II. Avgjørelser
CHAPTER 2
DECISIONS
Los tres habían salido de aquel estadio, Ejder se encargo de abrir un portal pero antes de que pudieran cruzar al otro lado de este las marcas de Rhaena empezaban a emanar un color azul eléctrico.
Rhaena al ver qué sus marcas brillaban le dirigió una mirada a Ejder quien no paraba de mirar a sus brazos, Krum veía aquello curioso porque no sabía que significaba aquello.
–Será mejor irnos ya –ella les dijo
–¿Por qué? –pregunto Viktor–. ¿Qué significa ese color?
–Nada bueno –respondió Ejder–. No creo que sea algo de que preocuparse
–Si el color cambia a un rojo carmín, ahí es cuando debemos preocuparnos –les dijo Rhaena y Ejder solo asintió
Ejder tomo el brazo de su hermana y después los tres cruzaron el portal y este desapareció.
⚔️
Los tres llegaron al Palacio Real de Oslo y se encontraban en aquel estudio en el que Rhaena estaba horas antes.
Rhaena vio el rostro de su amigo y Ejder hizo lo mismo.
–Creo que lo mejor sería llamar a un medimago –propuso Ejder
–No –ambos la miraron–. Tiene que ser un médico, Ejder, sabes perfectamente que él no puede cruzar el portal
–Cierto, lo olvidaba –su hermano le dio la razón–. Un médico no mago tendrá que atenderte o alguien que sepa arreglar narices
–Y en lugar de que te quedes ahí parado porque no vas y le pides a Sigrid que venga –Rhaena le ordenó
–¿Sigrid es médico? –Viktor pregunto con cierta duda
Ejder río y Rhaena solo rodó los ojos –¡Odín! Dame paciencia
–Sigrid no es médico –empezo a decir Ejder–. Pero, es una excelente guerrera –Viktor asintió ante aquella respuesta–. Iré a buscarla
Ejder se retiró del lugar para ir en busca de Sigrid mientras Rhaena y Viktor estuvieron completamente solos en aquel lugar.
–Porque no vas y te cambias –propuso–. Estaré aquí cuando regreses
–Tus runas siguen brillando –Viktor señalo los brazos de su amiga
–Tranquilo, el brillo desaparecerá cuando pase lo que tenga que pasar
Viktor no dijo más y se dirigió a la entrada para retirarse, justo cuando él cruzo la puerta los ojos de Rhaena se tornaron blancos sin ningún rastro de aquel iris de color azul.
Después de unos minutos aquellos ojos volvieron a la normalidad y las runas perdieron aquel brillo.
⚔️
Ejder camino por los pasillos del palacio dirigiendo se a los aposentos de Sigrid. Una vez encontrada la puerta la tocó esperando que ella abriera. Después de un minuto la puerta se abrió y se vislumbro a una Sigrid adormilada y algo despeinada.
–¿Interrumpí tu sueño? –dijo Ejder al verla
–algo así –respondió ella–, ¿qué es lo que necesitas, Ejder?
–Rhaena me mandó a buscarte
–¿Por qué razón? –Sigrid preguntó
–No tengo una mínima idea –respondió Ejder–. Pero si lo pidió fue porque serías de ayuda
–bien
Sigrid salió de su habitación y siguió a Ejder hasta que llegaron a dónde Rhaena se encontraba.
–ya estamos aquí –Ejder dijo ganándose la atención de su hermana–. Traje a Sigrid como lo ordenaste
–Perfecto
–¿Dónde está el malherido? –pregunto Ejder al ver qué Viktor no se encontraba
–No debe tardar
Un par de minutos después apareció Viktor con un atuendo diferente y sin ningún rastro de sangre, Rhaena le indico un lugar para que tomara asiento.
–Sigrid –Rhaena la llamo captando la atención de la nombrada–. Tengo entendido que hace unos siglos te ganaste la reputación de los huesos
–Se refiere a romperlos o a ponerlos en su lugar –ante la mención de aquello por parte de Sigrid, tanto Ejder como Viktor le dedicaron una mirada algo temerosa
–Ambas, de hecho
–y ¿A quién le voy a romper el hueso? –Sigrid preguntó
–Mas bien, arreglar –Rhaena le corrigió
–Comprendo, y es a él –señala a Viktor–, a quien le arreglaré...
–la nariz –dijo Ejder–. Supongo que comprenderás las razones
Sigrid asintió como respuesta –no puede cruzar el portal, un médico no mago es difícil de encontrar a estas altas horas de la noche y yo termine siendo su última opción, sí claro que las comprendo –Rhaena trato de ocultar su risa ante ese comentario
Sigrid se acerco más a Viktor para poder ver mejor –Necesitaré un pedazo de tela, puede que le vuelva a sangrar
Ejder busco lo que Sigrid necesitaba y cuando lo obtuvo se lo entrego, Sigrid lo tomo y se lo entrego a Viktor.
–Listo –ella dijo a Viktor mientras colocaba sus dedos en la nariz
–Solo hazlo –respondió y con eso Sigrid coloco el hueso en su lugar provocando el crujido a la hora de acomodarlo y un quejido por parte de Viktor
Viktor coloco el pedazo de tela en su nariz, la cual empezó a sangrar un poco –Gracias –él le dijo
–No fue nada, si me disculpan, me retiro
Sigrid salió del lugar y regreso a sus aposentos mientras que Ejder miraba a Viktor y por instinto tocó su nariz.
–Será mejor que se vayan a descansar –Rhaena les dijo
–Sí –respondió Ejder y después miro los tatuajes de su hermana–. ¿Qué crees que habrá pasado?
–Mañana lo sabremos
Los tres salieron del estudio y se dirigieron a sus respectivas habitaciones.
⚔️
A la mañana siguiente Rhaena despertó mucho antes que todos, cuando ya estuvo arreglada y presentable se dirigió al comedor, no ingirió comida alguna solo se dedicó a responder las cartas, al parecer las cuales no querían acabar.
Una de ellas llamo su atención, por el sello de está sabía que se trataba de Durmstrang, lo curioso fue que en total eran tres, al parecer Igor sabía que Viktor se encontraba en el palacio. Tomo la que decía su nombre y leyó el contenido
Tengo el honorable placer de anunciarle que en breve se llevará a cabo el Torneo de los Tres Magos, una competición entre los tres colegios de magia más importantes de Europa. Los campeones elegidos participarán en tres pruebas.
He elegido personalmente a los alumnos más capaces para esto y usted es una de ellos, espero una confirmación o negación de su parte para ser participe de dicho Torneo.
Un cordial saludo
Igor Karkarov
Termino de leer dicha carta y se dispuso a escribir la respuesta, justo en ese momento su amigo y hermano hicieron acto de presencia en el comedor.
–Buenos días –dijeron al unisono y después tomaron asiento
–¿Más correspondencia? –pregunto Ejder
–Sí –respondió ella–. Y esto es para ustedes –les entrego sus respectivas cartas
–y ¿Esto es? –pregunto Viktor
–lee el contenido y después dices lo que quieras –Rhaena le dijo y el asintió
Mientras ambos leían sus respectivas cartas, Rhaena terminaba de escribir aquella respuesta para después ponerla en un sobre y poner el sello personal.
–Con qué, el Torneo de los tres Magos –dijo Viktor terminando de leer la carta
–Suena interesante –mencionó Ejder–. Asistiré con gusto
–Era de esperarse –Rhaena les dijo–. Supongo que tambien asistirás
–Así es –respondió Viktor
Ejder pidió a alguien de la servidumbre que trajera papel y tinta para poder responder las cartas, y en cuanto se las trajeron, ambos escribieron su respuestas.
Rhaena reviso las cartas que ya tenían sus respectivas respuestas, solo faltaba una, una que portaba el sello de Rumania, decidió abrirla y leer su contenido, claramente se trataba de un permiso para que más de un dragón saliera del santuario, era de esperarse algo así, ningún dragón sale o entra sin su permiso, las razones venían más que claras; según esto, tenía que ver con el dicho Torneo, por lo tanto ella no podía dar una respuesta a la carta, tenía que ir personalmente al santuario para dar dicha confirmación.
En ese momento Harald entro al comedor y le entrego un periódico mágico a Ejder quién leyó el contenido para después mirar a su hermana.
–Tú lo sabías, verdad –su hermano le dijo
–Sí –respondió ella–. No hubo muertos, pero si heridos
–Magos tenebrosos –dijo Harald llamando la atención de los presentes–. Cómo fue que sobre pasaron la seguridad
–Alguién que está adentro del ministerio, está más que claro –dijo Ejder
–¿Sabes que significa eso? –Rhaena dijo ganando la mirada de los tres–. Problemas
⚔️
Los días pasaron más rápido de lo que esperaban, Septiembre ya había dado inicio y con ello el regreso al colegio, Durmstrang se había llenado de murmuros, no había alumno alguno que no se hubiera enterado ya de lo que se llevaría a cabo el treinta de octubre.
Aquellos que habían sido elegidos para poder asisitir a dicho Torneo contaban prácticamente los días faltantes para llegar a la supuesta fecha, lo cual Rhaena veía de lo más absurdo. Por otro lado, Ejder se unía a los alumnos que irían para el Torneo, Rhaena nunca entendería porque su hermano haría lo mismo de llevar la cuenta de los días, al parecer eso animaba a todos a excepción de ella, muchos alumnos hacían teorías sobre los retos y algunos decían que podrían ser tan peligrosas como mencionaba la historia del mismo Torneo, razón por la cual no se vivió a llevar a cabo hasta que el ministerio cambio eso.
Los días siguieron su curso, estaban a mediados de septiembre, Rhaena estaba en la biblioteca leyendo como de costumbre y como siempre no faltaba que su hermano interrumpiera su lectura.
–¿Qué se te ofrece, querido hermano? –dijo Rhaena sin quitar la vista de el libro
–No se me ofrece nada –respondió–. Solo vine a avisarte que empieces a empacar tus cosas –Rhaena bajo un poco el libro solo para ver a su hermano a los ojos
–¿Por qué debería? –preguntó ella
–Faltan dos semanas para el gran día –dijo con gran emoción, Rhaena rodó los ojos y volvió a su lectura
–Estoy enterada de eso, pero a diferencia de ti, yo tengo que pasar por Rumania antes de ir a Hogwarts
–¿Por qué vas a ir a Rumania? –Ejder pregunto con curiosidad–. ¿Le pasó algo a alguna dragón?
–No exactamente –ella le respondió–. No hay ningún dragón enfermo o malherido...
–¿Entonces? ¿Cuál es el problema? –Ejder dijo interrumpiendo a su hermana
–Si me dejaras terminar –Ejder hizo un ademán de disculpa y prosiguió–. Me encantaría poder decirte de que va todo esto, pero tengo prohibido mencionar palabra alguna, por lo tanto te diré que tengo asuntos que atender
–Eso que no me puedes decir, ¿venía en las cartas que habías respondido la otra vez? –Rhaena asintió como respuesta
–Quisiera decirte, pero hice una promesa de silencio
⚔️
La semana pasó de lo más rápido, solo faltaba una semana para el gran día. En ese momento, los que fueron elegidos para ir llevaron sus pertenencias hacia el barco que los llevaría a Hogwarts.
–Deberías venir con nosotros –Viktor le dijo a Rhaena pero ella solo negó
–Tengo asuntos que atender en Rumania, son de vital importancia, lo estaré viendo allá
–Claro –dijo Ejder metiéndose a la conversación–. Mientras tanto, nosotros llevaremos tú equipaje por tí
–Sigrid y Harald estarán conmigo, de todas formas, espero y el agua no los mareé tanto –Rhaena dijo burlona mente–. Recuerden, el barco irá por debajo del agua
–Si, claro, gracias por el consejo, hermana
–No hay de que
Rhaena vio como todos subían al barco para que después este mismo se undiera bajo el agua, dio media vuelta y abrió un portal el cual la dejo junto en la entrada del santuario de dragones, y como habría predicho, Harald y Sigrid ya se encontraban ahí.
Los tres caminaron y entraron al santuario, muchas miradas se posaron en ellos tres, más en específico en Rhaena, todos los que se encontraban en el santuario sabían quién era.
Rhaena siguió su camino en busca de aquel que ahora sería el encargado del lugar. Una vez que lo encontró el hombre la miro sorprendido.
–Alteza, no esperaba que viniera tan pronto –respondió aquel hombre de edad avanzada
–Cualquier cosa que tenga que ver con los dragones es un asunto importante a tratar –respondió Rhaena–. Ahora bien, transportar a más de un dragón no es algo tan sencillo, tanto usted cómo yo sabemos perfectamente eso –el hombre asintió como respuesta–. ahora, quiero que reúna a los mejores dragonologistas, diez minutos, no más
Aquel hombre no dijo más e hizo lo que Rhaena le pidió.
Rhaena y sus acompañantes caminaron hasta la base central, puesto que este es el punto de reunión y donde todos tienen que dar su reporte diario, ahí los tres esperaron hasta que el hombre de antes apareció junto con un grupo de personas tras de él, un pelirrojo en particular sobresalía en aquel grupo.
–Como usted lo ordenó, Alteza –aquel hombre hizo una reverencia
–Bien, ya ustedes sabrán porque están aquí –Rhaena se dirigió al grupo de dragonologistas–. No dudo en que hagan un buen trabajo, pero sus simples reportes no me dirán mucho; por eso he decidido supervisarlos yo misma, tres días máximo, después de ese tiempo yo misma decidiré quienes transportarán a los dragones, eso es todo, pueden retirarse
Los susurros no se hicieron esperar y poco a poco fueron saliendo, pero solo uno se quedó.
–¿Qué se te ofrece, Weasley? –dijo Rhaena sorprendiendo al nombrado
–No creí que me reconociera –respondió él–. O al menos no creí volver a verla
–Comprendo, ¿algo más?
–¿Por qué hace esto? –Charlie admitió
–Me tomo muy enserio a los dragones, se que eres bueno en tu trabajo y puede que seas tú uno de los que vaya, solo te pido que me lo demuestres al igual que tus compañeros.
Rhaena salió de aquel lugar dejando aún sorprendido y a la vez pensativo Charles.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top