Drácula


Relamí mis labios limpiando los restos de sangre que yacían sobre ellos. Observé a la chica muerta bajo mí y murmuré:
-Otro cuerpo sacrificado, otro amor sacrificado.

Besé una última vez sus labios. Su sangre sabía mejor que eso. Jamás encontraré a alguien que me satisfaga lo suficiente y no estoy hablando solo de la sangre, me refiero al amor.

•••

Te conocí en aquel barrio fantasma. Tú, eras tan lindo conmigo a pesar de que sabías que yo era un demonio -ese era mi apodo-. Sabías lo mala persona que soy y aún así me ofreciste tu amistad. Me enamoré de ti al instante.

Íbamos a tu casa, te encantaba esa película de acción. Sabía que contigo quedaría satisfecho, no como con todas esas chicas anteriores a las que maté.

No me enamoré del olor que desprendía tu sangre, me enamoré de tu sonrisa. Esa sonrisa que solamente yo podía ver.

Necesito a alguien que me alimente por un rato. Porque estoy sediento desde un muy buen tiempo.

Esta vez soy yo quien te invita a mi hogar. Te sorprendes al ver que no es nada más ni nada menos que una mazmorra.

Te acorralo contra esa pared de ladrillos viejos. Me observas con miedo. Susurro sobre tus labios:
-No tengas miedo -Y te beso. Correspondes necesitado, te gusta, lo sé. Nos separamos y te observo con locura.

Busco tu cuello hambriento, hace mucho no pruebo de la sangre. Se me hace agua la boca y mi estómago duele a montones. Clavo mis dientes en tu cuello. Tu sangre es diferente..., me siento satisfecho finalmente. Te encontré.

-¡Ah! -gritas mientras cierras tus ojos con fuerza.

Clavo más profundo mis dientes en tu cuello. Te tuerces de dolor y tus desgarradores gritos me excitan.
Aquellos gritos que posiblemente se escuchen por toda mi mazmorra.

Me separo y te observo. Tienes una hermosa cicatriz en tu cuello, la toco y sueltas un gemido de dolor. Te muestro mis dientes, llenos de tu sangre. Me miras asustado y te repito:-No tengas miedo.

Vuelvo a morder esa parte de tu cuello y más, cada vez gritas mucho más. Estás sangrado, estás gritando.

Caes al suelo y me posiciono sobre ti. Me observas con lujuria y dices:-Muerdeme más, no pares -Y sigo desgarrando parte de tu piel, succionando hasta el mínimo rastro de sangre.

Finalmente me siento lleno y tú estás en el suelo, aún hay restos de sangre a tu al rededor, pero ya no tengo hambre. Tú sonrisa me dice que eso te gustó.

-Besame -pides y yo cedo. Te beso, esta vez, sediento de tu amor. Nos separamos.

Observo las cicatrices que hay en tu cuello y pecho, son hermosas. Finalmente me siento satisfecho, a ti no te mataré. Me has hecho sentir conforme.

-Karma -me llamas y tomas mis mejillas entre tus suaves manos-. Tengo sed -Veo como dos pequeños colmillos van creciendo poco a poco en tu boca. Sonrío.

Lamo la sangre que hay en tu cuello y te doy un beso francés en el que puedes degustar de tu propia sangre.

-Te amo, Karma.

Me besas nuevamente y clavas tus pequeños dientes en mi labio inferior succionando sangre de él. Te hará mal comer de la misma sangre de Dracula.

Necesito alimentarte, alimentar a ese agujero que es mío.
Aliméntate, cariño. Así estamos completos.

-Ahora estamos completos -susurro y te beso.







¡Feliz Halloween! 🎃🎃🎃
Espero que les haya gustado este corto especial.
En total se me fueron 500 palabras :u
Creo que con eso es suficiente.

La historia está basada en esta canción:

Espero que les haya gustado y gracias por leer uwu.

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