Toothless estaba volando.

¡Volando de verdad!, ¿Cómo era eso posible? Le faltaba una de las aletas de su cola, no debía ser capaz de surcar el cielo por si mismo.

Fue cuando observo mejor al menor que se percató de que esté tenía una cola falsa del color de la sangre (osea rojo), ¿De dónde la obtuvo?. Al mirar el lomo del menor el dragón mayor obtuvo su respuesta, el "salvador", según tenía entendido los de su especie eran capaces de armar muchas cosas raras, como esos nidos que flotan (los barcos) y las garras metálicas que usan para capturar a los dragones (las jaulas), eran creativos, pero usaban esas habilidades para dañar, bueno, este "salvador" utilizo su habilidad de construir para hacerle una cola falsa a Toothless, ahora entendía realmente que esté ser escuálido era bueno, no le daría su confianza, pero mínimo intentaría tolerarlo, por el bien de su relación con el menor, quien parecía estar bastante apegado a él.

«Llegas tarde» Dice el mayor, que empezó a descender. «Ven, te enseñaré que es lo que debes comer... El Escualo puede quedarse, mientras no interfiera»

Toothless siguió a Pólux como un pequeño cachorro, el menor estaba realmente ansioso por aprender más sobre su especie, pero también estaba deseoso de pasar tiempo con el mayor.

Hiccup observó la interacción entre Toothless y el otro dragón, este no mostraba una posición hostil hacia ellos (quizás porque su amigo era el Alfa), esperaba que esto siguiera así, porque no sabría cómo lidiar con un furia nocturna salvaje, y aunque sabía que Toothless lo defendería en caso de que el otro se volviese violento, también sabía que su compañero no querría dañar al otro macho.

El Haddock vio como su amigo reptil descendía al bosque siguiendo al otro dragón, estaba un poco preocupado, pero si Toothless estaba tranquilo por algo debía ser.

Ambos dragones descendieron en un claro de aquel basto bosque, bajo del lomo de Toothless y observó el lugar a detalle, el claro estaba rodeado de pinos y secoyas, bajo uno de esos enormes árboles que parecía que acariciaban el cielo con sus ramas, había una pila de cangrejos de río.

Hiccup hizo una mueca de desagrado cuando el mayor abrió con sus garras al cangrejo y se lo comía, luego le daba algunos a Toothless, mostrándoles el como debía abrirlos.

Toothless intento imitarlo, pero solo acabo destrozando la coraza del cangrejo, aplastando la carne blanda del crustáceo.

¿El furia nocturna le estaba enseñando a Toothless?.

La emoción surcó los ojos verdes del jinete, que tomo algo de distancia de ambos dragones y se sentó en la hierba alta, saco su cuaderno y empezó a hacer anotaciones sobre lo que hacía el comportamiento del dragón, si, ya tenía mucha información sobre los furias nocturna, pero está se limitaba solo a Toothless, así que no estaba demás expandir sus datos sobre la especie, más cuando esté espécimen nuevo tenía comportamientos distintos a los de su amigo escamoso.

¡También tenía que hacer un boceto sobre el furia nocturna! Lo haría el mismo, no es que no quisiera que Fishlegs lo dibujara, pero sabiendo lo complicado que fue para su amigo el dibujar a la furia luminosa, no quería agobiar a su amigo y que la historia volviera a repetirse, así que lo iba a dibujar por si mismo, se preguntaba ¿Cuánto mediría desde la cabeza a la cola? ¿Cuál sería la envergadura de sus alas? ¿Cuan alto era? ¿Cuántos centímetros medirán sus garras? ¿Qué edad tendría? Obviamente era varios años mayor que Toothless, ¿Pero cuántos? ¿10 o 12 años? El dragón se veía viejo, así que obviamente tendría como 36 años o hasta 40 años.

No sabía cuál era la razón, pero Pólux se sintió muy ofendido.

•🖤•

Camuflada entre la vegetación estaba la furia luminosa, que portaba el nombre de Nevaeh ("Heaven" - "Cielo"). Ella observó con odio al otro macho que estaba junto a Toothless, él le había quitado la oportunidad de convertirse en la hembra del Alfa y lo haría pagar por ello.

La hembra extendió sus alas y se alejo volando del lugar, pronto haría que el Alfa volviera a centrar su atención en ella, era cuestión de tiempo, ella era fértil y le daría crías, sabía lo que decían los demás sobre el mestizaje, pero no le importaba en absoluto.

Ella podía darle crías al Alfa, ¿Qué es lo que esté macho salido de la nada podía darle? ABSOLUTAMENTE NADA, porque era un macho y los machos no podían tener crías, no a menos que fuera un portador, pero dudaba que esté dragón lo fuera, era demasiado hosco y feo.

Por ahora tendría que tener paciencia, pronto la emoción que ahora sentía el Alfa por este dragón pasaría y cuando eso sucediera ella estaría ahí para él.

La femenina sonrió, sabiendo que en el futuro ella sería quien se convertiría en la hembra del Alfa, luego, con el poder que obtendría al ser su compañera, podría hacer lo que quisiera y nadie sería capaz de detenerla, no a menos que quisieran sufrir la irá del Alfa.

Tras un par de horas de práctica, Toothless pudo abrir bien el cangrejo y degusto la carne blanda de aquel animal de río, era lo más exquisito que había probado en su vida, era cientos de veces mejor que el pescado, ¿Cómo es que jamás se ocurrió comer cangrejos?... Cierto, vivió su vida en una isla donde los otros dragones comían solo pescado, cuando llegó a ese lugar era apenas una cría que no conocía nada sobre el mundo, no sabía que comer, así que solo imito a los otros dragones con el fin de sobrevivir.

Por años copio a los demás dragones, pero ahora por fin podría ser él mismo, comer lo que se supone que debía comer. 

Feliz, el furia menor empezó a comer los demás cangrejos, con cada uno que comía, sentía que ganaba más y más fuerza.

Luego de comer, Pólux llevo a Toothless al río y le dio una explicación detallada de como es que debía atrapas a los cangrejos, hizo una demostración, atrapando al animal acuático con sus fauces, era como atrapar un pez, solo que se tenía que tener mucho cuidado con las tenazas del animal.

Se apartó un poco y dejo que el menor probará por si mismo, al inicio tendría muchas dificultades, pero él sabría superarlas, aprendía relativamente rápido.

Los ojos del mayor se dirigieron hacia el dos piernas, en las horas que llevaba allí no lo había visto comer nada... ¡Que idiota era! ¡Este dos piernas era aún una cría! ¡No sabía cazar por si mismo! ¡Así que no podría comer por mucha hambre que tuviese!.

La verdad no le agradaban los dos piernas, pero este "salvador" era parte del rebaño de Toothless y también le había construido una cola falsa para que el menor pudiese volar, tenía que ser amable, así que lo que debía hacer ahora era alimentarlo.

Se acercó al escuálido.

Hiccup se quedó estático al percatarse de que el furia mayor estaba ahora frente a él, se había distraído dibujando al ejemplar y no se percató de que esté se había acercado tanto.

—H-hola, grandote... No soy peligroso— El vikingo levanto ambas manos para mostrarle al dragón que no tenía ningún arma. —¿Ves?—

El dragón empezó a hacer sonidos extraños, como si estuviera por devolver su estómago.

Pronto se escuchó un sonido de alguien escupiendo y sobre las piernas de Hiccup cayó un pedazo todo babeado de cangrejo.

Hiccup observó con repulsión el cangrejo y luego miro al dragón mayor, este miro el cangrejo a medio digerir y luego miro al vikingo a los ojos.

Le decía que lo comiera.

El Haddock sentía que iba a desfallecer, la historia volvía a repetirse...

¡No quería comer algo regurgitado!... No otra vez.

Aún cuando habían pasado años desde aquella primera interacción con Toothless donde esté le regurgito un pedazo del pescado que le había dado, aún podía sentir el desagradable sabor en la punta de su lengua y la nauseabunda sensación que tuvo al tragarlo.

Ahora este dragón le estaba compartiendo su alimento, de una manera muy desagradable, pero le estaba compartiendo comida y eso era un progreso, por muy asqueroso que fuera.

Los ojos del Haddock estaban fijos en el trozo de carne de cangrejo, que estaba medio digerido y cubierto de baba.

El mayor soltó un gruñido, indicándole que comiera.

Hiccup agarro el trozo de carne con las manos temblorosas, tocar aquella masa carnosa era como estar tocando una babosa o un caracol. 

Lo levanto y lo acerco a su boca.

¿Realmente iba a hacerlo?.