El lunes llegó, diecisiete de julio. Edwin salió del hospital junto a su hijo, ahora está junto a su esposa.

Harry no llegaba al departamento a dormir, dormía en el hospital.

El cambio de asistente se realizó, ahora Harry trabajaba al lado del doctor Jones, mientras que Eleanor al lado de Louis.

En esa semana, Evans llegó a Los Ángeles, Louis y él se mantenían la mayoría del tiempo juntos.

Alejandro seguía aprendiendo de Harry, si, también aprendió kárate, el enfermero era el fiel amigo de Harry, entraba a las operaciones con él, lo ayudaba, todo está bien.

El director general le asignó a Harry todas las operaciones, Louis quería ayudarlo, pero el director se lo negó, Jones se ofreció a ayudar, pero también se lo negó, las operaciones las realizaba solo Harry y Alejandro. Algo que extraño mucho a estos dos.

Y Louis... Bueno con él seguían como compañeros de trabajo, hablan o se veían de vez en cuando, Louis trataba de sacar más conversación, pero siempre eran interrumpidos por llamadas.

Melissa le pidió de favor cuidar a la bebé mientras que ella repartía la comida, Harry no protestó, a ser verdad, ya se había encariñado con la bebé.

La operación había llegado, sería ese mismo día, Jay había hablado con ambos chicos, pidiéndole que la hicieran juntos, ellos estuvieron de acuerdo.

—Harry ya abrieron el restaurante italiano ¿Quieres ir?—Preguntó Zayn llegando a la oficina del menor.

—Está bien, en la noche vamos, tengo que ir a una operación.— Zayn asintió, antes que dijeran algo la secretaria entró.

—Doctor, su madrastra acaba de ser ingresada al quirófano con urgencia.—Harry suspiró.

—¿Quién la operará?— Preguntó Zayn.

—El doctor Jones.—Dijo la secretaria.

—Dile que yo lo asistiré.— La mujer asintió y corrió hacia el quirófano— Vengo por ti más tarde.— Harry asintió.

—Esta bien, ahora ve.— Zayn asintió y corrió hacia el quirófano, Harry caminó hacia los vestidores, tomó su ropa quirúrgica, luego de ponerse su ropa, caminó hacia el quirófano, llegó a aquel lugar y ahí estaba Louis lavando sus manos, caminó hacia él.

—¿Estás listo?— Preguntó, Harry asintió lavando sus manos.

—¿Usted está listo?— Preguntó, Louis suspiró.

—Si, Alejandro ayudará también en la operación. — Harry asintió. —Hablaras con la paciente, así ella no pensara mucho que la estamos operando. —

—Está bien. —Terminó de lavarse las manos y entró al quirófano, Louis entró después de él, ambos se arreglaron para la operación, se colocaron sus guantes, batas, mascarillas y todo lo necesario.

Louis suspiró al ver a su madre, si pasaba algo no se lo perdonaría, Harry solo llevo su mirada hacia el.

—Todo saldrá bien, confíe en usted. —Susurró, Louis asintió y caminaron hacia donde estaba su madre. Harry se quedó al lado de Jay, mientras que Louis se preparó para operarla.

—Vamos.— Todos asintieron, la operación comenzó...

—Mira, ahí está la célula temblorosa*¹— Harry llevo su mirada hacia atrás. —Es el núcleo dorso medial del tálamo.*²—

—Es extraño, no puedo sentir nada.—Dijo Jay.

—El cerebro no puede sentir dolor, tranquila.—Dijo Harry.—Es el objetivo.— Louis llevó su mirada hacia la máquina.

—Casi estamos ahí. Habla con la paciente.— 

—¿Cómo se está sintiendo?— Jay sonrió.

—Siento como que mi cabeza está vacía.—

—¿Qué pasa con el temblor de la mano?—Preguntó Louis, Harry llevó su mirada hacia la mano de Jay.

—Es el mismo.— Louis asintió, Harry llevó su mirada hacia Jay, tomó su mano y comenzó a subir y bajar lentamente.

—130 arco, 0 para de brazo en conjunto ¿Verdad?— Preguntó Louis, Harry asintió— Dale 1 voltio de estímulo—

—Si.— Respondió, llevó su mirada hacia la máquina, y presionó el botón.

Todos los doctores y enfermeros (menos Jones y Zayn) estaban observando la operación desde el vitral de los jueces. (También conocida como sala de observación) Mientras que Louis seguía con su mirada atenta a la máquina.

—El temblor sigue siendo el mismo.— Louis asintió.

—¿Está todo bien?—Preguntó Jay con su mirada hacia el techo, comenzó a cerrar y abrir los ojos. —No puedo ver.—

—La visión del paciente esta disminuyendo.— Dijo Alejandro, Louis llevó su mirada hacia la máquina que comenzó a hacer ruido.—La señal es rara.— Harry llevó su mirada hacia atrás.

—Es una hemorragia.—Dijo soltando un suspiro.— Dame la aguja de biopsia.—Alejandro asintió y le pasó la aguja, la introdujo.—Jeringa.—Pidió, Alejandro le pasó el instrumento, Harry llevó su mirada hacia Louis.

—Aún no puedo ver.— Dijo Jay. Mientras tanto los enfermeros que estaban viendo la operación comenzaban a alarmarse.

—Tranquila, hay una hemorragia en el cerebro, su hijo cuidará de ello, no se preocupe.—Jay sonrió.

—Confío en ustedes.—

—La preparación está casi completa.—Dijo Alejandro, la máquina seguía haciendo ruido, la jeringa comenzó a succionar la sangre. La máquina volvió a la normalidad.

—Listo.—

—Puedo ver.— Harry y Louis suspiraron aliviados, Alejandro sonrió.

—¿Ve su mano también?—Preguntó Alejandro. Jay comenzó a levantar su mano, al ver que ya no temblaba sonrió.

—Ya no tiembla.—Dijo entre lágrimas, Harry sonrió. Louis caminó y se colocó al lado del menor.

—Lo logramos.— Ambos sonrieron.

—Sostenga mi mano por un segundo.— Alejandro dejo su mano en el aire y Jay la tomó.—Puede bajar poco a poco su brazo.— Jay bajó poco a poco su brazo.

Se escucharon aplausos, llevaron su mirada hacia arriba encontrándose con todos los doctores de neurocirugía (ahora sí todos), los enfermeros aplaudían, el padre de Louis también aplaudía, igual que Evans, quien salió corriendo.

—¿Cierras el área?— Le preguntó a Harry.

—Sí.— Intercambiaron lugares, Louis sonrió y quedó enfrente de su madre.

—Ya mamá, ya puedes descansar, despertarás en una habitación VIP.— Sonrió.

—Gracias a los tres.—

—No hay de que, duerme.—

Harry terminó de cerrar el área, la paciente se quedó dormida, los enfermeros se la llevaron a la habitación VIP.  Los chicos salieron y quitaron sus batas y todo el implemento, quedándose en filipina.

—¡Lo lograste!— Se escuchó un grito.

Harry vio como Evans corrió hacia Louis y lo abrazó, sonrió levemente.

—Sí, sentía que pasaba algo.—

—No, eso jamás, eres el mejor neurocirujano que conozco.—

—El único.— Se separó un poco del abrazo, sonrió.

—En parte, pero vamos...— Asintió.

Se separaron del abrazo, Harry estaba de pie atrás de ellos, aún sus emociones estaban jugando rudo, negó con la cabeza y salió del quirófano, caminó hacia los vestidores y se cambió la ropa, caminó hacia su oficina.

Luego de unos minutos Zayn llegó a su oficina.

—La operación de tu madrastra salió bien.—Harry suspiró y llevo su mirada hacia sus documentos.

—Siento pena por ellos.—Zayn sonrió.

—No pienses mucho en eso.— No dijeron nada más ya que la enfermera llegó.

—Doctor Styles, se le necesita con urgencia en la recepción.— Harry asintió aún viendo los documentos que estaban en su escritorio, así la enfermera salió de la oficina del rizado.

—¿Ahora que crees que pase?— Preguntó Zayn.

—Por el momento no tengo idea.— Alzó los hombros y guardó los documentos en un cajón.— Vamos — Zayn asintió y salieron de la oficina.

Caminaron hasta la recepción, había miles de guardias y un herido.

—¿Por qué no llamaron a otro doctor?—Le preguntó al doctor Payne.

—No lo sé doctor Malik, Harry tiene más experiencia en esto.—Zayn asintió.

Se acercó al herido.

—No puede acercarse.—Dijo uno de los guardaespaldas, Harry rodó los ojos.

—Idiota, soy doctor solo lo revisaré.— Otro guardaespaldas quedó enfrente de Harry.

—No lo podemos dejarlo pasar.—El rizado suspiró pesadamente.

—¿Quieren que su jefe muera?—Preguntó.

Los guardaespaldas se vieron entre sí y negaron.

—Traigan una camilla, lo llevaremos al quirófano.— Anunció a unos enfermeros, ellos corrieron por la camilla.

El rizado se acercó hasta el enfermo, pero los guardaespaldas se volvieron a poner al lado de Harry.

Uno de los guardaespaldas tomó el hombro de Harry, él frunció el ceño.

—Aléjese de él.—El rizado negó.

—Primero quítame las manos de encina.—Otro de los guardaespaldas colocó su mano en el otro hombro de Harry. —Vuelvo a repetir, quítame las manos de encima. —Los guardaespaldas negaron, Harry asintió.

Nadie sabe en qué momento Harry derribo a los guardaespaldas, los demás que observaban la escena solo guardaban silencio. Los guardaespaldas se dejaron ir con Harry mientras él derribaba a todos, aprender kárate con su madre lo había ayudado en mucho.

—Por eso te trae así Harry ¿Verdad?— Preguntó Liam. 

—Tal vez por eso, es que... Ve su emoción.—Dijo en un suspiró mientras veía como Harry dejaba inconscientes a los guardaespaldas.

—Iré a preparar las camillas para los guardaespaldas.— Louis asintió y sigo viendo a Harry con una sonrisa.

—¿Cuándo le confesarás que aún te interesa?— Preguntó Niall.

—Creo que nunca, sabes que ya me lo advirtió.—Suspiró.

—Si, pero ¿Por qué no te atreves?—Preguntó el rubio.

—Uno, me voy a casar, dos; Harry no me ama, me lo dejó en claro.—

—Termina tu compromiso con Eleanor y empieza algo con Harry, creo que él todavía se interesa por ti.— Louis suspiró y frunció sus labios.

—¿Ahora ya me dejaran atender a su jefe?—Preguntó viendo a los guardaespaldas tirados en el suelo, ellos estuvieron de acuerdo.

Iba a caminar, pero un dolor llegó a su estómago, suspiró y evitó que se notará, llevó su mirada hacia los doctores, ahí estaba Louis.

—Doctor Tomlinson.— El doctor estaba cruzado de brazos.

—Por favor opere al paciente.—Dijo en todo severo, Harry asintió.

Subieron al paciente en la camilla y lo llevaron al quirófano.

Luego de la operación, Harry llegó a la habitación del anterior operado, sus guardaespaldas seguían en revisión.

—Me acabas de dejar sin guardaespaldas.— Dijo el chico de ojos color café.

—Ellos no hicieron caso.—Alzó los hombros y el chico sonrió. —¿Cómo se siente?— Preguntó.

—Tutéame, soy Erick.— El rizado asintió.— ¿Te puedo decir solo Harry?— Preguntó.

—Mientras no levantes cargos por agredir a tus guardias, si.— Erick rio y asintió.

—No levantaré cargos.— El rizado le regaló una sonrisa y asintió.

—Te dejo descansar, tengo que revisar a otros pacientes.— Erick asintió, así Harry salió de la habitación encontrándose al doctor Tomlinson por los pasillos.

—¿Podemos hablar?— Preguntó Louis.

—Si es sobre trabajo sí, en caso que no sea de trabajo espere a mi hora de salida.— Louis asintió.

—Vamos a mi oficina.— El rizado frunció el ceño, pero asintió.

Caminaron hacia la oficina de Louis hasta que llegaron.

Harry iba pensando que tal vez lo sancionarían por derribar a los guardaespaldas.

Entraron a la oficina y Harry se quedó de pie.

—Necesito hablar contigo.— Dijo cerrando la puerta.

—Dígame.—Louis suspiró.

—Te sigo a...— Una persona entró corriendo a la oficina.

—Amor, ya están las invitaciones de nuestra boda.— Eleanor entró, Harry mordió el interior de su mejilla.

—Con permiso, debo ir con unos pacientes.— Louis negó.

—Espera... Puedo explicar...—

—No me interesa.—

—Harry por favor, esto...—

—¿Me quieres dar solo la invitación y así me puedo ir?—

La chica suspiró profundamente y asintió, le entregó la invitación.

—Gracias.— Susurró.

Caminó hacia su oficina y se recostó en su escritorio y así sus recuerdos pasaron por su mente.

—Harry te busca... —Zayn entró a la oficina, pero no termino de hablar ya que Harry seguía ¿dormido? —Harry. —Llamó, el rizado elevó su mirada.

—¿Paso algo?— Dijo aún adormilado.

—Eso te quería preguntar a ti.—El rizado negó.

—No me pasa nada, solamente no dormí bien ayer.— Zayn frunció el ceño, hasta que su mirada llegó a la invitación de la boda.

—Creo que es por esto...—Corrió y tomó la invitación.—...Que estás mal ¿O me equivoco? —Harry suspiró y volvió a negar.

—No quiero tocar ese tema.—Zayn frunció sus labios y asintió —¿Qué venías a decirme? —Preguntó.

—Una mujer de la casa hogar te está buscando.—

—Hazla pasar por favor.—

—¿Ya te van a dar al pequeño?—

—Hasta hace unos días metí la solicitud, tal vez venga a darme esas noticias.— Sonrió.

—Eso es increíble, ahora viene.— Asintió.

Salió corriendo, Harry sonrió, el viernes había enviado una solicitud, pero dijeron que podía tardar demasiado.
Aún así, no perdió las esperanzas.

Una mujer entró a la oficina, la saludó con un estrechón de manos. Tomaron asiento.

—Vengo a darte buenas noticias.— Sonrió.

Sacó unos documentos, frunció el ceño.

—La solicitud esta aprobada, tú decides cuando vas a ver a que niño puedes ayudar.— Asintió.

—¿Puedo ir hoy mismo?—

—Sí, yo después de aquí, me voy a la casa hogar, estaré ahí hasta las seis.—

—Esta bien, yo estaré ahí.—

Le entregó los documentos.

—Bien, te espero allá.—

—Muchas gracias.—

Se despidieron, al abrir la puerta una pequeña corrió a abrazarlo.

—¡Tú!— Lo abrazó.

—Nos vemos en la casa hogar.— Asintió.

Melissa frunció el ceño al escuchar.
La mujer mayor se fue, Darcy ya estaba abrazando a Harry.

—Adelante.— Asintió.

Entraron a la oficina, tomaron asiento.

—Perdón lo indiscreta ¿Adoptaras?—

—Sí adoptaré, iré a ver a que pequeño puedo ayudar más tarde.— Sonrió.

—Esta bien.—

Louis deseaba decirle a Harry que lo amaba, había sido una semana donde apenas se veían o se hablaban, pero como siempre él es necio, intento decirle que lo amaba, pero Eleanor entró a la oficina, luego de ver salir a Harry, suspiró.

—Doctor perdón, vi a mi padre caminar hacia aquí, pensé que era él, voy a hablar con Harry para decirle las cosas.— Louis negó.

—Tranquila, ya le diré yo.—Eleanor asintió.

—Lo siento en serio.—Louis suspiró. —Mi padre dijo que quería adelantar la boda, por eso venía a hablar con usted.—

—¿Cómo que adelantar la boda?—Preguntó.

—Así me dijo, doctor mandemos a la mierda está farsa, se que es mi padre, pero lo he complacido en todo y no me he opuesto a nada, pero esto es mucho, terminemos nuestro falso matrimonio aquí.—Louis suspiró.

—¿Tu padre no cumple amenazas?—Preguntó, Eleanor frunció sus labios.

—No puedo darle una respuesta segura, hay que atreverse, yo tomaré ese riesgo.—

—Está bien, pero que aún no se corra el rumor.—

—Las pruebas las dejé en su escritorio, aunque sea mi padre, lo ayudaré a quitarle el cargo.—

—Gracias.— Eleanor sonrió y asintió.

—Ahora, sea feliz con el doctor Styles.—  Louis sonrió.—Tengo que ir a hablar con alguien. — Asintió.

—Está bien, ve.— Eleanor salió de la oficina, sonrió.

Salió rápido de su oficina, corrió a la de Harry, al llegar llamó a la puerta.

—Adelante.— Autorizó.

—Hola, disculpa ¿Puedo hablar contigo?— Preguntó.

—¿Es urgente?—

—Un poco.—Harry suspiró y asintió, elevó su mirada.—¿Es tu hija?— Preguntó.

—Ese no es el punto.— Susurró.—Dígame ¿De qué quiere hablar?—

El teléfono del menor sonó, frunció el ceño y tomó llamada. La terminó de golpe.

—Harry... ¿Estas bien?—

—Sí, dime ¿Qué quieres?—

—Pedirte una oportunidad.— Vio como suspiraba aburrido del tema.

La pequeña solo veía la escena frunciendo el ceño.

—No Louis, vete por favor.—

—Harry... Por favor.— Se iba a acercar, pero se le negó.

—No, espero seas feliz.—

—Harry.—

—Vete o llamo a seguridad para que te saquen.— Suspiró.

—Esta bien, perdón.—

Salió de la oficina.

—Harry.—Llamó, el rizado llevo su mirada hacia ella.—¿Cuidarías a mi bebé?—Preguntó, Harry extrañado por la pregunta, era más que obvio que cuidaría a la bebé.

—Si, siempre que lo necesites la cuidaré.—Melissa sonrió.

—Cuídala mucho Harry, ella es la única que alegra los días.—El rizado asintió.

—¿Segura que estás bien?—Preguntó.

—Si, no te preocupes, gracias por todo.— Harry sonrió aún no muy convencido.—Iré a repartir la comida.— Melissa dejó la pañalera con unos juguetes.

—Está bien, y no tienes nada que agradecer.— Melissa sonrió, Harry se colocó de pie con la bebé en brazos.

—Te tengo y te tendré que agradecer mucho.—Dijo antes de salir, Harry frunció el ceño, Melissa salió de la oficina, el rizado corrió la mesita y dejó a la pequeña sentada en la alfombra, él se sentó junto a ella, sacó los juguetes y se los dejó a la bebé.

Después de que Louis entrará a la oficina, su teléfono sonó.

—Harry, hijo.—Se escuchó la voz de su padre, el rizado suspiró y terminó de golpe la llamada.

—¿Estas bien?— Asintió.

—Sí, dime ¿Qué quieres?— Le restó importancia.

—Pedirte una oportunidad.— Rodó los ojos.

—No Louis, vete por favor.—

—Harry... Por favor.—

—No, espero seas feliz.—

—Harry.—

—Vete o llamo a seguridad para que te saquen.— Suspiró.

—Esta bien, perdón.—

Salió de la oficina, Darcy frunció el ceño.

—¿Tu bien?—

—Si pequeña, estoy bien.—

—¿Él quien?—

—Nadie corazón, no te preocupes.— La pequeña asintió, nada convencida.

Si eres feliz haciendo lo que haces, entonces nadie te puede decir que no eres exitoso.

*¹:Temblor celular: vía neurológica desde el tramo relacionada con temblores.

*²: MD: el segundo grupo más grande del tálamo, procesa la información de forma activa, se integra con éxito en los circuitos neurales de la cognición e interactúa fuertemente con la corteza prefrontal.