Un día tranquilo en la universidad, era fin de semana y los caballeros no tenían ninguna materia ese día. José estaba en su cama tocando su paraguas como sí fuera una guitarra, Panchito roncaba en la cama de arriba mientras que Donald estudiaba para un exámen importante que era en esa semana; todo estaba tranquilo; de repente se escuchó un ruido proveniente del estómago de José.

José: Tengo hambre, iré por unos bocadillos.

Panchito: -despertandose- ¡¿Alguien dijo unos taquitos?!

José: Eh, yo dije bocadillos.

Panchito:¿Cuál es la diferencia carnal? -se levantó y bajó de la cama- échenle ganitas y vámonos.

José: ¿Tú que dices Donal'?

Donald: Umm sorry guys, pero éste exámen es importante; con ésto se comprobará si apruebo el año y no quiero perder más tiempo. ¿Pero me pueden traer una hamburguesa? -con una mirada de cansancio-

José: Por supuesto, ahí volvemos.

Panchito: Ésto no queda así --fingiendo una mirada de malo para después sonreír e irse--

"Panchito le falta dormir" decía mentalmente Donald mientras retomaba sus estudios. José y Panchito regresaron una media hora ya que el restaurant estaba lleno y demoró mucho en traer la comida para llevar para ellos y otra para Donald, regresando a su habitación se oyó uno de los típicos gritos de Donald así que apresuraron sus pasos y se dirigieron a su cuarto encontrándose con el pato destruyendo una foto contra la pared y apunto de tomar una silla de madera que estaba por ahí.

Sus amigos impresionados lo trataron de tranquilizar, tuvieron sujetarlo(casi amarrarlo) mientras que José le  hablaba y Panchito daba palmaditas en su espalda, ya estaba surtiendo efecto el pato poco a poco dejaba de tener su cara toda roja a su color blanco de antes. Sus amigos suspiraron, no es la primera vez que sucede ésto, hubo una vez que el pato destruyó una guarida de ladrones porque le robaron su mochila en el que llevaba un portaretratos familiar. Luego de que pasara unos minutos de  silencio vieron que su amigo miraba al suelo mientras lloraba, algo que los dejó impresionados ambos, nunca vieron a su amigo en ése estado.

José: ¿Donald, qué ocurre?

Panchito: Compadre, ¿Qué sucede?

Donald:....Ella me terminó -susurrando-

José/Panchito: ¿Quién?

Donald: -no quería seguir hablando, quería estar sólo y seguir golpeando cosas hasta cansarse pero a la vez necesitaba con quien hablar, levantó su cara y los miró con lágrimas- Mi novia; sólo llamó para terminar conmigo por un problema

Donald seguía llorando mientras ocultaba su cara sobre sus brazos; al loro y el gallo les dolió verlo así a su amigo, decidieron abrazarlo mientras daban palabras de animo; estuvieron así por horas hasta que el pato finalmente se durmió en ése abrazo.

Pasando la semana, el pato comenzó a actuar extraño y no del sentido de tirarse en su cama y no hacer nada; llegaba tarde (a la casi noche), no hablaba mucho del lugar de donde venía, y era muy reservado. Sus amigos se hartaron de tantos secretos; un día decidieron seguirlo hacía adonde iba, con el sarape mágico iban detrás del autobús que hizo una parada y el pato bajó, siguiendo su camino entró en una tienda para mujeres; el loro y el gallo les extraño éso pero luego pensaron en que le iba a obsequiar algo a su hermana. El pato salió de allí y siguió su camino hacía una tienda de armas, allí se activaron las alarmas en las conciencias de Panchito y Jose; su amigo iba a cometer una locura y debían impedirlo.

Eran las 18:45 hs. Y el pato había regresado temprano después de tanto tiempo a su departamento, entró despacio como si no quisiera ser escuchado; cerro la puerta detrás con cuidado y cuando se volteó se topó con la miradas enojadas y acusadoras de sus amigos.

Donald: Uh, Hey guys! ¿Qué pasá?

José: No sé quisiéramos saber qué te sucede a tí. Desde hace días actúas raro.

Panchito: Oye Donald, ya sé que te cortaron y todo éso; pero para alguien que sufrió éso tienes comportamiento extraño, además que saliste de una casa de ropa de mujer y de armas-

Donald: ¿Q-Qué? ¡¿Me siguieron?!-pregunta con cierto enfado-

José: ¡No cambies de tema y dinos qué te pasa!

Sin salida el pato suspira derrotado, es una charla larga por explicar.

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Eran las casi 21:57 hs. Y algunos estudiantes de diseño textil estaban saliendo y un grupo de jóvenes se despedían de una pata con un moño violeta en su cabeza, está siguió su rumbo mientras se ponía un suéter por el frío que había hecho ésa noche. Mientras iba sóla había un sujeto que la estaba siguiendo a una distancia moderada, la pata seguía su camino tranquila ignorando a quien le estaba siguiendo; el sujeto robusto acercó sus pasos hasta ponerse al lado de la chica, no le dió la oportunidad de voltearse a mirar cuando le tapó la boca con un pañuelo con un somnifero, al principio forcejeo pero lamentablemente perdió el conocimiento, el sujeto la cargó hasta un auto metiendola al baúl, cerrando y desapareciendo en su vehículo.

Mientras tanto en el departamento de los caballeros, Panchito estaba preparando un sándwich mientras miraba a José quien estaba pensativo.

Panchito: Osh, ya bájale al estrés. -lo dice volteando los ojos-

José: Lo siento, es que no puedo creer que estamos-

De repente se escucha un timbre por lo cual ambos se miraron antes de abrir la puerta; al abrir se toparon con una chica que les sorprendio su visita.

???: Uh hi? Maybe Donald's here?

Ambos se quedaron callados sin saber que decir, ahora sí se metieron en un lío.

En una fábrica abandonada se encontraba una banda de perros con ropa de preso y otros con ropa elegante con rayas blancas. Estaban hablando del dinero que iban a ganar; en ése momento se escucha el motor de un auto afuera, todos los que estaban allí sacaron sus armas y apuntaron hacia la entrada. Abriendo la puerta aparece un perro robusto quien cargaba a una jovencita inconsciente como un costal de papas.

???: ¡¿Qué hacen imbéciles?! ¡Ya bajen sus armas! -todos bajan sus armas- ¡Que no ven que traje el botín!.

???: Querrás decir mi recompensa, infeliz.

Todos voltearon a ver a un pato grande fortachon del mismo traje mafioso a quien todos parece tener temor. El sujeto quien cargaba a la pata se adelantó rápido y la dejó en una silla amarrada.

???: Y- Ya está jefe Crow-se corría despacio de su lugar-

Crow: Je! Los chicos malos al parecer tenían razón.

Unos de los chicos malos habló -ya cumplimos con nuestra parte del trato, ahora denos el dinero que es para ma'-.
El pato con disgusto hizo una seña y uno de sus secuaces les arrojó una bolsa con joyas.

Crow: Y ahora largo sanguijuelas, ¿En dónde estaba? Oh si~ mi querida Daisy -se acercaba hacia la pata mientras sacaba una navaja- ni alejandote de tu familia ni siquiera del incompetente de tu inútil pato chiflado iban a impedir el encontrarte otra vez. Es una pena que todo terminé así cariño pero son órdenes de más arriba -con una sonrisa macabra-.

-Oh es una lástima~ -de repente se escuchó hablar al la pata pero tenía una voz ¿Aguda? ¿Chillona? Pero sobre todo ¿De hombre? Quien levantaba la mirada y sonreía con dientes de tiburón mientras sus ojos azules se volvían de color carmesí- Y yo que apenas llegó a la fiesta.

José le daba una taza de té a la pata quien se mostraba preocupada y conmocionada por lo que había escuchado, en serio como su ¿Ex novio? Supo de que algo malo le ocurría. De hecho lo alejó para éso, para que no se metiera en problemas, en sus problemas.

Panchito: No sé ponga así señorita Daisy; créanme que intentamos de todo para que nuestro compadre no hiciera alguna locura pero la causa lo ameritaba.

Daisy:-suspiro- Lo sé, pero aún así no quería que se metiera en este lío. Yo no quería romper con él pero lo hice para protegerlo.

José: Garota, a nuestro amigo lo destrozaste haciendo éso.-la vió con pena y puso una mano en su hombro- Sé que no fue tu intención el hacerlo pero aún así lo lastimó su ruptura; a pesar de ello mi amigo siguió protegiendote sin que te percatarse de ésto.

Panchito: ¿Por cierto como llegaste a ésto? -pregunto curioso el gallo-

Daisy: Todo comenzó cuando estaba en mi último año de la preparatoria; mi amiga estaba de novia con un patán, yo lo odiaba al tipo era muy asqueroso y le dije que tenga cuidado con el, que era capaz de cualquier cosa lo cual ella tomó en cuenta mi consejo, pero después... -para ése entonces la taza que sostenía ya estaba temblando a igual que sus manos a lo cual José toma una con cuidado y la acaricia; un poco más tranquila prosiguió- No puedo decir mucho pero después de éso el tipo comenzó a amenazarme y mandó a un "conocido" mío para que me hiciera la vida imposible; me comenzó a acosar en el transporte público por lo cual a veces bajaba en una parada antes al de mi apartamento. Yo no quería involucrar a Donald porque él es capaz de eliminar a quien se le ponga en su camino y tengo miedo de que lo lleguen a matar por ello; necesito que me digan dónde está.

José comenzó a dudar si decirle la verdad o no, pero antes de que hablará Panchito respondió.

Panchito: Donald nos contó que tenía una sospecha y temor de que tú corrieras peligro por lo cual hizo éso para ver hasta donde llegaban ésa gente; nos dijo que iba a mandar una señal por si llamamos a la policía.

José: Chicos, Donal' ya mandó la señal -mostraba un celular con tapa en donde mostraba un pequeño mapa con un punto azúl el cual decía la dirección del lugar- llamaré a la policía.

Panchito: Hazlo mientras estamos sobre el sarape -subiendose junto a José al sarape mientras el objeto se levitaba-

Daisy: Necesito de ir con ustedes, para saber si Donnie está bien; por favor -los miraba suplicante-.

Mientras ésto ocurre, en aquella fábrica abandonada se oían gritos y  golpes, algunos salían huyendo de ahí mientras otros peleaban con la furia que era el pato; era como un demonio viviente, después de una pelea con los matones de crow, él lo buscaba.

Donald: ¡Muy bien, te daré sólo 5 segundos para que salgas! -miro para todos lados para ver si se asomaba, lo cual se asomó pero con una sonrisa altanero, como si fuera un juego-

Crow: ¿Creés que haciéndote el malo sacaras del apuro a tu EX novia? Me das pena muchacho.

En cuanto menos se lo esperó Donald se le acercó demasiado para querer apuñalarle con una botella rota; Donald lo único que atina a hacer es cubrirse el rostro lo cual recibe un corte profundo en la muñeca, el pato a pesar de ello se abstuvo a gritar y siguió peleando mientras usaba la otra mano; al parecer su temperamento no le permitia ver sus heridas ni quejarse del dolor, sólo quería partirle la cabeza a ese imbécil.

Crow ya cansado baja la guardia y éso hace que Donald lo tiré al suelo y le de varios puñetazo en la cara, se detiene por un momento para hablar.

Donald: Una vez más, ¿Quién te mando?

Al no oír respuestas el pato le tomó del pico y lo apretó como si fuera a arrancarselo mientras preguntaba de nuevo pero con fastidio hasta que el grandulon habló.

Crow: N-No lo sé, sólo era una rata de estatura alto y sólo estaba interesado en una ratoncita y que Daisy se interpuso entre ellos.

*Ellos... interponer.... ¿Ratoncita?, ¿No será...* What sons of F- El pato murmuró ésas palabras ya sabiendo quien es, luego se levantó y se percataron que la policía estaba llegado por lo cual debía impedir que se escapará pero en cuanto iba a hablar sintió como si una corriente eléctrica corriera en su espalda y luego en todo su cuerpo por lo que colapso. Sólo estaba en el suelo sin poder hacer nada, estaba paralizado, vulnerable al mismo grandote que hace unos momentos molio a golpes, sólo veía como lo tomaba del cuello y lo levantaba como si fuera una marioneta, ya se la veía venir lo que iba a pasar.

Crow: Confieso que estás armas son las mejores -tirando el arma eléctrica- creo que tengo que darte un final no lo creés? -mientras levantaba una navaja con una sonrisa- bueno será un bonito regalo enviarle tu cabeza a Scrooge McDuck.

Iba a apuñalarle el cuello cuando se escuchó un disparo que le recibió en la mano y del dolor soltó al pato. De repente apareció un gallo marrón rojizo quien lo miraba con ira y sin dirigirle ni una palabra le dió un puñetazo que lo noqueó. Suspiro y se acercó al loro y la pata para corroborar el estado del pato quien increíblemente se estaba levantando, de a poco sus ojos carmesí volvían a ser sus característicos azules y fingía una sonrisa.

- Estoy bien chicos....- miró su muñeca en lo cual comenzó a sentirse mareado -*Mierda*-.

Y otra vez colapso para estar inconsciente. Rápidamente la policía llegó y arrestaron a Crow y a todos los sus cómplices; a Donald lo llevaron a emergencias y por suerte no fue nada grave, sólo unos huesos de la costillas rotos además de que tuvieron que anesteciarlo para poder suturar la herida de su muñeca con 18 puntos; el pato en lo único que pensaba era en el exámen importante que era mañana, pero el doctor le dijo que por dos semanas no podía moverse de su cama. Para su inesperada suerte ocurrió que en la universidad ocurrió una falsa alarma de incendio por lo cual el exámen se pospuso para dos semanas y medía.
Sus amigos se retiraron para ir a una de sus clases al día siguiente lo cual Daisy se ofreció a quedarse a cuidarlo.

Era la madrugada y la pata trataba de dormirse en la silla donde estaba; sin que se diera cuenta el pato había despertado y observó la situación, decidió llamar su atención y hacerle espacio en la camilla; la pata al principio se negaba por el hecho de que alguna enfermera vendría a verlos por lo cual el pato sólo levantó su hombro en señal de no saber, finalmente se rindió y sin apoyarse mucho en el brazo vendado de éste se acostó y se acurrucó a su lado mientras lo abrazaba, éste con su brazo sano devolvió el abrazo mientras cerraba de nuevo los ojos para seguir durmiendo; antes de caer dormido de nuevo escuchó un susurro que decía "gracias....te amo" además de sentir un beso en la frente. Él sólo sonrió con tranquilidad, ya que lo que más amaba estaba protegida y a salvo.

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Lo iba a hacer para la pelea a Donald con su disfraz de Paperinik, pero meh (?

Me base en un cómic de Carl Barks en el que Donald se disfraza de Daisy para que ella pueda ir a un evento con unas amigas mientras que la otra Daisy (Donald) iba a su trabajo en el cual era de besos por un dólar, pero en vez de recibir un beso, Daisy(Donald) les daba un puñetazo en la cara; los hombres locos y aturdidos por el"beso" volvían a la fila para recibir más.

Aparecieron Panchito y Jose♥️💚 Ellos siempre defendiendo desde antes a su mejor amigo 💙

Bueno, sin más que decir nos vemos la próxima~