Pov narrativa

Dos jóvenes caminaban por las calles buscando a un joven pelirrojo. Reinaba el silenció entre ellos dos.

-Kyoya, te puedo preguntar algo- al ver Kyoya a Momo muy nerviosa o mejor dicho incomoda, no dudó en responder.

-¿Qué es lo que me quieres preguntar?- aun seguía muy serio, pero le daba curiosidad por el comportamiento de la menor.

-No crees, que alguien nos este siguiendo- al darse cuenta de lo que decía la peli rosa, no dudó en voltear, para checar quien es.

-De hecho, ya me había percatado de eso, no te preocupes ya se quien es- Momo al ver lo serio que estaba, decidió hacerle caso.

Los jóvenes siguieron su camino, pero una cierta persona los observaba, al ver la cercanía de ellos dos, decio irse a un lugar para desahogarse.

Se fue a un lugar para comer y pensar en otra cosa que no fuera la bella joven, que esta teniendo una "cita" con su mejor amigo.

Pasaron unos minutos caminando, el silenció los dominó otra vez, nadie decía ninguna palabra. Kyoya se había artado de tal silenció y habló.

-¿Que pasaría si no encuentras a tu hermano?- se sorprendió la menor al escuchar a Kyoya.

-No tengo la menor idea, pero lo quiero encontrar- fue su única respuesta para seguir reinando el silenció.

El peli verde al notar lo nerviosa que estaba, por una ciudad que no conocía y la gran confianza en encontrar a su hermano mayor.

Al ver todo esto, Kyoya decidió llevarla a un lugar donde se podía divertir y tener un poco de confianza. 

Momo al darse cuenta de que Kyoya la estaba tomando de la mano, no dudó en sonrojarse, toda su cara era de un color rojo.

Pero eso no importaba ahora, al detenerse la peli rosa se dio cuenta de que esta en un zoológico, se sorprendió demasiado que rápidamente abrazo a Kyoya, el no sabia que hacer, era la primera mujer que lo abrazaba.

-Es mi primera vez visitando un parque lleno de animales, gracias Kyoya- muy contenta que estaba, tanto el aun no sabia por que su corazón latía muy rápido al sentir que lo abraza y no lo soltaba.

Siguieron todo el rato tomados de las manos, algunos jóvenes los observaban, ya que Kyoya era muy conocido en la ciudad y a parte era muy raro que el estuviera con una chica.

Para ellos dos no les importaba tal cosa, solo venían a divertirse. De tanto estar caminando y ver cada animal y comentar sus ideas sobre ellos, escucharon por los altavoces que va a ver un show donde podrán acariciar a los leones.

Momo dirigió a Kyoya donde se encontraban los leones.

-Es la primera vez que veo un León de verdad, siempre los había visto en los libros que tengo- le dedicó una sonrisa al mayor y el solo apartaba la mirada para que no lo vea sonrojado.

Pasaron todo el tiempo juntos, para que comience el show, unos minutos después se empezó a llenar de gente, hasta que por fin comenzó.

Ya había comenzado, todo estaba llendo bien, esta que uno de los trabajadores de ahí dijo por altavoz que quien quiere acariciar a un León.

Momo al escuchar rápidamente levantó la mano, al ver el joven le dijo que pasará con su pareja.

Le hicieron caso y bajaron, al llegar le entregaron a la menor unos leones pero era unos bebes, y al mayor le dijeron que podía estar con los leones adultos.

La peli rosa se enamoró de los cachorros, mientras que Kyoya estaba sobreviviendo a los grandes  leonés ya que no lo dejaban.

Terminando el espectáculo a Momo le entregaron un diente de leche que pertenecía a uno de los cachorros.

-¿Que fue lo que te dió ese señor?- se veía los celos que tenía Kyoya, tanto ella solo pudo reír.

-No me dio nada importante, solo agradeció que ayamos participado- aun no le creía a la joven.

Salieon del lugar para encontrar a Gingka, caminaron un buen rato hasta que la peli rosa se canso de tanto caminar.

Kyoya se dio cuenta de que Momo estaba cansada y decidio ir a un arroyo o lago para descansar.

Él se sentó en el césped y con una mano le indicó que se sentará juntó a el.

No dudo en sentarse andaba muy cansada, ninguno de los dos hablaba, el ambiente era incómodo.

-Momo se está haciendo tarde, si no encontramos a Gingka te puedes quedar en mi casa- mirando dónde apenas se formaba el crepúsculo.

-Lo dices, ¡en cerio!- se le formó una sonrisa en su rostro y un color rosa se le a pereció en sus mejillas- espero no encontrar a Gingka- lo dijo susurrando para que el mayor no se de cuenta.

Kyoya se dió vuelta, mirando a la persona que estaba enfrenté de el.

Su mano se estaba ha cercando hacia la cara de la joven, cerro sus ojos con fuerza, hasta que sintió unas cálidas manos en su frente.

Abrió sus ojos cuando sentía sus dedos rozar en su oreja.

-Tienes bellos ojos Momo- aun estaba de frente hacia ella mirándola y no despegaba sus ojos hacia ella.

Estaba demasiada sonrojada, no se podía creer que el mismo Kyoya la observaba figamente.

Sus pensamientos se la estaban comiendo, no sabia que hacer en estos momentos, hasta que escucho una voz muy familiar, solo lo ignoró y siguió en lo suyo,  pero aun se escuchaba la misma voz, gritándole su nombre muy alto para que volteara, Kyoya se hartó de esa voz chillona.

Al voltear ambos vieron que era Gingka, estaba muy enojado, Momo al verlo se pusó muy nerviosa, Kyoya no entendía por que se pone muy nerviosa al ver a su hermano.

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Lo siento demasiado, me fui a Zacatecas por unos familiares y en el lugar donde fuí es un rancho.

Y no hay Internet, fui horrible pero pude terminar el extra y trataré de subir el siguiente capítulo.

Y otra vez les pido lo siento.

Otra cosa más, no tengo la menor idea si los leones bebés se le caen los colmillos y le salen otros.

Si saben me informan si se les cae y aparte si ven letras raras es por mi teclado, esta raro.