Capitulo 15

Se removió en la cama sintiendo el calor que emanaba del cuerpo de Jin chocar contra su piel. Lo observo por unos segundos,  al fin el chico había logrado quedarse tranquilo tras varias pesadillas y algunos lloros que Namjoon pronto asocio a la definición de tristeza. Lo cierto es que hasta esa noche nunca se había fijado en la melancolía que transmitía su mirada. Seokjin se marchitaba tan fácilmente... Como las flores. Demasiada calor las mataba pero también lo hacía el exceso de frío.

Jin era el tipo de ser humano que parece estar bien mientras se guarda mil batallas interiores. Y pudo comprobarlo tras tenerlo temblando entre sus brazos al borde de un ataque de ansiedad o quizás en el medio de uno.

-Nam – susurro. El nombrado se acerco más a Jin envolviéndolo en un abrazo protector más por instinto que por cariño. Sonrió a la vez por el sobrenombre que el muchacho le había puesto. No era la primera vez que lo llamaba así pero si la primera que alguien lo reclamaba con tanta necesidad de ser atendido. Por eso no pudo negarse a ayudarlo, tal vez y solo tal vez si Jimin hubiera estado en el piso el se hubiese ido sabiendo que dejaba a su amigo en buenas manos.

Sin embargo, Jimin no estaba y Namjoon no fue capaz de irse dejando a Seokjin solo después del repentino ataque de pánico del chico. Pensó en llamar a urgencias pero descarto la opción al comprender que no se quedarían cuidando a Jin toda una noche solo por una repentina caída en la ansiedad.

Al contrario de lo que muchos pensaban Namjoon podía llegar a ser realmente protector con las personas que apreciaba.  Lo fue con Hoseok en su momento, con su madre, con otros amigos… en su cabeza no existía una explicación para ese comportamiento que salía a flote cada vez que la gente cercana a él se encontraba mal anímica o psicológicamente pero le gustaba pensar que simplemente es una buena persona. O al menos lo intenta.

-Creí que te habías quedado dormido. – Jin tembló bajo el toque de las manos frías de Namjoon sobre su vientre - ¿Necesitas algo?

Se giro, aun sin romper el abrazo,  se recostó frente a Namjoon para mirarlo mientras hablaba. Iluminados por la luz de las farolas que se colaba a través de la ventana. Una estampa más similar a la de una pareja que a la de unos chicos que se habían conocido hace un par de semanas en una terapia de grupo.  O al menos por parte de Jin,  el cual, se encontraba totalmente perdido en el sentimiento de tener a alguien a su lado.

-Lo que ha pasado esta noche… -Namjoon acaricio la cadera de Jin animándolo a seguir hablando – Yo…cuando escuche el claxon de ese camión recordé el accidente de coche.  Estoy de acuerdo con que ya ha pasado mucho tiempo y debería superarlo pero simplemente me acuerdo de la muerte de mis padres cada vez que me subo a un vehículo. Eso me cuesta mucho más que el miedo a que nos estrellemos.

-¿Tus padres murieron en el accidente donde te hiciste la cicatriz?  - Jin asintió – Y tu estabas allí.- afirmó casi a modo de pregunta-¿Le tienes miedo a los coches o al recuerdo de tus padres muriendo en uno?

-Supongo que a ambos – hablo encogiéndose entre las mantas – No hice nada para ayudarles.  Deje que me sacaran del coche a mi pero no hice nada para sacarlos a ellos.

La mirada de Namjoon recorrió los ojos de Jin intentando buscar una emoción distinta a la del dolor en ellos.  Se había vuelto una costumbre durante las horas que lo tubo temblando o llorando sobre su pecho.

-¿Habrías logrado algo si intentases ayudarlos? – pregunto con la voz calmada – Estoy seguro de que no podrías haber echo nada Jin.  Y a juzgar por la cicatriz que tienes en la zona de las costillas no estabas precisamente ileso.

-El problema es que quizás si hubiera podido ayudar pero nunca lo sabré.  Siempre tendré esa duda. Ese pensamiento carcomiéndome la cabeza.

Namjoon suspiro apegándose al chico para sentir su calidez. Era agradable descansar con Jin en una misma cama. Intimo de una forma que le gustaba evitar pero al fin y al cabo más confortable de lo que llego a creer posible.  No pudo evitar pensar que con Seokjin dormitando a su lado no necesitaría la gran cantidad de mantas que solía usar o la calefacción.  La ventana del cuarto del chico seguía abierta y ni siquiera sintió el frio mientras se abrazaban.

-Necesitas trabajar en ello – Jin asintió a las palabras de Namjoon – pero creo que aunque Susan se implique con nosotros sus métodos no llegan a funcionar. Entiendo la importancia de hablar acerca de nuestros problemas pero dudo que sirva de mucho si no los enfrentamos de cara.

Jin se aparto de Namjoon y comenzó a pasear por la habitación.  Sus ojos recorrían una estantería con vinilos y el chico suicida noto el frío recorrer su cuerpo cuando se sentó sobre la cama observando al fatalista.

-¿Te importa si pongo música?  Me ayuda a conciliar el sueño.  Jimin y yo solíamos quedarnos dormidos escuchando clásicos del rock o grupos que nos gustasen cuando compartíamos litera en nuestra antigua casa. Ambos tenemos problemas de insomnio y esta técnica nos relaja -Namjoon asintió preguntándose el tipo de música que le gustaría a Seokjin - ¿Sabes que Leonard Cohen murió hace poco?  Es una pena,  estaba grabando nueva música que me hubiera encantado poder escuchar – Namjoon no conoció al cantautor del que le hablo Jin hasta que una melodía inconfundible se coló en sus oídos – Aunque siempre tendré el resto de canciones para deleitarme con su voz. 

“Now I've heard there was a secret chord that David played, and it pleased the Lord but you don't really care for music, do you? It goes like this: the fourth, the fifth. The minor fall, the major lift. The baffled king composing Hallelujah”

Namjoon se levanto de la cama y encendió la luz de la pequeña lámpara con bombilla anaranjada que descansaba sobre la mesilla a su derecha. Camino hacía Jin y miro sobre su hombro para observar la gran cantidad de vinilos que se esparcían en la estantería metálica, le recordaba a una taquilla de instituto.

-The Beatles, Simon & Garfunkel, The Doors, Bob Dylan, The Rolling Stones, The Clash,  Pink Floyd… Nunca imagine que te gustasen los clásicos.  ¿Tienes alguno favorito?  - pregunto pasando su dedo por algunos de los vinilos. Jin sonrió y percatándose de esto Namjoon llevo su mirada hacía el chico.  Por primera vez parecía realmente emocionado, como si deseara desde hace mucho hablar acerca de su pasión por la música.

Jin conocía perfectamente la localización de cada uno de sus vinilos así que cuando se movió rápidamente Namjoon se encontró preguntándose  si el orden de estos tendría algun sentido.  Pues no se encontraban en orden alfabético ni tampoco situados por época.

-Fleetwood Mac, Rumours – hablo destilando emoción – No te puedes imaginar lo mucho que me costo encontrarlo. – Namjoon dejo escapar una pequeña carcajada de sus labios.  Jin parecía un niño pequeño colocando el vinilo en sus manos y señalándole sus canciones favoritas - No dejo pasar una semana sin oírlo.  Es la música que me gustaría que me acompañara en los momentos importantes de mi vida.

-Pareces muy sumido en esto – hablo Namjoon haciéndole una seña a Jin para que colocara el vinilo que sostenía en el tocadiscos. Una vez más el chico se movió con la felicidad resplandeciendo en su rostro aceptando la petición de Namjoon.

-La mayoría eran de mi padre.  A él le encantaba sentarse conmigo en el salón para hablarme sobre el rock de los setenta y ochenta.  Simplemente amplié la colección tras su muerte, siempre me ha gustado la música.  Es algo como la terapia pero sin tener que hablar de lo que me sucede.  Solo me siento o acuesto sobre la cama y miro hacía el techo intentando disfrutar de lo que escucho.

-¿Podemos hacer eso?  - un extraño dolor aprisiono el pecho de Namjoon al comenzar a escuchar la melodía.

-¿Echarnos sobre la cama, mirar al techo y disfrutar de la música?  - pregunto Jin – Claro.  ¿Necesitas hablar de algo?

Ambos se acercaron a la cama y se acostaron.  Miraban al techo mientras cada palabra de la nueva canción curaba sus almas en forma de efecto placebo.  Cuando el disco se acabara volverían al mundo normal pero por el momento podían sumirse en cada acorde, disfrutarlo, llorar, soñar… ser solo dos personas escuchando la más bonita melodía, o la más triste, o la más rabiosa… daba igual mientras sus mentes se centraran en la historia que la letra les contaba.

-Últimamente la terapia empieza a afectarme – Jin miro a Namjoon animándolo a seguir hablando. La canción Dreams de Fleetwood Mac como testigo de la charla entre los dos chicos- Antes simplemente hacía lo que quería pero ahora no puedo evitar el pensar en las personas que me quieren antes de hacer alguna locura.  Pienso sobretodo en mis padres.  No te haces una idea de la mala vida que les di. Siempre me escapaba de casa y me metía en algun lio. Para mi era divertido, emocionante y para ellos una tortura. Lo sabía pero nunca deje de hacer lo que quería cuando quería, discutíamos hasta que soltábamos cosas por la boca que no pensábamos. Me recuerdo a mi mismo gritándole que los odiaba o que ojala se murieran de una maldita vez. Ahora pienso en ello y me avergüenzo… los echo tanto de menos Jin… pero ni siquiera de esa manera he dejado de hacer lo que hago.  No he dejado de pelear, de arriesgarme, de buscar adrenalina en los lugares más peligrosos…

-Mi chico suicida – susurro Jin y los ojos del mencionado se clavaron en él- ¿Nam te gusta tu vida? Quiero decir… cuando piensas en quien eres , ¿estas realmente satisfecho?

Namjoon se mantuvo en silencio durante un par de minutos que a Jin le parecieron eternos. Tenía miedo de haber hablado de más, de haber confundido las cosas.

-No lo sé – respondió finalmente – Se supone que debería gustarme.  Hago lo que me apetece sin pedir explicaciones a nadie pero si quieres saber la verdad no lo sé.  No sé si me gusta mi vida o no. La disfruto al menos. ¿Y a ti?

-¿Si me gusta mi vida?  - Namjoon asintió – Oh, eso es fácil.  No me gusta nada que tenga que ver conmigo. Como entenderás eso incluye mi vida.

Namjoon aparto la mirada del techo y observo durante unos segundos a Jin.  La mirada de tristeza había vuelto a sus ojos, esos que siempre estaban envueltos en ojeras o rojez.

-¿Por qué?  - Jin sonrió sarcásticamente cuando Namjoon le pregunto el porque del odio a su vida.

-¿En serio?  Si no fuera por Jimin estaría solo en el mundo y ni siquiera sé como aun no se ha escapado.  Mis manías y mis miedos asustan a todo aquel con el que me topo. Cuando pienso en mi futuro me veo igual de solo que ahora pero con un tarro de pastillas en mis manos.

Namjoon trago con fuerza.  No le gustaba esa tristeza y no sabía el motivo de ello.

-Jin tener una pareja esta sobrevalorado.  ¿Qué importa si no tienes a nadie?  El amor romántico no existe, las películas o los libros lo hacen muy atractivo pero lo cierto es que en la realidad acabas cansado de estar con la misma persona solo unos meses después de empezar algo con esta. Lo que al principio amabas se convierte en objeto de tu odio.

Jin se giro sobre la cama y llevo su mano al cuello de Namjoon.  Cuando acaricio la piel fría de su clavícula este cerro los ojos.

-Soy un romántico Nam.  Da igual si a veces me gusta el sexo ocasional o si no leo novelas románticas a cada segundo.  Cuando pienso en lo que me gustaría tener la idea de una pareja a la que amar en todas las formas posibles siempre se instala en mi cabeza. Alguien a quien acariciar de la forma que intento mostrarte – Jin bajo su mano hasta el pecho de Namjoon colándose en la camiseta de este y mimando su piel con lentas a la par que suaves caricias – Alguien que me acoja cuando me coloco sobre sus piernas buscando mimos – Jin se sentó a horcajadas sobre Namjoon y por instinto este rodeo la cadera del chico. – Alguien a quien pueda besar tan lento que el momento se haga realmente intimo, como si solo ambos supiéramos lo que se pasa por nuestras cabezas.  Solo nosotros dos entendiendo lo que quiere y desea el otro. Entendiéndonos como nadie más puede.  Con el mundo en nuestra contra– esta vez Namjoon dudo cuando Jin lamio su labio inferior pidiéndole que abriera la boca para recibirlo sin embargo no tardo en aceptar el beso.

Jin rodeo la nuca de Namjoon con sus manos acariciando la piel y cabello de este con delicadeza. Sus piernas se apretaron alrededor de la cadera del chico mientras mantenía el beso en una velocidad lenta.

Sus labios rozaron los de Namjoon y se lengua exploro cada parte de la boca del chico logrando que un suspiro se le escapase. Cuando se separaron Jin lamio los labios de Nam con mimo antes de dirigirse al cuello de este y succionar la piel blanca enrojeciéndola.

-Joder Jin – susurro el chico suicida – A veces puedes ser intenso.

Sonrió aun sobre el cuello de Namjoon y a este le gusto el sentimiento que comenzaba a extenderse por sus terminaciones nerviosas.

Protesto cuando Jin se bajo de sus piernas y volvió a tenderse sobre la cama.

-Quiero poder hacer eso cada día con alguien que sienta lo mismo que yo. Saber dónde tocar para volverlo loco o que decir para lograr que sonría. Que él haga lo mismo por mi.

(***)

Namjon y Jin se despertaron horas después con el sonido de una acalorada discusión atravesando cada una de las paredes de la casa.

Un confundido Seokjin se levanto rápidamente al escuchar los gritos de su compañero y prácticamente corrió hacía la zona de donde provenían las voces con Namjoon pisándole los talones.

-¿Qué sucede?  - pregunto preocupado tras llegar al salón y observar la nariz sangrante de Jimin. A unos pasos de este se encontraba Yoongi chupando la sangre que se esparcía por su labio.

Namjoon se coloco a un lado de Jimin casi de forma protectora cuando el chico que desconocía intento acercárseles. Miro a Jin un segundo, este posaba su mano en la cara de su amigo intentando comprobar si la herida era grave. Realmente parecía un hermano mayor preocupado y nervioso.

-Oye lo siento pero tu me golpeaste primero – Jimin hablo captando la atención de todos – Es que no entiendo para que necesitas una novia. No quería decir todo lo que dije pero… solo… lo siento Yongs.

-Hazme un favor – hablo el otro chico.  Namjoon lo observo con precaución, parecía a punto de explotar – Déjame en paz. Sabes que no puedo salir con hombres. Ya he decepcionado a mi familia las suficientes veces y no lo volveré a hacer. No por ti.  Estas obsesionado con la danza pero no entiendes que si empiezo algo contigo mi padre hará lo posible por arruinar mi futuro en la música.

-¡Eres un maldito hijo de… - Jin tomo a Jimin del brazo instándolo a relajarse – Hace una semana estabas follando conmigo y diciéndome que era especial. ¿Qué ha cambiado?

-Vamos Park . Te conozco desde hace unos meses.  Tenemos buen sexo pero eso es todo.  Si te dije que eras especial es porque tienes esa jodida idea de que necesitas mejorar en todo metida en la cabeza.  No me apetecía lidiar con un niño inseguro mientras estaba caliente . – un sollozo se escapo de la garganta de Jimin y Jin lo acogio en sus brazos mientras Namjoon detenia a Yoongi cuando este intentaba acercarsele – Oye.  Te aprecio pero admite que fue un error decirle a mi novia que tu y yo tenemos sexo mientras ella me es fiel.

Jimin no contesta.  Esconde la cabeza en el cuello de su hermano intentando que las ganas de llorar se esfumen.

-Deberías irte – Jin mira de una manera peligrosa al chico que ha lastimado a su hermano.  Esa mirada característica en él cuando se trata de proteger a su único amigo.

Yoongi lo ignora y una vez más intenta avanzar hacía Jimin. Sin embargo,  cuando intenta tocar la espalda del sollozante muchacho alguien lo detiene.  La fuerza con la que sujetan su brazo lo hace encogerse y deja que un pequeño grito salga de su boca.

-No era una invitación que puedas ignorar– Namjoon clavo aun más los dedos en la piel del brazo del pelinegro – Jin te ha dicho que te vayas. Es mejor que no trates de acercarte a ellos o yo mismo me encargaré de romperte la cara. ¿A que esperas?  ¿Sabes donde esta la puerta?

Jin sintió una oleada de calor rodeándolo.  Nunca antes nadie los había defendido de la manera en que Namjoon lo estaba haciendo ahora.  Siempre habían sido Jimin y él,  solo ellos dos enfrentándose a todo lo que les caía sobre los hombros.

Yoongi se froto el brazo cuando Namjoon lo soltó.  Miro a Jimin, el dolor instalándose en cada parte de su tensa espalda mientras lloraba abrazado a su compañero de piso. Nunca lo admitiría pero solo el echo de verlo de esa forma le hacía desear poder quedarse a su lado. 

Es cierto que solo se conocían de tres o cuatro meses pero las veces en que se encontraban siempre implicaban largas charlas acerca de asuntos que nadie más que ellos dos entendería. Yoongi había encontrado en Jimin un consuelo, por eso cuando este hablo un segundo antes de que abriera la puerta dispuesto a irse todo pareció caerle encima. 

-Busca un psicólogo Yongs. Yo adoro hablar contigo,  en serio, podría pasarme horas escuchando cada una de las palabras que salen de tu boca pero mientras yo he empezado a quererte tu solo me usas para olvidar tus problemas.  – Jimin sollozo de nuevo y Yoongi no se atrevió a girarse para mirarlo a la cara – Joder.  Odio tanto haber empezado a necesitarte.

¿De veras Jimin pensaba eso? El no lo usaba como psicólogo ni como objeto para olvidar sus problemas, le gustaban las horas de charla, las sonrisas cómplices que escondían en la noche. Pero simplemente no podía olvidarse de sus padres y comenzar una relación con un chico que ni siquiera tenia claro si quería.

-Olvídate de mi Jimin.  Solo déjame vivir en paz – aun sin volverse a mirarlo abrió la puerta y salió del departamento cerrándola con un golpe. Sabiendo que esas palabras implicaban una de las mayores mentiras que jamás había dicho.

En la calle una nueva tormenta había comenzado.  Tranquila pero cobrando fuerza con cada minuto que pasaba , se acercaba a la ciudad impasible.

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Heiiiia!!!
Un poquito de Yoonmin para el body ¿no?. Es mi ship fav ASI que era necesario jaja.

¿Quereis que siga incluyendo escenas secundarias de Yoonmin en Do you! ?

Espero que os haya gustado este episodio y una vez más muchísimas gracias por los 3K

Os amo, Mel xoxo