Capítulo cuarenta y nueve

El jardín de mis abuelos había sufrido un cambio radical durante el día y lucía increíble esa noche bajo las luces de las guirnaldas. Podía afirmar con completa convicción que no conocía ni a un cuarto de los invitados, pero no era algo que me importara ya que tenía fuertes intenciones de pasar mi tiempo con cinco muchachos que no se habían apartado ni un metro de mí desde que había llegado a la fiesta. No podía quejarme porque, en palabras de mi buena amiga Sara, era una suertuda de primera.

Los cinco lucían increíbles en sus trajes y las diferencias entre ellos eran notables. Julian era mucho más extrovertido que el resto y vestía un traje colorido que lo hacía resaltar, James parecía un agente secreto con su traje a medida, Theo se veía condenadamente increíble vestido de azul y sus ojos resaltaban como zafiros, Tyler había optado por un look sin corbata y parecía un modelo que acaba de escapar de la pasarela y, por último, Taylor tenía ese aspecto que anunciaba problemas con su ropa oscura y sus brillantes ojos verdes. Definitivamente era una suertuda.

ꟷMe parece una falta de respeto que no me hayan permitido alquilar un helicóptero para ver a la ciudad desde arriba ꟷse quejó Julian cruzándose de brazosꟷ. Era una despedida increíble que ahora no podremos vivir.

ꟷPrimero, no confío en tus habilidades como piloto ꟷcomencé sin dejar de sonreírꟷ. Segundo, te dije que no permitiría que gastes dinero solo porque tu madre nunca te puso límites. Y tercero, a Theo no le gustan las alturas.

ꟷ¡Pero si mide dos metros! ¡Él siempre está en altura!

ꟷCasi dos metros ꟷse defendió.

ꟷSi ahora mismo se desmayara, sería como tirar un árbol.

ꟷEres insufrible, Julian ꟷle hizo saber Tyler.

ꟷ¡Lo dices porque a ti no se te ocurrió el paseo en helicóptero!

ꟷ¿Realmente extrañarás esto, Genie? ꟷMurmuró James inclinándose ligeramente hacia mí.

Le di un sorbo a mi bebida y asentí con la cabeza. No había podido dejar de sonreír desde que los había visto a los cinco juntos y esperaba que ese sentimiento eufórico permaneciera en mí durante el resto de las vacaciones.

Catorce horas. Solo quedaban catorce horas para que tuviera que despedirme de uno de mis mejores amigos y de dos grandes personas que había conocido durante ese verano así como también de mis abuelos. Luego tendría que despedirme de Tyler al llegar a Estados Unidos, aunque podríamos molestarnos mutuamente por unas horas más durante el vuelo y Taylor sufriría a solas nuestra presencia.

ꟷSí, los extrañaré muchísimo. Espero que vayas a visitarme, Jamie.

ꟷSiempre y cuando tú vengas a visitarnos.

ꟷEs un trato.

Extendió su mano en mi dirección y sin dudarlo la estreché con fuerza tal y como mi padre me había enseñado. Él sonrió al notarlo y dejó ir mi mano poco después.

ꟷOh, mierda.

Mis ojos viajaron rápidamente hacia Theo sin poder ocultar la sorpresa que me arrolló al escucharlo decir una palabrota. Al notar la mirada de todos nosotros sobre él, señaló hacia la entrada y rápidamente los cinco miramos hacia ese punto como los chismosos que éramos.

Entendí con facilidad por qué había soltado esa palabra y sentí un bola de nervios crecer en mi estómago. Ahí estaba Jaden bajando los escalones para llegar al jardín y escaneando con la mirada el lugar. Estaba lo suficientemente oculta para que no me encontrara con facilidad, pero sabía que era cuestión de minutos para que me hallara ya que era un poco difícil de ignorar a un grupo de cinco muchachos y una chica con un vestido largo y rojo fuego.

ꟷ¿Qué demonios hace aquí? ꟷGruñó Tyler exteriorizando mis pensamientos.

ꟷCreímos que no iba a venir, le dijimos que no lo hiciera ꟷintentó explicar Julian sin muchos éxitos.

ꟷ¿No tiene instinto de supervivencia? ꟷSiguió Taylor sin apartar sus ojos de él.

ꟷQuiere disculparse con Genie antes de que se vayan. Intentamos persuadirlo de hacerlo.

ꟷEs un poco tarde, ¿no, G?

No supe qué contestar por lo que decidí quedarme en silencio sin poder apartar la mirada de él. La última vez que lo había visto no había terminado muy bien, lo había enviado al demonio y Taylor lo había golpeado. Desde entonces había ignorado cada uno de sus intentos de ponerse en contacto conmigo y me había negado a escuchar de él cuando Julian y James intentaban sacar el tema a la luz.

Estaba enfadada con Jaden porque había creído que era alguien distinto, lo había defendido frente a mis amigos y había terminado humillada por su culpa. Sin embargo, sabía que no quería irme de Londres con asuntos sin resolver.

ꟷHablaré con él ꟷanuncié finalmente.

ꟷ¿Qué?

El trío de oro había hablado a la vez y los enfrenté para que entendieran que iba en serio.

ꟷSi quiere disculparse, lo dejaré hacerlo.

ꟷPero, cielo, él te...

ꟷSé lo que hizo, Tay. Créeme, estaba allí.

Mi novio suspiró y se frotó los ojos como hacía cuando se sentía cansado. Era probable que estuviera armándose de paciencia para no ir hasta Jaden y echarlo de allí porque seguía bastante enfadado con él. Yo prefería solucionar las cosas con diplomacia porque no quería darles un disgusto a mis abuelos en mi última noche allí.

ꟷYa vuelvo ꟷanuncié.

ꟷG, no creo que sea una buena idea.

ꟷEs solo una disculpa, no me convertirá en vampiro o algo así.

Sabía que ninguno de los tres estaba muy a gusto con mi decisión, incluso Theo que parecía ser siempre la voz de la razón no lucía como alguien dispuesto a perdonarlo. Jamie y Julian parecían incómodos y no podía culparlos.

ꟷEstaré bien ꟷles aseguré.

Solté la mano de Taylor y él me dejó ir sin chistar. Pude sentir la mirada de los cinco clavadas en mí mientras avanzaba hacia el rubio sorteando mi camino entre los grupos de personas que conversaban animadamente y los camareros que se paseaban con aperitivos.

Tomé una amplia bocanada de aire cuando llegué a un metro de donde se encontraba Jaden y acallé las voces de alarma de mi interior mientras soltaba la falda de mi vestido. Me aclaré la garganta y di un paso hacia atrás como medida de protección para mis sentimientos.

Los ojos verde intenso de Jaden recayeron sobre mí y ese intento de sonrisa que lucía más como una mueca se formó en sus labios.

ꟷHola, Jaden.

ꟷGenesis, estaba buscándote. No podía verte entre tanta gente. Por cierto, feliz cumpleaños.

Asentí a modo de agradecimiento y entrelacé mis manos porque no sabía qué hacer con ellas. Solo podía pensar en que quería darle otro buen golpe y luego escuchar sus disculpas; no obstante, me había prometido a mí misma no hacer algo estúpido y darle una bofeteada entraba en la categoría de estupideces. Debería habérmelo prometido tres meses atrás y me habría ahorrado bastantes momentos incómodos durante ese verano.

ꟷSé que no debo ser tu persona favorita en este momento.

ꟷNunca lo fuiste.

Se acomodó el cuello de su camisa al escucharme y me sentí un poco mal por haber sonado tan cruel; sin embargo, el sentimiento se desvaneció rápidamente al recordar cómo había fingido ser mi amigo por semanas.

ꟷQuería disculparme por lo que ocurrió en la fiesta. Verás yo... yo, fui un idiota, aunque no te besé por las razones que crees.

ꟷ¿No le dijiste a tus amigos que me besarías para probar que era tonta como el resto de las chicas? ¿Estás seguro que no eres un machista y un mentiroso?

ꟷSí, lo dije, pero estaba ebrio y no pensaba con claridad.

ꟷ¿Sabes qué es lo que yo hago cuando me emborracho? ꟷPregunté con burla sin esperar un respuestaꟷ. Me meto en fuentes y hago el ridículo, nunca planeo humillar a otras personas.

ꟷLo sé y lo entiendo. Fui un idiota y quiero disculparme por eso. Quiero que sepas que no te besé por lo que dije al principio del verano.

ꟷLo repetiste hace unas semanas.

ꟷ¡Lo sé! Y me estoy disculpando e intento explicarte lo que sucedió.

Suspiré y recargué el peso de mi cuerpo en una de mis piernas. Había ido con paciencia y se había esfumado tan pronto como había comenzado a hablar. Seguía enojada con él y muy, muy desilusionada.

ꟷDe acuerdo, explícame.

ꟷTe besé porque me gustas, Genesis. No fue por lo que dije estando ebrio ni porque quisiera humillarte ꟷexplicó en voz baja como si temiera que alguien pudiera escucharnosꟷ. No creo que seas tonta, eres maravillosa y me gustas. Me gustas tanto que tomé el tonto impulso de besarte incluso cuando sabía que me ibas a rechazar. Y me gustas tanto que estoy aquí disculpándome a pesar de que yo nunca me disculpo por mis errores.

ꟷ¿Yo te gusto? ꟷRepetí sin poder creérmelo.

Lo había sospechado, no mentiré ni fingiré humildad; no obstante, luego de los sucesos en la fiesta en honor a Theo, me sentí bastante tonta por pensar que le gustaba.

ꟷSí, creí que era obvio. ¿No fue por eso que me rechazaste en el establo? Porque estás enamorada de Taylor y porque sabías que me gustabas pero yo a ti no.

ꟷNo importa lo que dije en el establo porque eso fue antes de que supiera quién eras en realidad.

ꟷMe equivoqué, ¿sí? Pero eso no significa que sea una mala persona, simplemente fui alguien que se equivocó y a quien su amigo traicionó.

ꟷNo culpes a James por tus errores.

ꟷNo lo hago. Yo hablé de más y me hago cargo de eso. ꟷSuspiró y bajó la mirada por unos segundosꟷ. Realmente lo siento, Genesis.

Sabía lo que tenía que hacer para poder sentirme en paz y también porque era lo que me habían enseñado. Perdonar era parte de crecer y de cerrar etapas, yo quería cerrar mi etapa con Jaden.

ꟷTe perdono.

Levantó con velocidad su cabeza y buscó mis ojos con los suyos. Me pareció ver una chispa de felicidad e ilusión en el verde y me sentí un poco mal por lo que estaba por decir.

ꟷPero eso no significa que quiera ser tu amiga de nuevo.

ꟷ¿Podríamos serlo en un futuro?

ꟷNo lo sé, ahora mismo no me siento con ánimos de hacer promesas o de pensar en el futuro.

ꟷLo entiendo.

ꟷSé que no eres una mala persona, Jaden y me alegra que tú también lo sepas. Ahora te queda mostrárselo al resto del mundo y dejar de apartar a la gente.

Asintió con la cabeza como un niño que acababa de recibir un regaño y por unos segundos sentí la necesidad de abrazarlo. me aseguré de reprimir esos sentimientos con todas mis fuerzas y me abracé a mí misma para evitar acercarme a él.

ꟷEspero que tu amistad con Julian y James siga intacta.

ꟷBueno, discutimos un poco pero lo hemos resuelto.

ꟷMe alegra saberlo.

ꟷY me aseguraré de que Theo se siente bienvenido aunque en este momento me esté observando igual de disgustado que tu novio y tu otro amigo.

ꟷGracias por eso.

ꟷBien, creo que me iré ahora.

ꟷPuedes quedarte, Jaden. No te echaré a patadas.

La comisura derecha de su labio se elevó en una sonrisa de lado y negó con la cabeza logrando que su cabello rubio se alborotara por el movimiento.

ꟷSolo venía a disculparme y a dejarte un regalo, ya hice ambas cosas por lo que puedo irme.

ꟷ¿Me has traído un regalo?

ꟷSí, lo encontrarás con el resto en la mesa.

ꟷ¿Cómo sé que no me mientes?

Rió por lo bajo.

ꟷTiene una carta adentro y una dedicatoria, podrás encontrarlo con facilidad.

ꟷGracias.

ꟷEs hora de irme, disfruta la fiesta y tu regalo. Espero volver a verte pronto.

Tomándome por sorpresa, dio dos pasos hacia adelante y depositó un beso corto sobre mi mejilla que pareció casi una ilusión ya que fue solo un roce. Se separó a los pocos segundos y me saludó con una sonrisa para perderse entre la gente que disfrutaba la fiesta dejándome en mi lugar con la duda de si había hecho bien al perdonarlo y rechazarlo al mismo tiempo.




El sol había salido finalmente unos minutos atrás y el cielo se había iluminado con tonalidades naranjas, rosas y rojas cuando los rayos de luz impactaron contras las nubes. El espectáculo había sido maravilloso incluso con el descenso de temperatura y sentía que moría de sueño. Sin embargo, era mejor bostezar debido al cansancio que llorar debido a la ausencia.

ꟷA Theo le gustan los cereales de chocolate ꟷsoltó Taylor mientras recibía la botella de champaña y le daba un largo sorboꟷ y la granola. Sus frutas favoritas son el melón, la manzana, la sandía y la banana.

ꟷOh, sí, a Theo le gusta mucho la banana.

Tyler acompañó sus palabras con un baile de cejas y consiguió un golpe múltiple que venía auspiciado por Theo, Taylor y por mí.

ꟷLas películas de terror no son lo suyo a menos que las vea en la mañana ꟷcontinué y la botella llegó a mí por lo que no dudé en darle un sorboꟷ. Sus series favoritas son Friends y NCIS.

ꟷEs alérgico a las ostras y suele hablar al dormir ꟷañadió Tylerꟷ. Su película favorita infantil es Buscando a Nemo pero su película favorita en general y que les hará ver un millón de veces es El lobo de Wall Street.

ꟷ¿Dejarán de soltar información sobre mí?

ꟷNo ꟷcontestamos al unísono.

ꟷEllos deben saber lo que te gusta, grandote. Jamie y Julian tienen que conocer todo sobre ti para que se aseguren de cuidarte bien.

ꟷPuedo cuidarme solo.

ꟷSu comida favorita son los espaguetis con salsa boloñesa y abundante queso, también le gusta comer galletas Oreo y tuvo una época de adicción a la Nutella ꟷsiguió Taylor sin prestarle atenciónꟷ. Necesita tener hilo dental siempre en el baño o perderá la paciencia.

ꟷ¡Oh, sí! Una vez se enojó conmigo porque en casa de mis padres no había. También tiene una obsesión con abrir todas las ventanas sin importar la temperatura.

ꟷEso es mentira, Ty. Solo abro una y es para ventilar los ambientes durante la mañana.

ꟷLe teme a los payasos ꟷrecordé de prontoꟷ. No lo obliguen a ver IT a menos que lo quieran traumado por el resto de su vida.

ꟷ¿Dices que le hagamos ver las dos películas de IT? ꟷBromeó Julian.

ꟷLo digo en serio, Jul. No me hagas cruzar el océano para patearte el trasero.

El moreno elevó sus manos en señal de rendición y siguió anotando todo lo que le decíamos en su teléfono móvil. Llevábamos los últimos quince minutos dándoles instrucciones para que cuidaran de la mejor manera posible a Theo, no queríamos que nuestro mejor amigo pasara una mala temporada en Londres.

ꟷRecordé otra cosa ꟷchilló Taylor y pidió la botella que era la recompensa por saber datos sobre el rubioꟷ. Para estudiar necesita un resaltador amarillo y otro verde, el amarillo es para resaltar el texto y el verde para los títulos. Cuando escribe ensayos necesita hacerlo en la computadora y con un diccionario al lado para asegurarse de escribir todo bien.

ꟷLeeré todos sus informes, descuiden ꟷnos aseguró Jamie con una sonrisa.

ꟷSu dislexia no ha sido un inconveniente para él desde hace años, aunque cuando está muy estresado se vuelve un problema. En esos momentos le sirve jugar al básquet o ir al supermercado.

ꟷSí, Tyler tiene razón ꟷcomentéꟷ. Al grandote le encanta encargarse de ir al mercado y sabe ahorrar dinero haciendo compras inteligentes.

ꟷBien, ya basta ꟷse quejó Theo y nos quitó la botella a punto de terminar de champañaꟷ. Soy mayor que ustedes, estaré bien. No se preocuparon tanto cuando me fui a San Francisco.

ꟷPorque tu madre estaba a una hora y media de distancia, grandote.

ꟷComo sea, sobreviviré y ustedes lo comprobarán cada vez que vengan de visita.

Suspiré y dejé el tema pasar para no molestarlo. Tan solo nos quedaban unas horas juntos y todavía tenía que bañarme y guardar mis regalos en la maleta que mis abuelos me habían comprado al notar que me faltaba espacio. Sí, tenía mucho para hacer y no quería perder tiempo enfadando a mi mejor amigo.

ꟷVendré para el cumpleaños de mi abuela que es noviembre ꟷanuncié con una sonrisaꟷ y espero una gran bienvenida porque no me perderé ni uno de sus cumpleaños a partir de ahora. También vendré en febrero para el cumpleaños de mi abuelo.

ꟷEn noviembre es mi cumpleaños también, Gen. Un día después del de tu abuela.

ꟷBien, festejaremos tu cumpleaños en mi visita. No me lo perderé, Jul.

ꟷYo tengo que venir cada tres meses ꟷles recordó Taylorꟷ. Será por unos días, pero se cansarán de verme.

ꟷYo no planeo volver ꟷañadió Tyler y antes de que Theo pudiera darle un golpe, lo esquivóꟷ. Es broma, tengo que venir para la feria internacional del libro y buscaré otra fecha para visitarlos.

ꟷIré a Rose Valley para fin de año como les prometí y también a mi madre. Eso es lo máximo que tendrán de mí porque yo no soy rico ni tengo un trabajo increíble.

Dejé caer mi cabeza contra su hombro y le dediqué una sonrisa tierna que me correspondió.

ꟷCuando quieras ir de visita solo tienes que decirlo, me encargaré de todo.

ꟷGracias, pequeñita.

ꟷ¿Nosotros también podemos ir? ꟷIntervino Jamie.

ꟷPor supuesto.

ꟷSi van a Nueva York avísenme para no estar disponible.

A pesar de que sonaba como una broma, no sabía que tanto de verdad había allí.

Continuamos sentados en el living del jardín acurrucados y tapados con mantas mientras las horas corrían y el final se acercaba. A medida que pasaban los minutos la conversación se volvió más silenciosa y cuando el reloj marcó las ocho de la mañana, el silencio fue absoluto.

Miré una última vez a Theo sintiendo las lágrimas picar en mis ojos y con un nudo en la garganta me retiré a mi habitación para finalizar de empacar y prepararme para el largo viaje. Intenté memorizar su rostro como si estuviera viéndolo partir a la guerra y cuando él no pudo oírme, me dejé llorar sabiendo que estaba siendo un poquito dramática.

Ese verano en Londres no había salido según lo planeado pero terminó siendo perfecto con todos sus baches. Theo se quedaba, sí, solo que no era una despida oficial sino un "hasta luego".

Verán, cuando comencé a narrar esta historia, tan distinta a la primera y tan igual a la misma vez, les brindé cinco adelantos y les aseguré que no todos eran reales.

Uno de nosotros se confundió. No me avergüenza decir que esa fui yo. Sufrí de confusión con mis abuelos, con el trío inglés, con mi propio trío de oro y, sobre todo, respecto a mí misma. Puedo decir que aprendí la lección y que las corazonadas no siempre son reales.

Uno tomó una importante decisión. Theo Johnson había dado un salto de fe y su amistad con James Dankworth lo llevó a mudarse al viejo continente abandonando todo lo conocido, permitiéndose nuevas aventuras y creyendo en sus capacidades. Estoy segura que su vida en Londres será un cúmulo de decisiones que se volverán una anécdota sin fin.

Uno de nosotros peleó por un imposible. Tyler Murphy no se enamora y cuando lo hace, nada lo detiene. En su cabeza, su relación con Emma parecía estar en un punto de no retorno donde todo pendía de un hilo y las desgracias estaban a la vuelta de la esquina; no obstante, se armó con sus mejores cualidades y se aseguró de dar los pasos correctos. Su imposible se volvió una realidad y su primera novia no podría ser mejor para él.

Uno cumplió una promesa. Si algo caracteriza a Taylor O'Malley es que nunca falla a su palabra y cuando prometió un para siempre a nuestro lado, era real. No lo detuvo la distancia, los chismes y los celos, no cambió sus convicciones y siempre se mantuvo fiel a sí mismo. Mi novio siguió siendo el chico perfecto ante mis ojos y demostró una vez más ser la clase de persona de la cual siempre se puede aprender algo.

Uno rompió una amistad. Por supuesto, ésta era falsa. Un cuartero de oro no se separa ni se rompe, la distancia es solo un número y las discusiones son recuerdos que quedan para utilizarlas como bromas en momentos de ebriedad. Theo, Tyler, Taylor y yo aprendimos mucho ese verano, pero, sobre todo, entendimos que nuestra amistad no requería cajas de protección o cercanía física.

Y como dije en un principio, luego de ese verano nuestra amistad cambió para siempre.

Nos volvimos un cuarteto con cuatro puntos de reunión: Londres, Nueva York, Massachusetts y Rose Valley. Dicen que uno siempre vuelve a donde fue feliz y todos nuestros caminos siempre nos conducen de vuelta a los brazos de los otros. La felicidad no se debe hallar en un solo lugar ni de una sola manera, la felicidad se encuentra donde puedes reír y llorar, donde puedes amar y maldecir y donde puedes ser tú mismo sin importar el qué dirán. Mi felicidad, nuestra felicidad, está unida.

Y algo me dice que seguirá así por mucho tiempo.

¡Hola, gente muy bella! Sucedió, llegamos al final de este libro y no puedo explicarles las emociones que bullen en mi interior.

Primero que nada, GRACIAS. Gracias por todo su apoyo y cariño durante estos tres libros. Gracias por emocionarse, enojarse, amenazarme y reír con nuestro cuarteto de oro.

Sigue pareciéndome increíble que hace un año no cabía en mi cabeza una historia de comedia romántica como ésta y hoy vamos a empezar por el cuarto libro. Una locura, ¿no creen?

Ya sea que continúen a mi lado en la historia de Theo y en las venideras o decidan quedarse aquí, sepan que tienen mi amor. Son las mejores lectoras del mundo y me han hecho muy feliz, espero ser capaz de devolverles un poquito de esa felicidad.

Ahora sí, pueden continuar con el epílogo y, por supuesto, la historia de Theo que pueden encontrarla en mi perfil.

MUAK!

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top