La sociedad, siempre había un balance entre omega, beta y alfa. En el mundo, donde los omegas eran pocos y los alfas eran muchos, el segundo genero era importante en el momento de querer hacer una familia o para hacer negocios, en un mundo donde los omegas dominantes son los pilares de todo, los alfas buscaban conquistarlos sin dudar, siempre era una guerra por uno pero el mundo estaba listo para eso y más.

Japón, ciudad de Yokohama.

La universidad Y, era prestigiosa por excelentes alumnos, entre ellos, como debía ser en cada serie, película, incluso en la vida real, había un grupo de chicos populares: Osamu Dazai, alfa de tercer año. Nakahara Chuuya, omega dominante de tercer año. Akutagawa Ryunosuke de segundo año, alfa recesivo. Nakajima Atsushi de primer año, omega dominante.

Akutagawa era un chico solitario que pasaba sus días en la biblioteca, adoraba ser el primero en su clase, y enorgullecer a su amigo y admiración, Dazai. Quienes eran familia política.

Esa tarde, en la cafetería, almorzaban los tres juntos, - en serio te lo digo – decía Chuuya – ese chico es impresionante

-          Nunca he estado cerca de un omega dominante además de ti – respondió Dazai

-          En el centro de omegas dominante se portó todo woow, me imagino que es por su padre

-          ¿Quién es su padre?

-          Shibusawa Tatsuhiko

-          Es el gran magnate de joyería ¿no? Incluso escuche que los proveedores de cualquier artículo, así sea una vasija hasta algún nuevo diseño de modas, se pelean por sus joyas

-          Si, es muy rico y famoso, y su hijo no se quedo atrás, ya que hable con el es un chico bastante amable, pero parece igual bastante mimado

-          Me imagino, debe de viajar a cualquier continente cada fin de semana solo por capricho

La pareja miro al menor, se había mantenido callado – Akutagawa

-          ¿si Dazai-san?

-          ¿no vas a chismear?

-          Los escucho – respondió – no tengo nada que decir, mi familia solo tiene farmacias. Además, ¿Por qué me fijaría en un omega como ese chico Nakajima?

Entonces, pudieron ver a los alfas de la cafetería movilizarse, todos corrían a la entrada, chicos, chicas, todos querían un poco de él. Atsushi había aparecido – woow sí que es bonito – dijo Dazai

Claro, Chuuya no se preocupaba, él y Osamu tenían una unión ya, así que no se interesaba, pero incluso Chuuya lo sabía, Atsushi era un chico bonito.

A pesar de la multitud a su alrededor, Atsushi los ignoro a todos, y solo busco lo que iba a buscar, claro, sonrió al verlo y se acercó amablemente – Chuuya-san – le sonrió

-          El pequeño Atsushi ¿Qué te trae por la cafetería? – pregunto

Los alumnos los miraban como una novena maravilla, Chuuya era un omega sexy, y Atsushi por su lado uno tierno, juntos eran una explosión a la vista de todos.

-          Quería agradecerte tu ayuda en el comité de omegas, llevo dos días buscándote. Eres un chico escapista

-          Bueno, hay que trabajar, y la verdad suelo huir de uno que otro alfa

-          Lo sé, son... algo persistentes ¿no? Ah – Atsushi busco en su bolso, saco una caja y sonrió – por favor, acepta mi agradecimiento Chuuya

Chuuya lo miro, lo tomo y abrió, estaba asombrado totalmente, era una cadena para su sombrero, de oro puro con trozos de diamantes. Al chico miro al perloso una vez más, este sonreía – en verdad, si no fuera por ti hubiera ido todo mal en ese lugar. Gracias

Atsushi iba a retirarse, cuando un alfa se acerco chocando con él, tomo sus manos fuertemente – por favor, sal conmigo – pidió aquel chico. Atsushi hizo mueca – te haré feliz, lo juro.

Los ojos de Atsushi habían cambiado, tiro de sus brazos para zafarse, ese era el lado dominante, un tigre. – no vuelvas a tocarme con tus sucias manos a olor de basura – expreso serio y molesto

Atsushi se retiró, Dazai miro a Chuuya – parece que hay nuevo rey en la escuela

-          Eso lo sé desde que ter marque, tonto – respondió Chuuya

-          Que chico, por lo menos Chuuya se ve enano y enojo, pero Atsushi se ve de woow

-          Todo un tigre – menciono Akutagawa sorprendiendo a los otros dos chicos

-          ¿ah sí? – pregunto Dazai burlón

-          Umh – respondió asertivo – como un Jinko

Los mayores lo sabían, Akutagawa nunca se interesaba por algo que no le dijera Dazai, pero esta vez, era diferente.

Unos días después, Chuuya estaba en una cafetería fuera de la universidad, se encontró con Atsushi nuevamente, al parecer el chico se veía incomodo, pero dócil. Chuuya pudo imaginarlo, debió ser una cita a ciegas, se acercó generosamente – Atsushi, que sorpresa encontrarte aquí – menciono - ¿no íbamos a hacer un proyecto? Aun es temprano, pero pasaba a comprar café para ello

-          Chuuya... - Atsushi sonrió – sí, tienes toda la razón. – miro al chico frente a él – lo siento, pero tu sabes, te dije que mi agenda era apretada, sigo estudiando

-          Lo comprendo, pensé que era una excusa, me alegra saber que estudias arduamente. ¿nos vemos otro día?

-          Claro, mándame mensaje

Atsushi se levantó, salió de allí con Chuuya a su lado y suspiro – gracias, no podía rechazarlo por que papá lo llamo primero

-          Entiendo, no te preocupes. Me paso lo mismo hasta que conocí a mi novio

-          ¿en serio?

-          Si, cuando te enamores podrás saltarte todo esto

-          Papá dice que puedo enamorarme de alguna cita a ciegas

-          Podría pasar, pero es difícil... - menciono – oye, pero en serio quería café ¿vamos a otro lugar?

-          Chuuya eres un ángel, si por favor. Yo invito

Ambos chicos fueron a otra cafetería, ligeramente lejana, Chuuya quien iba a verse con Dazai tuvo que mandarle un mensaje para avisarle mientras Atsushi hacia el pedido. El joven de cabello perloso llego con Chuuya de nuevo – en serio, gracias

-          Pensé que eras un chico bastante asertivo

-          Si, pero te digo, mi papá quiere que salga con él y lo conozca, pero no me interesa, huele a éter

-          Que fuerte

-          Lo sé, pero los padres de él igual tienen empresas, como si no pudiera hacer algo yo mismo

-          Vaya, pensé que eras un niño mimado

-          ¿perdón? Mi papi si me compra de todo, pero no soy inhumano, siempre me da y compra todo – menciono – nunca he tenido que pedir nada, así que realmente no he tenido caprichos

-          Entonces... ¿nunca has pedido nada?

-          No, todo lo he tenido, pero no es como que lo quisiera – menciono - ¿en serio eso piensan de mí?

-          Bueno, si... la mayoría, disculpa

-          Aah – suspiro – está bien, supongo que es normal al ser hijo de mi papá ¿no?

-          Eres buen chico, disculpa por juzgarte

-          Nah, está bien – suspiro – ahora solo quiero un rico café y

-          Chuuya ~ - le llamo el castaño alegre, entonces lo vieron - ¿eh? Nakajima Atsushi-kun – pronuncio entre sorprendido y preocupado

-          Oye, no seas grosero – se quejó Chuuya

-          Pero dijiste que ibas a estar con un amigo, por eso salí corriendo

-          Umh... - Atsushi se levantó – iré por los cafés – menciono – Dazai-san, siéntese

Atsushi fue por el café pedido, Dazai se sentó de inmediato – Chuuya, ¿Por qué estas con el egocéntrico?

-          No es ningún egocéntrico, es un chico educado, deja de ser tan grosero

-          ¿grosero yo? Pero escuche que le rompió la mano a otro alfa, y que le quito el empleo a toda una familia, no puedes ser tu amigo, podría hacer que tus padres pierdan todo, es un chico sin escrúpulos, grosero y mimad

Fue callado con el café frio sobre su cabeza, Atsushi dejo el café caliente sobre la mesa – lamento molestarlos – dijo para retirarse. Chuuya volteo a verlo, Atsushi apenas iba a salir, Chuuya se había levantado y fue justo cuando choco con alguien chico, Akutagawa

-          Dazai-san me abandono y – el choque fue entre la cabeza y su barbilla.

Atsushi tuvo un buen golpe, Akutagawa fue el único que pudo ver sus lágrimas, pero no sabia el por que era. No había sido tan fuerte el golpe – oye, estas

-          Akutagawa, retenlo – dijo Chuuya

Akutagawa apenas tomo su brazo, miro los ojos de Atsushi, filosos y molestos, lo soltó de inmediato y Atsushi se fue, Chuuya intento seguirlo, pero no, había desaparecido.

Regresando al lugar, los chicos en servicio y Akutagawa ayudaban a Dazai a limpiarse – ese malcriado, tonto y grosero

-          El grosero fuiste tú, llegaste diciendo todas esas mentiras, además, lo dijiste en voz alta para que te escuchara, te mereces eso y más

-          Chuuya-san ¿Qué paso? – pregunto Akutagawa

-          Tu amigo fue grosero con el pobre chico, estoy seguro de que debe estar totalmente herido

-          ¿herido? ¿Qué hay de mí? Tengo frio

-          Que imbécil eres.

Atsushi había llegado a su casa nuevamente, grande, alta y llena de joyería, fue hasta su habitación, una habitación grande, vacía, tenía un par de muebles y peluches de camaleones. Tomo uno de ellos, el más grande, color rosa con blanco, tenía un enorme moño rojo en su cuello. Se tiro a la cama y lo abrazo con fuerza – estúpidos alfas – pronuncio antes de sumergirse en la felpa.

Al día siguiente, Chuuya estaba con Dazai y Akutagawa, revisaba sus redes sociales, quería encontrar las de Atsushi para poder encontrarlo, es decir, la escuela era enorme y ni siquiera sabía en que departamento estaba.

-          Aay allí esta ese millonario – se quejo Dazai

Chuuya subió la mirada, pudo ver a Atsushi caminar con su bolso, tenía a unos tres alfas detrás de él y uno que otro a su alrededor queriendo hablar. Fue a ayudarle de inmediato, tomo su mano - ¡Atsushi!

-          ¿eh? Chuuya

El mayor miro a los demás - ¿no les da vergüenza? Todos son mayores, lárguense

Los chicos se fueron, Chuuya miro a Atsushi - ¿estás bien? ¿Por qué no los alejaste?

-          Lo siento, ni siquiera los había notado

-          ¿estás bien?

-          Si, solo un poco constipado – menciono - ¿Qué haces aquí Chuuya?

-          comía con mi ... novio y su amigo

-          Oh, - se inclinó – gracias de nuevo. Debo retirarme

-          Espera – volvió a tomarlo, ahora del hombro – dame tu numero

-          No creo que eso

-          Redes sociales, ¿en que departamento estas? dímelo todo

-          Eem... puedo intercambiar números si gusta, estudio diseño del arte, así que mis redes sociales son para eso así que...

-          Solo intercambiemos

-          Ok

Intercambiaron números, Atsushi siguió su camino y Chuuya volvió con el par de sonsos. – Chuuya ¿Por qué quieres ser amigo del chico que podría acabar con mi familia? Anoche llamaron a la casa y me asuste

-          Eso te mereces por molestarlo – se quejó – no es un chico malo. Déjalo en paz.

Akutagawa los miro y suspiro, así eran siempre ellos.

Más tarde, ese mismo día.

Akutagawa revisaba unos libros en la biblioteca, cuando lo vio, de puntitas y bien estirado buscando tomar el libro un estante más arriba, sus dedos bien estirados y su delgado dedo intentando por lo menos con la uña jalar un poco la pasta para poder alcanzarlo.

Se acerco, 2 centímetros eran, 2 centímetros con los que logro alcanzar esa pasta y jalar el libro, Atsushi primero se molestó, creyó que era otro alfa molesto intentando oler su cuello, pero al voltear, el mayor solo sostenía el libro – aquí tienes – dijo

-          Umh... Gracias – respondió amable

-          No hay de que

Akutagawa se alejó, entonces Atsushi lo miro mejor, no pudo evitar sonrojarse al ver como el mayor simplemente fue a sentarse, guardo silencio y abrió su libro para seguir leyendo. Era la primera vez que un alfa no lo pedía su número, se le insinuaba o insistía en platicar. Su corazón comenzó a latir - ¿eh? ¿taticardia? – se pregunto a si mismo.

Tomo el libro y prefirió irse, lo mejor era ver a un doctor.

...

Aquí tienen su primer estreno, espero lo disfruten mucho, es muy universitario, love, ya saben, conflictos de comunicación y todos revueltos pero me encanta.

Como aquí los omegas son dominantes, no quita el Atsushi amable pero quise sacar ese Atsushi que nos muestran en batallas o injusticias, ese Atsushi que se enoja y que (sin dudar a Akutagawa) se pone al tu por tu.

Gracias por acompañarme de nuevo

¡Gracias por leer!