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Despertarme mejor de lo que hice en años parece un sueño. Sueño que cumplió Jackson y no, no le agradecí que viniera hasta mi habitación con una bolsa llena medicamento de la farmacia, tampoco le pregunté cómo hizo para conseguirlos.

Se quedó toda la noche en mi habitación cuidándome y odie que lo hiciera porque removió algo que jure había acabado hace siete años.

Me cuido como lo hacía en nuestro tiempo de noviazgo, se preocupó a tal punto de que llegue a imaginar que estos siete años separada de él habían sido un mal sueño.

Pero toda esa magia se evaporó cuando me levanté y lo vi dormido en una silla y tuve que sacarlo de mi habitación sin importarme su amabilidad.

— ¿Estás mucho mejor?

Lucas agita una mano en mi rostro haciendo que mi mirada se desvíe hacia él.

— Sí.

— Tranquila, mañana en la tarde regresaremos a Wisconsin y podrás olvidarte de Jackson nuevamente, si es que puedes —murmura esas últimas palabras, pero las ignoro.

Ahora mismo nos dirigimos hacia un restaurante donde nos encontraremos con el señor Benjamín y su hijo para firmar los documentos y dar inicio a los negocios junto a Motors B&E.

— ¿Cómo te termino de ir anoche? Nos informaron que tuviste una visita tarde de la noche.

— Yo no lo llamaría visita —acomodo la pulsera que debí votar hace algunos años—. Invadieron mi privacidad y según yo eso puedo demandarte

— No hubo negación de tu parte, así que no hay nada que demandar —acusa Lucas.

— Aja, siento que estos dos días la unión entre ustedes y el idiota esta más arraiga, no sé qué están tramando.

Jackson es amigo de mis hermanos hace muchos años —aunque esa amistad inició por mí, no terminó cuando nosotros lo hicimos—.

Aún me pregunto cómo logré evitar a Jackson durante tantos años.

Bueno, realmente sí lo recuerdo.

Cada vez que me enteraba de que Jackson acudiría a nuestra empresa, huía. Cuando coincidimos en alguna gala, huía. En fin, siempre me alejaba de él porque no quería verlo y recuerdo que decidió dejar nuestra relación de años para ocuparse de la empresa de su familia y llenarse más los bolsillos.

— Te recuerdo que es nuestro nuevo socio, así que ya no lo podrás evitar, sería un error perder a Hardware Singnals.

— Error es trabajar con esa empresa sabiendo lo que me hizo ese imbécil.

— No te hizo nada.

— Me dejó porque tenía que ocuparse de las empresas de su familia, ¿creen que eso es nada?

— ¿Estás segura de que él te dejó? —pregunta Liam.

— Yo conozco otra historia, hermanita —Lucas estaciona el auto y se gira para mirarme— tú lo dejaste, ¿Por qué? El idiota de Ethan te daño la mente y fuiste tan ingenua que caíste en eso, así que déjame decirte algo Harper.

La seriedad que toma Lucas me pone los pelos de punta.

— Te amamos como no lo imaginas, eres nuestra pequeña hermana, el único familiar directo que tenemos y siempre estaremos de tu lado y vamos a protegerte, pero esta vez no, sabemos lo que iba a decirte Jackson en ese entonces —Liam interrumpe sus palabras.

— Jackson es el único hombre que se ha interesado por ti y no por los números en tu cuenta. Quiero a ese hombre como parte de mi familia.

— Entonces cásate tú con él, o tú —señalo a Lucas antes de bajarme del auto.

Son unos idiotas en potencia, la edad les está vaciando la cabeza hasta el punto de que lo único que puedes decir son tonterías.

— Escuche cuando su padre le dijo que debía retrasar todo contigo, que te dejará hasta que la empresa volviera a la bolsa.

— Jackson nunca me haría eso —insisto.

Ethan vino hacia mí para decirme que el padre de Jackson estuvo en su oficina haciendo una oferta la cual mi novio no dudó en aceptar, pero me niego a creer que Jackson sea así.

— Escucha.

Un audio se reproduce donde el padre de Jackson es quien habla, mi novio no emite ningún ruido y eso me genera ansiedad.

—Retrasa todo, encárgate de ambas empresas... dirigir HS duplica tus ingresos y ayudará a tu empresa emergente.

Ese mismo día viajamos a las Vegas y escuché una conversación que me hizo saber que lo que me había dicho Ethan era real, que el hombre que amaba con locura me haría a un lado para dedicarle todo su tiempo a las empresas, así que tomé yo la iniciativa y corte con él destrozando mi corazón en el proceso.

—Quiero que terminemos —murmure ese día.

Jackson me miró sorprendido como si lo que estuviera diciendo fuese una mentira, pero de su boca solo salieron algunas palabras.

—¿Eso es lo que quieres?

Debió decirme que no me había llevado allí para terminar, que solo quería celebrar un año más de nuestra relación. Que no arruinaría una fecha tan importante para ambos en el lugar donde siempre soñé casarme.

Me lavo las manos y salgo del baño. Cuando entré al restaurante afortunadamente Jackson no se encontraba con los hombres en la mesa, pero mi fortuna ha terminado.

— Señorita Blanche, es un gusto poder verla nuevamente el día de hoy.

— Lastimosamente no puedo decir lo mismo, mi día se daña en cuanto veo tu maldito rostro —me siento en mi puesto y agradezco que hoy no esté él junto a mí.

Jackson sonríe y asiente hacia mí con suficiencia.

Lo odio, realmente lo detesto.

Todos platican con comodidad mientras yo me distraigo en mi teléfono respondiendo un par de correos que aún tengo pendientes.

Kelly llama mi atención de vez en cuando y le respondo lo necesario. Quiero terminar este almuerzo, firmar los documentos y regresar a mi habitación de hotel o si es posible, quiero volver a mi apartamento en Wisconsin y estar allí por una semana.

— Harper, ¿consideras que los términos del contrato están bien?

— Creo que para usted sería señorita Blanche, no creo que tengan una amistad para que la llame por su nombre —interrumpe Jackson a Patri, pongo los ojos en blanco e ignoro sus palabras.

— Siempre y cuando mis hermanos crean que está bien, para mí lo es —digo y tomo de mi vino, miro hacia Jackson y luego le sonrió a Patri—. Mis hermanos son los de los números, los negocios y todo lo que conlleva a hacernos ganar dinero, yo solo le aviso a la prensa las cosas buenas y limpio los escándalos.

Patri me sonríe y me guiña el ojo, acto que me asombra. Sé que le estoy respondiendo a sus preguntas y estoy permitiendo que me tutee, pero esto es demasiado íntimo para mí.

— Creí que habíamos tenido una conversación muy a gusto —Jackson aprieta sus manos mientras lanza sus palabras a Patri.

— Tú hablaste, además Harper y tú no tienen nada, así que no creo que ella se case contigo.

Me atraganto con una aceituna, creo que estos dos hombres acaban de perder la cabeza.

— Cierra la maldita boca, imbécil.

— Se supone que estos son negocios, no deberíamos estar creando enemistades con nuestros futuros socios —dice Lucas.

— Mi enemistad con este hombre existe desde hace muchos años, siete —le recuerdo— por si lo has olvidado.

Jackson y Peter tienen un enfrentamiento de miradas y decidí ignorarlos mientras me tomo el resto de mi copa de vino.

— Bueno, si eso es todo, entonces firmemos —menciona el señor Benjamín.

— Estoy de acuerdo con el señor Benjamín, es mejor terminar esto en este preciso momento, debo hacer un par de compras antes de regresar a Wisconsin.

Falso, no debo hacer nada, pero ahora mismo prefiero salir de este restaurante e ir con Kelly a algún lugar donde pueda gastar un par de números de mi cuenta para olvidar el rostro y la voz de Jackson por los próximos siete años.

Nuestro abogado saca algunos documentos de su maletín y se los pasa a Liam quien firma y me los pasa.

— Se supone que solo deben firmar tú y Lucas —digo.

— Hoy solo firmaremos nosotros, Lucas se encargará de otras cosas.

No me preocupo por leer los documentos, puesto que nuestro abogado fue quien se encargó de redactarlos y si Liam se atrevió a firmarlos sin leer, no debo desconfiar de nada.

El señor Benjamín y su hijo son los siguientes en firmar y el último es mi querido Jackson, el cual sonríe cuando deja su huella en la última línea de los documentos.

— Si eso es todo, creo que mejor me voy —me pongo de pie y para mi sorpresa, el único en hablar es Jackson.

— Deberías quedarte, acabamos de firmar algo muy importante para ambos —lo miro, pero lo ignoro completamente.

¿Se propuso ser un grano en el culo después de siete años?

Me despido cortésmente y salgo del restaurante junto a Kelly, estaba a punto de dirigirme hacia un taxi cuando Jackson me alcanza y sostiene mi brazo.

— Tesoro —acaricia mi mejilla y retrocedo—. Por favor no hagamos un escándalo.

— Entonces deberías dejar de tocarme —me aparto bruscamente de él.

— Eres imposible.

— Aja.

— Nos veremos esta noche, vamos a celebrar lo que acabamos de firmar.

— Celebra tú, yo tengo planes.

Me subo al taxi junto a Kelly y le pido al conductor que me llevé hasta el hotel, vine con mis hermanos y sé que ellos pasaran más tiempo aquí, así que prefiero llegar sola.

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No pensaba salir, pero en el hotel había una recepción así que decidí ponerme mi mejor vestido y bajar al salón para divertirme un rato. No debo seguir amargando mi vida por un hombre que no me valoro.

Ya han pasado siete años desde que tome la iniciativa de romper con él antes de escuchar de su boca que tenía mayor interés en las empresas que en la mujer que lo había acompañado durante mucho tiempo.

Llevo dos horas en el lugar y el alcohol que he tomado está haciendo efecto demasiado rápido.

— Señorita, ¿puedo invitarla a una copa? —susurra una voz masculina y me siento tentada a poner los ojos en blanco, pero me giro y le sonrió.

— Ya he tomado lo suficiente —aseguro.

— Entonces déjeme acompañarla.

El hombre me sonríe mientras se acerca más a mí.

— Ya tengo compañía —le señalo a Kelly que está a mi lado.

— Puedo acompañarlas a ambas, aunque le gusta más usted.

Me giro ignorando lo que acaba de decir, los hombres en algunas ocasiones son realmente imbéciles. Me tomo de un solo trago mi última copa de vino y luego camino hacia Kelly.

— Deberíamos irnos —menciono.

Ya estoy ebria y para evitar hacer una estupidez es mejor que regrese a mi habitación.

— No tan rápido, nena, la noche apenas comienza —el tipo se toma el atrevimiento y rodea mi cadera con sus manos.

Me muevo para liberarme de su agarre, pero el hombre ajusta aún más sus manos.

— Maldito imbécil —alguien se acerca a nosotros y debo espabilar varias veces para notar que ese alguien es Jackson.

¿Dónde estaba? Bueno, eso no importa. Jackson deshace el agarre del tipo e inicia a golpearlo sin importarle que esté montando una gran escena.

— Jodidamente la vuelvas a tocar —masculla al separarse—. Si una mujer te dice no, es no. No te acercas a tocarla, nunca.

— No sabía que estaba con alguien, crei...

— No crees, no supones y no consideras.

— Lo siento, hermano, me has roto la nariz.

— Y te romperé las manos si no te marchas.

Escucho la discusión de ambos hombres sin pestañear ni una sola vez, ¿Jackson me está defendiendo?

— Tesoro, ¿estás bien?

— Lo estoy —respondo en voz baja.

Doy un paso hacia atrás y Jackson me atrapa en sus brazos antes de que me choque con el piso.

Como muchas saben, estuve enferma por mas de un mes, lo que impidió mis actualizaciones.

Hoy regreso con todos los libros y tratare de avanzar este en las próximas dos semanas, ya que es un libro de diez capítulos.

Disfruten de Jackson y su querida Harper.