Pequeños y delgados rayos de luz se filtraron por la entrada de la madriguera, golpeando el rostro de uno de los dragones que yacía ahí dentro.

Pólux parpadeó cuando el sol le dio de lleno en el rostro, era muy temprano, demasiado para su gusto.

Pero aún así, se levantó.

Se estiró un poco y abandonó el nido, bostezando, tenía que empezar a cazar, Toothless había pasado todo el día anterior creando la madriguera y el nido, era su momento de contribuir.

Salió de la madriguera y caminó hacia el pequeño río que estaba a varios metros del que ahora era su hogar, bebió agua hasta saciar su sed y poco después empezó a pescar, atrapó varios cangrejos así como salmones, sabía que Toothless estaba más acostumbrado al pescado, no podía decirle que deje de comerlos de un momento a otro, no sería adecuado, no cuando él había estado comiendo peces durante un periodo de tiempo prolongado, por ahora la dieta del macho menor iba a ser de cangrejos y pescado.

Sus orejas se movieron cuando escucho pisadas, levantó un poco la cabeza y olfateó, el efluvio del dos piernas le llegó, solo era el Salvador o como Toothless lo llamo, "Hiccup", no había peligro. Podían decir que era imprudente al confiar tan rápido en un dos piernas, pero la verdad era que no confiaba en él, solo le estaba dando el beneficio de la duda.

—¡Toothless! ¡Estoy aquí! ¡Y te traje comida!— El Jefe de Berk traía una cesta llena de pescado para su amigo, que no había llegado a dormir, normal, debía estar demasiado entusiasmado al tener a otros de su especie cerca. El castaño dejo la cesta en el suelo, busco con la mirada a su amigo, pero él no estaba y tampoco estaba la cría, el único que estaba allí era el Veterano. —Hola, grandote, ¿Dónde está Toothless? ¿Y la pequeña cría?—

El mayor observó al dos piernas por un momento, entendía que él quería saber dónde es que estaba Toothless, así que solo soltó un gruñido y con su cabeza señaló hacia donde estaba la entrada de la madriguera.

Hiccup volteo en la dirección en la cual le había señalado el Veterano y vio un agujero en las raíces de un árbol, podía jurar que eso no estaba allí ayer. Se acercó con cautela y se asomó, se cubre la boca para evitar reír ante la graciosa imagen que estaba protagonizando Toothless y la pequeña cría, su amigo dragón estaba estirado panza arriba, con las alas plegadas, su hocico estaba abierto y su lengua estaba de fuera, la cría estaba en la misma posición, copiando al mayor.

Se alejo un par de metros y rompió en risas, siempre era chismoso el ver dormir de manera tan inusual a su amigo, ya se había acostumbrado, pero el verlo ahora así, junto a la pequeña cría, no pudo aguantar mucho tiempo la risa.

Pólux observó reír al dos piernas, su risa era alegra y juvenil, un claro delator de su estado de cachorro. Los ojos del dragón estudiaron brevemente al dos piernas, observando la extraña coraza que traía puesta, parecía estar hecha a base de escamas viejas, pero no fue eso lo que captó la atención del Veterano, sino que sus ojos se fijaron en las membranas que la cría tenía bajo sus patas delanteras, se veían como alas.

Se acercó al dos piernas y tocó una de aquellas membranas, eran alas, realmente lo eran.

¿Todos los dos piernas tenían alas? ¿O solo era este? Fue ahí que le vino la imagen del día anterior, cuando Toothless llegó volando con el Salvador a cuestas, ¿Le estaría enseñando a volar?.

Era una cría y los adultos debían enseñarles a volar, Toothless le estaba enseñando por lo que posiblemente sus progenitores no tenían alas como él. Seguiría el ejemplo de su pareja y le iba a enseñar a volar a este cachorro.

Se acercó al cachorro y lo tomó con sus patas delanteras, extendió sus alas y emprendió el vuelo, llevándose con él a la cría, que se agitaba entre sus patas, parecía que estaba muy ansioso por aprender a volar.

Sonrió ante el entusiasmo que estaba mostrando, cuando estuvieron a una buena distancia del suelo, lo soltó.

El cachorro empezó a rugir (gritar), debía estarse divirtiendo mucho.

Hiccup estaba asustado y muy confundido, el Veterano lo había prácticamente secuestrado y se lo estaba llevando lejos de donde estaba Toothless, ¿Acaso ahora que había una cría no quería tenerlo cerca? ¿Lo veía como una amenaza potencial?.

Cuando llegaron a cierta altura, el Veterano lo soltó, lo que provocó que el Haddock cayera al vacío, gritó con fuerza al ser lanzado tan sorpresivamente por el dragón, ¿Acaso estaba tratando de matarlo? Posiblemente.

El castaño abrió las membranas que tenía su armadura y las utilizo para planear, el viento no era fuerte así que estaba tranquilo, solo tenía que buscar alguna colina ennla cual aterrizar, o de preferencia un árbol lo suficiente alto.

El Veterano se acercó al dos piernas, viéndolo planear. La cercanía puso nervioso al Jefe de Berk, que recordaba lo que aquel dragón que ahora volaba a su lado le había hecho a un furia luminosa el día anterior, ¿Le haría lo mismo a él?.

«Así no se vuela, lo que haces es planear, ¡Debes agitar tus alas! ¡Arriba, abajo, arriba, abajo!» Dice el veterano, aunque lo único que oía Hiccup eran gruñidos, que parecían muy molestos. «Toothless debió haberlo estado llevando en su lomo mucho tiempo, se acostumbro a ser cargado y lo único que saber hacer es planear»

Cuando volvieran hablaría muy seriamente con Toothless, él tenía que ser firme y no ceder ante los caprichos de las crías.

Soltó un gruñido, llamando la atención del cachorro, cuando él lo observó, empezó a mover sus alas con lentitud, intentando que Hiccup entendiera que debía mover sus alas.

🔸🔆🔸

Toothless se estiró en el nido y bostezo, se movió hacia un lado, acomodándose para continuar durmiendo, por desgracia, no pudo hacerlo, porque Orión habia empezado a llorar, pidiéndole comida.

Gruñó y se puso de pie, volvió a bostezar y caminó hacia la entrada de la madriguera, escaló y salió, solo. Pronto empezaron a escucharse fuertes lloriqueos que provenían desde el interior de la madriguera, había dejado allí a Orión, que al ser tan pequeño no podía salir por si mismo.

Se maldijo por ser tan estúpido, al menos Pólux no estaba allí para ver aquello, porque estaba seguro de que si su pareja hubiese estado allí, habría recibido un muy feo regaño.

Volvió a entrar a la madriguera y tomo a Orión con sus fauces (como hacen los gatos). 

Salió nuevamente, pero está vez llevaba cargando a la pequeña cría, que no paraba de llorar pidiéndole comida. Dejo al pequeño en el suelo y caminó hacia el río, dispuesto a pescar para alimentar a su cría, aunque no tuvo que hacerlo, parecía que Pólux había estado pescando, porque en la orilla había un buen número de cangrejos y salmones.

Abrió varios cangrejos, mismos que después mastico, convirtiendo la carne en una papilla llena de baba con la que alimento a la cría hambrienta. 

Astrid estaba alimentando a Stormfly, era su turno de patrullar la isla, el día anterior habían sido Hiccup y Fishlegs, hoy le tocaba a ella, luego a Valka, quien iba a patrullar por la tarde hasta el anochecer.

Pronto apareció Valka, que era seguida por Claudjumper. —Astrid, ¿Has visto a Hiccup?—

—Fue a llevarle el desayuno a Toothless, él paso la noche con el otro furia nocturna, así que debe estar muy hambriento, aunque no sé si los peces lo dejen satisfecho, Hiccup me dijo que el Veterano comía cangrejos de río, parece que la dieta de los furia nocturna se basa más en los crustáceos que en los peces—

El entrecejo de la mujer mayor se frunció, ella sabía mucho sobre dragones, y conocía sobre los furia nocturna, ellos no comían crustáceos, su dieta era estrictamente de peces. Parecía que faltas de hora de sueño de su hijo volvían a hacerlo crear cosas, primero creo a un furia nocturna adulto y luego una cría, ahora creaba datos extraños sobre la especie.

—¿Sigue con eso?— Pregunto la mujer, que estaba empezando a preocuparse por la salud mental de su hijo.

—¿A qué se refiere con "sigue con eso"?— La rubia observó a su suegra con una ceja alzada.

—Astrid, Hiccup no ha dormido adecuadamente en las últimas semanas, su mente está muy revuelta debido al estrés al que se ha visto sometido—

—¿Insinúa que Hiccup imagino al Veterano y a la cría?—

—Bueno...—

—Es increíble... De todas las personas que podían pensar que Hiccup sd volvió loco debido al estrés, ¿Es usted?— La rubia miro a la mujer con enojo. —Escuché, si Hiccup dice que hay más furias nocturna y que él los vio, le creo. ¡Le creería incluso si viniera a decirme que encontró algún dragón sin alas, que escupe baba verde y ruge como delfín! ¡Le creería! ¡Porque confío en Hiccup!... Lo cual parece que usted no hace, vaya madre es—

Astrid tomo su morral y se subió al lomo de Stormfly, que al tenerla en su lomo emprendió el vuelo, alejándose del campamento.

A la escena se unió Gobber, que no comprendía porque Astrid parecía estar tan furiosa.

—¿Qué sucedió? ¿Tuvo problemas con Hiccup?—

—Más o menos...— Respondió la mujer.