Talina

Mire la fotografía para luego mirar la casa gire para ver a William quien seguía sin estar de acuerdo con este plan pero aún con ello tenía su apoyo.

—¿Como lograste que tu hermana te diera permiso de venir aquí?

—Bueno realmente no me dio permiso de estar en este lugar exactamente.

—Talina, ¿que le dijiste a tu hermana?

—Qué estaría con Emily, por supuesto para que mi plan fuese un éxito primero le tuve que decirle a Emily sobre mi plan.

—¿Y ella estuvo de acuerdo en esto?

—Bueno, la verdad es que solo le dije que quería que me ayudara a ocultar el hecho de que quiero pasar tiempo contigo a solas.

—¿Y te creyó eso?

—No, entonces le tuve que decir que en realidad quería tener sexo contigo.

—¿Que?

—Entonces estuvo de acuerdo en la mentira pero si no quieres que sea mentira podemos cambiar eso.

—¿Como puede mentir así?

—No es mentir solo es ocultar la verdad.

—¿Acaso también me ocultas cosas a mi tambien?

Guarde silencio por un momento ya le había dicho sobre el matrimonio de mi hermana más o menos pero oculte muchas cosas de mi pasado cosas que no considero revelante.

—Más o menos. Si resolvemos esto prometo contarte todo lo que se.

Me acerque a la casa para ir a tocar el timbre era un tanto extraño estar en este lugar que parecía ser la casa de mi madre, según mi hermana ella era huérfana pero con tantas cosas que han salido a la verdad ya ni se en que creer, la puerta se abrió y mi mirada se cruzó con la de una mujer mayor que me miró de pies a cabeza le sonreí y cuando extendí mi mano para saludar ella se desmayo, literalmente lo hizo sin más.

—Señora, ¿esta bien? —pregunté preocupada mientras me acercaba con la intención de ayudarle pero me detuve al escuchar como alguien le llamaba—. Juro que no hice nada.

Mencioné al hombre que se acercó para ayudar a la mujer el giro a verme un tanto sorprendido.

—¿Marelyn?

—Si, señor.

—¿Que sucede aquí? Y... —una mujer apareció y me miró yo retrocedí lentamente al sentirme algo presionada creo que muchas me estaban mirando con sorpresa.

—Creo que si llegamos al lugar correcto —mire a William quien se había colocado frente a mi con protección como si esas personas me fuesen a hacer daño.

Voy a admitirlo es algo incomodo el ser consiente de que la persona a la cual le di una sorpresa tan grande que se desmayo es a mi abuela inexistente y quien recibió otro gran susto es mi tío y su esposa quienes también pensé que eran inexistente, mire a William quien también se veía algo incómodo por la situación luego mire a mi tío quien estaba sentado frente a nosotros después de que nos invitó a pasar y tomar asiento no a dicho nada más.

—No sabía que mamá tenía un hermano, bueno la verdad que no se muchas cosas de ella.

Él me miró y yo volví a tomar un sorbo vaya que su mirada era tan pesada, escuche soltar una breve risa.

—Eres igual a tu madre.

—Me lo dicen mucho en especial mi hermana. 

—Entonces tengo en realidad dos sobrinas, tu madre ella... ¿Esta bien?

Preguntó pero yo negué.

—Murió cuando yo era muy pequeña.

El asintió miró hacia la habitación donde se encontraba mi abuela desmayada.

—¿Que le paso?

—Enfermo pero irónicamente murió de un infarto... Sabe se ve bastante confundido y la verdad es que yo también, tengo un sin fin de preguntas, mi madre al parecer estaba comprometida con alguien mas pero bueno obviamente no se caso con él —busque entre mis cosas para sacar una fotografía de mi padre la cual se la extendí —este hombre, ¿lo conoce?

Mi tío tomo la fotografía pero negó.

—Mi madre, cuando escapó, ¿nunca dio un por qué?

—Aunque Marelyn era una persona muy alegre era alguien cerrada ante sus emociones, sinceramente nunca pensé que tuviera algún problema o motivo para irse, era feliz dando clases ni siquiera tenía problemas con su prometido... Recuerdo el día que se fue, dijo que iría a la casa del campo para pintar unos nuevos cuadros pero ni siquiera llegó a su destino, es como si la tierra se la hubiera tragado viva, nunca supimos nada de ella—mi tío miró la fotografía para verme —este hombre, ¿es tu padre?

—Biologicamente si... De acuerdo con las palabras de mi hermana ellos dos estaban muy enamorados y no tenían problemas pero sabe algo cuando ella falleció las cosas se volvieron difíciles, se volvió un alcohólico violento, incluso bueno trató de tocarnos más de una vez... No entiendo, si tenía una buena vida, ¿por qué se fue con alguien como él? ¿No hay nadie que pudiera darme alguna pista?

Pregunté pero vi su mirada con furia y cierto lamento.

—¿Te hizo daño? Ese hombre...

—Estoy bien la verdad es que la mayoría de los golpes se lo llevo mi hermano aunque eso no suena bien pero ella se caso con un buen hombre, además él ya está muerto.

Mi tío me miró luego a William.

—¿Como fue que nos encontraste si ella nunca contó nada?

—Bueno el mundo es más pequeño de lo que parece, la madre de mi novio resultó ser la mejor amiga de mi madre.

—Entonces debes ser hijo de Martha, vaya que el mundo sí resultó ser pequeño... Escucha Talina ahora mismo creo que todos estamos muy sorprendidos—miró hacia la puerta de la habitación para volver a verme—¿que tal si vuelven mañana? Prometo responder a todas las preguntas preguntas que tengas claro supongan do que halla respuesta.

—De acuerdo.

Ambos nos despedimos para poder regresar al hotel me alegraba mucho haber dicho que estaría varios días con Emili de lo contrario la preocupación sobre una nueva mentira me habría invadido.

—Quitando el hecho de que hice desmayar a mi abuela creo que las cosas salieron mejor de lo esperado, sinceramente creo que las cosas hubieran salido mejor si... ¿Que tienes?

—¿Por qué siempre me ocultas todo?

—¿De qué hablas?

—Me refiero al hecho de que literalmente no se nada de ti, ¿Por qué nunca me dijiste nada sobre tu padre?

—No es importante además recuerdo haber mencionado algo al respecto en la biblioteca.

—No pensé que fuese e enserio, nunca se puede saber cuando bromeas o no Talina.

—¿Por qué demonios bromearia de esa manera?

—Porque siempre lo haces, buscas el chiste a todo.

—Oh disculpa no sabia que te debía una explicación a cada detalle de mi vida.

—No pero al menos me hubiera gustado saber un poco más sobre ti y no tener que enterrarse solo así.

—¿Como demonios quería que te lo contará? Dime, espera ya se, hey William que crees en mi infancia mi padre alcohólico me golpeo y al desmayarme trato de violarme pero mi hermana lo detuvo y gracias a ello le rompió un brazo, desperté solo con ropa interior mientras veía a mi hermana cubierta de moretones y sangre mientras su brazo está del lado equivocado... Dime, ¡¿como demonios querías que te lo dijera!?

Ni siquiera me di cuenta en que momento las lágrimas comenzaron a brotar solo lleve mis manos para cubrir mi rostro no quería que me viera de esta manera, sentí como se acercó para abrazarme.

—Perdón no quería revivir malos recuerdos.

—Pues eso hiciste—le reclame entre llantos y lo escuche soltar una pequeña risa mientras acariciaba mi cabello.

—Soy alguien egoísta Talina, desde el día en que te vi saltar por la ventana llamaste mi atención y solo pensé en que quería conocerte, ese día que le quitaste los zapatos a tu hija empuje a mi amigo para que fuese él que se acercara primero porque no quería que pensaras que era un raro y cuando me atreví a hablarte por primera vez en la biblioteca me sentí como un tonto cuando solo me miraste sin ningún interés pensé en rendirme pero cuando ese día te vi taclear a un jugador como una simple bolsa pensé que eras alguien realmente grandiosa.

—Que gustos tan raros tienes.

—Tal vez pero no me arrepiento —sentí como rompió el abrazo tomo mis manos para quitarlas de mi rostro y mirarme a la cara—quiero estar a tu lado por mucho tiempo... Quiero ser alguien egoísta y ser la persona a la cual busques en tus días tristes, a la que llames en tus locuras. Quiero ser la persona a la que mires siempre.

—Eso sono tan posesivo.

Aquello lo hizo reír.

—Tal vez lo sea... No soy ese chico lindo que piensas que soy.

Le mire con una media sonrisa para volver a abrazarlo respirar el aroma de su perfume me era un deleite me separe para mirarlo.

—Esta bien, te diré de ahora en adelante todo lo que pienso y la verdad es que siempre te miro, si no fuese así no estarías acompañándome ahora, además lo que le dije a Emily no era del todo mentira... Realmente quiero estar contigo de una manera íntima pero no sabia como decirlo ademas no parecías muy feliz estos últimos días.

El me miró en silencio un tanto sorprendido yo me aleje un tanto avergonzada.

—Pero entiendo si no quieres... Yo, bueno, ya no se que decir creo que iré a tomar una ducha, no se.

William tomo mi mano me acerco a él lo cual me sorprendió le mire y sentí sus manos sobre mi cintura lo cual me hizo sonreír me acerque a él para besarnos, caminamos lentamente hacia atrás para caer en la cama sentí como mi cabeza golpeo la suya lo cual me hizo reír.

—Perdón, soy nueva en esto.

—Yo también lo soy, supongo que podemos aprender juntos.

—Solo espero que esto no termine como cuando estudiamos juntos.

Aquello lo hizo reír.

—Ya veremos.

Se acercó para besar nuevamente mis labios yo me abrace a su cuerpo sintiendo un poco de nerviosismo por esta nueva experiencia pero cuando William besaba mi cuello produciendo cosquillas haciéndome reír olvidaba por completo todo aquel nerviosismo, podía notar que sus manos temblaban un poco al tocarme y aquello me hacía sonreír, me alegraba no ser la única nerviosa en esta nueva experiencia.

—Wow, esto no es para nada a como cuando estudiamos, tienes un gran desempeño —lo escuche reír, sentí como se detuvo de peinar mi cabello para abrazarme—. Ya no volveré a juzgar a mi hermana por encerrarse con Eliam, creí que incluso yo empezaré a buscar excusas para quedarme a solas contigo.

—Será interesante verte intentarlo, con mi gran familia siempre estando al pendiente de todo en casa y con el señor Steller siguiendote de cerca.

—Soy una genio y creeme que si pude llegar hasta acá sin que se dieran cuenta puedo lograr lo que sea—me levante un poco para colocarme sobre su pecho—ahora creo que ya hablamos demacrado, hay que hacerlo otra vez.

William soltó una risa note el enorme sonrojo en su mirada para luego negar.

—No tenemos tiempo que perder además tu mismo dijiste que te encante desde la primera vez que me vistes, ya es demasiado tarde para retractate, me elegiste y por el momento no hay devolución.

William me abrazo nos hizo girar para quedar ahora él sobre mi cuerpo.

—Jamas podría arrepentirme de estar a tu lado.