Poco a poco se fue despertando, Louis lo seguía abrazando fuerte, él también estaba dormido.

Estuvo un rato abrazándolo, le hacía feliz estar en los brazos de Louis. En algunos minutos el mayor ya estaba despierto, el teléfono de Harry estaba sonando.

—Yo contesto.— Susurró Louis.

—Gracias.— Sonrió.

Reconoció el número, tomó la llamada.

—Familiares de Eva Cox.—

—¿Niall?— Preguntó.

—¿Louis?—

—¿Qué haces llamando?—

Harry frunció el ceño y elevó su mirada.

—¿Eres familiar de la paciente Eva Cox?—

—La conozco, dime ¿Qué pasa?—

—Ven a urgencias, está aquí.—

—¿Qué? ¿Por que?—

—Sufrió desmayos.—

—Esta bien ¿Nada grave?—

—¿Qué pasó?— Preguntó Harry.

—Eva está en el hospital.—

—¿¡Qué!?—

No espero respuesta, salió de la cama y corrió a su habitación, Louis salió corriendo atrás de él.

—¿Con quién estás?— Preguntó Niall.

—Uh... No se lo he explicado a nadie, pero es...—

—No me digas que regresaste con esa mujer.—

—No, no regresé con ella, solo vi a Marcos.—

—Otro idiota, pero... Tengo que colgar, ven rápido y me cuentas.—

—Bien, ahora voy.—

Terminó la llamada, Harry venía bajando los escalones.

—Mi amor, vamos.— Asintió.

Salieron rápido de la casa, por el camino Louis le explicó a Harry. Tomaron un taxi, al llegar al hospital, el mayor pagó y corrieron hacia el interior.

—Ven.— Lo tomó de la mano y comenzó a caminar por el pasillo.

El menor frunció el ceño. Hasta que vio a un doctor caminando hacia ellos.

—Oye Niall.—

—¿Qué le pasó a mi abuela?—

—Sufrió varios desmayos, le realizamos una TAC, tiene un tumor, no es nada complicado, pero necesitamos realizar una operación.—

—Yo la reali...— Lo interrumpió.

—No puedes, aún no te han dado la autorización de volver a quirófano.—

—¿Aún no?— Negó.

—No, pero si quieres apresurar, habla con tu padre.—

—No, esperaré.— Asintió. —¿Dónde está la paciente?—

—Hace unos minutos fue trasladada a una habitación...—

—Que la trasladen al piso VIP.— Harry abrió sus ojos al extremo.

—¿Qué? No es necesario.—

—Se que por el tumor la tendrán aquí hasta la operación.—

—Louis... No podré pagarlo.— Le susurró.

—Cortesía de la casa.— Le dijo el doctor.

—No, aún así...—

—Nada, pide que trasladen a la paciente ya mismo.— El doctor hizo unas llamadas y en algunos minutos ya estaban caminando al piso VIP.

—No debiste hacerlo.— Susurró.

—Las habitaciones comunes se comparten... En las VIP estarás cómodo, a Eva no le faltará nada.—

—Aún así...—

—Calla cariño, mejor camina.— Lo jaló hacia él, Harry caminó aún tomado de la mano.

—¿Ustedes que son?— Preguntó el chico de cabello rubio.

—Metiche.— Le dijo Louis.

—Solo soy informativo.— Rodó los ojos.

—Vaya... ¿A quién tenemos aquí?—

Llevaron su mirada hacia atrás, vieron a otro doctor.

—Liam.— Saludó Louis.

—Hola.— Vio a Harry, el chico apretó la mano de Louis.—Somos amigos de Louis, no te preocupes. Me presento soy Liam Payne.— El menor frunció el ceño.

—¿Conoces a Zayn?— Preguntó. Vio como aquel doctor sonrió nervioso.

—¿Zayn?— Le preguntó Louis, Harry asintió.

—Oh... El amor, el amor.— Vio como Liam le tiró un lapicero a Niall. —Idiota, dejas mala imagen de nosotros frente a la pareja de Louis.—

—No... Nosotros aún...— Niall negó abrazando a Harry por los hombros.

—No importa, me presento soy Niall Horan, residente de neurocirugía.—

Sintió como Louis zafó el agarre de Niall, empujándolo.

—Ush, vamos, no dejas presentarnos formalmente.—

—Existe la mano ¿Sabias?—

—Tu la tienes tomada.— Señaló sus manos, Harry lentamente separó sus manos.

—Vamos, después podremos preguntar todo.— Frunció el ceño.

—¿A quién?— Preguntó Harry.

—A ti, nos tenemos que conocer formalmente, no podemos dejar que estés con nuestro amigo si no te conocemos.— Louis rodó los ojos.

—Ignóralos, ahora se que hablaré con Zayn también, vamos.— Tomó la mano de Harry, caminaron hacia la habitación nueve.

—Ahora está sedada, despertará en unas horas.— Abrió la puerta de la habitación.

Harry vio a Louis, pidiéndole que entrará con él, el ojiazul estuvo de acuerdo y entraron. La mirada Harry se perdió al ver a Eva en cama, canalizar, suspiró profundamente.

—Ella estará bien amor.— Lo abrazó.

—Sí, ella resistirá...— Susurró separándose un poco.

—Harry...— Se separaron del abrazo, el menor corrió hacia la camilla.

—Hola abuela.— Sonrió.

—Deberías estar en la escuela.—

—Eso puede esperar.—

—Los dejaré hablando solos, regreso en unos minutos.— Asintió.

—Gracias.— Louis se retiró cerrando la puerta atrás de él.

—¿Por qué estás triste?— Acarició su mejilla.

—Por nada abuela, solo no quiero que te pase nada malo.—

—No pasará nada, tranquilo.—

—Esta bien abuela, aún así, te tendrán aquí hasta la operación.— Negó.

—No quiero morir en el hospital.—

—No morirás abuela, no me abandonaras.— Sus lágrimas pasaron por sus mejillas.

—No llores, todo estará bien.— Sonrió levemente.

—Esta bien, abuela.—

Al salir de la habitación, Niall estaba apunto de hacer una llamada, Louis le quitó el teléfono.

—No se te ocurra llamar a mi madre, te juro que te perseguiré por todo el hospital.—

—Solo la iba a poner al tanto.—

—No, yo le diré.— Asintió.

—Esta bien.—

—¿Y Liam?—

—En su oficina, ahora voy a hacerle un interrogatorio.—

—Esta bien, iré por mi bata y vuelvo con Harry.—

—Louis... ¿Hace cuánto lo conoces?— Preguntó.

—Uh... Hace unas semanas.—

—Eres un idiota.—

—Harry es diferente, a cierto punto.—

—¿Esta metido en drogas, alcohol o el cigarro?— Negó.

—No, salió de ese mundo, también evité que volviera a caer.—

—¿Estuvo en drogas?—

—Sí, Marcos le ofreció droga, evite que se la entregara.—

Niall suspiró, no estaba convencido.

—Lo voy a conocer... Me vale mierda si estás de acuerdo o no, pero Liam y yo lo vamos a conocer, te salvamos de ese mundo, no volverás a caer.— Asintió.

—Esta bien, Niall.—

—Bien, ahora ve por tu bata y regresa.—

Se despidieron, corrió hacia su oficina, tomó su bata y corrió hacia el ascensor, marcó el piso VIP.

Al llegar, llamó a la puerta, espero unos minutos, Harry abrió.

—Se quedó dormida.— Susurró.

—Tranquilo mi amor.— Lo abrazó, Harry correspondió el abrazo.

—¿Esto es peligroso para ella?— Entraron a la habitación, cerrando la puerta atrás de ellos.

—Tal vez por su edad, pero no te puedo prometer nada.— Suspiró profundamente.

—Esta bien.—

—Pero ten fe mi amor, ella estará bien.—

—Sí...— Las alarmas comenzaron a sonar.

Fruncieron el ceño.

—¿Qué pasa?— Preguntó alarmado.

—No mi amor, no es nada.— Asintió.

La puerta se abrió, dejando ver a Niall.

—Reunión urgente.—

—¿Qué pasó?—

—Te lo explico después, urgente.—

—Ve.— Asintió.

Salió corriendo de la habitación, corrieron hacia el ascensor.

—¿Qué pasó?— Preguntó.

—Están matando a los doctores que vean un vídeo de una operación, van dos neurocirujanos que murieron por eso, acaba de morir uno más.—

—¿Mi padre lo sabe?— Negó.

—El director no quieres decirle.—

—Mis padres son los dueños, tienen derecho.— Sacó su teléfono.

—Louis, el director puede regañarte.—

—Me interesa más la opinión de mis padres, que de ese señor.—

Salieron del ascensor, Louis llamó a su padre.

—Hola cariño ¿A qué debo tu llamada?—

—Papá, ven al hospital urgente, están matando a doctores por ver un vídeo de una operación.—

—Vamos para allá.— Terminó la llamada.

—¿De qué trata el vídeo?—

—Es de negligencia médica, pero aún no se sabe más.— Suspiró.

—Vamos.—

Llegaron al salón de juntas.

Harry estaba en la habitación, su teléfono comenzó a sonar, tomó la llamada.

—Hola Harry.— Se escuchó la voz de Zayn.

—Hola Zayn.—

—¿Cómo estás?—

—No se como sentirme, han pasado varias cosas.—

—¿Quieres hablar?—

—¿Puedes venir al hospital?—

—¿Te paso algo?—

—No, mi abuela está internada.—

—Voy para allá, dime ¿En que habitación esta?—

—Nivel VIP, habitación nueve.—

—Bien, en unos minutos llego.—

Terminó la llamada, otra alarma sonó, frunció el ceño.

En algunos minutos, Zayn llegó a la habitación, se sentaron en el sofá.

—¿Sabes quién fue?—

—Eleanor.— Susurró.

—¿Qué? Pero ¿Cómo fue?—

—No se, pero me dolió su traición, éramos amigos, ella sabía que no quería perjudicar a Louis.— Abrazó a su amigo, Zayn acarició su cabello.

—Tranquilo, todo está bien, no tienes que deprimirte, ambos saldrán adelante.—

—Sí, pero aún así, duele.— Asintió.

—Comprendo, eh, sobre eso, quería comentarte algo, antes que te enteres por alguien más.— Se separó del abrazo, frunció el ceño.

—¿Qué pasó?—

—No quiero que te sientas mal.—

—Dime.—

—Me expulsaron también, por ser cómplice de una pareja de profesor y alumno. —

—Zayn perdón, no fue mi intención, puedo hablar con los directores para decir que tú no estabas enterado...—

—Harry tranquilo, no, está bien, déjalo así, creo que es más probable que me vaya a vivir con mi hermana después de esto, estudiar allá en Canadá.— Suspiró.

—Zayn... Perdón.—

—No, te dije que no te sintieras mal.—

—Pero lo hago.—

La máquina de pulso comenzó a hacer ruido, se alarmaron.

—Buscaré a un doctor.— Zayn corrió hacia el pasillo.

Harry caminó hacia la camilla y tocó varias veces el botón.

—Abuela no me puedes dejar, por favor, por favor no.— Comenzó a llorar, aún presionó varias veces el botón.

Salió corriendo, encontrándose a Louis y su amigo, el amigo de Louis corrió.

Después que todo pasará... La mujer que llegó días atrás a su casa entró a la habitación.

—Con permiso.— Louis salió de la habitación.

—Tendremos que mantenerlo aquí, no diremos nada.— Le dijo el director general del área de neurocirugía.

—Ustedes no van a mantener nada en silencio.— Llegaron sus padres.

—Señores...—

Subieron al escenario, el director general caminó hacia su asiento.

—Llamarán a los familiares de los doctores. Ningún doctor sale de este hospital, el responsable de esto pagará por todo, se le anulará la licencia.— Todos se quedaron en silencio.

—Les presentamos a los detectives y a la policía.— Varias personas entraron.—Ellos se encargarán de este caso, todos tienen que colaborar o se irán a la cárcel, cuando tengan los números de los familiares, mandaremos un finiquito, ahora vayan a trabajar...— Otra alarma sonó.

Los policías corrieron, todos los doctores veían los movimientos en silencio.

—Colaboren con los detectives, no quiero saber que el personal médico es el responsable de quitar la vida de personas inocentes, cuando lo único que deberíamos hacer es salvar vidas, así que... Si la persona responsable está aquí, es una vergüenza y una deshonrar para este hospital.— Le dijo la dueña del hospital.— Vayan, los policías y los detectives iran a investigarlos.— Asintieron.

Salieron del salón de juntas, Louis, Niall y Liam se quedaron.

—Hola mamá.— Iba a saludar a su madre, pero ella lo tomó de la oreja.

—Deja de meterte en el bar, lo hablamos muchas veces.—

—Mamá, no he consumido nada.— Lo soltó, Louis suspiró y la abrazó. —Te prometo que no he consumido nada, tampoco alcohol.— Su madre correspondió el abrazo.

—Esta bien, te creeré, pero no te metas en ese lugar, la idiota de esa mujer salió de la cárcel.— Frunció el ceño.

—¿Qué?— Vio a su padre.

—Sí, salió de la cárcel hace unos días, pagó fianza.—

—Pero...—

—La enviaron a un centro de rehabilitación.— Suspiró aliviado.

—Esta bien.— Susurró.

—Ahora ¿Qué me tenías que contar?— Preguntó.

—Oh si, si quieres vamos a mi oficina, te tengo que contar muchas cosas.—

—¿A mi también?— Dijo su padre.

—Sí, a ti también.—

Niall y Liam estaban hablando con los detectives.

—Los detectives te interrogarán, dime un poco sobre el tema.— Sonrió.

—Bueno... Conocí a alguien...— Un parlante se escuchó.

"Emergencia en la habitación VIP, se solita al Doctor Horan con urgencia."

—Harry.—

—¿Qué pasa?— Preguntó su madre.

—Mamá, más tarde los llamaré, Harry me necesita.—

Sin decir más, Louis salió corriendo, Niall lo seguía.
Subieron al ascensor y marcaron el piso, al salir corrieron. Harry venía corriendo.

—Ayuda, mi abuela...— Niall corrió, Louis abrazó a Harry, quién ya estaba llorando.

—Mi amor, tranquilo, estará bien, vamos.— Asintió.

Caminaron abrazados hacia la habitación, entraron, Niall ya había logrado recuperar a la paciente.

—Esta bien, por el momento...—

—¿Por el momento?— Asintió.

—Le haremos estudio más tarde, ahora será mejor dejarla descansar.—

—¿Se pondrá bien?—

—Hay que tener fe.—

—Gracias.— Susurró.

—Bien, con permiso.— Asintió.

—Ve, tienes que ir a la junta, estaré bien.— Susurró Harry separándose un poco.

—Vengo más tarde ¿Si? Cualquier cosa llama a mi teléfono.—

—Esta bien, gracias.—

Salió de la habitación, una mujer entró a la habitación.

Caminó por el pasillo, Niall iba a su lado.

—¿Le dirás a tus padres que te gusta Harry?—

—Si... Aunque mamá hará todo lo posible para conocerlo.—

—Pero... Todos nos preocupamos por ti, no queremos que pases otra vez lo mismo.—

—Aunque no lo creas... Es muy diferente, demasiado... Me quiere lo sé, y yo igual lo quiero.—

—Tu lo amas... ¿Y él a ti?—

—Sí, me ama, estoy seguro de eso.—

—Ambos se aman... Solo espero que no vaya por tu dinero.—

—Harry no sabe quién soy realmente.— Frunció el ceño.

—¿No sabe que tus padres son dueños del hospital? ¿Qué eres el famoso Louis Tomlinson? ¿Qué todos ruegan y suplican que les hagas caso, o al menos tengan un acostó contigo?— Comenzó a reír.— Bueno no, en serio ¿No sabe nada? ¿Entonces de quién se enamoró?—

—De su profesor titular, del que decidió rentar un cuarto y no vivir en una mansión... Del que el primer día que se conocieron fue por haberle robado a un señor de la tienda de dulces... De él, de Louis...— Alzó los hombros.

—Vaya... Ambos están enamorados.— Sonrió.—Ahora factor ¿Edad?—

—Tiene dieciocho.—

—Oh, está bien, pensé que tenía diecisiete.— Negó riendo.

—De igual manera, si fuera menor de edad no hubiera estado con él, la cárcel no será un buen hotel.— Rieron.

—Doctor Tomlinson, sus padres pidieron que le avisara que estarían en una reunión.— Llegó una enfermera.

—Esta bien, muchas gracias.—

—Vamos a buscar a Liam.— Asintió.

—Hola.— El menor sonrió.

—Hola ¿A qué debo la visita?—

—Hace días hablé con tu abuela, y aquí estoy para cumplir nuestro acuerdo.— Frunció el ceño. —Siéntate, debo hablar contigo.— Asintió.

Harry se sentó en el sofá, Zayn iba a salir, pero la mujer lo detuvo.

—No, la oferta es para los dos.— Frunció el ceño.

—Espere.— Zayn corrió por la silla al lado de la camilla, la atrajo hacia él y se la dio a la mujer, ella tomó asiento.

—Muchas gracias.—

—No hay de que.— Tomó asiento al lado de Harry.

—Los fui a buscar al colegio, pero me contaron que ya no estudian ahí.— Suspiraron.—Me explicaron los motivos, no se preocupen, la beca sigue en pie.—

—¿En serio?— Asintió.

—Sí, la beca es en Canadá, estudio en medicina, también tiene trabajo seguro en el hospital de allá.—

—¿En serio?— Preguntaron incrédulos.

—Sí, tu madre me dijo que tu sueño es ser médico, salió está oportunidad y se las daré a ambos.— Sonrieron.

—Gracias, en serio muchas gracias.— Susurró Zayn emocionado.

—No hay de que.— Sonrió.

—¿Y mi abuela?— Preguntó Harry.

—Ella se podrá ir con nosotros, no tienes que preocuparte de eso, hay dormitorios de estudiantes y Anne tenía una casa allá.—

—¿Mi madre?— Asintió.

—Cuando estés allá te explicaré toda la historia.—

—Gracias, gracias en serio.— Sonrió.

—No hay de que, ¿Su respuesta es positiva?— Asintieron.

—Sí, ¿Cuándo nos vamos?—

—En una semana.—

—Muchas gracias señora...—

—Marisa Rossi, dueña del hospital de Canadá.— Abrieron sus ojos al extremo.—Si se los decía al principio iban a estar nerviosos.— Rieron.

—Muchas gracias.— Los dos chicos la abrazaron, Marisa sonrió.

—No hay de que, estaré llamándolos para tramitar todo.— Asintieron separándose del abrazo.

—Gracias.— Sonrieron.

—¿Van a ir a almorzar? Pueden ir, yo cuido a Eva.—

—Muchas gracias, pero no queremos molestar, ya está haciendo mucho por nosotros.—

—Vayan, no tienen de que preocuparse.—

Después de tanto insistir, estuvieron de acuerdo, salieron corriendo, Marisa sonrió.

—Has crecido mucho.— Se escuchó la voz de Eva.

—Han pasado varios años, Anne tendría que estar aquí.— Murmuró.

—Mi hija esta orgullosa de ti, de todo ese gran trabajo, mírate, dueña del hospital más famoso de Canadá.—

—Le prometí que cuidaría a Harry cuando ella no estuviera, por eso viaje aquí.—

—Gracias Marisa, síguelo cuidando, es necio, pero comprende.— Sonrió.

—Lo veremos graduarse Eva.—

—No, yo ya no, tu si lo lograrás, por favor, ve a la casa, llévate un regalo que tengo en el armario, dáselo cuando se gradué.—

—Se lo darás tu Eva, tú estarás con tu nieto.—

—No Marisa, yo lo cuide en su infancia, te dejo a ti cuidándolo en su adolescencia.—

—Eva no digas eso, estarás con él.— Negó.

—No Mari, cuídalo por favor.—

—Esta bien Eva, lo cuidare.— La mujer mayor sonrió y asintió.

Se quedó dormida...