3- Encuentro a escondidas

Arco uno: mundos escontrados

Joy Golden ya estaba de regreso a su casa, las clases habían culminado con éxito y su primer día con yeso parecía haber sobrevivido a la peor parte del día.

Los días pasaron y Joy se fue recuperando poco a poco, durante este tiempo, la rubia no había intercambiado palabras con Freddy, solo un par de miradas y nada más, ni siquiera le había escrito.

La rubia faltó uno que otro día para ir a terapias de rehabilitación para su tobillo, el cuál, afortunadamente, no era grave, solo fue cuestión de 6 días para que le retiraran el yeso y pudiera caminar con cierta facilidad

Mientras tanto, el castaño estaba sentado en su escritorio pensando en la rubia, hace tiempo no hablaba con ella y no le había llegado ningún mensaje.

Freddy: ¿Por qué no escribe? Supongo que no necesitará ayuda en nada...

Se preguntaba la razón de su preocupación, simplemente lo atribuyó a su sentimiento de culpa... ¡Si! Eso debe ser, solo se sentía culpable y por eso se preocupaba por ella.

Freddy: Como sea, tengo otras cosas que hacer en vez de estar esperando el mensaje de una chica el cual no llegará

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La rubia estaba caminando por su cocina buscando algo para comer. Su padre al verla, no le pareció que estuviera fuera de su cama.

Sr. Golden: Joy, regresa a tu cama, no puedes estar caminando, tienes que recuperarte por completo

Joy: Pero papá, ya me siento mejor, ni siquiera me duele el tobillo

Sr. Golden: Recomiendo que te quedes en cama tres días como mínimo para asegurar tu máxima recuperación

Joy: ¡Pero papá! El doctor dijo que ya estaba bien, estoy caminando normal y no me duele nada

Sr. Golden: ¡Soy tu padre y harás lo que yo diga, si yo digo que lo mejor es que estés en cama descansando, lo harás! Alzó la voz

Joy era una persona sensible y frágil cuando alguien le gritaba, sus ojos se llenaron de lágrimas y se fue corriendo a su habitación, para luego encerrarse y echarse en su cama.

Su padre puede que esté molesto, pero esa no era razón para gritarle de esa manera, también se entiende su preocupación, pero tampoco había motivos para mandarla a su cama por 3 días para evitar que camine.

Joy: ¡Detesto todo esto! Ojalá pudiera por una vez en mi vida hacer lo que yo quiera...

La rubia miró su celular y rápidamente pensó en una persona. Sin pensarlo dos veces, agarró su celular y llamó.

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Nuestro castaño protagonista estaba sentado en su escritorio leyendo un libro, hasta que el tono de su llamada lo desconcentra, al fijarse, su corazón empezó a acelerarse.

Freddy: E-Es ella...

Se levantó, se alejó de su celular, pero luego regresó rápidamente para contestar, por poco y casi se le cae, pero pudo sujetarlo a tiempo.

Llamada:

- ¿Sí?

- Freddy, soy yo, Joy

- Oh, hola, Joy, no esperaba tu llamada

- Estaba pensado en lo que me habías dicho hace unos días... ¿Crees que podamos salir a algún lado?

- ¿Lo qué te había dicho hace días?

- Si, me dijiste para salir, me lo debías por haberme lastimado

- Creo recordarlo, claro que podemos salir, ¿algún lugar en específico?

- No, quiero que me sorprendas, no conozco muchos lugares cerca

- Genial, ¿te parece bien mañana?

- Perfecto

- Bien, nos vemos

- Hasta luego

Fin de la llamada

Ni bien el castaño esperó a que la rubia cortara la llamada, dio un pequeño grito de felicidad y se lanzó a su cama.

¿Por qué estaba tan emocionado? Esa chica lo había estado evitando durante dos semanas y recién se acordó de llamarlo. Tal vez aunque se hacía el despreocupado, la idea de salir con Joy lo había mantenido alerta todo ese tiempo.

A pesar de que no se conocieron en las mejores oportunidades, sentía que la salida de mañana sería como el comienzo de algo más grande, algo que llevaba tiempo esperando sin saberlo.

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La joven de cabellos dorados cortó la llamada y se tumbó a su cama con la vista al techo, estaba cansada de su vida monótona y mañana era una pequeña luz de esperanza para innovar y hacer algo diferente, finalmente.

Se levantó y fue en dirección a su vestidor amplio para poder elegir la vestimenta que usaría para el día siguiente.

Afortunadamente, mañana sería domingo y no tendría clases, tampoco ninguna grabación ni sesión de fotos, tendría libre para ella.

Al día siguiente

La joven de clase alta había iniciado su día desde temprano y ya se encontraba arreglando su habitación, miró la hora y faltaba poco para el medio día, había olvidado por completo darle una dirección de encuentro al castaño.

Joy: ¿Cómo pude olvidarme de eso? Se regañó a sí misma

Antes de que pudiera seguir lamentando su mala memoria, escuchó unos ruidos proveniente de su ventana. Abrió la ventana de su habitación y abajo pudo ver al castaño, había estado lanzándole piedritas para llamar su atención.

Joy: ¿Cómo sabías que esta ventana daba con mi habitación?

Freddy: No estaba del todo seguro, pero tus cortinas color rosa fresa te delataron un poco

Joy: Un momento... ¿Qué haces acá?

Freddy: Iba a venir a verte, pero luego recordé que no habíamos quedado en un lugar ni tampoco una hora

Joy: Si mis padres te ven, te matarán

Freddy: Entonces vámonos de una vez Sonrió

La chica de ojos zafiros sonrió y luego se alejó de la ventana. Nuestro protagonista esperó un corto tiempo y luego vio a la rubia saliendo rápidamente de su casa un poco asustada.

Joy: ¡Vámonos, mis padres no saben que estoy saliendo! Siguió corriendo de largo

Freddy: ¡¿Q-Qué?! Empezó a correr detrás de ella

Joy: Mi mayordomo Alfred me cubrirá, espero no meterme en problemas

Freddy: Eso suena a como si estuvieras escapando de tu casa

Joy: Puede que suene así porque lo es

Ambos pararon de correr hasta que llegaron a una zona en donde estuviesen lo suficientemente lejos como para no notar su presencia.

Ahora que el castaño se detenía a respirar, miró de pies a cabeza a su acompañante, quien tenía un largo sombrero negro y unas gafas de sol, además de un abrigo que cubría gran parte de su cuerpo.

Freddy: ¿Te estás ocultado de alguien o algo? Bromeó al ver su vestimenta

Joy: No me gusta mucho que me dé el sol Mintió

Freddy: Bueno... cerca de acá hay una plaza increíble con un bosque al costado, pensaba que podríamos ir allá, conozco el lugar perfecto

Joy: Eso no suena bien si estuviéramos en una película de terror... pero no estamos en una, así que vamos

Ambos muchachos de distintas clases económicas, empezaron a caminar en dirección a su destino mientras tocaban distintos temas de conversación.

Joy: ¿Desde cuándo manejas bicicleta?

Freddy: Desde los ocho años

Joy: Deberías aprender un poco más, parece que estos años no fueron suficientes Bromeó

Freddy: ¿Tú sabes? En ese caso, podrías enseñarme

Joy: No sé manejar bicicleta, pero estoy aprendiendo a manejar carro

Freddy: Bien, podríamos dar un paseo algún día, solo ten cuidado de no accidentarte

Joy: Ja, ja

Freddy: No estaba bromeando...

Joy: Este año acabaremos la HS, ¿alguna idea de lo que quieres hacer después?

Freddy: Estudiar una carrera, supongo... aunque tendría que conseguir un trabajo para pagarla

Joy: ¿Te decidiste por alguna carrera?

Freddy: Sí, me gustaría ser psiquiatra, me interesan mucho las causas de los trastornos mentales y sus tratamientos

Joy: Oh, eso es... curioso

Freddy: Sí, pero en fin, ¿y tú qué has pensado?

La chica de ojos azules miró a su acompañante y luego miró al frente por unos segundos buscando alguna respuesta en su mente.

Joy: Tal vez me obliguen mis padres a estudiar administración de empresas, pero en realidad me gustaría ser modelo, como mi madre

Freddy: No sabía que tu madre era modelo, ¿eso significa que es famosa?

La rubia acababa de caer en cuenta en lo evidente que había sido, ella quería a toda costa evitar que el castaño se enterara de su fama.

Joy: ¡N-No! No es tan famosa, solo apareció en algunas pasarelas y ya, el dinero de mi familia es generado más por las empresas que tienen

Freddy: Igual creo que harías un gran trabajo como modelo, es decir, eres una chica muy bonita

Ante estas palabras, ambos se sonrojaron y apartaron a mirada a lados opuestos mientras seguían el ritmo de la caminata.

Freddy: ¡Mira, ya estamos cerca! Desvío el tema

Llegaron a la entrada de un bosque, estaba al costado de una carretera, la rubia agarró el brazo del chico de ojos azules y se dispusieron a ingresar.

Joy Golden veía con atención su alrededor, le encantaba todo lo que estaba viendo y era todo tan natural.

Siguieron caminando hasta llegar a orillas de un hermoso río, la luz del sol era perfecta y los pájaros estaban volando de un lado a otro, ambos tomaron asiento en el césped.

Joy: Este lugar es...

Freddy: ¿Hermoso? Completó la frase

Joy: Si... ¿Cómo conoces este lugar? No es que sea facil de encontrar o algo Levantó una ceja, con cierta curiosidad

El castaño se quedó en silencio por unos segundos, se notaba que quería abrirse con la rubia, pero era un tema algo delicado para él.

La chica de ojos azules notó esto.

Joy: No tienes que decirlo si no te sientes cómodo

Freddy: Gracias...

Ambos se quedaron en silencio observando la corriente del río fluyendo hacia el sur, el viento no soplaba ni tan fuerte, ni tan bajo, todo estaba a la perfección.

Joy: Esto me hace recordar a un viaje que hice en Suiza, mi padre me dejó en el campo por horas, ¿puedes creerlo?

Freddy: ¿En serio? No lo culpo Bromeó

Joy: Ese día había hecho un berrinche por un chocolate, supongo que fue una manera de darme una lección, tenía ocho años

El joven empezó a reír en voz baja, no podía creer que su padre la haya dejado sola durante tanto tiempo por un chocolate.

Freddy: Eso me recuerda cuando acompañé a mi madre al mercado y le pedí un juguete, ella siempre me decía: "mañana te lo compro". Al día siguiente, me decía lo mismo, hasta que un día simplemente dejé de pedirlo, sabía que no me lo compraría

Joy: ¡Qué injusto! Al menos ambos aprendimos algo de eso

Freddy: Sí, y son esos aprendizajes lo que nos vuelven quienes somos actualmente, somos el resultado de experiencias, de qué manera hemos afrontado esa situación y qué tanto permitimos que nos afecten

Joy: ¿Y crees que aprovechaste esos aprendizajes?

Freddy: Sí, entendí que no puedo conseguir todo lo que quiera en esta vida, y está bien, también aprendí a priorizar cosas, el dinero que iba a ser para mi juguete, mi madre lo gastó para el almuerzo, eso era más importante

Joy: Y a base de esa experiencia, yo aprendí a encontrar belleza en las cosas simples como apreciar lo que está alrededor y no tanto en lo material, de algún modo siento que no debieron dejarme sola por horas siento tan chica, pero supongo que ayudó en algo

Freddy: Igual y creo que fueron un poco duros al hacerte eso...

Joy: Creo que solo quieren lo mejor para mí, aunque a veces siento que ponen demasiada presión sobre mis hombros... tengo miedo de no alcanzar sus expectativas y ser una decepción

Freddy: Wow, ¿por qué pensarías eso?

Joy: Mis padres son demasiado estrictos conmigo, prácticamente han escrito el guion de mi vida: la HS, amistades, universidad, la carrera que estudiaré, mi futuro esposo... Yo no quiero ni la mitad de cosas que quieren para mí, ni siquiera se molestan en preguntar si soy feliz así Dijo mientras miraba al río

Freddy: Debe ser realmente agobiante, ¿pero qué es lo que quiere realmente, Joy Golden? Me miró a los ojos

Joy: Yo... quisiera viajar por el mundo, modelar por las pasarelas más lujosas, alejarme de la telev-

La rubia dejó de hablar, ya que si seguía, sería evidente que era una figura pública, esa era una información que no quería que Freddy supiera, temiá que solo la quisiese por su fama y no por quien realmente es.

Joy: Y esas cosas, ya sabes Intentó terminar el tema disimuladamente

Freddy: No sé porqué, pero te siento como un enigma, pareces tan segura y firme, pero también... es como si siempre estuvieras escondiendo algo Levantó una ceja

Joy: ¿Qué te hace pensar eso? Intentó ocultar su nerviosismo

Freddy: No lo sé, es solo mi intuición, no tienes que contarme nada que no quieras, pero recuerda... si necesitas hablar con alguien, estaré ahí

Joy: Es complicado, Freddy. Conforme fui creciendo, me he dado cuenta que muchas de las personas a mi alrededor, solo están ahí para aprovecharse de mí y no les interesa en lo absoluto conocerme realmente, es como si estuviera rodeada de buitres volando encima mío, esperando que me desangre para bajar a comerme Respondió con tristeza en la mirada

Freddy Fazbear al escuchar esto, se acomodó en frente de ella y la agarró de las manos mientras la miraba fijamente.

Freddy: Quiero que sepas que yo solo veo a la Joy real, la chica que no tiene miedo de reírse, no tiene miedo de soñar y tiene una gran fortaleza, no dejes que las personas equivocadas extingan esa luz propia que tienes. Estoy conociendo a la verdadera Joy, y me gusta la persona que estoy conociendo Sonrió

Joy Golden no pudo evitar un leve sonrojo en su rostro, ¿quién lo diría? Al principio no querían verse ni en pintura y ahora estaban hablando sobre sus inseguridades, buscando consuelo uno del otro.

Freddy: Cuando llegamos, me preguntaste cómo conocía este lugar...

La rubia, con un aún leve sonrojo en su rostro, asintió.

Freddy: Solía venir acá con mi padre antes de que falleciera en un accidente laboral, solo tenía once años cuando lo perdí, desde ese entonces ahora tengo esta responsabilidad emocional de cuidar de mi madre, a pesar de que lo perdimos hace años, la ausencia sigue siendo como si hubiera sucedido ayer

Joy: Oh, Freddy, lo siento mucho, no lo sabía

Freddy: Está bien, siento que a pesar de todo, he aprendido a salir adelante junto con mi madre, hace poco conseguí trabajo repartiendo paquetes en mi bicicleta

Joy: ¿Esa es la razón por la cual casi me atropellas con ella? Empezó a reír en voz baja

Ambos empezaron a reír delicadamente, el castaño se levantó y extendió su mano para ayudar a la rubia a hacer lo mismo.

Ambos estaban de pie, frente a las orillas del río, estaba empezando a atardecer, las hojas de los árboles se tiñeron de un color naranja producto del descenso del sol, simplemente hermoso.

Freddy: Nunca pensé que estaría en este bello lugar contigo, Joy, es como si el mundo se detuviera solo para nosotros.

Joy: Siento lo mismo, nunca había sentido tanta tranquilidad al estar con alguien.

Freddy: Me gusta cómo puedo hablar contigo, sin máscaras ni pretensiones, simplemente los dos, el uno para el otro Se empezó a acercar lentamente

Joy: He pasado tanto tiempo intentando cumplir las expectativas de las demás, que olvidé como vivir mi vida, luego apareciste tú y me haces sentir tan autentica y especial Miró sus ojos azules

Ambos sentían en ellos está química y conexión, el castaño dio un paso más cerca, sus manos acercándose a la cintura de Joy.

Freddy: Joy, tu eres más que especial. Tu manera de ser, de reír, la manera en la que hablas de tus sueños con tanta pasion... me tienes fascinado Empezó a susurrar

La joven de cabello de oro sentía cómo su corazón latía cada vez más rápido, mientras los últimos rayos del sol iluminaban sus cuerpos con un aura dorada.

Joy: Desearía que el tiempo se detuviera, que este momento durara para siempre... Expresó suavemente

Freddy: Yo igual, quiero disfrutar de cada segundo a tu lado, Joy Golden Susurró

Ambos se quedaron en silencio, solo se escuchaba el río fluyendo y el murmullo del viento. Freddy no apartó la mirada de los ojos azules de la rubia y levantó una mano para reposar suavemente en su mejilla, acariciando su piel con el pulgar.

Joy cerró los ojos un momento, sintiendo el calor de su toque, mientras una leve sonrisa se dibujaba en sus labios.

Freddy: Joy... Susurró

Joy abrió los ojos e inmediatamente se perdió en la intensidad de su mirada color océano. Ambos se inclinaron lentamente el uno hacia el otro, dejando que el mundo siguiera girando, mientras ellos vivían la mayor conexión que habían sentido en sus vidas.

El atardecer siguió bañaba sus rostros en una luz dorada cuando sus labios finalmente se encontraron en un beso suave y lleno de emoción, una parte de ellos se sentía completa con la presencia del otro, como si hubieran esperado por el otro toda su vida y finalmente se habia encontrado.

Al separarse, ambos se miraron y sonrieron, sabiendo que algo profundo había cambiado entre ellos.







Considero que este capitulo es el mejor que he escrito durante todos los años que tengo escribiendo historias :')

Disculpen el capítulo largo, pero quería profundizar en la relación amistosa entre Freddy y Joy para no apresurar las cosas, sino se vería forzado y quiero hacer con esta historia algo mucho más profundo a comparación de las otras que he escrito.

¿Qué crees que pasará ahora en adelante?

¿Freddy y Joy iniciarán una relación?

¿Los padres se enterarán?

Espero que les haya gustado el capítulo, si es así, no olvides votar y comentar tu parte favorita. 🤍

Nos vemos en la próxima, tomen agua, cuidense de cualquier enfermedad y hagan cosas buenos por los demás, adiooooooooooooos.

🫂

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