Slytherin había ganado a Hufflepuff por un buen margen de puntos, aunque a decir verdad no fue fácil, los tejones dieron pelea, la mayoría del equipo tenia experiencia y jugaban muy bien. Pero Thor no estaba dispuesto a perder deseaba estar en la final contra los Leones.

Al final la diferencia la marco el Thor al atrapar la Snitch dorada antes que su contrincante, dándoles la victoria 250 a 100.

En las tribunas de verde y plata, Odalis y Leo portaban los colores de su caza rival, al igual que habían hecho sus hermanos cuando ellos jugaron contra Ravenclaw, en señal de apoyo.

Cuando termino el partido bajaron a felicitar a sus hermanos por haber ganado. Scorp no estaba en el equipo pero diseñaba todas y cada una de las jugadas y técnicas que desarrollaba, era hábil al hacer las estrategias.

Ya todo estaba dispuesto para que Slytherin se enfrentara contra Gryffindor, sería un partido memorable, o al menos eso creía la mayoría del colegio después de haber visto jugar al trió de leones dirigido por Odalis.

La final se llevaría a cabo regresando de las vacaciones de navidad.

-¿Dónde pasaran las fiestas? -Pregunto Thor mientras comían en la mesa Slytherin.

-Nos quedaremos en el colegio, nuestro tutor está de viaje de negocios. -Contesto Antares, y su hermana se entristeció un poco pero trato de esconderlo.

Thor no era muy sensible, pero noto el cambio en las chicas, por lo que decidió hacer algo al respecto, pero tenía que usar un par de trucos para que su imagen no se viera afectada, por lo que cuando terminar de comer se dirigió a la mesa vecina a hablar con su hermana castaña.

-Ody podemos hablar.

-Si claro dime. -Contesto la castaña.

-Necesito pedirte un favor.

-Que invite a los Fornax a pasar navidades en con nosotros. -Afirmo antes de llevarse el vaso de jugo a los labios.

El chico se rasco la cabeza desconcertado, en ocasiones Ody le inspiraba cierto grado de miedo, era sorprendente como siempre se adelantaba a las cosas.

Y como si la chica hubiera leído su mente. -Leo me dijo que se quedarían en el colegio y me pareció adecuado invitarlos, hace apenas un momento se lo pedí y si no me equivoco por eso está en su mesa avisando a sus hermanas. -fijo sus ojos grises en la mesa de las serpientes y vio como Antares e Hydra le sonreían y asistían con la cabeza.

-Y al parecer aceptaron. -Dijo Thor concento de que así fuera.

Entro una lechuza que se puso en frente de Odalis, era el ave de su madre con una carta.

La castaña la desamarro con cuidado y se la entrego de inmediato a su hermano, sin siquiera leerla.

-Le escribí a mama para pedirle permiso, así que esta debe ser  la solicitud para que la directora permita ir a los Fornax a con nosotros, se la puedes entregar por favor, es que tengo que hacer unos deberes pendiente.

Thor se encogió de hombros aun desconcertado por su hermana tomo la carta y la vio irse del comedor.

-No trates de entenderla, solo acéptala. -Le dijo una voz a su espalda. -Gracias por la invitación. -Le dijo Hydra dándole un beso en la mejilla de agradecimiento.

Quizás el más feliz de los tres Fornax era Leo, le resultaba emocionante pasar las fiestas de diciembre al lado de Odalis. Últimamente ya no discutían, desde lo ocurrido en el primer partido cuando salvo de una fatal caída a Dominique, la castaña lo había aceptado por fin como amigo, aunque a decir verdad e aspiraba mucho más que eso.

Antares, Leo e Hydra se instalaron en la Mansión Malfoy, estaban muy felices de no pasara esas fechas solos recluidos en el colegio.

-Espero que estén cómodos. -Les dijo Hermione mostrándoles la mansión y acompañándolos a sus habitaciones.

-Muchas gracias por la invitación señora Malfoy. -Amable agradeció Antares

-En verdad muchas Gracias. -Apoyo Hydra.

-No tienen nada que agradecer, los amigos de mis hijos siempre son bienvenidos. Siempre que quieran las puertas de esta casa están abiertas para ustedes.

Leo se puso triste, de alguna manera Hermione le recordaba a su propia madre, quizás no físicamente, pero creía que tenían la misma amabilidad y dulzura. La castaña mayor lo noto y se acerco con cautela a los chicos Fornax.

-Sé lo que es pasar las primeras fiestas sin padres, yo perdí a los míos casi al mismo tiempo, se que se sienten tristes y solos, pero están equivocados, jamás estarán solos sus padres viven en ustedes, además nos tienen a nosotros, somos su nueva familia.

Leo sin pensarlo se abrazo a Hermione, ella acariciaba su cabello negro con ternura y correspondió el abrazo, le sonreía con cariño a las dos chicas que estaban al borde de las lagrimas.

-Vengan acá. -Les pidió y obedientes la chicas se unieron al abrazo.

A cierta distancia Odalis sonreía complacida, había sido buena idea invitarlos. Sabía que su madre aceptaría sin duda a los chicos más después de que supiera que eran sus primeras navidades sin su madre.

Hermione le había contado a Odalis sobre la muerte de su madre en el accidente automovilístico y un año después la de su padre, de alguna manera la castaña de ojos grises contaba con que su mama pudiera ayudarles a superar la tristeza que sentían Hydra, Antares y Leo, ya que de algún modo solo ello podría comprender exactamente como se sentían.

Avergonzado Leo desizo el abrazo pero se sentía mucho mejor, más al ver la sonrisa de Hermione cargada de afecto y comprensión.

-Vamos les muestro sus habitaciones para que dejen sus cosas y descansen un poco antes de la cena. -Hermione tomaba las manos de Antares e Hydra y las encaminaba como si fueran niñas pequeñas, niñas que se sentían perdidas sin sus padres pero que poco a poco podrían superarlo.

Las gemelas prefirieron compartir habitación y en la habitación de un lado se instalo Leo.

-Si necesitan algo no duden en pedirlo.

-Gracias Señora Malfoy. -Dijeron los tres

-Díganme Hermione por favor.

-Muchas gracias Hermione. -Repitieron juntos de nuevo.

La navidad llego a la mansión Malfoy. Se dio un gran banquete para celebrar, todos los amigos de Hermione y Draco se reunían en esa especial fecha.

Los primeros en llegar fueron Harry y Tamy  con sus hijos James, Albus y Lily quienes al llegar fueron a buscar a Odalis.

Blaiser Zabini como siempre también era puntual llego del brazo de su esposa Leiza, acompañados por sus hijos Luca  y Loret.

Luna como siempre llego ataviada por un vestido en un estrafalario color amarillo canario del brazo de un guapo Axel, sus gemelos Locan y Lyzarde a penas salieron de las llamas verdes de la chimenea, salieron corriendo en busca de James y Fred a quienes admiraban por su ingenio para hacer travesuras.

Theodoro Nott estaba feliz pues acababan de confirmar que serian padres por segunda vez, Ginny no podía estar mas radiante al igual que su hija Samantha que deseaba que el tiempo pasara rápido para conocer a su hermano o hermana.

Ron y Sara discutían acaloradamente porque su pequeña Rose les habia informado que queria tener novio. Como siempre el celoso pelirrojo se opuso rotundamente, mientras que Sara trataba de convencerlo.

Aina, George y sus hijos Fred y Nicol fueron de los últimos en llegar debido a que habia mucho trabajo en sortilegios Weasley.

En cuanto a los demás Wealey, Molly y Artur habían llegado desde un dia antes para ayudar a Hermione con la organización de la cena.

Bill y Fleur, asi como sus hijos Victoria, Dominique y  Louis, no pudieron asistir ya que pasarían ese día con Charly en Rumania ya  que debido al trabajo no podía viajar.

Percy y su esposa Andrew y sus hijas Molly y Lucy solo pasaron un momento a la mansión a repartir abrazos a que el ministro había invitado a Percy a una cena en su casa, a la que no pudo negarse.

Para Antares, Hydra y Leo ese día fue increíble, todos se trataban como una sola familia, la cena fue sumamente agradable llena de risas por los chistes de George o las travesuras de James y Fred, las conversaciones eran variadas, incluso era gracioso ver el rostro enrojecido de Ron mientras se seguía aponiendo a que su pequeña Rose tuviera novio a su tiernos 14.

Incluso los Malfoy que siempre hacían gala de sus buenos modales terminaban contagiados por la risa y el desenfreno de sus primos y tíos postizos.

Los Fornax fueron tratados como miembros más de la gran familia Weasley, los chicos pudieron darse cuenta que sin importar sus apellidos y las diferencias que habían tenido en el pasado, todos formaban una sola familia.

Se fueron a dormir ya de madrugada con el estomago adolorido de tanto reír y tan cansados que apenas tocaron la cama se quedaron dormidos.

A la mañana siguiente al pie de su cama los hermanos Fornax encontraron una gran torre de regalos.

Parte de ser un Weasley era tener el suéter hecho a mano de la señora Weasley, así que cada uno recibió un paquete de su parte.

El de Antares e Hidra eran en color verde con su la inicial de su nombre bordada en el pecho en color plata, mientras que el de Leo era color rojo con una L bordada en color dorado.

Fueron muchos los regalos que recibieron por parte de todos sus amigos, desde cajas de chocolates, bombones, grageas de todos los sabores, libros, plumas y ropa. No podía creer la suerte que tenían.

Ese día Hydra, Antares y Leo comprendieron a que se refería Hermione, ahora entendía porque nunca estarían solos, porque tenían una nueva familia formada con amigos que siempre los apoyarían. Porque sin importar su apellido u origen ahora eran Weasley de corazon.