4. ¿vamos a casa?

Ella siempre tiene razón.

Son unos minutos y ya.

Salir a luz , moverse , acercarse un poco , y seguirse moviendo . . . Y luego acaba.

Recojes el dinero del suelo , sales , respiras convencida de que no fue tan malo e ignorando el sentimiento que te embarga te desmaquillas , te vuelves a vestir decentemente , sellas tu salida y ya,  Se acaba , no vuelves hasta mañana a la noche.

— ¿Te acompaño a casa? —

Dice Lily cuando sale de escena , sonreí por la complicidad en que lo dijo , mi sonrisa se sentía verdadera porque era verdadera. . . Ella no hablaba de la casa hogar , hace una semana después de unos meses de trabajo logré comprar un piso en la misma residencia que Lily. No fue barato y justo por eso me alegra, se que a Cecilia le va a encantar , aún no tiene muebles , y no tiene nada , pero tiene buenas paredes , no existe la humedad , el piso es más que moqueta simple , y de aquí a dos años esto estará listo para ella.

No hay nada que arreglar por ahora , pero el simple hecho de estar sentada en un lugar mío propio me llena de calma así que asentí. Nos fuimos en su Malibú rojo que ganó en su divorcio y nos llevó unos 20 minutos tal vez antes de dar un desvío

— hoy invito la pizza yo , bonita —

Le di las gracias , hoy no podía pagarla yó , necesitaba el dinero para Cecilia.

Unos 10 minutos más y ya habíamos llegado al lugar , respiré , no me cansaba de saber que tenía la llave de una de esas puertas.

— tenemos que hacer una parada en mi casa , ok? —

Lo dice como si fuera muy lejos , su habitación está una planta más abajo que la mía , entramos sin hacer ruido porque Terry , el hijo de Lily , estaba dormido y ella fue a su cocina y sacó una botella de refresco , de eso modo estábamos listas para irnos al otro piso.

— espero que el ascensor sirva para cuando Ceci esté aquí —  dije y ella sonrió , sabe todos mis planes y todos mis deseos , al fin y al cabo es mi única amiga.

— le encantaría con o sin ascensor bonita —

Metí la llave en la cerradura y abrí dándonos paso a la oscuridad , había venido unas veces más después de comprarla así que ya sabía dónde estaba la interruptor de la luz , la luz se dió y capté lo mismo que había captado antes , el suelo limpio color crema casi nueva , la paredes de un azul turquesa que pintamos hace unos días , un almohadón en el suelo , y un pequeño estante donde habían los  tres libros que compré con mi primer sueldo.

como otras veces nos sentamos en el suelo.

— Estoy orgullosa de tí , sabías eso? —

Lo sabía , y eso me hacía sentir real

— Gracias por todo Lily, sin tí ya me habría rendido —

Ella lo sabía también.

— agradéceme es unos minutos —

Seguido de eso me regaló una sonrisa pero yo no entendía la razón

— este refresco se calentó un poco , ¿Puedes buscar un poco de hielo en el refrigerador? —

Tragué saliva , me iba a reír pero si sonrisa era tan grande que de inmediato sabía que estaba tramando algo, me levanté incrédula aún sin poder hablar , estaba temblando y sentía que iba a llorar , a pasos de plomo me dirigí a la cocina y efectivamente . . .

—  no puedo creerlo —

Un refri de dos puertas estaba frente a mí con una nota adherida

Y así comienza a crecer tú casa , bonita.

Me ardía la garganta , ella necesita también su dinero y aún así me ha obsequiado esto. Estaba demasiado agradecída que quería echarme a lloriquear ahí mismo.

— ahora sí  puedes agradecerme — sonrío

Fuí hasta ella y la abracé para transmitirle todo lo que sentía

— gracias , gracias , enserio gracias , no sé qué decir para hacerte saber cuan agradecía estoy —

— se cuanto me agradeces , tranquila — me devolvía el abrazo con la misma fuerza , así como yo sentía lo que me quería espero que ella también pueda sentir cuanto lo quiero.
— ahora anda sirve un poco de hielo en los vasos y vamos a comer —

El refri estaba conectado , y ya había una cubitera puesta a hacer con hielos , los saqué con unos vasos desechables, suspiré.

Mi piso , mi refrigerador.

Entre risas , anécdotas y consejos se fueron como 3 horas , debían ser como las 4 de la mañana , tenía que irme , como las otras veces Lily me llevó en su auto hacia la esquina de la casa hogar , de ahí caminé , trepé por la cerca , subí hasta la baranda y caminé hasta la ventana .

Un empujón , dos empujónes . . . Y nada.

No , no puede ser. Esto no puede estar pasando.

Tres , cuatro y cinco con más fuerza y la ventana no cédia . . . Estaba cerrada.

Demonios.

Toda mi felicidad de hace un rato se había esfumado , había desesperación ahora, mis manos temblaban y sentía furia , ese chico la había cerrado aproposito y ni manera de acusarlo.

¿Cómo explicaba esto si me descubrían?

No , no podía darle la satisfacción de que me meta en problemas.

Seguí caminando por la barandilla hacia el otro lado de la gran casa y con el corazón martillando comprobé la ventana del pasillo de la planta de las hermanas , abrió y respiré , aún así era peligroso, me adentré sin abandonar la mirada a las varias puertas de cada una de las habitaciones de las hermanas.

Al llegar a las escaleras ya estaba a salvo.

Toda la fatiga de no haber dormido en toda la madrugada y nunca dormir lo suficiente me cayó de repente.

Me dirigí a mi habitación sin ganas de enfrentar a nadie por ahora , puse mi pijama sin tiempo a un baño , y caí como roca.

Muchas emociones en un solo día , sabía perfectamente lo que iba a pasar.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top