Capítulo 24
Thomas:
—¡Dylan, escóndete! ¡Escóndete rápido! —dije mientras el pánico se apoderaba de mi cuerpo—. Esconde a Olla por lo que más quieras y no salgas para nada con ella, sacaré a mi madre de aquí lo más pronto posible
—¿Estarás bien? —asentí y besó mis labios—. Buena suerte, te amo
—Gracias, bebé, yo más
Nos dedicamos una última mirada antes de que Dylan subiera a nuestra habitación, respiré hondo y caminé hacia la puerta. Me detuve en seco con mi mano sobre la perilla, dudando en si girarla o no y sintiendo los nervios recorrer por mis venas, junto a la sensación de aquel dolor de estómago producido por el miedo. Al escuchar otro golpe —más fuerte que el anterior—, brinqué en mi sitio y volví a la realidad; soltando un suspiro, abrí la puerta y encaré a mi madre con una sonrisa muy falsa en mi rostro.
—Madre —fingí estar sorprendido
—Hola Thomas —dijo seriamente y entró sin pedir permiso
Rodé los ojos.
—¿Queeeee... te trae por aquí?
No respondió, simplemente se dedicó a observar atentamente la casa, como si preparara un discurso listo para juzgar, como siempre lo hacía desde que salgo con Dylan.
—¿Dónde está el joto?
—¿Disculpa?
—Que, ¿Dónde—está—tu—novio—el—joto?
—Te pido respeto por favor —Dios ya comenzaba a enfadarme—. No permitiré que lo trates así
—No me interesa, ¿sabes? ¿Sigues con él?
—No, ya no... —mentí, no quería pelear con ella, quería que se largara de inmediato
—¿Ah sí? —levantó una ceja y caminó por toda la sala, sus tacones eran lo único que se escuchaban en el lugar—. Pues un pajarito me contó que tú y ese tonto adoptaron un bebé
Me quedé frío, abrí los ojos como platos y rasqué mi nuca, ¿como diablos se enteró?
—¿Por qué te inventas esas cosas? Eso no es verdad
—Basta de mentiras —su tono de voz cambió—. Ava me lo contó, ahora dime, ¿por qué has adoptado un bebé?
Suspiré y me pasé una mano por el cabello, a veces detestaba contarle mis cosas a mi hermana, porque como sea, mamá siempre terminaba enterándose. Ahora es cuando me doy cuenta que ni en un propio hermano se puede confiar, siempre te atacarán por la espalda.
—Esa niña llegó aquí, ¿ok? La abandonaron, Dylan y yo creímos que lo mejor sería dejarla en un orfanato, y eso hicimos. Pero después nos arrepentidos y volvimos por ella
—Pero...
—Escúchame —la interrumpí, antes de que comenzara con sus críticas—. ¿Sabes por qué volvimos por ella? Fue porque nos dimos cuenta de que la queríamos. Esa niña había traído alegría a nuestro hogar, ella hace mejor mis días mamá, al igual que Dylan
—Pero amor, ¿qué va a decir el resto? ¿Sabes cómo te mirarán al saber que un Sangster ha adoptado un bebé con un chico?
—No me interesa lo que piense el resto si yo puedo ser feliz así —mi enojo incrementó—. Me importa una mierda si me miran mal, mamá. Dylan y mi hija me hacen feliz, y tú no puedes prohibir mi felicidad, y sí, lo digo, es MI HIJA, porque así la considero
—¿Y qué futuro piensas darle a esa niña? Una niña sin una madre, criada por dos padres, ¿no crees que...?
—¡NO ME IMPORTA! —grité con fastidio—. ¡ENTIENDE QUE ELLA NOS AMA COMO NOSOTROS A ELLA! ¡YA NO PUEDES INFLUENCIAR EN MI VIDA PORQUE YA SOY MAYOR DE EDAD! ¡YA NO SOY UN NIÑO! ¡¿CUÁNDO VAS A DEJARME EN PAZ?! —las lágrimas comenzaron a salir de mis ojos—. Estoy cansado de que tú y papá me vean así, Ava lo entiende, ¿por qué no pueden ser como ella?
—¡Porque eso no es normal! ¡Y eso quiero que entiendas! ¡Renunciaste a tu compromiso con Isabella solo por ese!
—¡ESE, COMO TÚ LE LLAMAS, ES MI NOVIO! ¡Y NO MENCIONES A ESA TIPA! ¿SABES CUÁNTO DAÑO ME HIZO?
—¡Isabella era un ángel! ¡Era mejor que tu novio!
—¡No me interesa, ¿sí?! ¡Ahora, si no tienes nada mejor que decirme, te ordeno que te vayas!
—¿Estás echando a tu madre? ¡A mí que yo te he dado la vida! ¡¿Así me pagas?!
—¡No me vengas con esa labia barata! ¡Ahora vete!
—¡NO ME IRÉ SIN LLEVARME A ESA NIÑA CONMIGO!
—¡NO TE LA LLEVARÁS! ¡NO TIENES EL DERECHO!
Dylan:
Los gritos no paraban, suspiré y apoyé mi cabeza en la puerta de la habitación. La voz de Thomas se escuchaba entrecortada, al parecer estaba llorando, hice una mueca y descendí hacia el piso.
Ay Tommy, perdón por no estar contigo.
—¡NO ESTÁ AQUÍ! ¡ELLA NO ESTÁ AQUÍ! —escuché su grito
¿Ella quién? ¿Olla?
Ya comienza a asustarme.
Cerré los ojos y me concentré más para escuchar mejor. Sin embargo, la bebé comenzó a llorar muy fuerte, su llanto retumbaba en la habitación. Abrí los ojos como platos y corrí hacia ella para calmarla de inmediato, si Tasha la escuchaba, nos podría ir mal.
—No, no mi amor, no llores, tranquila, aquí estoy
—¡PAPIIII! ¡PAPIIII! —lloraba a gritos
La tomé en brazos y me senté en la cama para hacerla callar.
—Ya amor, shhhh. No ahora por favor
—¡PAPÁ! ¡PAPÁ! ¡PA...PÁ!
—Tranquila amor, tranquila
Dios mío, si no lograba calmarla, estaremos en serios problemas.
—Olla por favor, cálmate
Sus manos se aferraron a mi pecho, parecía asustada, de seguro había tenido una pesadilla.
—Tranquila, bebé. Aquí estoy, aquí estoy
—Papá Y...lan... pa...pá Ylan
De pronto, la puerta se abrió de golpe, dejándome ver a una Tasha muy enojada, junto a Thomas detrás de ella, quien intentaba impedir que entrara.
—¡No mamá! —gritaba él
—Ahí está —dijo ella deteniéndose para observar a mi niña—. ¿Es ella?
—Sí —Thomas se posicionó delante de mí—. Y si le tocas un solo pelo, te irá mal
—¿Se la quiere llevar? —le pregunté en un susurro, asintió con la cabeza
—Tommy, mi amor, no me discutas, dámela y no te molestaré más
—¿Y cuál es su afán por quitárnosla? —pregunté
—Esa niña merece un buen futuro, necesita de una madre para que la cuide, ustedes dos no podrán hacerlo, ¿saben cuánto odiará su vida por no tener una madre? ¿Saben cuántas personas la mirarán mal?
—Ella entenderá —dije juntando mis cejas—. Además, preferiría que la miraran mal antes de dejarla con usted, ¿o tengo que recordarle todo lo que le hizo a Thomas cuando era un niño? ¿Recuerda acaso cuando los dejaba a Ava y a él solos mientras usted iba a putear?
—¡No me faltes al respeto!
—¡Pero es que eso hacía! ¡Lo único bueno que sabía hacer! ¡Usted nunca lo apoyó! ¡Siempre mantuvo la tonta idea de que fuera un hombre frente a toda circunstancia!
En ese momento, sentí como la bebé se abrazaba más a mi pecho, lucía muy asustada, y quien no con tantos gritos, por lo que se la di a Thomas.
—Nunca se preocupó por su hijo, y ahora que es muy tarde viene a querer obligarlo a hacer algo que no quiere
—Yo...
—Ahora sí se quedó sin palabras, ¿no? Porque es verdad todo lo que le digo... Ahora lárguese y déjenos a mí y a mi familia en paz
La vieja entrecerró los ojos y me miró enojada, al parecer no se iba a dar por vencida. De pronto, soltó un puñetazo directo a mi cara y me tiró al piso casi inconsciente.
—¡Dylan! —pude escuchar el grito de Thomas, sin embargo no podía ver nada además de sombras borrosas
—¡Papá! —ahora el llanto de mi bebé
—¡Vete mamá! ¡Vete!
Se escuchó cómo ambos forcejeaban, por más que intentaba levantarme, no podía, la cabeza me daba muchas vueltas. De pronto se escuchó cómo la mamá de Thomas le dio una bofetada, luego escuché los gritos y el llanto de mi hija.
—¡No... mala! ¡MALA! ¡PAPI OMMY! ¡PAPÁ YLAN!
Logré reaccionar, todos los colores volvieron a su lugar, levanté mi cabeza y la giré hacia varias direcciones, la habitación estaba vacía. Rápidamente me levanté y corrí hacia la sala, en donde Thomas y su madre forcejeaban con la bebé. Corrí hacia ellos y tomé a Tasha de la cintura y la alejé de Thomas. Tomé sus brazos y la empujé hacia la puerta, la abrí y con un gran empujón la tiré al suelo, la miré enojado y cerré la puerta de golpe. Respiré honda mientras observaba la puerta y giré sobre mis talones, para ver a Thomas llorando mientras tomaba su mejilla. Me acerqué a él y acaricié la misma, la cual estaba roja y llena de lágrimas. La bebé lo miraba atenta y preocupada, ella también tomó su mejilla.
—Estoy harto, Dyl —dijo entre lágrimas
—Ya, tranquilo —acaricié su cabeza mientras lo abrazaba junto a Olla
—¡Thomas abre la puerta! —gritaba Tasha desde afuera
—No la escuches Tommy
—Su voz sigue ahí. La odio Dyl
—Mírame, Tommy, mírame —sus ojos rojos se clavaron en los míos—. Todo está bien, ¿sí? —él asintió, su respiración se agitaba cada vez mas—. Tranquilo
—Papi no —Olla se abrazó a su cuello y Thomas besó su mejilla
—Estoy bien mi amor, tranquila
Ambos nos miramos y besamos nuestros labios. Nuestras frentes se juntaron y ambos suspiramos.
—Te amo Dyl
—Yo más
—Aaaaaawa —balbuceó la pequeña y ambos reímos
—Nosotros también te amamos pequeña celosa —ambos besamos cada una de sus mejillas y ella rió
—Vayamos a dormir, ¿Te parece si mañana vamos a dar un paseo?
—¿Y el trabajo?
—Neh mañana hablaré con Lucas
***
Thomas:
Abrí los ojos al escuchar un ruido proveniente de la sala, observé a mi alrededor y me di cuenta de que Dylan no estaba durmiendo con nosotros. Coloqué varias almohadas al rededor de la bebé y bajé por las escaleras. Tomé una escoba y caminé con cuidado y cautela, por si se trataba de un ladrón. Las luces de la cocina estaban encendidas, por lo que me oculté en una de las paredes de esta lo más sigiloso posible. Asomé mi cabeza y vi el refrigerador abierto, así que caminé hacia este y lo cerré. Di un paso hacia atrás y sentí un pequeño toque en mi brazo, no dudé ni un segundo y lancé un golpe hacia atrás con la escoba. Al escuchar un grito familiar, abrí los ojos y vi a Dylan tirado en el piso.
—Dyl —susurré y me arrodillé a su altura a la vez que palmeaba sus mejillas—. Amor despierta
—¿Ah? ¿Mamá? —dijo desorientado
—Ay amor, lo siento, creí que eras un ladrón
—¿Ladrón? Auch —se tomó la frente, probablemente el lugar en el que lo había golpeado
Me paré y extendí mi mano para ayudarlo a levantarse.
—Oye Tommy, con este golpe me dejaste más pendejo
Reí.
—¿Qué haces aquí a estas horas de la madrugada?
—Ah estaba... investigando algo
—¿Y qué investigabas?
Me hizo una señal con su dedo y caminó hacia el comedor, lo seguí hasta que se sentó en una de nuestras sillas ubicada frente a una laptop.
—Míralo tú mismo
—¿Cuál es el proceso de adopción de niños? —leí el título de la página web—, oh, ya veo, pero, ¿tan pronto?
—Sí, ya quiero que en su nombre lleve los apellidos O'Brien Sangster
—Insisto que queda mejor Sangster O'Brien
—Pero recuerda que tú eres la pasiva, así que prácticamente tú serías su madre
—Buena esa, entonces, ¿qué debemos hacer?
—Justo estaba averiguando, dice que tenemos que ir a una Unidad Técnica de Adopción, la más cercana está como a una hora de aquí —explicó y asentí con la cabeza—. Debemos llevar nuestros antecedentes y luego nos harán evaluaciones, entrevistas y demás, después harán visitas a nuestra casa, unos cuantos trámites más, y ¡bingo! Olla será nuestra hija
—Bueno, se escucha un poco complicado, pero valdrá la pena
—Sí, así que será mejor que vayamos mañana
—Claro, y después iremos de paseo como lo prometiste
—Exacto —cerró la laptop y me atrajo hacia su cuerpo para abrazarme y sentarme sobre su regazo y así besar mi cuello con delicadeza
—¡PAPÁ YLAN! —escuché un grito de la bebé y de inmediato nos separamos—. ¡PAPI OMMY!
—¡Ya vamos! —gritamos al unísono y yo tomé la mano de Dylan para subir directo a nuestra habitación
Al entrar, vimos a la bebé mirarnos enojada mientras abrazaba su peluche de unicornio.
—¿Estás enojada? —le preguntó Dylan
—Malos —nos sacó la lengua y ambos sonreírnos
—A dormir enana —dije en cuanto ambos nos recostamos y Dylan apagó la luz
***
—Me están tomando el pelo, ¿verdad? — nos preguntó la trabajadora social que nos estaba atendiendo
—¿Qué? ¡No! —exclamó Dylan
—Así que... ¿esa niña vino en una canasta hasta su hogar... con esta nota?
—Sí —respondimos ambos al unísono
—Dios mío
—¿No nos cree? —pregunté
—Bueno es que... es raro que ella llegue a su casa y ustedes ya quieran adoptarla
—No, es que usted no entiende, ella ya nos reconoce como padres
—¿Ah sí? —la mujer levantó una ceja
—Sí, mire —dijo Dylan—. A ver Olla, di papá Dylan
La bebé simplemente lo miró y se llevó un dedo a la boca.
—Ah no puede ser, Olla di papi Tommy —dije, pero no respondió
—Papá Dylan —esta vez fue Dylan
—¡Caca!
Dylan y yo golpeamos nuestras manos contra nuestras frentes, mientras la bebé reía, parecía que lo hacía a propósito.
—¿En serio la llamaron Olla? —preguntó la mayor un tanto extrañada
—Es un buen nombre —respondió Dylan—. Hija coopera, di papá Dylan
—Caca
—¿Y a qué hora les dice papá a alguno de los dos?
—Sí suele llamarnos así, pero, ¡AHORA SE ESTÁ HACIENDO LA PENDEJA!
—¡Thomas, cálmate! —me regañó mi novio
—¡Es que no entiende!
—Sé qué hacer, ¿podría sostenerla un momento? —le preguntó mi novio con algo de recelo
—Claro —la tomó en brazos y la cara de felicidad de la pequeña cambió drásticamente a terror
—Adiós —Dylan se despidió con su mano y tomó la mía para caminar juntos hacia la puerta
Se escucharon unos pequeños gimoteos.
—No... papá Ylan —dijo en cuanto estuvimos a punto de abrir la puerta, a continuación comenzó a llorar—. Pa...pi Ommy
Dylan y yo reímos en medio de su llanto, giramos sobre nuestros talones y la observamos extendiendo sus brazos hacia nosotros y retorciéndose en los brazos de la mujer. Mi novio sonrió se acercó para cargarla, de inmediato, la bebé se abrazó a su cuello y se calmó, parecía que su único consuelo era abrazarse al cuello de Dylan.
—¿Lo ve? —le dije levantando una ceja
—Ya veo que no me mintieron, pero a decir verdad son unos padres muy extraños
—Pero los mejores, señora —dijo Dylan guiñándole un ojo
—Bien, les ayudaré con su caso. Tomen asiento
***
—Escuchen chicos. Cada dos o tres semanas, iré a su casa para comprobar que la niña esté en buenas manos y evaluar su actitud como padres, ya sea con entrevistas u otros procesos —Dylan y yo asentimos con la cabeza
—Aaaaaaaa —decía Olla mientras mordía los dedos de Dylan
—Firmen aquí —tomamos un bolígrafo y firmamos un papel—. ¿Ya decidieron un nombre para ella?
Ambos abrimos los ojos como platos y nos miramos nerviosos, no lo habíamos pensado, ¿en serio debíamos decidir ahora?
—¿Tiene que ser ahora? —pregunté preocupado
—No, pero si desean hacerlo ahora, adelante
—A mí no me engaña, a usted no le gusta el nombre Olla —Dylan la señaló con su índice
—No es eso. Es solo una recomendación incluso para el proceso de adopción, si quieren que todo salga bien, escojan un nombre
—Lo veo difícil — comenté pasando mi lengua por mis labios
—Tranquilos, para eso tenemos un libro de nombres —dijo sacando un libro gigante, que parecía como si hubiera juntado cinco biblias y las hubiese pegado una encima de otra
Tomé el libro y debido a todo el peso del mismo caí al piso. Dylan soltó una carcajada y tomó el libro con una mano para después colocarlo sobre el escritorio.
—Debilucho
—Te odio —me senté bien y observé la primera página—. Amelia, no, Ana, no ¿Anabelle?
—No, después le van a hacer bullying por la muñeca esa
—Mmmm, pasemos a la C... Carla, Camila, Carolina, Catalina, Ca... Car... —me quedé atorado en una palabra puesto que solía confundir las letras algunas veces
—Carmita .me ayudó Dylan
—Gracias
—Dejemos que ella escoja —Dylan miró a la bebé—. ¿Te gusta Cecilia? —Olla no respondió ni hizo nada, sólo me observó atenta—. Es inútil
—Pongámosle Cindia
—Tommy, hay un montón de páginas, sigue buscando
—Mmm —abrí el libro aleatoriamente, salió la letra R—. ¿Romina?
—No —dijo la bebé mirándome tiernamente
—Roberta —hizo cara de asco—. Ay más claro póngale Panchita, se acabó
—¡No! —volvió a decir, esta vez con las cejas juntas
—Carlita Santa Ana —dijo Dylan riendo
—No
—¿No puede dejarle como Olla? —la mujer negó—. Regina, Reee... Reina
—¡Chiiiii! —chilló la pequeña
—¿Reina? —pregunté y ella sonrió
—Es un lindo nombre —dijo Dylan de pronto
—Estoy de acuerdo, además, le queda bien —dijo de pronto la trabajadora social
—Así podremos decir que es nuestra reina —Dylan le sonrió a la bebé
—Bueno, entonces Reina —abrí aleatoriamente el libro otra vez, había abierto la C otra vez
Dylan tomó el libro y lo observó, dejé que él viera uno, ya que sentía que ninguno quedaba con Reina.
—Cecilia, Cassie, Camila, Cinthya, Clemen —leía entre susurros—. Claudia... —sonrió—. ¡CLAUDIA!
—¿Claudia Reina? —pregunté extrañado levantando una ceja, ya que aquellos nombres no combinaban
—¡No tonto! ¡Reina Claudia!
—¿Quieres llamar a tu hija Reina Claudia? Dylan, definitivamente es el peor nombre del mundo
—¿Por qué?
—¡ES UNA FRUTA, TONTO! ¡LE VAN A HACER BULLYING CUANDO SEA GRANDE!
—Pero es un nombre original, me gusta
—Dylan...
—¡POR FAVOOOR TOMMY, POR FAVOOOOOOOR! —juntó sus manos para simular que me estaba suplicando
—Dylan, repito, es el peor nombre del mundo
—Pero está lindo, anda, llamémosla Reina Claudia
—¿Estás de acuerdo con esto? —le pregunté a la bebé, o debería decir ¿Reina Claudia?
—¡Chi!
—¡Somos dos contra uno! —chilló Dylan—. ¡Se llamará Reina Claudia!
—No puede ser —golpeé mi mano contra mi cabeza
—Entonces, ¿Reina Claudia? —nos preguntó la mayor
—Sí —respondió un Dylan contento
—¿Saben? Ustedes son los padres más locos que he visto en toda mi vida —sonrió mientras observaba a ahora Reina Claudia—. Les deseo mucha suerte, el proceso de adopción de Reina Claudia acaba de empezar
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
HOLAAAAAAAAAAAAA
No me pregunten por el nombre de la niña xd desde que comencé a escribir la historia, siempre quise que se llamara Claudia, pero no encontraba otro nombre que quedara bien, así que pedí ayuda a mis amigos hasta que llegamos a Claudia Valentina, pero luego se me ocurrió Reina Claudia por la fruta (al menos así la llaman en mi país, aunque he visto que también la llaman ciruela o solo Claudia)
Entonces hice una votación con la mayoría de mi salón y ganó Reina Claudia xd porque todos decían que sí quedaba ya que Dylan y Thomas eran padres primerizos.
Así que esa es la historia del nombre de la bebé xdxdxd
Bueno, sin más qué decir, nos vemos en el siguiente cap, gus bai, feliz navidad si no subo cap hasta ese día jsjs las amo <3
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top