—Yixing, pásame ese libro por favor.

—¿Es- este? —tomó uno de color verde con sus manos temblorosas, lo mostró a Junmyeon.

—Ese es, gracias. —con una sonrisa, Junmyeon quitó el libro de sus manos.

—Yixing, pásame el libro de color rojo. —ese era Jongdae.

—Si lo quieres muévete.

Después de que había llegado Junmyeon, Yixing casi pega el grito al cielo. Había sido engañado por su amigo, lo cual debería haber sabido desde que le pidió un lápiz, Jongdae ni siquiera usaba un lápiz "¿Y si me clavo una astilla con él y muero?", tenía que admitir que era su culpa por no recordar que Dae utilizaba lapicero pero eso no cambiaba el hecho de que le mintió.

No se hubiera molestado tanto por aquello, simplemente se habría dado la vuelta, maldecido mentalmente a Jongdae y ya, fin de la historia... pero es Jongdae. Lo obligó a quedarse con la amenaza de que si no lo hacía le contaría a Junmyeon que veía las películas de Barbie alguna veces.

"Te maldigo Bárbara Millicent Roberts"

Haciendo una mueca mientras se estiraba, Jongdae se quejó —si li quiris miviti, lo que pasa es que no me quieres.

—Si no te quisiera no hubiera atravesado media escuela para traerte un simple lápiz el cual ni siquiera usas.

—Es tu culpa por no recordar que no los uso. —le sacó la lengua.

—No, la culpa es de tu madre por haberte dejado caer de la cuna. —se cruzó de brazos, una sonrisa triunfadora se plantó en sus labios.

—¡Dijiste que no hablarías de eso de nuevo! Y además no tiene nada que ver.

—¿Por qué no mejor estudiamos? —ambos miraron a quien hablaba, Junmyeon tenía la misma gran sonrisa de siempre.

"¿No le duele la cara de tanto sonreír?" pensó Yixing.

—¿No te duele la cara de tanto sonreír? —"gracias por hacer la pregunta Jongdae".

—¿Disculpa? —Junmyeon cambió su gran sonrisa por una más pequeña, no sabía si Jongdae se había dado cuenta pero ,para Yixing, Junmyeon se veía algo molesto.

—Debe doler siempre poner esa gran sonrisa, tus mejillas deben de estar entumidas. —Jongdae estiró su mano para poder tocar una de las mejillas de Junmyeon.

Todo se veía en cámara lenta para Yixing, mientras más cerca estaba de tocar su amigo, más odio podía ver en los ojos del mayor. En un movimiento involuntario, Yixing tomó la mano de su amigo.

—No toques a las personas como si nada. —lo regañó.

Jongdae soltó un bufido —Esta bien que él te guste , pero no deberías de ser tan celoso.

—Cierra la boca y estudia. —habló Yixing tratando de terminar la conversación sin ser avergonzado otra vez, mientras cubría sus mejillas para que no se viera el color rosado de estas.

★

Revisó su celular, faltaban 15 minutos para su siguiente clase, vio a Jongdae y Junmyeon, ambos estaban concentrados en un libro. Sin querer interrumpir, agarró su mochila y se puso de pie.

—Ni se te ocurra irte sin decir adiós.

Dejando la mochila sobre la mesa, Yixing volvió a sentarse. —Mi clase comienza en quince minutos.

—Eso no te impide despedirte de mí, como castigo, ve por una bebida a la máquina expendedora. —habló sin despegar su vista del libro.

Extendió su brazo y abrió su mano esperando recibir el dinero, era mejor no pelear y terminar rapido.

—Tu castigo es pagarla e ir por ella, así que baja ese brazo.

Golpeó el piso con sus pies —Ambos sabemos que no tengo dinero.

—Tu problema, no mío.

—Problemas mi trase-

—Yo iré por ellas. —Junmyeon se puso de pie, caminó en dirección a la entrada de la biblioteca.

Jongdae estiró sus brazos en dirección a donde se había ido el mayor—¿Por qué no puedes ser un ángel como él?

—La misma pregunta te hago a ti.

Ambos se quedaron callados por 30 segundos, Yixing mirando los estantes mientras que Jongdae seguía con su lectura.

—Yixing. —rompió el silencio Dae.

—¿Qué?

—No le dijimos que tipo de bebidas comprara.

Lanzando un suspiro, Yixing se puso de pie y caminó en dirección a la puerta.

—Termine llendo de todas formas, ese idiota. —habló para si mismo.

Giró a la derecha y pudo ver la espalda de Junmyeon, este estaba recargado en la máquina expendedora. Yixing solo caminó hasta estar junto a la máquina.

—Olvidamos decirte cuales comprar.

Junmyeon dio un brinco por la sorpresa, el sonido algo golpear contra el piso, bajó su mirada y pudo ver un teléfono celular.

—Perdón por asustarte, déjame recogerlo. —se agachó por el celular.

—No es necesario, estaba distraído.

Tomó el celular, en el se mostraba un texto, del cual solo pudo alcanzar a leer "Yi" antes de que le fuera arrebatado por Junmyeon.

Junmyeon se puso de pie siendo seguido por Yixing.

—¿A que venías? —preguntó Junmyeon guardando su teléfono en su bolsillo.

—No te dijimos que bebidas comprar. —rascó su cabeza

—Pensé qué querían agua.

—Jongdae nunca compra agua embotellada, dice que es una tontería comprarla cuándo puedes coger cualquier botella y rellenarla en casa.

—Eso es cierto. —Junmyeon lució un poco avergonzado, era extraño para Yixing el verlo con las mejillas rosadas.

Kim sacó su billetera del bolsillo derecho de su pantalón, tomó un billete de ella para después insertarlo en la máquina.

Retrocedió dos pasos —Elige tú por favor.

Yixing algo apenado se puso entre la máquina y Junmyeon, vió las opciones, seleccionó las bebidas de fresa con kiwi, su favorita desde hace unos meses, y te negro de limón. Esperó unos segundos hasta que la máquina lanzará dos latas, se agachó y cogió ambas.

—¿Por qué no me enviaste un mensaje? —habló Junmyeon.

Se había quedado congelado, no se esperaba aquello.

Dio media vuelta hasta poder mirar a Junmyeon.

—Veras... ¿Có-cómo decírtelo sin que suene como una excusa? —sostuvo ambas latas con un brazo, rascó su nariz, estar solo con Junmyeon ya era difícil, pero el que hiciera esa pregunta lo hacía más.

—Solo se sincero.

—Bueno... Jongdae me quitó el cartón de leche y luego lo tiró a la basura, yo no presté mucha atención al número que anotaste sino a la carita que dibujante, era muy bonita por cierto, cuando quería ir por el al bote de basura Jongdae no me dejó y ya. —bajó la cabeza y cerró los ojos, era obvio que no le creería.

—Te creo.

—Sabía que no me creerías. —un sonido lastimero salió de sus labios.

—Yixing, dije que te creo.

—¿Enserio? —levantó su cabeza, pudo ver a Junmyeon sacar su celular.

—Si, no convivo mucho con Jongdae, pero por lo que he visto sé que eso es posible. —desbloqueó su celular, lo giró y pasó a Yixing.

—¿Por qué me lo das?

—Porque quiero que escribas tu número en el.

Casi se va para atrás, ¿Qué clase de broma es está?

—¿Hablas enserio? —no, no podía creerlo.

Junmyeon le quitó las latas —Totalmente.

Con las manos algo temblorosas ingresó su número de teléfono y lo agendó como "Zhang Yixing". Entregó el celular a Junmyeon.

—Gracias. Ahora volvamos antes de que ha Jongdae le dé un ataque.

Yixing solo asintió con la cabeza, se había quedado sin habla.