En la U.A no se hablaba de otra cosa que no fuera la extravagante pareja entre el rubio explosivo y el tierno pecoso de la clase A. Críticas en su mayoría hacia la disfuncional pareja.

Monoma, por ejemplo, aseguraba que Bakugo tenía amenazado al torpe y tímido de Midoriya. O podía ser al revés, ya que Bakugo apenas y soporta estar parado en el mismo lado que el de rizos. Le parecía ilógico que de la nada formaran una relación más allá de la amistad aparentemente inexistente que se tenían.

La ideología de la escuela en general era la misma, exepto por los más allegados a ellos, es decir, sus amigos y compañeros de clase, quienes observaron de primera mano el lento y tedioso cambio en la relación tan deteriorada que esos dos tenían en un principio.

Aprendieron a trabajar juntos. No fue fácil, pero superaron barrera tras barrera, aliviando culpas y sanando viejas heridas.
Recuperaron la amistad perdida, y con el tiempo fueron fortaleciendo el lazo que hoy los une.

Para nadie fue una sorpresa. Creían que esos dos habían empezado a salir desde hace mucho tiempo, solo que no se daban cuenta. No fue hasta que Mina, después de tanta insistencia y correteos de Bakugo por toda la escuela amenazando con volarle la cara; logró "abrirle los ojos" a su explosivo amigo, quién siendo muy varonil —en palabras de Kirishima— decidió pedirle a Izuku formalizar la relación.

El tema seguía siendo de interés aún pasados seis meses de aquello. En el grupo del cenizo a veces salía a flote, y aprovechaban para molestarlo un poco, ¿Por qué no? Después de todo Bakugo nunca les contaba nada de su relación con Midoriya.

Mina por su lado, amante de las parejas y todo lo que involucre sentimientos afectivos, se sentía ofendida por no saber ni "J" de cómo iban esos dos. Solo alimentando sus ansias de chisme por lo que la para nada discreta pareja dejaba ver en público. Basta de eso. Esa noche de fin de semana habían salido los cinco a beber. Bakugo aceptó de mala gana, solo porque Izuku estaba ocupado viendo el maratón de All Might que ha visto como 802 veces en toda su maldita vida, 803 con esta.

—¡Oye, Bakugo! ¿Qué tal las cosas entre Midoriya y tú?

—¿A ti qué te importa extra?

Ni con todas las copas que Mina le hizo tomar pudo adormecerlo lo suficiente como para que se amansara un poco.

—Vamos, somos tus amigos.

—Auto-proclamados.

Mina frunce el entrecejo al ver su plan fallido. Le había dicho a Bakugo que ella pagaría por los dos con el fin que este no escatimara en bebidas, pero haciendo cuentas ya llevaba como más de una hora bebiendo y tres mil pesos en puro alcohol, del cual ella le atribuía dos míseras copas.

—¡No sé cómo alguien tan dulce y tierno como Midoriya te aguanta!— suelta ella por despecho, dolida por no obtener nada de información de la pareja que ella misma había juntado.

Bakugo la mira incrédulo, o quizá sea burla lo que se refleja en esos brillantes ojos escarlata. Ríe con diversión mientras niega una y otra vez.

—¡¿Qué es tan divertido?!— exclama Mina con molestia, haciendo un gesto infantil con sus mejillas.

—Ese bastardo no tiene nada de lindo y tierno— responde calmando su espontáneo ataque de risa.

—Es solo que no lo aceptas, bro. Midoriya es realmente lindo—Se mete Kirishima, quién también estaba algo "alegre".

—¿Lindo? ¡Es un jodido pervertido de mierda! Se oculta detrás de esa carita de niño bueno.

—¿De qué hablas? Eso es imposible, Bakugo. Creo que fuiste tú quien le pegó las malas mañas. Ya venías dañado de fabrica, pero Midoriya es un pancito—apoya Kaminari a su amigo pelirrojo.

—¿Sí? Pues no dirías lo mismo si el viernes en la noche te hubieras encerrado con él a darle uso a todas las mierdas de juguetes sexuales que guarda en su armario.

—¡¿QUÉ?!— Exclaman los cuatro restantes.

—¡¿Entonces por eso faltaste a nuestro entrenamiento de levantamiento de pesas?!— Exclama Kirishima sintiéndose traicionado— ¡¿Dejaste a tu amigo plantado por ir detrás de un culo bonito?! Qué poco varonil de tu parte Bakugo.

Katsuki rueda los ojos. Kirishima es un ebrio muy molesto.

—¿Estuviste cogiendo todo el santo día? ¡El viernes hubo suspensión de labores!— Deduce Mina perdiendo el poco pudor que le queda.

—Deku quería probar ese kit de sadomasoquismo que compró la semana pasada— una sonrisa orgullosa se forma en sus labios al decir aquello, disfrutando quizá de los recuerdos que llegan a su mente.

—Viejo, pobre Midoriya. ¿Cómo es que puede caminar después de estar encerrado contigo y ese montón de objetos de tortura?

—¿Ah?—La mueca de confusión en el rostro de Bakugo descoloca a sus amigos—. Nunca dije que yo fuera el dominante— la declaración deja estupefactos a los presentes, víctimas del mutismo que el shock les provoca.

El tono de llamada de Bakugo rompe el iceberg del ambiente.—¿Ya terminó tu maldito maratón?— Es Midoriya quien llama. La pista anterior no es lo que se los confirma, el rubor y la forma en la que Bakugo se muerde el labio inferior es prueba suficiente. Ríe tenuemente, acentuando el adorable color cereza de sus mejillas, esto no pasa desapercibido por el cuarteto que observa atónito tales reacciones tan atípicas en él. Denki incluso mira el interior de la botella de la que ha estado bebiendo y derrama el resto del líquido en el piso.

Ignorante de aquello, Bakugo ve esa llamada como señal libertadora del engorroso ambiente de bar, y se retira de la barra olvidando ahí a su boquiabierto grupo de amigos, quienes todavía alcanzan a oír mientras se contonea hasta la salida:— Adivina qué: traigo puesta la lencería que tanto que gusta.

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No c de dónde salió esto. Me pareció divertida la idea(¿

Y aprovecho este espacio para decir que:

¡De ahora en adelante todos los DekuKatsu de este perfil están dedicados a: pene_deDeku30cmDKBK

Que no son la gran cosa, es verdad, pero va un pedacito de mi corazón en cada uno, y quiero que tú tengas todas las piezas.