Somebody I Used To Know

You can get addicted to a certain kind of sadness
Like resignation to the end, always the end
-Gotye

Años despues

El nacimiento de Scorpius Abraxas Malfoy fue tempestuoso, hubo una gran lluvia en el pueblo y relampagos por todos lados, uno en partícular hizo que se fuera la luz de todos los alrededores.

Por su parte cuando nació Lyra Atenea Malfoy, un año despues fue un viento como nunca se habia visto, los sembradíos habian quedado arruinados

Lyra y Scorpius habian sacado el cabello platinado y los ojos de Draco, sin embargo habian heredado los rizos de Hermione, su nariz y labios. Desde pequeños se caracterizaron por su inteligencia, aprendiendo a hablar a partir de los 9 meses e iniciando a caminar un mes antes del año.

Edward por su parte siempre fue un hermano mayor sobreprotector, su mirada se fue agudizando con forme crecía, cuando cumplió doce, Draco y Hermione lo llevaron a una tienda del mercado negro para escoger una varita, nadie  preguntó o miró de más. A la vista de todos Edward no tuvo magia en sus venas, tuvo educación Muggle en las mañanas y llegando a casa Hermione y Draco le enseñaban todo lo que debía saber de su magia y como controlarla. Con el tiempo su magia se habia vuelto más salvaje, fuerte, extraordinaria, Lucius tomó entre sus manos la educación en defensa contra las artes oscuras.

Pansy y Blaise tuvieron un solo hijo, John Armand Zabini, diciendo que era más facil ser hijo unico mientras que Theo y Luna tuvieron dos gemelos, Lorcan y Lysander Nott.

El verano en donde Ed cumplio 13 años Draco y Hermione tuvieron que abandonar su tranquila vida en Escocia y se mudaron a Londres Muggle por cuestiones de negocios, Lucius estaba decidido a darle la empresa a Draco y él debía empezar a adaptarse, Hermione entró a trabajar a un buffet de abogados Muggle y mandó a sus hijos al preescolar mientras que Edward terminó en una secundaria privada.

Poco a poco, Draco y Hermione les enseñaron a hacer pociones tanto a Ed como a Scorpius y Atenea, niños brillantes de rapido aprendizaje, cuando Scorpius cumplió diez y Atenea nueve empezaron a experimentar con el viejo libro que Snape les habia regalado, algo acerca de más anotaciones, por su parte Edward estaba estudiando para presentar examen en Cambridge a forma de criminólogo, Lucius intento convencerlo de seguir sus pasos y los de Draco pero él se negó por completo, no estaba dispuesto a renunciar a su sueño.

Los tres fueron llevados a clases particulares de ballet y artes marciales, las semanas eran ocupadas y a veces saturadas pero los fines de semana Draco y Hermione apagaban su telefono y se dedicaban enteramente a sus hijos, sin interrupciones.

Eran buenos días, aunque no pudiera ir al mundo mágico, todo iba de maravilla, la vida muggle era buena y fácil de acostumbrarse, las vacaciones las pasaban en Italia o en Grecia, a veces visitaban a los Corleone en Estados Unidos. El mundo era perfecto y la preocupación no llegó hasta que Scorpius está por cumplir once Draco escribió a Theo y a Blaise para encontrarse en un bar cercano.

-Tendra que ir a Hogwarts -susurra pasándose una mano por sus cabellos- no quiero que esté solo, de por sí sera complicado ser hijo de un Mortifago.

-Creo que te estas preocupando de más.

- Yo creo que está siendo justo- aporta Blaise- Scorpius es un niño brillante, nadie va a molestarlo.

-O se meterá en tantos problemas como pueda, él es brillante pero también es agresivo cuando quiere.

-Puedo hacer que Armand venga a Hogwarts con él así no estará solo- ofrece Blaise.

-¿En serio?

-Si, por supuesto ademas Pansy y yo hemos estado pensando en mudarnos a Londres ella quiere estar al pendiente de la sucursal de aquí.

-Si, Luna tambien quiere volver ahora que ustedes están aqui, los gemelos no ingresaran hasta dentro de un año pero... Extraña Londres ademas, su padre no está muy bien de salud.

-En ese caso... Creo que estoy menos preocupado con ustedes aquí-acepta Draco- mandaré a desempolvar la mansión Malfoy, ya es hora de volver.

Cuando Scorpius cumplió once llegó la carta de Hogwarts, aceptandolo como estudiante. Él habia mirado a sus padres despues de leer la carta, Edward se mantuvo en silencio. Para ninguno de sus hijos era secreto lo que hicieron en la guerra, Hermione no escondía la marca en su casa.

-¿Scorpius? - pregunta su madre.

- Es solo que, estoy un poco nervioso.

-Tranquilo cariño, estarás bien, no olvides que eres un Malfoy - sonríe Draco- vas a estar bien

-Y si alguien te hace algo...-inicia Edward con tono semisugerente- tu solo tienes que decirme un nombre y yo me encargaré del problema

-¡Hyperion!- le regaña su madre - deja de decir eso

-Vamos mamá, estoy hablando en serio... Nadie va a dañar a mis hermanitos.

-Ah, igual que tu padre- suspira

-¿Protector y perfecto?

Scorpius y Atenea se rien.

°•••

-¿Escucharon la noticia?- entra casi corriendo a la madriguera Lavander a la reunion familiar semanal.

-¿Cual? - cuestiona Ginny ansiosa

-Los Malfoy mandaron a descombrar la mansión, dicen que regresan - el rostro de Harry y Ron se levantan en automático- y eso no es todo, los Nott y los Zabini tambien...

-Que extraño- murmura George- despues de catorce años regresan, debe ser algo importante.

-¿Quien te dijo eso?

-Estaba comprando los libros de Rose y el señor Lovegood no dejaba de hablar del regreso de su hija, la lunatica, y de todos sus amigos.

Luna... Luna ...

Harry parecia tan ido que George tuvo que meterle un ligero golpe cuando el ceño de Ginny se empezó a fruncir. La pelirroja no era tonta, podian estar mas de diez años casados y podria haberle jurado amor eterno pero en sus pesadillas siempre era el nombre de ella que gritaba, no se sorprendió cuando nombró Luna a su hija con el pretexto de ser por Lupin, él no era precisamente discreto. Poco o nada se sabia de lo que habia sido de Lovegood, sin embargo Ginny temia que con su regreso trajera problemas a su matrimonio.

-¿Los Malfoy?- preguntan James, primogénito de los Potter, un niño con aires egocentricos, a pesar de tener los rizos y el cabello de Harry sus ojos eran azules como los de su madre y su comportamiento dejaba mucho que desear, habia sido consentido hasta la medula del hueso por parte de los Weasley aunque Sirius lo trataba de manera dura en un esfuerzo a que se compusiera su caracter.

Igual a su abuelo habia dicho Snape una vez que se reunio a hablar con Sirius por el camino que estaba tomando el hijo de Harry

-Eran mortífagos, todos ellos... Al final dijeron que pelearon a nuestro lado. ¡Mentiras!- dice Ron- no son más que unos interesados y rufianes, se llevaron a nuestra mejor amiga ¿No, Harry? Estúpido hurón de cabellos blancos

-Bueno, ella decidió irse, ya era mayor para decidir - contesta su padre

-¿Pero si fueron Mortifagos?- esta vez es su pequeña Lily quien pregunta,la menor de los tres, ella sacó el cabello pelirrojo y los ojos azules de su madre, no era una gran belleza y tenía una inteligencia promedió, su mayor pasión era la danza clasica, Ginny siempre presumía su destreza en el arte, al igual que su hermano mayor ella fue consentida por todos desde su nacimiento.

-Lo fueron, Hermione no, pero ella los ayudó de salvarse de Azkaban- termina Ron- si los ven deberían tener mucho cuidado, son serpientes engañosas como todas.

-No creo que la culpa de los padres se deban pagar con los hijos- aporta Severus, el hijo del medio del matrimonio Potter, él sacó el cabello ondulado y azabache de su padre y la mirada verdosa de su abuela. De los tres fue el menos consentido podría decirse que fue la oveja negra de la familia, jamás se interesó por el Quidditch y nunca vio gran relevancia en otra cosa que no fueran conocimientos puros, era bueno jugando por supuesto, la tactica y la tecnica eran lo suyo, siempre estaba observando, taciturno. Sus primos jamás concordaron con él, demasiado estupidos para mantener una conversacion, todos estaban seguros de que iria a parar a Slytherin.

-Por supuesto, ya salio Albus... El intelectual- se burla James-¿por qué no mejor vuelves a tus libros ?

-¡James! No le hables así a tu hermano- le regaña Harry

-¿Por qué? Es más que obvio en que casa va a a quedar... Slytherin cuelga arriba de la cabeza de Albus

-Soy Severus- inicia, su voz no de alza pero no es necesario para sacar su despreció- y sería un gran honor pertenecer a Slytherin, por lo menos no voy a estar rodeado de idiotas que intentan vivir bajo la sombra de su padre

-¡Severus! -Lo regaña Ginny- disculpate

- Lamento que seas tan idiota, James. Con permiso- sale de la sala tan rapido como puede.

-Ugh, si uno de mis hijos queda en Slytherin jamás volvería a hablarle- dice Ron

-Si, porque tu eres un idota Ron- sonrie George

-Vamos, el tuyo quedó en Revenclaw.

-Tiene más cerebro que los tuyos, es natural - sonrie con sarcasmo.

-¿Por qué sigues viniendo a las reuniones si nunca traes a tu esposa o a tus hijo? Es más que evidente que no nos quieres en tu vida.

-No generalices, mamá necesita ver a un hijo que por lo menos razone

Sirius rueda los ojos, secretamente Albus era su favorito, a pesar a su obvia inclinación a las artes oscuras, las travesuras y el sacar el mayor provecho de la situación, era el niño más educado quien no se dejó influenciar por su madre o tíos.

-Si el inicia un imperio lo seguiré sin dudar- murmura Black a George cuando se sepran un poco de los demas

-¡Ja! Sería su más fiel seguidor si así le callo la boca a Ron -Ambos se rien.- ¿Entonces es cierto? ¿Todos regresan?

-Si, Narcissa mandó una carta de que volveran para llevar a la escuela a su nieto.

-¿Malfoy se casó?

-Por supuesto que sí caso

-Solo puedo imaginar a una sangre pura- se burla -tu sabes con quien ¿No?

-Dejare que sea sorpresa para todos.

•°••
Draco lleva a Scorpius a comprar su varita y sus libros, una forma para dar a conocer su llegada, Hermione insistió en que no era momento para que ella saliera. Asi que prefirió hacer la cena antes de que Scorpius se fuera a Hogwarts al siguiente día.

-Tu te iras a la universidad, Scopius a Hogwarts y yo me quedaré sola- refunfuña Atenea

-Oh, vamos... Solo será un año

- Ni siquiera se si quiero ir a Hogwarts ¿Puedo educarme en casa?

-No, no puedes... El Ministerio no lo permite, lo sabes

-Pero mamá, Ed se educó aquí, tiene una vida Muggle y tambie magia. Yo quiero eso.

-Tu hermano tuvo una situacion diferente a la tuya, asi que no

-Llevame contigo a Cambridge- le ruega.

-No, tienes que quedarte aquí, cuida de mamá y papá mientras no estoy- sonríe.

-esta bien -murmura

Mientras tanto Draco caminaba con Scorpius en el callejón Diagon.

-Detesto las compras padre, ¿Es necesario?

-Si, necesitas medirte la túnica, espera aquí ya vuelvo

Su padre desaparece en el mostrador, mientras que unos nuevos clientes aparecen. Harry se detiene de golpe, hay algo familiar en el rostro que le hace retroceder un poco.

-Malfoy ¿No?- la voz sale de forma despectiva de los labios de James.

Scorpius sonrie.

-Por el cabello, los aires de superioridad y los lentes, eres un Potter ¿Cierto?

-Scorpius- llama Draco aun en los vestidores - ven a probarte las túnicas.

-En seguida padre- el pequeño platinado da la vuelta para entrar a los vestidores cuando sale para que la modista termine de ver los ultimos detalles, James puede ver el mismo uniforme pero con una ligera diferencia en la tela, más fina y la medida exacta, el logo de Slytherin ya está en la solapa.

-Potter- saluda Draco con un ligero asentimiento.

-Malfoy

-bien, eso sería todo. ¿Algo más que pueda hacer por usted? - pregunta la modista.

-Otras cuatro tunicas iguales, la misma tela... Y la misma medida, pediré a mi elfo que venga por ellas.

-Sera un placer señor Malfoy .

-Hasta luego- se despide en general, Harry quiere detener su impulso pero aun así logra tomar el brazo de Draco antes de que salga- ¿Sucede algo, Potter?

-Si- suspira- ¿Dónde está Hermione?

Scorpius voltea a ver a su padre.

-En su casa- se encoge de hombros

-Ese día, fui un idiota con ella, quiero disculparme...

Draco frunce el ceño

- Tendras tu oportunidad- se suelta del agarre -Vamos Scorpius, tu madre nos espera

•••°

-Llevaba el logo de Slytherin, ni siquiera pasa el sombrero y ellos ya tienen el logo - se queja James llegando a su casa- ni siquiera yo estoy seguro de si quedaré en Gryffindor

-¿En que otra casa quedarias? No eres inteligente y definitivamente no eres astuto asi que tal vez Hufflepuff. - bromea Albus desde la esquina

-¡Pierdete!

-¿Habrá algun dia que no se peleen?- pregunta su padre y él solo se encoge de hombros.

Lo que Harry no sabía, es que este sería el inicio a un cambio trascendental en Severus Potter.

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