegue el día del Torneo de las Artes Marciales- dicho esto se retiró como siempre lo hace.
Capítulo siete editado en Fan Fiction el 07/04/2018.
Publicado en Wattpad el 27/07/2020.
Espero que les haya gustado el POV de Gohan, ya que creo que es así exactamente cómo se siente respecto al tema de las peleas y sobre el asunto de Cell (Al menos antes sin tomar en cuenta el actual DB Súper, claro está)
También espero que les haya gustado la ausencia del sujeto misterioso luego de su POV XD, pero sobre todo, espero que les gustase como Vegeta, Trunks y Bra entrenaron y las cosas que hacían, en especial molestar a ese transeúnte y encabronando a Bulma cuando destruyeron toda la sala de gravedad que le costó tanto trabajo crear, ¿Pero qué es lo que hará Gohan respecto al tiempo? Creo que eso es un poco obvio, ¿O no? XD
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