CAPÍTULO 1: JUSTICIERA EXTREMISTA


Dragnya avanza extremadamente horrorizada a través del terreno cubierto por múltiples cadáveres de Estelares asesinados a sangre fría, llegando a la conclusión de que la responsable de tan tamaña masacre es la misma persona que le había arrebatado a todos sus seres queridos mucho tiempo atrás. Conforme andaba los cuerpos desmembrados e irreconocibles seguían en aumento, representando un paraje infernal sacado de las peores pesadillas que nadie podría llegar a concebir en su mente.

DRAGNYA: Esto es horrible... ¿El responsable de esta masacre será el mismo que acabó con mi querida familia? De ser el caso me encargaré de vengar sus muertes acabando con dicha persona. Grrr... No se lo perdonaré... Jamás se lo perdonaré...

De repente Dragnya escucha un alarido de terror y corre a toda velocidad en la dirección de la que procede, llegando poco después a una zona abierta en la que una pequeña niña Estelar está llorando y pidiendo ayuda para ser salvada de la misteriosa mujer que se dispone a matarla. La misteriosa mujer es de piel ligeramente pálida, tiene el pelo corto de un color rojo intenso, al igual que el iris de sus ojos. Su vestimenta consiste en una lujosa mitra, en un bello kimono carmesí con un collar usej adornando su cuello, brazaletes oscuros en sus muñecas, zapatos negros y una faja negra con un lazo en la parte trasera, mientras que de la parte delantera surge una tela que acaba en punta y está decorada con varios signos desconocidos. La niña no puede parar de llorar y con ojos acuosos e irritados mira con horror a quien va a arrebatarle la vida.

NIÑA ESTELAR: (llorando desconsoladamente) ¡P-por favor! ¡Se lo suplico! ¡Perdóneme la vida! ¡No quiero morir!

MUJER MISTERIOSA: Créeme, si no hubieras nacido como una insidiosa Estelar y no hubieras cometido ningún pecado no estarías en esta situación. Los descendientes de las Viejas Deidades habéis traído muchísimo mal y es por ello que me ocuparé de eliminar hasta el último Estelar y el último Sentimogu que exista. Haz algo útil y que tus restos alimenten la vegetación de este planeta.

NIÑA ESTELAR: ¡¡NOOOOOOO!!

La sádica mujer alza su brazo y su mano empieza a convertirse en un grueso tentáculo con múltiples cuchillas capaces de descuartizar incluso la sustancia más dura que existe. La joven cierra los ojos con fuerza resignada y aceptando su final, pero justo antes de que el tentáculo pueda alcanzarla es rescatada por Dragnya al dar un veloz sprint. La extremidad golpea el suelo con brutalidad, levantando una gran cantidad de rocas y dejando una profunda marca en la superficie del lugar. El tentáculo desaparece inmediatamente después y vuelve a convertirse en la mano de la mujer del kimono carmesí.

NIÑA ESTELAR: (temblando y aún en shock) ¿A-ah?

DRAGNYA: Tranquila, ya estás a salvo. Yo te protegeré de esa despreciable mujer.

MUJER MISTERIOSA: (voltea la mirada y ve a la niña en los brazos de Dragnya) Vaya, ja, ja. Me ha sorprendido bastante a la increíble velocidad que te has movido para salvar a esa mocosa de mi ataque. Te felicito por ello. Está claro que tú no eres una cualquiera, me lo acabas de demostrar.

La malvada mujer dibuja una sonrisa carismática y despreocupada en su rostro, lo que provoca que Dragnya le lance una mirada de odio y desprecio mientras se le marcan venas en el rostro.

DRAGNYA: ¿Se puede saber qué demonios le has hecho a esta pobre gente? ¿Acaso te han hecho algo para que les estés masacrando de una manera tan horrible?

MUJER MISTERIOSA: Ellos no, pero sus antepasados me hicieron algo terrible en el pasado. Es por ello que debido al hecho de que compartan raza o lazos de sangre con aquella gentuza merecen ser eliminados de la faz del mundo.

DRAGNYA: ¡Ese argumento no tiene ningún sentido! ¡No se puede generalizar y meter a todo el mundo en el mismo saco! ¡Si la gente no ha hecho nada malo no se merece ser castigada!

MUJER MISTERIOSA: (aún sonriendo) Simplemente pueden convertirse en una amenaza en el futuro. Tan solo me estoy asegurando de salvar a las futuras víctimas inocentes de estos despreciables asesinos. Mi objetivo es purgar el mal de toda la creación, y los Estelares y los Sentimogu son los principales responsables de todo el mal acontecido desde el principio de los tiempos.

DRAGNYA: ¡No todo el mundo es igual! ¡Eres igual de déspota y de extremista que el maldito Vladyron!

MUJER MISTERIOSA: ¿Vladyron? ¡JA, JA, JA, JA, JA, JA, JA, JA, JA, JA, JA!

DRAGNYA: (molesta) ¿Qué es tan gracioso?

MUJER MISTERIOSA: Enseguida te lo digo, querida. Pero antes voy a deshacerme de esa molestia que tienes en tus brazos para que podamos hablar con más tranquilidad.

NIÑA ESTELAR: (abrazando con fuerza a Dragnya) ¡¡NO!!

DRAGNYA: No le vas a poner un dedo encima a esta chica, ¿me has oído?

MUJER MISTERIOSA: (sonriendo maliciosamente) Descuida, esa no es mi intención.

La malvada mujer cierra su puño, concentrando una pequeña cantidad de energía que puede verse a su alrededor. De repente, la cabeza de la niña Estelar estalla y un géiser de sangre empapa a Dragnya y parte del suelo. La joven heroína se queda impactada al haber visto morir a una niña y no dice nada sosteniéndola en brazos, mientras la sangre se desliza por el cuello de la chica Estelar asesinada.

DRAGNYA: ...

MUJER MISTERIOSA: Asegúrate de dejarla tirada por ahí para que sus restos sirvan de alimento para este planeta. En breve me comeré su alma y será liberada de todos sus pecados una vez pase a formar parte de mi ser.

DRAGNYA: (posa con delicadeza el cadáver en el suelo y habla en voz baja) Desgraciada bastarda...

MUJER MISTERIOSA: ¿Hm? No es para tanto, únicamente quiero acabar con el mal que corrompe este universo enorme y que todos puedan ser felices. A todo esto, si no estoy equivocada he escuchado antes que has mencionado el nombre de Vladyron. ¿Significa eso que conocías a mi difunto hermano?

DRAGNYA: (impactada) ¿Tu hermano? ¿Vladyron es tu hermano?

MUJER MISTERIOSA: Sí, el muy gilipollas parece que no le hablaba a los demás sobre mí. ¡Ups, pero qué modales los míos! Permíteme presentarme como es debido: mi nombre es Zyanna, encantada de conocerte.

Zyanna se levanta el sombrero para saludar a Dragnya, revelando que posee dos cuernos negros a ambos lados de su cabeza decorados con símbolos celestes. En estos momentos la joven recuerda las últimas palabras de su madre Lúmina describiéndole cómo era la persona que había asesinado a todos sus seres queridos en su ausencia, dibujando una expresión de furia en su rostro mientras aprieta sus puños con fuerza.

DRAGNYA: Ahórrate tus absurdas presentaciones. ¿Reconoces este colgante? ¡Era el que siempre llevaba mi madre Lúmina y que me entregó antes de morir!

ZYANNA: ¿Hm? ¡Anda! ¿Tú eres Dragnya, la chica que lideró a los héroes que acabaron con mi hermano Vladyron y con la tiranía que ejercían el Dios Sentimogu y el Universal sobre todos nosotros? ¡Me moría por conocerte, cielo!

DRAGNYA: ¿Por qué estás matando indiscriminadamente a esa pobre gente? ¡Esa niña solamente estaba pidiendo ayuda!

ZYANNA: Es por eso que la salvé de sus orígenes. Ahora no sufre y me ocuparé de consumir su esencia para que pueda purificarla y la guíe a la felicidad eterna. Mi misión es despojar todo lo que se conoce de todo mal.

DRAGNYA: No me hagas reír. Suenas igual que Vladyron, desde luego se ve que realmente sois hermanos.

ZYANNA: Por favor, querida. No me compares con ese merluzo de Vladyron, para él la única perfección era que él fuera el único ser existente. Yo lo que me limito a hacer es eliminar todo aquello que suponga una amenaza para los demás. Es mi deber debido a mis orígenes, y quiero redimirme haciendo justicia y que la gente pueda disfrutar de la paz que tanto merece, sin viejas deidades como los Estelares o los Sentimogu que únicamente han traído problemas.

DRAGNYA: ¿Tus orígenes? ¿De qué estás hablando?

ZYANNA: Veo que no lo sabes. En ese caso permíteme arrojar algo de luz sobre ese asunto: Vladyron y yo somos descendientes directos del primer matrimonio entre un Estelar y una Sentimogu, algo completamente antinatural. A causa de ello nosotros fuimos condenados a muerte a pesar de que ayudábamos a los demás y quienes desconfiaban de nuestras buenas intenciones querían vernos muertos. ¿Tienes idea de lo mucho que tuve que soportar por culpa de esos desgraciados que nos temían a pesar de que poníamos nuestras habilidades al servicio de otros?

DRAGNYA: ...

ZYANNA: No sentí ninguna lástima por mis padres o por Vladyron. De hecho sus alaridos de dolor y agonía eran música celestial para mis oídos cuando estábamos siendo torturados. Ver cómo el mal es castigado hace que mi corazón se ponga a mil por hora, eso es algo que me llena de felicidad.

DRAGNYA: ¿Estás diciendo que por cometer un pecado según tú tus padres merecían acabar de esa manera?

ZYANNA: Efectivamente, cielo.

DRAGNYA: Eres despreciable... Diría que eres incluso peor que Vladyron...

ZYANNA: (fingiendo sentirse dolida) Qué palabras más hirientes, y eso que nos acabamos de conocer. Deberías agradecerme que matara rápidamente a tu querida familia y les permitiera ir al paraíso para ver la utopía que quiero crear. Esa fue mi muestra de respeto hacia aquellos, que a pesar de tener un origen lleno de pecado, salvaron este bello mundo que conocemos de varios cataclismos. Además, me encargué de destruir aquellos cachivaches que conceden deseos para evitar que todos aquellos a los que he matado puedan regresar a la vida.

DRAGNYA: Te mataré...

ZYANNA: ¿Eh? ¿Qué has dicho?

DRAGNYA: ¡¡TE MATARÉEEEEEEEEEE!!

Dragnya estalla en ira y carga una monstruosa cantidad de energía a su alrededor, fruto de la ira y la rabia que está sintiendo. Zyanna ve el incremento de fuerza de Dragnya con cierta sorpresa, preparándose para enfrentarse a la joven Estelar y disfrutar un poco de un emocionante combate mientras sonríe de forma maliciosa.

ZYANNA: Venga, acércate y disfrutemos de un divertido combate. Espero que tú me des algo más de juego que el resto de tu querida familia. Reconozco que me infligieron algunas heridas que tardaron bastante tiempo en sanar, pero tampoco fue para tanto.

Dragnya, tras escuchar las crueles palabras de la malvada Zyanna, desaparece del campo de visión de la sádica mujer. Zyanna trata de encontrar a Dragnya, y sin previo aviso recibe un potente puñetazo en la cara que es incapaz de interceptar, provocando que el sombrero de la mujer salga volando por los aires. Acto seguido la joven carga mucha energía entre sus manos y la lanza al abdomen de Zyanna, haciéndola retroceder varios metros hasta que impacta contra un árbol, generándose una intensa explosión.

DRAGNYA: Uf... Uf... <<¿Por qué me siento tan cansada? Algo no anda bien aquí...>>

Zyanna da un salto de la nube de polvo que se ha producido tras la explosión y se coloca a unos metros de Dragnya. La hechicera realiza unos rápidos movimientos con las manos y de repente la joven guerrera siente cómo una poderosísima onda de choque le ha alcanzado sin que se diera cuenta, sufriendo un intenso dolor al mismo tiempo que pierde una brutal cantidad de sangre por los múltiples cortes que ha recibido del ataque.

ZYANNA: Venga, cariño. ¿No me irás a decir que eso es suficiente para derribarte? En caso afirmativo sería verdaderamente decepcionante. Confiaba en que me dieras un poco de juego, quiero divertirme un poco y ejercitar un poco el cuerpo para que no se me oxide.

DRAGNYA: Grrr...

Dragnya da un salto y se queda levitando en el aire preparando su siguiente ataque, acumulando mucha energía para ejecutarlo y acabar con su enemiga.

ZYANNA: Parece que vas a emplearte a fondo, me alegro. ¡Adelante! ¡Golpéame con todo lo que tengas!

DRAGNYA: ¡¡MUEREEEEEE!!

Dragnya gira a gran velocidad hasta envolverse de la energía que ha logrado acumular en pocos segundos. Inmediatamente después se lanza a gran velocidad como un taladro, ante lo que Zyanna responde disparando una gigantesca bola de energía oscura para detenerla en seco, pero se queda petrificada del asombro al ver cómo la joven heroína la atraviesa a gran velocidad y explota en el cielo, causando una espesa nube de humo.

ZYANNA: Ji, ji. Sabía que no me defraudarías, pero eso no va a ser suficiente para vencerme. Voy a detenerte sin demasiado esfuerzo.

Zyanna crea enfrente de ella una gruesa barrera de color violeta para defenderse del ataque de Dragnya. Cuando la potente embestida de la Estelar impacta brutalmente contra el escudo de la maligna mujer saltan chispas y pequeños relámpagos. Ambas contendientes forcejean con dificultad sin dar su brazo a torcer, negándose a ceder un solo milímetro.

DRAGNYA: Ñg... Ergh...

ZYANNA: Uf... Me estás obligando a esforzarme más de lo que esperaba. Esa técnica tuya es verdaderamente poderosa y noto cómo mi protección está agrietándose poco a poco, pero al mismo tiempo tú estás sufriendo las consecuencias de desatar un poder de tanta magnitud, ¿me equivoco?

DRAGNYA: (quejumbrosa) ...

ZYANNA: Tu silencio me dice lo que necesito saber. Eres igual de patética que tu querida familia de perdedores, no puedes llegarte a imaginar lo mucho que disfruté escuchar sus últimos alaridos de muerte. Chillaban como unas vulgares alimañas infectas, ja, ja.

DRAGNYA: Retíralo...

ZYANNA: (extrañada) ¿Hmm?

DRAGNYA: (furiosa) No te atrevas a insultar... ¡¡A MI FAMILIA!!

Dragnya saca fuerzas de flaqueza y finalmente hace añicos la barrera creada por Zyanna, la cual es atravesada con brutalidad al sufrir un gigantesco agujero en el estómago. La sangre negra se desperdiga por los alrededores y salpica el suelo verde del lugar, quemando la vegetación y dejando pronunciadas zonas estériles entre la hierba. Dragnya deja de girar y se detiene a las espaldas de la maléfica criatura, quien a pesar de haber recibido una herida letal no se ha desplomado y permanece en silencio mientras la niña le lanza una mirada de odio y rabia.

ZYANNA: ...

DRAGNYA: Despídete, asesina despreciable...

Cuando Dragnya se prepara para darle el golpe de gracia a Zyanna en una milésima de segundo siente cómo un millón de cuchillas han provocado heridas fatales en su cuerpo, rasgando una parte de su vestimenta en el proceso. La pobre chica cae sobre sus rodillas y siente un intenso ardor que le recorre todo el cuerpo a causa del potentísimo veneno que hay en las cuchillas presentes en los tentáculos de la malvada Zyanna. La híbrida vuelve a convertir los tentáculos en sus manos y el agujero que Dragnya le ha hecho en el estómago se cierra rápidamente, sonriendo de manera juguetona y maliciosa mientras escucha a su enemiga retorcerse de dolor a sus espaldas.

ZYANNA: Ji, ji. Voy a serte sincera, querida. Po r un momento pensé que no iba a salir viva, pero gracias a mi increíble capacidad regenerativa no hay nada ni nadie que pueda matarme. Al fin y al cabo es lo que hizo Vladyron. Él me selló porque a pesar de su gran poder sabía que jamás iba a ser capaz de acabar conmigo por mucho que se esforzara.

Las lágrimas se acumulan en los ojos de Dragnya y se deslizan sin descanso por sus mejillas sin que sea capaz de evitarlo, debido al enorme dolor que está sufriendo. La chica escucha a su malvada enemiga acercarse a ella lentamente y voltea lanzándole una mirada asesina que refleja la más devastadora de las cóleras. Zyanna se agacha al lado de Dragnya y le pasa el dedo por el rostro para secarle las lágrimas de los ojos. La Estelar intenta atacarla, pero a causa del veneno que circula por su cuerpo es absolutamente incapaz de hacerlo y es forzada a mirar a los ojos a la mujer del kimono, fijándose especialmente en las estrellas demoníacas que posee en sus pupilas.

DRAGNYA: Grrrr...

ZYANNA: No me gustaría que terminaras de una manera tan lamentable. ¿Sabes? Se me ha ocurrido algo que podría salvar tu vida. Quiero que seas mi ayudante y me ayudes en mi periplo a purgar todo el mal que existe... ¿Qué me dices, cielo?

DRAGNYA: (enfadada) Jamás... No seré nunca la ayudante de una asesina despreciable que mata a diestro y siniestro a gente inocente por su criterio egoísta y erróneo de justicia... Prefiero la muerte antes que servirte...

ZYANNA: Es una lástima, pensaba que serías más razonable. En ese caso no tenemos nada más que hablar, por el grave crimen de haber intentado asesinarme te daré un castigo muchísimo peor que la muerte. Es más, desearías estar muerta y reunirte con tu querida familia, pero lamentablemente no volverás a verla nunca más y verás cómo hago de toda la creación un lugar mejor para todos.

DRAGNYA: ¡¡NO TE LO VOY A PERMITIR!!

Dragnya usa las pocas fuerzas que le quedan y de su dedo dispara un fino rayo amarillo que perfora uno de los núcleos vitales, provocando que escupa un poco de sangre por la boca. Antes de que la malvada híbrida pueda reaccionar Dragnya crea una espada en su mano y de un rápido tajo decapita a Zyanna. La cabeza cercenada vuela por el aire y rebota por el suelo durante unos instantes hasta que se detiene.

ZYANNA: ¿Ah? ¿Pero qué...?

DRAGNYA: Jaque mate, zorra.

Cuando Dragnya cree que ha ganado el cuerpo de Zyanna se levanta del suelo como si estuviera poseído y le ataca desprevenida con un poderoso ataque de energía oscura que la deja muy malherida. Mientras Dragnya lucha para mantener la consciencia ve con horror cómo la cabeza decapitada vuelve a pegarse al cuerpo gracias a hilos fabricados con oscuridad, sanando completamente la decapitación que ha sufrido hace unos instantes.

ZYANNA: Qué pena, cariño. Ya me has demostrado tu postura y está claro que te has equivocado de bando, no me dejas elección que darte tu merecido castigo por tu actitud de mocosa impertinente.

Dragnya repta por el suelo intentando recomponerse mientras sigue tratando de no perder el conocimiento. Zyanna alza sus manos hacia el cielo nocturno y estrellado y empieza a recitar un cántico en un idioma arcano, el cual tiene como resultado que la pobre heroína sea sellada en un cristal morado de gran tamaño, permaneciendo inmóvil en su interior. Cuando la maligna mujer ve cómo su rival ha sido atrapada se acerca al cristal y lo acaricia por donde se encuentra el rostro de Dragnya.

DRAGNYA: ...

ZYANNA: Pequeña, siento mucho que esto haya tenido que terminar así. Tenía la esperanza de que recapacitaras y fueras más inteligente que los estúpidos de tu familia... Ahora el castigo que debes sufrir es el de permanecer eternamente atrapada en este cristal y ver cómo hago de este mundo un lugar mejor en el que yo sea la única deidad existente que guíe a los mortales y no se desvíen del camino correcto que yo establezca. Lo que debes estar sintiendo es que estás viva y muerta al mismo tiempo, no me gustaría estar en tu pellejo, cielo. Creo que me quedaré un poco más en este planeta, siento que debo arreglar este lugar antes de continuar con mi periplo. Hasta siempre, Dragnya... Esta es mi forma de darte las gracias por haberme liberado de mi presidio al haber acabado con mi hermano Vladyron y por haber acabado con los tiranos divinos. Observa desde tu cárcel de cristal cómo mejoro todo aquello que se conoce y extiendo mi divinidad.

Zyanna voltea y comienza a alejarse del cristal en el que está presa Dragnya. Unos momentos después se detiene y con una sonrisa extremadamente maligna y sádica da un pequeño golpe en el suelo con la parte posterior de su zapato derecho. Esto tiene como resultado que se abra una profunda y ancha grieta en el suelo que engulle el cristal con Dragnya en su interior, perdiéndose de vista en el profundo y oscuro abismo pocos segundos después. Tras esto Zyanna se marcha tarareando una dulce melodía que acompaña a la brisa nocturna del planeta. 

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