"Un pajarito me dijo que estás comiendo muy poco".  Comenta él castaño antes de soltar su cuerpo sobre el cómodo sofá que tiene vista a la cocina.

"Creo que sería fácil saber quien te lo dijo".

"Solo responde, ¿es cierto?"  Taehyung esta integrado, observando desde su asiento los moviéndoselo de su amigo.

"Estoy subiendo de peso, hace unos días quise comprobarlo en la báscula y creo que ahora soy una vaca". Confiesa, soltando aquello igual que un berrinche,.

"Pues yo te veo perfectamente bien, no entiendo para qué haces esto".

"Tu haces lo mismo, te matas de hambre por semanas a base de agua y licuados de proteína, yo solo me comporto riguroso en las comidas y no pruebo ni un bocado más".

"Dios. Jimin, Yo lo hago por trabajo, de eso vivo. Mi imagen es muy importante en lo que hago y si me descuido un poco seré criticado y ya estoy harto de los malditos chismes o entrevistas que solo tratan de incomodarme" 

"Tu vives metiéndote en problemas, aún recuerdo cuando salías con tres alfas al mismo tiempo y uno de ellos tenía pareja". 

"Soy actor, no un santo, además te recuerdo que ahora trato de detener una relación a la vez.".

"Como sea, lo tuyo es monetario y lo mío personal, no quiero verme como una ballena ahora duermo abrazado por Yoongi Hyung".

"Por dios, él fue quien me lo dijo porqué no quiere que te enfermes, no le importa en absoluto si aumentas un par de kilos".

"Pues a mi si, ¿sabes lo importante que ha comenzado a ser en el medio? No quiero pensar en que dirán cuando la gente note que tiene a un chico híbrido y además obeso a su lado".

"Eso no es lo importante, él se preocupa por ti y dudo mucho que le interesen las opiniones de personas irrelevantes en su vida".

"Solo ha sido una semana, no entiendo porque hacen tanto drama, no va a pasarme nada.

"¿No has pensado que es muy sospechoso que mi celo llegará antes que el tuyo?"

"¿Y eso porque sería sospechoso?"

"Bueno, podré parecer un poco extraño pero mi celo llega una semana quizá dos después del tuyo, lo se porque así ha sucedido las últimas dos veces".

"N-no, yo suelo ser un poco irregular, además no es posible porque siempre estoy cuidándome".

"¿Usan protección?" El felino menor se cruzó de brazos y sonrió con burla.

"¡Kim Taehyung! ¿Que clase de pregunta es esa?"

Sus mejillas se habían pintado con gran velocidad, demostrando lo avergonzado que le habían hecho sentir las insinuadoras palabras del actor.

"Una que deberías responder. Anda, dime".

"A.. veces, pero tomo la pastilla". 

"Pero no siempre es efectiva".  Una linda risa se abrió paso entre sus labios.  "Y tú siempre me decías que tuviera cuidado".

"No estoy en estado, solo estás confundido y yo estoy engordando, así que por favor cierra lo boca".

"Pues yo creo que deberías hacerte un estudio, no confío en la pruebas, en ocaciones suelen fallar".

"Estás loco".  Respondió y trató de finalizar aquella conversación.

Su mirada se mantiene pérdida, detallando una y otra vez la posibilidad que Taehyung le hizo ver, poco antes de que soltar un ligero chillido.

Los brazos de Yoongi le rodean con fuerza, atrayéndolo hacia su pecho, entrelazando sus manos y depositando un par de besos sobre sus bonitos hombros.

Gracias a la posición le es imposible observar la expresión del mayor, pero gracias al tiempo de conocerlo, intuye que este encuentra sonriendo.

—Taehyung está esperándote en la sala, le dije que irás en un momento.

—¿No puedes quedarte? —Un lindo puchero se forma sobre sus labios.

—Sabes que no. Te prometo tratar de regresar lo antes posible, después de todo se que hoy es tu día libre y te aseguro que después de llevar la memoria pasaremos todo el día juntos.

—Entonces ve, quiero tenerte conmigo todo el tiempo que pueda.

—¿Aún más?

—Yoonie, esta semana solamente has llegado a dormir y me preocupa que no has descansado ni un poco. —Responde, besando con rapidez los delgados labios.

—Me fascinas Jiminie.

Min decide acorralar al chico contra la pared, con intenciones de seguir besando un por un momento más aquellos labios que tanto le hacen suspirar, despidiéndose sin muchas ganas pero asegurándole una vez más que no tardará mucho.

Min Yoongi se había marchado de su hogar aproximadamente una hora o dos horas atrás. Aquello hacia que la sangre del castaño hirviera de molestia, se había tardado bastante en convencer al rubio de sacar los estudios que se había hecho hace unos días, sin contar lo mucho que se desgastó al insistir que se los mostrara una vez que los tuvo sobre sus manos.

Su labio era apretado fuertemente entre sus dientes, que trataban de contener los nervios dentro de su pequeño cuerpo. —No estoy seguro de esto.

—No hay alternativa.

Ambos se encontraban sentados uno frente al otro, en distintos sofás y con una pequeña mesa de cristal de por medio, donde se encontraban dos tazas de té y un plato de ricas galletas que había preparado el más bajito el día anterior.

—¿Y si mejor hablamos de tus problemas amorosos?

—Jimin, abre ese maldito sobre ahora si no quieres que te lo arranque de las manos y lo abra yo mismo.—Le advirtió, cansado de los intentos que hacía su amigo por cambiar de conversación.

—No, no, no. —Trato de calmarle y hacer lo mismo consigo. —Lo abriré, solo trata de tenerme paciencia...

Aquel sobre era maltratado una y otra vez por las pequeñas y gorditas manos.

—Es un gran defecto mío no contar con ella, así que dime en este momento si seré tío.

—Solo cállate, no me haces sentir mejor y estoy seguro de que voy a vomitar de nuevo, pero esta vez será sobre ti. —Jimin sentía que los nervios le carcomían el alma.

—Otra señal de un posible gatito en camino. —Sonrió y por un momento pensó en dedicarse a leer la mano de los demás.

Sus dudas comenzaron a sentirse pesadas y en un arranque de ira rompió la orilla del sobre que contenía parte de su futuro.

—¿No sería mejor esperar a Yoongi?

—Te juro Park Jimin, que si no abres esos papeles en este instante voy a enloquecer y le diré a todos tus vecinos que te gusta usar ropa interior femenina. —Realmente era una amenaza que estaba considerando.

—¡Eso es mentira! —Se defendió.

—Pues ellos no lo sabrán y entonces empezarán a correr tantos rumores que en tu próximo cumpleaños serán los únicos regalos que recibas.

—Eres un dementé.

—Y tu un chico que prefiere estar en el hospital, dando a luz y recién aceptar que te encuentras en estado de gravidez.

—Bien. Tú ganas, veremos que dicen los malditos papeles.

Inhalo y decidió retener el aire el mayor tiempo posible, rogando por perder el conocimiento antes de lograr leer los resultados.

—Tranquilo, si dice lo que espero no sería algo malo, tú me has dicho que te gustaría tener gatitos.

—Quiero, sería un sueño. —Pellizco su labio una vez más. —Pero no estoy seguro de que sea el momento, su carrera está despegando rápidamente y yo estoy muy feliz trabajando. La primera noche aquí... el me pregunto acerca de esto y no supe cómo reaccionar.

—¿No te sientes listo? —Taehyung corrió hacia su amigo, sentándose a su lado y sosteniendo una de sus manos.

Park sonrió, negando con diversión antes de dirigir su vista a los resultados. —No creo estarlo tan fácil para cuatro o cinco, pero incluso de esa forma estría muy feliz.

Pestañeó al inicio de la lectura, esperando que sus ojos no se aguaran y le hicieran soltarse en un mar de lagrimas por horas y horas

—¿Y? ¿Qué dice?

La puerta principal fue abierta por el dueño de aquel lugar, quien regresaba desesperado por cumplir la promesa que había hecho con su chico, sin embargo, no espero que la imagen de su gatito llorando fuese lo que le diese la bienvenida.

—¿Jimin? —Comenzó a acercarse. —¿Amor, todo esta bien?

Taehyung comenzó a escabullirse, creyendo que era lo más prudente desaparecer de aquel lugar.

—Mi amor. —Su naricita se encontraba rozada y sus mejillas aún más. —¡Vas a ser papá!

Con esto último me despido, espero que la historia fuera de su agrado y gracias por el apoyo y los mensajes bonitos que me han dejado leer por aquí.

Los amo mucho UuU < 3

Yui-Chan ❤️