En absoluto.

Harold Hellinger

19 años

Transferido de Atlanta

Fecha de nacimiento: 06 de noviembre del 2000

Mamá : ...

Papá: ...

Ficha médica: pendiente.

Historial:

Colaborador y obediente , Haro es bueno con lápiz y papel , le gusta jugar con los niños , se muestra sonriente . No muestra síntomas de estrés postraumático ni incomodidad estando en el lugar.

Calificativo: 09.5 /10 .

Educación: terminada.

Me quedé mirando por más rato el documento ¿Enserio? , ¿Con quién es sonriente? Porque conmigo no , no me creo lo del estrés postraumático , no me creo absolutamente nada de este papel.

Chorradas.

no es tan ejemplar como aquí dice.

Di vueltas en la habitación como León enjaulado , sentía la necesidad de saber de él , sentía paranoia por alguna razón , pero no podía buscarle como si nada.

Si , si podía.

Pero . . .

No habían peros que valiesen , a demás , el se ha llevado también mi documento

Me detengo en seco.

¿Porqué habrá querido ver mi documento?

Aguantando la respiración salí a paso seguro a su encuentro , tenía que estar en su habitación si tenía un documento que no deberia tener , como yo. Iba a abrir sin tocar pero me congelé , sería mucho. Me detuve y con tres toques a la puerta me dejaron pasar.

El ambiente no cambió , todo era fresco , pero de repente sentia cohibición , ¿Enserio iba a dejarlo ganar? , Sentía que estaba perdiendo la partida imaginaria cuando la que sentia pena era yo.

Esto debía cambiar.

Solté el aire , y active la reserva de confianza que guardo por algún lado de mí.

— ¿Harold? — levanté el documento que llevaba en la mano y dándole una sonrisa de burla apunto de echarme a reír.

Si, Harold era un nombre que no le pegaba por ningún lado.

— ¿Annabeth Leticia?— replicó con la misma actitud

Si, sin duda ya leyó mi documento.

Me adentré un poco más a la habitación , y ya no sentía que usaba mi reserva de confirmar , no era tan necesaria.

— tus padres no debieron quererte para colocarte semejante combinación — dijo abriendo el documento otra vez , por segundos fuí conciente del contenido de su frase , pero no hubo malicia , no hubo doble intención , una simple broma , por lo que verdaderamente me sorprendía ¿Haro me estaba declarando paz? , No , no lo creo.

— justo por eso estoy aquí — seguí la broma . Y reímos un poco del pobre chiste.

Nos quedamos unos minutos en silencio, el estaba mirando dentro la carpeta , y yo rondaba en su habitación , no había nada de diferente excepto por unos 3 dibujos que estaban colgados en la pared. Una rosa , un lugar que parece un balcón , y luego el otro son rayones , simple garabato centrado en el papel .

— tú documento es una total mentira — dice Haro cuando alza la mirada que le devuelvo.

— y el tuyo? Ja. Ni se diga — abrí la carpeta — ¿Sonriente?  ¿No muestra estrés postraumático , ¿calificativo 9.5?, Mentiras — sonrió

bueno sonriente cuando quería y con quién quería.

— ¿Honesta? ¿Sin estrés postraumático? ¿Calificativo 10/10? — leyó — estás también son mentiras Annabeth

nadie era lo suficientemente real como para escribir cosas reales.

No teníamos en común esas cosas, lo que teníamos en común es que eran mentira.

Estuvimos otros segundos en silencio , aún me seguía desconcertando esos tres dibujos ¿Rosa , balcón , garabato?

— ¿ Cuál es tu historia Annabeth? —
Su pregunta me llevó hacia el primer día , solo que ahora el ambiente era diferente; me giré dejando de espaldas los dibujos sin sentido y le miré , no se sentía tan enemigo cuando su rostro estaba relajado.

— ¿Cuál es tu historia Harold? — pregunté y el me miró con cara de horror

— si me vuelves a decir así te echaré de mi habitación , lo juro Annabeth — se ofendió , su cara roja me causó gracia , por fin había logrado alterarle. Me la debía , fue accidental pero igual se sintió cobrado.

— y tú deja de llamarme Annabeth — negocié

— así te llamas, bicho raro — me miró con cara absurda , si así me llamaba pero nadie me decía así.

— Ann , Anna , Annie , menos Annabeth— expliqué , solo me faltaron las manzanitas .

— en tus sueños pienso llamarte Annie — hizo una cara rara por lo que reí , reí de verdad  , reí con el estómago, su risa me acompañó segundos después , era una risa seguida cortada en intervalos cortos , con los ojos achinados y dientes reluciendo no era para nada el enemigo.

Segundos después , la risa cesó

— y bien. . .?— seguía teniendo curiosidad, el me miró detenidamente , cerró mi documento y se cruzó de brazos apoyándose en el espaldar de la cama
Después de unos segundos habló.

— Harold Hellinger , 19 años , 20 en noviembre , una madre muerta en el parto y un padre lo suficientemente malo para elegir nombres — ríe un poco — amm . . . Estuve en una casa común en Atlanta por tres años después que mi padre murió por infarto y luego llegué aquí . Fin —

Me quedé pensativa, tratado de imaginarlo , o tratar de seguir la ruta , pero no podía. ¿Cómo se vería un Haro de 16 años llegando a un orfanato? ¿Cómo fue su vida hasta los 16? , No podía imaginar nada.

— Annabeth Wells , 17 años, 18 en enero , pues . . . Amm. . . Un padre agresivo maniático y una madre sumisa y silenciosa, el gobierno me trajo aquí por 5 meses ¿y que te digo? Soy tan 10/10 que me dejaron , así que llevo dos años —

Su historia , mi historia. La historia.

A veces cuentas algo tan repetitivamente dentro de tí que instintivamente es lo que recitas . . . Mi historia , sin duda no es así , pero es lo único que puedo contar , nadie enseña la basura que hay debajo de la alfombra, justo por eso es que está debajo de ella.

Estábamos ahí, en silencio , atando cabos entre ambos , cabos que jamás se podían atar porque el rompecabezas estaba mal ordenado , incluso incompleto; cuando cuentas a alguien parte de tí sientes como se esclarecen y calman las cosas , pero ningúno de los dos sentíamos eso.

Es como caminar en calles sin salida.

Aún seguíamos gritando ¿Quien eres?

Y ¿Cuál es nuestra verdadera historia?.