.27. ojo por ojo
Ahora nos encontrábamos en un triángulo de miradas demasiado peligrosas , pero solo a nosotras se nos había cortado la respiración, Haro parecía serio , como si no se preocupara de nada , me recordó a cuándo flor lo encontró en mi habitación , en vez de preocuparse como yo, se ocupó... Pero ¿Como podría arreglarlo esta vez?
no te ganes un lío que luego voy a tener que arreglar yo , annabeth .
El me lo había advertido ¿Porque no solo le hice caso? A la mierda , eso nunca hubiera pasado , no se de qué forma habría impedido que yo pasara, pero pasé y me metí en una grande.
Esperen. . .
Solté todo el aire que tenía y dejé de buscar cualquier explicación para salvarme; no había razón para que me delatara porque no hay razón para que ella esté a media noche en la habitación de Haro con su bata de dormir.
Fue como si me cayera un balde de agua encima y me despertara todos los sentidos; la Vi a ella con la misma expresión que yo, "tratando de entender que hace aquí" la Vi con su bata , jamás la había visto con su bata , era muy transparente para venís a ver a Haro , incluso hasta yo podía verle la punta de los pezones. Mierda... Entendí que esa era la intención, entendí el cabello desordenado de Haro , entendí y sentí por alguna razón que mi cerebro se iba a dar de paro , tenía la garganta seca , no pude pronunciar nada por unos segundos que parecieron eternos.
— te dije que volvieras a tu habitación — susurró Haro cogiendo una camisa y pasandosela por la cabeza , los hombros y todo el torso hasta así colocarsela.
Quise golpearlo , que le doliera , quise que su actitud fuera otra por alguna razón , que me dijera "annabeth , no es lo que parece" "annabeth, déjame explicarte" pero el no iba a hacerlo porque no le interesaba en lo absoluto que las cosas si eran lo que parecía y que yo podía entender lo que me diera la gana. En la puerta le dije que no lo juzgaba pero ahora aquí adentro se me era imposible, así yo tuviera mil mierdas solo podía ver la mierda de él en este momento ... Se estaba revolcando con Florencia.
La hermana flor, salí de mi estupor con Haro para entrar en la cruel verdad , casi me entraron ganas de reírme , flo.ren.cia , la novicia más joven, la que supuestamente dedicaba su vida a Dios , solo a Dios , no , a Dios no, A la iglesia , porque esa mierda es totalmente diferente aunque no lo parezca , la iglesia que le prohíbe tener cualquier acto de lujuria , que le prohíbe ser una persona totalmente normal. Admito que jamás me lo hubiera esperado , pero aquí está.
Bueno , no es la primera santa que resulta no serlo.
Solo me preocupaba que ella dijera algo pero ¿Que podía decir en estás condiciones? Nada. Me relaje y hice caso omiso a todo lo que se me estaba revolviendo por dentro.
— bienvenida al mundo real — le dije a Florencia, ella se quedó un poquito pasmada — donde todos tenemos secretos — concluí y abrí la ventana sin ninguna culpa , y sin ver atrás para ver cómo reaccionaban salí y me largué.
Por el camino esperé calmar un poco mis manos temblorosas , pero a medida que iba avanzando sentía la taquicardia apoderarse de mí pecho , esa misma sensación que tienes cuando alguien te ha traicionado , es muy cínico sentir eso ya que estoy traicionando la confianza de la madre soledad y de todas las demás cada vez que salgo cada noche y bailo semi desnuda arriba de un escenario , pero no puedo evitar sentirme así.
En una acera diviso un contenedor de basura y lo pateo con todas mis fuerzas
— MALDICIÓN —, Grito cuando lo pateo pero luego siento un fuerte dolor en mi pie, mierda mierda , no era de metal blando , era de acero y no cedió ni un poquito con mi golpe , estaba totalmente jodida.
Caminaba ahora renqueando y ¿Que más mierda faltaba? Ah sí , no comprobé el cielo antes de salir así que ahora a medio camino había comenzado a llover , primero poquito pero luego Iba creciendo y creciendo , ya me encontraba empapada y nisiquiera podía correr por la condición de mi por.
— Annabeth — llamó una voz por detrás de mi , no sabía quién era porque la lluvia distorsionaba los sonidos , ojalá fuera Dios que viniera a llevarme ... Oh no querida , Dios no te va a llevar a ningún lado, me dije , Dios nisiquiera sabe que existes.
Me volteé y era Haro... ¿Ya ves? , Si Dios me quisiera o se apiadara de mi , no tendría a Haro al frente ahora mismo , pero aquí está. La prueba de todo.
— vuelve a casa — le ordené seria, el no cedió, el era igual de testarudo , el debió saber que no me iría a mi habitación cuando lo ordenó.
— ¿Que haces cada noche que sales? — preguntó ignorando lo que había dicho.
— A revolcarme con alguien no. Eso es seguro — dije las palabras lo más filosas posibles y aunque no las había planeado se sintieron liberadoras.
— está claro que no , si te acostaras con alguien cada noche no habrías estando tan escandalizada de ver a Florencia en mi habitación — contestó , normal , sin Apice de vergüenza. Y entendí que así era Haro, se podría estar quemando el mundo y solo trataría de que las llamas no lleguen a él ... El no vino a asegurarse que yo estuviera bien , el vino a asegurarse de que nada le afecte a él.
— vete al infierno , Haro — solté y me giré para seguir caminando, pude escuchar que soltó una pequeña risa , joder ¿Porque había golpeado ese contenedor? Hubiera ahorrado todas mis fuerzas para golpearlo a él.
— sabes que eso no me ofende en lo absoluto — respondió , lo sentía caminando detrás de mi , como la sombra , como el temor de cualquiera , como el demonio. — ¿Porqué caminas así? ¿Que te ocurrió? — preguntó.
Pero lo ignoré , seguí caminando bajo la lluvia que ahora era constante.
— como sea — se dijo — algo bueno ha salido de esto , Florencia ésta dispuesta a hacer lo que sea por tu silencio, estoy segura que hubiera hecho más si tú no hubieses salido por la ventana , porque de esa forma tendría menos evidencia contra tí; aún así conoces a la florecita , estaba tan nerviosa que era incapaz de pensar en el ojo por ojo , ya sabes , eso de "tú no dices que me viste porque si lo haces yo digo que te Vi también" , de cualquier forma le dije que tú a veces necesitabas aire libre y por eso bajabas por la ventana ciertas noches y que había escuchado mal , que no dijiste "trabajar" , dijiste "Bajar" , nisiquiera hago esfuerzos con ella , se cree todo lo que le digo — venía hablando tras de mi , y yo solo intentaba ignorarlo pero parecía mi abogado del mal, de repente me pregunté ¿Como es que todo le parecía un juego? .
— dile a "tú florecita" que no necesito nada, que si ella no vio nada, pues yo tampoco lo hice, punto. — escupí de mala gana, sin voltearme, enseguida sentí como el aumentó el paso y en cuestión de segundos ya estaba frente a mi.
— ¿Así como así? — parecía renuente a aceptarlo — ni hablar , tenemos un mundo de posibilidades y tú decides no tomarla? — me preguntó.
— ¿Tenemos? — le pregunté de repente molesta — Tú tendrías que estar viendo por ella , fue contigo con quién se revolcó , y en cambio aquí estás , diciéndome que "tenemos" mil formas de extorsionarla — me preguntaba si el chico tendría límites , nunca había pensando en ellos. ¿Que sería capaz de hacer Haro? ¿A qué punto sería capaz de llegar solo para lograr todo lo que quiere? Y principal ¿Que quiere?.
— bueno ... Tampoco es que tú tengas mucho que perder , ¿Cuál es la gracia hacerle la vida difícil a alguien que tiene de por sí la vida difícil? — me dijo , como si nada, a veces la honestidad era asquerosa.
— osea que ...¿Para ti tiene Gracia lo preocupada que debe estar flor? — le pregunté , aunque ya sabía la respuesta , su comportamiento , su inexistente Apice de preocupación , nada , no había nada que expresara que sintiera algo más los por la hermana flor entonces ¿Porqué carajos estaba enrollandose con ella?.
— le estoy dando algo de qué hablar y de que pensar en su aburrida vida , todos ganamos — respondió.
— la estás haciendo caer en tentación, la estás haciendo faltar a sus creencias — le hice entender.
— igual sigue siendo problema de ella si cae o no ... Yo solo digo y hago las cosas adecuadas en el momento adecuado , nunca le prometí nada más de lo que le esté dando , es problema de ella lo que entienda — se salvó de culpas.
— eres un enfermo — le solté .
Y seguí caminando pero tuve que detenerme cuando un lugar lleno de luces me dio la bienvenida... Mierda, había llegado a la tasca sin siquiera darme cuenta.
Maldi-tasea.
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