Pasaron varios meses de preparación tanto para el torneo, como para sus participantes.

Kyabe se encontraba volando majestuosamente sobre las ciudades de su amado planeta Salad, saboreando un sándwich con la mente inmersa en las posibles pruebas que le depararían en el inminente Torneo.

Entre bocado y bocado, se dejaba llevar por la confianza que emanaba de sus habilidades excepcionales, convencido de que pocos podrían igualarlo en combate en este prestigioso evento. Sin embargo, una sombra de duda se insinuaba en su pensamiento, como un susurro de precaución. Una incertidumbre que solo surgía al considerar la posible participación de dos chicas saiyajin en particular: Kale y Caulifla.

Kyabe: *Estoy seguro de que puedo superar a cualquier oponente, pero cuando se trata de Kale y Caulifla, las cosas se ponen. . . Interesantes.* (Reflexionó, pensando en las chicas cuando las conoció y en como se desenvolvieron en el Torneo del Poder.) *Esas dos siempre tienen la capacidad de sorprenderme. Bueno, siempre y cuando no estén participando, puedo mantener mi confianza intacta.*

La brisa acariciaba su cabello mientras Kyabe daba el último bocado a su sándwich. Con un movimiento fluido, liberó una poderosa aura que lo envolvió, anunciando su inminente partida. Con velocidad supersónica, se lanzó hacia su destino, surcando el cielo con destreza.

Kyabe, inmerso en sus pensamientos, murmuró consigo mismo mientras atravesaba las nubes.

Kyabe: Ahora que lo pienso, ¿Qué tan probable es que hayan Super Saiyajines en este torneo? Nadie conocía esta transformación, o yo al menos no sabia nada, hasta que Goku y Vegeta me la revelaron. Sin ellos, no creo que llegaría muy lejos. Bueno, sería emocionante si aparecieran. Mientras tanto, prefiero no usarla para mantener las cosas justas.

El joven Saiyajin surcó los cielos hasta llegar a una exuberante isla tropical en el corazón del planeta Salad. A medida que se acercaba, vislumbró a numerosos Saiyajines que volaban y aterrizaban en esa misma región. La excitación y anticipación llenaban el ambiente, palpable en las expresiones de aquellos que ansiosamente se preparaban para participar en el torneo, así como en los rostros de los que aguardaban como espectadores.

El zumbido de conversaciones animadas y el tintineo de las armaduras Saiyajines resonaban en el aire, creando una sinfonía peculiar de emoción y determinación. Kyabe descendió con gracia, uniéndose a la multitud de guerreros que se congregaban en la isla. Su mirada recorría el escenario, captando la mezcla de expectación y competitividad que flotaba en el ambiente.

Con una sonrisa decidida, se preparó para sumergirse en el torneo, listo para enfrentar a sus compañeros Saiyajines con la misma valentía que lo caracterizaba. La isla vibraba con la energía de los guerreros, marcando el inicio de un evento que prometía desafíos y emociones sin igual.

Kyabe se movió rápidamente hacia la zona de inscripción, cruzando a su paso a unos guardias y a un científico que llevaba consigo un extraño medidor. La curiosidad lo llevó a detenerse por un momento y escuchar la conversación que mantenían.

Guardia 1: Viejo, ¿Me recuerdas qué este cacharro?

Científico: Un medidor de pelea reducido

Guardia 2: Creí que estas cosas estaban fuera de línea hace años.

Científico: Y lo estaban, hasta que su alteza quiso que las modificara. Ahora hacen que el guerrero deba liberar grandes cantidades de energía para medir su nivel de poder con números más reducidos para la capacidad de la computadora. Por ejemplo, con esta máquina podríamos decir que 1000 = 1.

Guardia 1: Sabes que todos aquí rozan o superan las 1000 unidades como minimo.

Científico: Era un ejemplo. La máquina simplifica el resultado en medio de su cálculo, lo que la hace algo más lenta, pero bastante más efectiva que los medidores que se utilizaron en muchas organizaciones hace varias décadas.

Guardia 2: Genial, entonces quiero usarla.

(No estoy seguro si darle o no "Niveles de Poder" a la historia. Si quieren, lo hago, pero como se hizo en el Fanmanga "New Hope" con números propios que tengan sentido dentro de la historia. Si no, simplemente pueden comparar a ciertos personajes de esta historia con otros dentro del Canon y tomarlos como referencia para medir el poder que tienen.)

Guardia 2: ¿Creen que saque un numero mayor al del rey? 

 Guardia 1: Contigo el no tendría ni para empezar.

Kyabe completó su inscripción, recibiendo una mirada compasiva por parte del administrador, quien parecía subestimarlo por su apariencia aparentemente débil. Sin embargo, Kyabe optó por ignorar el juicio implícito en esa mirada; sabía que su verdadera fuerza yacía más allá de las apariencias físicas.

Mientras se dirigía hacia la zona de espera, sus ojos captaron una escena peculiar. Un hombre musculoso se encontraba en una pulseada con un niño, este último esforzándose al máximo para contener las risas mientras intentaba ganarle al adulto.

Kyabe, observando la situación, quiso intervenir. Con un gesto decidido, empujó suavemente las manos de ambos contendientes, brindando un apoyo discreto al niño. La expresión de sorpresa y alegría iluminó el rostro del pequeño guerrero cuando finalmente logró vencer al hombre musculoso.

El administrador, sorprendido por la intervención de Kyabe y su demostración de apoyo al niño en la pulseada, observó al saiyajin con un nuevo matiz de respeto. La expresión de incredulidad en su rostro se transformó en un reconocimiento silencioso, como si hubiera descubierto algo inesperado en el guerrero de apariencia modesta.

Kyabe, sin prestar mucha atención a la reacción del administrador, continuó su camino con determinación hacia la zona de espera del torneo. Aunque su físico no proyectaba la misma imponencia que algunos de sus compañeros, había dejado claro que su fortaleza no se limitaba a la apariencia externa.

Con el paso del tiempo, más saiyajines se unieron a la isla, sumándose a la creciente lista de guerreros que participarían en el torneo. Siete nuevos rostros llamaron la atención, cada uno con su propia esencia y misterio.

Zarakon: El Saiyajin del gimnasio, destacando con su torso desnudo y pantalones grises, demostrando una impresionante fuerza y determinación.

Kal: El Saiyajin del pueblo lejano, vistiendo un kimono verde, con habilidades curativas y un enfoque orientado al bienestar de los demás.

Radish: La Saiyajin de las calles del Planeta Salad, ataviada con ropas desgarradas, mostrando valentía y determinación incluso con la Ley  sobre ella.

Calaban: El Saiyajin de la opulenta mansión, elegantemente vestido, glamuroso y arrogante, irradiando poder y autoridad.

Force: El Saiyajin del modesto bar, con apariencia de albañil, rebosante de pasión y orgullo, confiado en que ganará el torneo.

Pepper: La Saiyajina traviesa y provocativa de las calles del bajo mundo, cambiando su enfoque hacia el torneo y la promesa de poder.

Betto: El Saiyajin calvo, musculoso y de apariencia formidable, emanando malas vibras a la vista, lo que añadía un toque de intriga a su participación.

Con la llegada de estos nuevos competidores, la expectación en la isla alcanzaba niveles más altos. La diversidad de personalidades y habilidades entre los Saiyajines prometía un torneo lleno de emoción y retos.

Pasados unos momentos, todos los participantes se encontraban en un gran cuadrilátero, frente al imponente medidor de poder. La expectación llenaba el aire mientras cada saiyajin aguardaba con curiosidad el uso que se daría a tan peculiar aparato.

El científico a cargo, con el medidor en mano, se dirigió a los participantes.

Doc: Bien, pasen al frente y expulsen sus poderes. Una vez que midamos su fuerza, se determinará su participación en el torneo.

Aunque las palabras del científico resonaban en el cuadrilátero, no todos los saiyajines parecían convencidos. Algunos expresaban sus dudas, cuestionando la confiabilidad del aparato o la justeza de medir el poder de esta manera.

Doc: (Percibiendo la incertidumbre en el grupo, añadió) Sé lo que piensan, y no, no es del todo justo. Pero el Rey lo ordenó para agilizar las rondas del torneo.

A pesar de las reservas, los saiyajines se prepararon para demostrar la magnitud de su poder.

Y así comenzaron las mediciones.

Los primeros participantes pasaron la barrera de las 10,000 unidades, pero sus cifras no impresionaron demasiado. Entre los Saiyajines, no se percibía una diferencia significativa, ya que la mayoría no superaba los 40,000. (Recuerden que este medidor no mide de la misma forma que como lo hacían los del ejercito de Freezer.)

Sin embargo, el ambiente cambió cuando llegó el turno del Saiyajin albañil, ahora conocido como Force. Emitió un rugido resonante mientras liberaba una poderosa ráfaga de energía, haciendo temblar el lugar. Las cifras en el medidor se dispararon, marcando unos impresionantes 82,000 unidades de poder.

Force: (Con una sonrisa de satisfacción, comentó) Ese laburo de la semana pasada resultó ser un buen entrenamiento después de todo.

Las miradas de sorpresa y respeto se dirigieron hacia Force, que ahora se destacaba como uno de los competidores más fuertes en el torneo. La competencia se volvía cada vez más intensa, y la emoción crecía mientras los saiyajines seguían mostrando sus increíbles niveles de poder en el medidor.

El turno de Kyabe llegó, y aunque reprimía sus poderes para evitar la transformación en Super Saiyajin, logró alcanzar las 81,000 unidades en el medidor. Aunque no superó el nivel de Force, la cifra seguía siendo impresionante.

Force: (Inicialmente sorprendido, dejó escapar un suspiro.) *¿Así es como se siente envejecer? Diablos* (Pensó mientras se tocaba su barbilla afeitada para el torneo, sintiéndose de repente más viejo ante la competencia Juvenil.)

La secuencia de mediciones continuaba, revelando un espectro diverso de poder entre los saiyajines.

Pepper, con un poder cercano a las 50,000 unidades, mostró una fuerza impresionante, aunque no llegó a igualar a Kyabe y Force.

Radish, atando su larga cabellera, desató un poder que alcanzó las 70,000 unidades, ganándose la admiración de los presentes.

Kal, con un gesto sereno, liberó una fuerte aura de Ki que marcó 85,000 en el medidor, consolidándolo como un contendiente poderoso.

Betto, con un esfuerzo evidente, alcanzó las 89,000 unidades, demostrando una determinación singular en su intento por posicionarse en la cima.

Luego, Calaban se adelantó, extendió sus brazos y liberó su poder, superando las 90,000 unidades. Kyabe y Kal, a pesar de sorprenderse, mantenían su calma. El control sobre su propia energía les permitió regular su poder sin problemas, por lo que claramente se estaban conteniendo.

Pero la verdadera sorpresa llegó con Zarakon. Sin cambiar su postura, sin mostrar esfuerzo aparente, ejerció un poder y presión que desconcertó a todos. La máquina sufrió una descompostura antes de calcular nuevamente, revelando un resultado increíble.

Doc: ¡¡2 Millones!! (El impacto de esta cifra dejó a todos en shock.)

Kyabe y Kal, que hasta ese momento habían mantenido su compostura, retrocedieron ante la abrumadora presión del Ki de Zarakon.

Kyabe: Wow. E-Es demasiado. (Comento sorprendido.)

Las mediciones prosiguieron sin contratiempos hasta que finalmente concluyeron. Luego, se destacaron a los 16 participantes que avanzarían al torneo, ordenados según sus niveles de poder:

8- Pepper - 50,000

7- Radish - 70,000

6- Kyabe - 81,000 (Probablemente más)

5- Force - 82,000

4- Kal - 85,000 (Probablemente más)

3- Betto - 89,000

2- Calaban - 90,000

1- Zarakon - Más de 2,000,000

La diversidad de fuerzas presentes en el torneo se reflejaba en la variada lista de participantes, cada uno con su propio conjunto de habilidades y niveles de poder. El escenario estaba listo para un enfrentamiento épico entre los saiyajines, donde la verdadera magnitud de sus capacidades se pondría a prueba en combate.

Los otros 8 son relleno.

El entusiasmo en la multitud alcanzó su punto máximo con los nombres de los 16 participantes anunciados. Sin embargo, un silencio repentino se apoderó del lugar cuando una figura descendió majestuosamente del cielo. Era el Rey, Kyarotto. (De la palabra "Rey Zanahoria" en Japones)

El imponente monarca aterrizó con gracia frente a los participantes, observándolos con escrutinio. Su expresión inicial mostraba escepticismo, pero después de un breve suspiro, volvió a elevarse en el aire hasta posicionarse en la cima, visible para todos.

La atención de la isla se centró en Kyarotto, esperando sus palabras y evaluación sobre los guerreros saiyajines que se enfrentarían en el torneo.

El Rey vestía una armadura real elaborada con materiales avanzados, pero adornada con detalles tallados y grabados que evocaban la estética tribal y primitiva de los saiyajines. La capa real que llevaba, aunque majestuosa, tenía un borde desgarrado que sugería un historial de batallas y victorias.

Su cabello oscuro, más disciplinado que el de los saiyajines del Universo 7 pero aún con un toque de rebeldía, caía en cascada sobre sus hombros. Las cicatrices en su rostro contaban la historia de innumerables enfrentamientos, una mezcla de la nobleza de su posición y la ferocidad innata de su raza.

Los ojos oscuros del Rey Kyarotto, siempre alerta y penetrantes, reflejaban la valor y determinación de un líder que había enfrentado desafíos significativos. Su figura musculosa y postura regia transmitían la fuerza y la majestuosidad esperadas de un gobernante saiyajin.

(Si no les da la imaginación, tomen al diseño de Kakumei como referencia)

Kyarotto: Saiyajines, guerreros de Salad. Hoy nos reunimos en este torneo para poner a prueba sus habilidades, su fuerza y, lo que es más importante, su valía como defensores de nuestro orgullo y legado. Observé las mediciones, vi sus niveles de poder, y aún así, me pregunto si son lo suficientemente fuertes para representar a nuestra raza. Demuestren que son dignos. No hay espacio para la mediocridad en este torneo. Solo los más fuertes merecen el honor de llevar la posición de "Elite". No me emocionan fácilmente, pero hoy, quizás, encuentre algo en ustedes que merezca reconocimiento. Que empiece el torneo saiyajin."

Pepper miraba al rey con corazones en los ojos, Zarakon, por su parte, mantenía la compostura y dirigía su mirada con respeto, reconociendo el poder y autoridad que emana el Rey.

Kyabe, en posición firme, mostraba una mezcla de respeto y cierta intimidación frente al poder del monarca. Kal, con una expresión respetuosa, dirigía su mirada al frente, mostrando la seriedad propia de un saiyajin que comprendía la importancia del momento.

Mientras tanto, Force se rascaba el bigote con aparente impaciencia, esperando a que el discurso del Rey llegara a su fin para dar inicio a la siguiente fase del torneo.

Kyarotto: No me emociono ni me sorprendo fácilmente, pero hoy, quizás, encuentre algo en ustedes que merezca reconocimiento. ¡Que empiece el torneo saiyajin! ¡¡A PELEAR!!

En cuestión de minutos, los guerreros se dirigieron a sus respectivas salas de espera, mientras el Rey y los altos mandos ocupaban tronos y gradas especiales. Las pantallas presentaron los primeros enfrentamientos:

Kal Vs Radom

Kyabe Vs Otro Random

Calaban Vs Radish

Pepper Vs Force

Zarakon Vs Otro Random

Betto Vs Último Random

Los otros dos combates restantes me dan mucha paja ya que serian cuatro Randoms mas, por lo que los dejamos aun lado.

Kal Vs Un Radom

Kal, con movimientos finos y dignos de un artista marcial, desplegó su destreza en la arena. Su agilidad y precisión le permitieron superar a su oponente sin dificultad, ganando la ronda de manera imponente.

Kyabe Vs Otro Random

Kyabe, tras intercambiar unos golpes con su oponente, lanzó un puñetazo directo que envió a su rival fuera del ring. La fuerza del golpe fue suficiente para asegurar su victoria de manera contundente.

En las gradas, Kale y su abuelo observaban atentamente el desarrollo del torneo. Kale, con un brillo de emoción en sus ojos, comentó sobre la participación de Kyabe.

Kale: Kyabe está participando, abuelo.

El Abuelo: Kyabe, ¿ese chico que estuvo contigo en ese torneo extraño al que fuiste?" Al recibir la afirmación de su nieta, el anciano examinó detenidamente a Kyabe. "Es muy flaco para ti... ¿Estás segura de que te gusta?"

Kale: (Sorprendida y un poco avergonzada) ¡Abuelo! Es solo un amigo.

El Abuelo: Tu abuela también fue mi amiga.

Kale: (Sonrojada) ¡¡Abuelo!!

Calaban Vs Radish

La batalla entre Calaban y Radish alcanzó un punto crítico cuando, a pesar de la abrumadora diferencia en los niveles de poder, la determinación de Radish despertó un aumento momentáneo de su energía saiyajin. Una mezcla de desesperación y emoción por la batalla desencadenó en Radish un poder latente que la llevó a igualar un poco las cifras en el medidor.

Calaban, sorprendido por el cambio en la intensidad de su oponente, se vio obligado a elevar su propio nivel de energía para mantener la ventaja. La arena temblaba con la colisión de sus ataques, mientras ambos saiyajines desataban un espectáculo de fuerza y velocidad.

A pesar del aumento de poder momentáneo de Radish, Calaban demostró su superioridad al final. Con un movimiento hábil, desvió un ataque de Radish y contraatacó con un puñetazo que la envió fuera del ring. Aunque Radish mostró una resistencia impresionante, la brecha en los niveles de poder finalmente se hizo evidente.

El enfrentamiento entre Calaban y Radish comenzó con una tensión palpable en el aire. La multitud aguardaba expectante mientras los dos saiyajines, representantes de mundos opuestos, se preparaban para la contienda.

La campana resonó y, como un relámpago, Calaban se lanzó hacia Radish con una serie de movimientos ágiles y precisos. Sus puños y patadas eran ejecutados con gracia y elegancia, reflejando la pericia de un guerrero acostumbrado a la comodidad de la opulencia. 

Calaban: ¿Es todo lo que puedes hacer, basura de las calles? (Ridiculizó, despreciando a su oponente.)

Radish, sin embargo, esquivaba los ataques con destreza, moviéndose con agilidad y contrarrestando con golpes rápidos y certeros.

Radish: La elegancia no sirve de nada en las calles. Aquí es donde la verdadera fuerza se prueba. (Respondió, desafiante.)

La pelea se intensificó a medida que ambos saiyajines chocaban en un duelo de estilos y filosofías de vida. Calaban desplegaba su técnica refinada, mientras Radish confiaba en su experiencia en las calles para encontrar aberturas en la defensa de su oponente.

En un momento crítico, Calaban desató una ráfaga de energía, creando una onda expansiva que envolvía a Radish. Sin embargo, la Saiyajin desfavorecida se levantó entre los escombros, mirando desafiante a su oponente. 

Radish: La riqueza no puede comprar la verdadera fortaleza, Calaban.

Calaban: Es cierto, ¿Pero para que? Si puedo nacer en un cuerpo talentoso.

La batalla alcanzó su clímax con movimientos rápidos, intercambios de golpes y explosiones de energía. Finalmente, con un puñetazo bien colocado, Radish derribó a Calaban, demostrando que la determinación y la habilidad superan las ventajas sociales.

pesar de la abrumadora diferencia en los niveles de poder, la determinación de Radish despertó un aumento momentáneo de su energía saiyajin. Una mezcla de desesperación y emoción por la batalla desencadenó en Radish un poder latente que la llevó a igualar un poco las cifras en el medidor.

Calaban, sorprendido por el cambio en la intensidad de su oponente, se vio obligado a elevar su propio nivel de energía para mantener la ventaja. La arena temblaba con la colisión de sus ataques, mientras ambos saiyajines desataban un espectáculo de fuerza y velocidad.

A pesar del aumento de poder momentáneo de Radish, Calaban demostró su superioridad al final. Con un movimiento hábil, desvió un ataque de Radish y contraatacó con un puñetazo que la envió fuera del ring. Aunque Radish mostró una resistencia impresionante, la brecha en los niveles de poder finalmente se hizo evidente.

La multitud, emocionada por la valentía de Radish, reconoció el esfuerzo de la Saiyajin desfavorecida. Calaban, aunque victorioso, también ganó el respeto de algunos espectadores por la destreza de su oponente.

Force Vs Pepper

La arena vibraba con anticipación mientras Force, el musculoso y trabajador Saiyajin, se preparaba para enfrentarse a Pepper, la Saiyajina traviesa y provocativa. La tensión en el aire era palpable cuando el gong resonó, dando inicio al enfrentamiento.

Pepper, ágil y astuta, se lanzó hacia Force con movimientos rápidos y evasivos. Con una serie de arañazos y golpes rápidos, intentó encontrar alguna abertura en la defensa de su oponente. Sin embargo, Force, con su imponente físico, bloqueaba y resistía cada ataque sin mostrar signos de esfuerzo.

Los golpes y arañazos de Pepper parecían apenas rozar la resistente piel de Force, quien se mantenía firme y seguro en su posición defensiva. Sus músculos parecían absorber los impactos sin problemas, y su rostro permanecía imperturbable.

Pepper, frustrada por la aparente impenetrabilidad de su oponente, redobló sus esfuerzos, tratando de encontrar una estrategia que pudiera superar la resistencia de Force. Sin embargo, el musculoso Saiyajin se mantenía sereno, bloqueando y contrarrestando cada movimiento con una calma que desesperaba a su ágil contrincante.

Finalmente, con un gesto hábil, Force atrapó el puño de Pepper en su mano, deteniendo sus ataques.

Force: Mas te vale cambiar de estrategia si crees que con pura acción me vas a ganar. Estas no son las camas de tus novios puerca.

Pepper: Al menos ellos son mas hermosos y educados que tu, cerdo con olor a mierda.

La intensidad del enfrentamiento entre Force y Pepper alcanzó un nuevo nivel cuando, tras liberarse con una patada, Pepper expresó su frustración y enojo hacia su oponente. Sin embargo, la actitud segura de Force no se vio afectada, y con una calma aparentemente inmutable, contratacó los ataques de Pepper.

Pepper: (Desesperada y cerca del borde del Ring) ¡No espera! ¡Por favor! ¡Déjame ganar! ¡Te daré parte de mis ganancias! ¡Te chuparé el ####! ¡No me saques! (Suplicaba mientras Force la mantenía a raya.)

Force: (Sin inmutarse ante las ofertas y súplicas de Pepper, respondió con frialdad) Radish está más buena que tú. (Con esta afirmación, desató una ráfaga de energía que envió a Pepper fuera del ring, dejándola débil y derrotada en el suelo.)

Zarakon Vs Un Pobre Random

Zarakon, con un puñetazo al aire, generó una ráfaga de aire que golpeó a su oponente, expulsándolo del ring y dejándolo fuera de combate. La exhibición de poder del saiyajin del GYM fue impresionante.

Betto Vs . . . Wow, Otro Random.

Betto, con su fuerza bruta y determinación, molió a golpes a su oponente, dejándolo inconsciente en el suelo. Su dominio en la pelea fue innegable, asegurando su avance en el torneo.

A medida que avanzaban las rondas del primer combate, el abuelo experimentaba una leve decepción al sentir que las batallas se volvían un tanto aburridas para su gusto. El pensamiento de si valía la pena haber venido a este torneo cruzaba por su mente, y la posibilidad de abandonar la arena se hacía presente.

No obstante, el abuelo encontraba razones para permanecer en el lugar, y esas razones eran Kyabe y Zarakon. Kyabe, porque conocía a su querida nieta Kale, y Zarakon, debido a su imponente poder que despertaba el interés del anciano.

Aunque las batallas no cumplían plenamente sus expectativas, la presencia de estos dos guerreros saiyajines añadía un elemento intrigante al torneo, y el abuelo decidía quedarse para presenciar cómo se desenvolverían las siguientes rondas.

Sin percatarse de que las rondas del torneo habían concluido, el abuelo permanecía absorto en sus pensamientos, aún reflexionando sobre la naturaleza de las batallas que se desarrollaban en la arena. Mientras tanto, Kale, sin notar la distracción de su abuelo, lo llamaba para que se unieran a ella y fueran juntos a algún restaurante cercano.

A pesar de que el abuelo no se había dado cuenta de que las rondas habían pasado, la llamada de Kale finalmente logró captar su atención.

Mientras el abuelo se levantaba de su asiento, observaba cómo el resto de los saiyajines también se dirigían hacia los lugares de comida, listos para disfrutar y reventar cada lugar con sus voraces apetitos.

Incluso el Rey abandonó su trono para unirse al festín. La arena, que minutos antes estaba llena de energía y batallas, se vació rápidamente mientras todos los guerreros saiyajines se dirigían a satisfacer sus hambres y compartir momentos de camaradería en torno a la comida.

. . . 

La atmósfera pasó de la tensión de las peleas a la relajación y el bullicio de los saiyajines disfrutando de sus alimentos. En los restaurantes, se podía escuchar risas, conversaciones animadas y el sonido de platos y cubiertos chocando mientras los guerreros compartían sus experiencias y se preparaban para las rondas siguientes del torneo. La pausa para el almuerzo ofrecía un respiro necesario antes de que la emoción regresara a la arena de combate.

La escena en el restaurante presentaba una variedad de situaciones. Mientras Kal comía con educación, escuchando las historias de Force, el albañil devoraba un pollo asado con entusiasmo y Zarakon comía en silencio, rodeado de admiradores que deseaban conocer el secreto de su formidable poder. Ignorando las alabanzas, Zarakon continuaba su comida en paz.

Calaban, por otro lado, disfrutaba plenamente de la atención que recibía, saboreando cada momento de su popularidad entre los presentes.

De repente, Kyabe divisó a Kale junto a un anciano y decidió acercarse para unirse a ellos.

Kyabe: ¡Kale! ¿Cómo has estado? (Exclamó, expresando su alegría al encontrarse con ella.)

Kale: Kyabe, ha pasado un tiempo. ¿Cómo has estado?

Kyabe: Bien, estuve entrenando.

Kale: No mostraste mucho en tu batalla.

Kyabe: Bueno, es que aún no tengo un oponente lo bastante fuerte como para usar todo lo que tengo.

Abuelo: (Harto de ser ignorado) Sigo aquí, tortolitos.

Kale: ¡A-Abuelo, ya te dije que no es eso!

Kyabe: ¿¡Abuelo!? ¡Es un placer, señor!

Abuelo: ¿Así que es tu amigo y no le hablaste de mí? Siento que le he fallado a tu abuelita.

Kyabe: Bueno, Kale y yo solo nos vimos una vez en un torneo junto a Caulifla. Pero aún así, nos hicimos buenos amigos.

Abuelo: ¿Conoces a mi otra nieta rebelde y rabiosa? (Preguntó sorprendido) Y por lo que veo llevas puesto el uniforme de las defensas élites del planeta, pero sin la armadura y con las mangas cortas.

Kyabe viste un traje similar al traje de Vegeta en la Saga de Buu, pero conservando algunos accesorios de su traje normal.

Abuelo: Me sorprende que Caulifla te considere como un amigo... debió pensar que eras alguna clase de menso nada más verte.

Kyabe: Eh, sí. (Recordó claramente que lo vio como a un imbécil mas) Fue toda una sorpresa viniendo de ella.

Abuelo: Claro. Ven, siéntate con nosotros.

Aunque Kale se sentía algo excluida en el almuerzo, también se sorprendía al ver cómo Kyabe convivía tan bien con su abuelo. Para integrarse un poco, soltó una pregunta que también estaba pensando hasta ahora.

Kale: ¿Planeas usar el Super Saiyajin en las siguientes rondas?

La pregunta hizo que Kyabe la mirara, mientras el viejo se sorprendía al escuchar el nombre de aquella forma. Observó a Kyabe, dudando de que él pudiera tener el Super Saiyajin, esa forma agresiva y feroz, siendo Kyabe un chico amable y mayormente pacífico.

Kyabe: No planeo usarlo por el momento, más que nada porque quiero ver qué tan lejos puedo llegar sin la forma. . . Además, no sería justo.

Abuelo: (Con una mirada un poco más seria) Dime, ¿cómo conociste esa transformación? ¿Acaso pasó algo a alguien?

Kyabe: Uh, no, no le pasó nada a nadie... *No sé si Kale le contó sobre el Universo 7, pero por si acaso miento un poquito.* Me lo enseñaron otros Saiyajines. ¿Por qué lo pregunta?

Abuelo: *¿Entonces hay más Saiyajines con esa forma?*

El viejo se rasca un poco la cintura, dejando ver algo peludo que esta atado a el, pareciendo un cinturón con pelo. El anciano dudaba de que otros Saiyaijines conocieran la transformación, pero si al final había más, esperaba que no se tratara de casos similares al suyo.

Abuelo: ¿Cómo eran esos Saiyajines?

Kyabe: Uh, em. . . Ellos. . .

Betto pasó por ahí, chocando con la mesa del anciano.

Betto: Viejo puto, ¡muévete! (Lanzando un golpe)

Kale y Kyabe iban a defenderlo y atacar a Betto, pero el viejo paró sin esfuerzo el ataque y sacudió a Betto hacia atrás, lanzándolo y haciendo que este se moviera algunos centímetros atrás.

Kyabe se sorprende, y Kale también. No pensaron que este anciano tendría algunas sorpresas como esas.

Abuelo: Veo que la falta de respeto abunda por aquí.

Betto: ¡Viejo de Mierda! No sabes con quién te estás metiendo.

Abuelo: (Sonríe de manera burlona) No deberías subestimar a los ancianos, muchacho. ¿O acaso necesitas una lección para aprenderlo?

Kyabe y Kale miran al abuelo, intrigados por su habilidad y por lo que pueda suceder a continuación.

Guardia: Lo sentimos, pero los participantes tienen prohibido luchar entre ellos fuera de la arena. Por favor, les pido que controlen sus emociones.

El guardia se sentía incómodo, pero también intimidado por Betto. Era como si algo turbio saliera de él, pero también como si estuviera frente a un criminal... Era extraño, ya que no había historial criminal a la vista en ninguno de los participantes.

Betto: Bien, púdrete, viejo. Machacaré al flacucho tonto en la arena para desquitarme más tarde.

Kyabe: Ya lo veremos.

Abuelo: Bueno. (Ve al mesero llevando un postre a Kal y Force) ¿Alguien quiere postre?

El reloj marcaba el inicio de la segunda ronda, y el ambiente en el torneo estaba cargado de expectación. Mientras los participantes se dirigían nuevamente hacia la arena, el misterioso anciano con habilidades sorprendentes dejaba tras de sí un aura de incertidumbre. Kyabe se preguntaba si este torneo traería consigo más sorpresas de las que imaginaba.

Los espectadores, ansiosos por presenciar nuevas batallas, ocupaban sus asientos con la esperanza de que la emoción y el suspenso aumentaran en esta fase del torneo.

¿Habrá más sorpresas en este torneo?

¿Qué secretos ocultará este anciano? 

¿Kyabe podrá superar esta prueba?

En los cuarteles de la Patrulla Espacial, una señal de socorro interrumpe la tranquilidad. La pantalla destella, indicando un ataque en curso en un remoto planeta volcánico.

En ese mundo ardiente, un hombre de piel grisácea, con una sonrisa desafiante, observa cómo hordas de Hombres de Metal se abalanzan hacia él. Lanzan lava y emiten humo negro, manifestando su furia por el devastador daño causado a su hogar.

El hombre, líder de esbirros, observa con satisfacción cómo sus subordinados protegen un majestuoso árbol. Con una risa malévola, decide descender para disfrutar aún más de la masacre que se avecina.

Magenta, emergiendo como líder de los defensores, se interpone valientemente frente al misterioso guerrero.

Magenta: ¡Te pedimos por favor que te vayas de nuestro planeta con tus lacayos!

???: (Sonríe) ¡Chatarras inservibles!

Ante este insulto despectivo, la moral de los defensores se desmorona. Incapaces de resistir, son víctimas de un poderoso ataque de energía, vaporizándolos a todos. 

???: El Poder del Árbol de la Esencia Sagrada es increíble.

El hombre carga otro ataque de energía al ver a los sobrevivientes intentando levantarse, a Magenta destrozado en el suelo, pero aún con vida.

???: Y pensar que la vida de estos insectos me dará mucho más poder.

Este Saiyajin mira malévolamente a sus presas.

???: A este ritmo, ¡todo el universo estará a mis pies! 

Turles: ¡Y nadie va a detenerme!