Itachi caminaba con fastidio, estaba cansado, sólo quería regresar a casa, trabajar en sus pendientes en el clan y descansar, tronó su cuello con cansancio, habían detenido a un cartel de tráfico de drogas en el barrio rojo, sacar a todos esos repugnantes delincuentes violando a chicas en casas de seguridad, lo fastidio -linda, vamos cariño, acepta una cita con nosotros -el azabache giró su mirada con curiosidad mientras caminaba -no me interesa, vete -abrió sus ojos con sorpresa al escuchar una voz conocida, se acercó lentamente -eres bastante fría cariño, no te habíamos visto antes ¿de dónde vienes? es imposible que una belleza como tú haya pasado de nuestra vista -Naruto levantó su mano parando su discurso, afiló su mirada -dije que no me interesas, aléjate de mí y vete, demonios -el chico apretó el ceño -no lo haré, me gustas demasiado, queremos una cita contigo ahora mismo -el Uzumaki suspiró con fastidio, levantó ligeramente su dedo, tocó el pecho del mayor, sonrió lindo, su mirada de inmediato se hizo afilada y fría, su mano se hizo puño -dije que no me interesas maldito idiota -el chico abrió sus ojos con terror al sentir un fuerte golpe en su quijada, salió volando con una fuerza impresionante hacia el muro dejándolo caer desmayado, otros dos chicos corrieron aterrados lejos del lugar.

-¿Qué fue eso? -Naruto se sonrojó avergonzado al escuchar la voz de Itachi, mordió sus labios con vergüenza -no dejaban de molestar ttebayo -rascó su nuca, el Uchiha negó -¿hablaba de cómo hiciste eso? ¿creí que no usabas chakra por tu embarazo? -Naruto hizo una "o" con su boquita haciendo sonreír al mayor -Ero-sennin era insistente en trabajar en mi fuerza física -levantó sus hombros restando importancia, sonrió con emoción levantando las bolsas en sus manos -que bueno que te veo ¿tal vez quisieras comer esto conmigo? -Itachi vio las bolsas con duda, sus ojos se hicieron grandes al reconocer -creo que subiré de peso contigo -ambos sonrieron con diversión -un poquito no hace daño, este bebé tiene hambre -el Uchiha asintió, caminaron con calma al parque cerca del lugar, compartieron los dulces en una banca -cuéntame ¿cómo fue que comenzó a entrenarte? -Naruto sonrió divertido -el bastardo no quería, dijo que debía conseguirle si quería que me entrenara, una fresca, jugosa y con curvas, creí que era una sandía y se la conseguí -Itachi escuchaba con emoción sus historias, muchas eran divertidas.

….

Naruto estaba recargado en un árbol del campo de entrenamiento uno que el Hokage le había permitido usar, veía el atardecer con añoranza, recordaba a su pareja con amor, quería tenerlo a su lado, lo extrañaba demasiado, no había un momento del día donde su recuerdo no llegara a su mente y a su corazón, le dolía, la angustia de no saber si estaba vivo, de estar tan lejos, lo amaba demasiado, sintió a alguien a su lado, abrió los ojos con sorpresa -tienes la guardia baja ¿te encuentras bien? -el Uzumaki levantó su mirada viendo al Uchiha con su máscara anbu, lo vio colocarla junto a su cadera y sentarse a su lado, negó lentamente -¿hubiera sido egoísta pedir que huyeramos juntos? -

Itachi lo escuchó con cuidado, sabía que se refería a su alter de otra dimensión -si Madara existe, lo más probable es que ese Itachi haya pensado que los seguiría a la dimensión que fueran, tal vez pensó que era un peligro para ese mundo -Naruto sonrió quedito -son tan diferentes en su personalidad, pero ese tipo de pensamientos los hacen bastante parecidos -sonrió divertido -el Uchiha sonrió ligero -te traje algo -el mayor sacó una banderilla de dulces, el Uzumaki sonrió con emoción, afiló su mirada -te comiste el resto ¿no es así?-

Itachi sonrió quedito con diversión -cómela antes de que me arrepienta -Naruto comió los dulces con diversión -ya se te empieza a notar el embarazo -el pequeño asintió -los embarazos de donceles son de cinco a seis meses, por eso te dije que en cuatro meses me aliviaba, supongo quedan tres, llevo un mes aquí -suspiró con remordimiento y dolor. Itachi lo vio con cuidado, levantó su mano, sin dudarlo golpeó suavemente su frente en un poke, Naruto abrió sus gemas bastante recordando las palabras de su Itachi, "para mí esto es una muestra de cariño y aprecio, sólo lo he hecho con mi hermano, significa que eres especial para mí", parpadeó con duda, sonrió, giró su mirada al atardecer, tal vez simplemente le tenía lástima por su situación, tal vez sólo lo veía como un amigo, recordó que no le gustaban los chicos al Uchiha a su lado, suspiró con cansancio, recargó su barbilla en sus rodillas recordando a su hombre. Itachi lo veía con total descaro, no sabía porqué había hecho ese movimiento, el poke era algo especial para él, tomó la punta de su cabello, la jugó con sus dedos con ansiedad observando al chico a su lado, la luz del sol bañaba por completo su rostro iluminando sus enormes gemas, se veía lindo para él, sintió su corazón latir con fuerza, suspiró un poco al recordar la situación, mordió sus labios con duda y ansiedad.