Yixing tardó casi nada en llegar a la entrada de la biblioteca. Talló la palma de sus manos sobre su pantalón éstas le sudaban de forma exagerada, su pie golpeaba el piso constantemente gracias a los nervios.

-No puedes echarte atras, Yixing -habló para si mismo -no puedes seguir no haciendo nada.

Con las manos temblorosas y sudorosas empujó la puerta. La biblioteca estaba tan silenciosa como siempre y eso lo relajó momentáneamente. Dio unos cuantos pasos dentro y cerró la puerta tras él, paseó la mirada por el lugar de forma lenta buscando a Junmyeon, lo encontró en uno de los pasillos formados por los estantes llenos de libros hablado por teléfono, fijándose un poco más pudo darse cuenta de que era el mismo de la vez que encontró una nota entre los libros.

El pensamiento de que podría estar haciendo lo mismo que todas aquellas veces le dió el impulso que necesitaba para acercarse a él.

Caminó de forma lenta repasando una y otra vez lo que diría. Soltó el aire que había retenido cuando estaba a dos pasos de distancia de Junmyeon, estiró su brazo y tocó suavemente con su dedo el hombro de éste.

Los segundos que tardó en darse la vuelta le parecieron eternos, olvidó como respirar por un segundo, bajó su brazo y lo ocultó rápidamente detrás de su espalda, no quería que su mano temblorosa lo delatara.

Lo primero que pudo notar fue el cambio en la expresión facial de Junmyeon, el como una mueca de completa molestia pasó a ser una cálida y amable sonrisa.

-Yixing. -era sorprendente lo feliz que parecía de verlo.

"Deja de fingir"

-Q-quie- quiero hablar contigo.

La sonrisa de Junmyeon se hizo más grande -Ya lo estás haciendo -tocó su nariz de forma juguetona.

"Deja de tratarme como un tonto"

La sonrisa en su rostro desapareció-¿Ocurre algo? Luces nervioso -se acercó un poco más para ver mejor el rostro de Yixing.

Junmyeon estiró su brazo para tocarlo nuevamente, pero Yixing retrocedió un paso.

Yixing cerró fuertemente sus ojos y dejó salir todo el aire retenido.

-Se lo que hiciste. -hablo rápido y bajo, mantuvo los ojos cerrados.

-A que te refie-

-Tao. Tu hablaste sobre lo que él hacía.

Silencio. Al no recibir respuesta por parte de Junmyeon, Yixing abrió los ojos.

Junmyeon no parecía feliz, pero tampoco molesto, Yixing no podía descifrarlo ya que su rostro no le decía nada, ni siquiera esos ojos marrones oscuros le daban algún indicio esta vez.

Junmyeon soltó un suspiro, cruzó sus brazos y se alejó de Yixing.

-Sabía que esto pasaría en algún momento.

"¿Qué?" Paró de temblar, estaba confundido.

La sonrisa de Junmyeon volvió-Mira tu rostro, luces adorable cuando estás confundido -pellizcó la mejilla de Yixing.

-No...no entiendo -Yixing se separó de él -acabo de decirte que se lo de Zi Tao.

-Te escuché, no estoy sordo. -Dió un paso más cerca de Yixing, ladeó su cabeza, sus mejillas parecían que iban a explotar por la gran sonrisa que mostraba.

-Y... ¿Entonces? -habló con algo de miedo, al parecer a Junmyeon si le faltaba un tornillo, bueno, no, menos, como cinco.

-Yixing -metió sus manos en los bolsillos de su pantalón -no voy a hacerte daño.

Cerró sus ojos, una sensación de alivio lo recorrió, llevó su mano derecha sobre su corazón, una preocupación menos.

-Si quisiera hacértelo... -abrió los ojos para poder mirarlo nuevamente, ahora Junmyeon se balanceaba sobre sus pies, sus ojos brillaban con malicia y su gran sonrisa iba haciéndose más pequeña- lo abría hecho desde el incidente con el profesor Lee.

El sonido de una campana en su cabeza fue una clara señal de alerta. Su expresión en ese momento debió de ser muy graciosa para que Kim riera.

-Deja de ser tan adorable~ -puso ambas manos en las mejillas de Yixing y las apachurró -Vas a provocarme un ataque al corazón.

-¿Sa-sabías lo del profesor Lee?-preguntó mientras Junmyeon presionaba sus mejillas cual bebé.

-Cariño -Junmyeon lo soltó -yo se todo lo que pasa en este lugar.

—Mientes. —Yixing sabía que era verdad pero quiso dárselas de valiente.

—Me dueles, Zhang —llevó su mano derecha sobre su pecho e hizo un puchero —en fin —se puso recto —el que sepas todo lo que he hecho estas últimas semanas, no me afecta mucho que digamos.

Ahí es donde se equivocaba, si Yixing quería, hablaría sobre todo lo que había hecho Junmyeon.

Yixing lo señaló con su dedo, estaba un  poco feliz por tener algo con lo que defenderse—Te equivocas en eso, puedo decirle a todos lo que has hecho.

—Creo que quién se equivoca aquí eres tú —apuntó a Yixing con su índice —de haberlo querido, lo hubieras hecho hace mucho, además, ¿Quién te creería?

En eso tenía razón, nadie le creería, Junmyeon nunca se mostró como alguien grosero, siempre puso una bonita sonrisa y ayudó a quien se lo pidiera. En cambio él, solo era amigo de Kim Jongdae, el chico que armaba drama por cualquier cosa y hacía bromas al azar, si le creían sería por un milagro del cielo.

Se sentía mal, quería hacer algo pero no serviría de mucho.

—Tu suerte se terminará en algún momento.

Kim negó con la cabeza varias veces —Yixing, Yixing, realmente me voy a poner triste, me tratas como si hubiera hecho algo malo.

Casi se reía por aquello, ¿Se iba a hacer el inocente después de todo lo que le había dicho?, Junmyeon realmente era algo.

—Hiciste algo malo.

—No, malo es matar a alguien —Junmyeon cortó la distancia que había entre ellos, miró directamente los ojos de Yixing —yo solo ayude a sacar la basura de este lugar.

—Pero... tu...

—Piénsalo bien —lo interrumpió —si, estaba molesto con el profesor Lee por la calificación pero, yo no lo obligué a meterse con una estudiante, ni tampoco obligué a Huang a meterse al sistema y cambiar calificaciones.

Eso lo dejó sin palabras. Era cierto, demasiado, Junmyeon no era un santo pero Tao y Lee tampoco lo eran, su cabeza iba a estallar en cuestión de segundos si no encontraba algún tipo de respuesta rápido.

Un pequeño sonido de pop hizo que el mayor  por fin dejara de mirarlo, este sacó su celular de uno de sus bolsillo, presionó un botón y la pantalla se encendió, revisó lo que se mostraba y luego dejó salir un suspiro para después volver a guardar el teléfono.

—Tengo que irme —acarició la cabeza de Yixing —portate bien mientras no estoy, nos vemos mañana.

Se separó de él y después lo rodeó para poder salir del pasillo.

Cuando los pasos de Junmyeon se volvieron cada vez más lejanos pudo respirar con tranquilidad. Se recargó en uno de los estantes, cubrió sus ojos con su brazo izquierdo y pudo sentir gotas de sudor.

Escuchó pasos acercándose pero no le tomó mucha importancia.

—Olvidé ésto.

Iba a preguntarle a Junmyeon que era lo que había olvidado pero el sentir algo suave tocar sus labios lo detuvo, no estaba seguro de lo que era hasta que escuchó un pequeño chasquido después de que ese algo se despegara de ellos.

—Ahora si, nos vemos mañana, Zhang.

Y nuevamente, el sonido de pasos alejándose, solo que esta vez eran opacado por los fuertes latidos de su corazón.

Su brazo calló y él se derritió como mantequilla terminando sentado en el piso.

Junmyeon le robó un beso.