Capítulo 25. Bienvenidos a Italia


Volaban, así es, Atsushi y Toru llevaban gafas de sol oscuras, más negras que el cabello de Akutagawa o como dijo Toru "que su corazón"

¿Como? Bueno, Toru era una persona que amaba gastar dinero, y Sousuke, amaba hacer negocios. ¿El permiso? Atsushi decidió pedir perdón en cuanto regrese y ¿la visa? Sousuke movió sus influencias. ¿El celular de Atsushi? También, lo mismo

Si sabían hacer algo bien era resolver problemas.

El avión aterrizó en Milan, Atsushi tenía bien sujeto a Toru, era su primera vez fuera de Japón, lo cual estaba nervioso — Atsu, creo que es mala idea que te aferres a Toru si quieres seguridad

— es un loco, pero se que nada me pasará — exclamó Atsushi

— ooun, tan lindo — mencionó sonriente — pero Sousuke tiene razón, aquí la mafia italiana busca matarme como al pan de cada día

— no pasará — dijo Ryunosuke serio — por que yo estoy aquí

Toru se soltó a la risas— si, si All Mitgh

— Toru, deja a mi novio

— tu novio es molestable

— y tu un patan — le añadió Ryunosuke

— aaash como sea

— ¡Toru! ¡Querido Toru! Sousuke, regresaron

Atsushi y Ryunosuke vieron aquellos asombrados, habían bajado de un auto estilo jeep, un par de jóvenes.

Un rubio de ojos azules, y el otro de cabellos azules y ojos castaños. — ¿Da-Dazai-san? — preguntaron Atsushi y Ryunosuke

— no, el es Samu — sonrió Toru, es como lo qué pasó con ustedes, cuando vi a Dazai-san creí que era Samu

— me mencionaste te ellos — dijo Samu — pero es sorprendente verlos en vivo, es un placer, mi nombre es Samu Ai

— "Ai"?— preguntaron ambos confundidos

— mi amado Samu está listo para repartir amor a todos — mencionó el de cabellos azules — lastima que a cada paso que da la muerte lo acecha, es un milagro que no ha muerto

— por ello agradezco al todo poderoso por dejarme vivir un día más a tu lado, Jury — añadió el rubio tomando sus manos

— ¿Jury?

— se llama Juryoku — mencionó Sousuke — a Samu le gusta decirle en diminutivo

— originalmente se llamaba Petrus pero la autora se quejó por que cada que escribía algo de él se le antojaba beber. Ahora por eso se llama Juryoku — sonrió Toru

— ¿autora?

— no le hagan caso a Toru, a veces habla como si alguien nos controlara

— aaay no saben nada — se quejó Toru

— Yo se que mi bebé quiere ir a casa, vamos chicos, deben estar agitados por el vuelo.

— claro, gracias — sonrió Atsushi

Así fue como Juryoku había comenzando a conducir, a su lado, Samu, Toru iba abrazando a Atsushi en los asientos de en medio mientras Ryunosuke y Sousuke miraban por la ventana en los asientos de atrás — entonces, Toru, y ¿Atsushi verdad?

— oh si

— Toru me dijo que también tienes un tigre por habilidad, te encantará nuestro hogar

— vivimos juntos — añadió Toru

— por seguridad, economía y ademas, mi amado Samu necesita protección constante

— mi momento favorito del día es poder hacer Yoga con Sousuke — sonrió Samu

Atsushi les sonrió — son tan diferente y relajados, este lugar es asombroso

— espera a ver mi casa Atsu, te encantará

Juryoku miró por el retrovisor — ¿y tu pequeño compañero?

— el es Ryunosuke— dijo Sousuke — no da confianza en seguida, denle tiempo ¿si?

— de acuerdo, estamos para servirte Ryunosuke

Samu lo miró — pídeme lo que desees estaré más que complacido de tener tu atención Ryunosuke-san

Ryunosuke solo trago saliva y siguió viendo a la ventana, Toru se acercó al oído de Atsushi y susurró — ¿Que le pasa tan de repente a tu novio?

— quizá está nervioso por Samu — respondió

— ¿por que?

— Ryu admira mucho a Dazai-san, en verdad mucho, pero muuuuucho

— Jooooooh.... — sonrió malicioso Toru

— no Toru, no seas malo

— ¿picaca?

— no

— Aaaah... picaca...

— bien, picaca

Toru abrazó a Atsushi y ambos rieron.

Juryoku estacionó el auto, Toru bajo corriendo jalando a Atsushi.

El lugar era tan verde como una sabrosa manzana, habían viñedos a lo lejos, falta poco el decir que era un enorme terreno, la casa, una grande y espaciosa, color amarillo, fresca y amplia. Toru corrió la puerta de cristal — BUBU ESTOY AQUÍ — dijo alegre y un enorme perro llegó a él. Salto directo a Toru tirándolo, luego de lamer su cara comenzó a oler a Atsushi, en cuanto termino también le brinco y lamió

— ¡aaah! — gritó Atsushi al ser derrumbado.

Ryunosuke quien bajaba las maletas con Sousuke fue a ver qué pasaba, su rostro se llenó de asco a ver a tu tigre debajo de un perro — no, no, oh no, no, no, no — expreso, Rashomon llegó tomando al albino de los hombros pero el perro lo tomó de su pantalón, comenzaron a tirar — suéltalo animal! — se quejó pero el perro solo gruñó

— ayúdame, Toru — pidió sosteniendo su pantalón pero Toru estaba muriendo de la risa en el suelo.

Samu llegó junto con Juryoku, Bubu miró a Samu y comenzó a ladrar — oooh Bubu, no ladres, yo te amo — decía Samu intentando ir por el perro pero este solo se fue con Toru — Bubu ¿cuanto tiempo me odiaras?

— eso es algo casi imposible — mencionó Sousuke

— esa cosa tomó a mi gato — se quejó Ryunosuke

— no soy un gato — se quejó Atsushi mientras Toru se le ponía encima

— déjame morder tu cuello y vemos si no te quedas quieto

Rashomon jalo a Atsushi y Ryunosuke lo abrazó — suéltalo alimaña de gato callejero. Jinko es como un persa a tu lado

— soy un tigre — se quejó Atsushi mientras Toru reía

— Muy bien chicos, vamos a acomodarnos

— Atsu — le llamó Toru tomándolo de su brazo — dormirás en la habitación de al lado. Quisiera dormir contigo pero Sousuke y yo tenemos

— ya entendí

— Toru, le avisamos a tus padres que estás bien — mencionó Samu

Ryunosuke miró a Atsushi, este estaba sorprendido y con mirada nostálgica — ¿Dijeron algo? — preguntó Toru

— solo... bueno

— preguntaron cuando desapareciste — terminó Juryoku

— me imagine — añadió Toru y le sonrió a Atsushi — no te preocupes, nos unos científicos muy ocupados, así que no tienen memoria para un hijo — tomó su mano — vamos, te enseñaré tu habitación

— haré un nutritivo almuerzo — dijo Samu

— déjame ayudarte, no vayas a cortarte

— Juryoku ¿escucharás predica conmigo mientras cocino?

— no me queda de otra — suspiró cansado mientras iban a la cocina

Ryunosuke miró a Sousuke — ¿y yo donde dormiré?

— ¿como que donde? — cuestionó y Ryunosuke subió sus hombros — ¿pensabas no dormir con Atsushi?

— ni siquiera lo pensé

— esto es como su luna de miel

Toru se asomó desde el segundo piso — oh no, no habrá luna de miel sin boda — tomó al albino — Atsu, ven, buscaremos unos vestidos de novia

— ¡¿e-eh?!

Ryunosuke palmeó su rostro — este lugar es de locos — se quejó.

Sousuke había ido con el par de tigres — ¡necesito verlos con vestidos! — gritaba Sousuke intentó abrir la puerta

— no seas un puerco amor, espera a la noche — decía Toru desde el otro lado de la puerta

Iban a ser unas largas y raras vacaciones

...

¿Dudas?
¿Preguntas?
De una vez

¡Gracias por leer!

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top