– Bueno se que me estoy tardando. Asi que esta semana, al menos esta historia se actualizara 1 vez por dia. –

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En poco tiempo el niño de cabello blanco se dio cuenta que no encontraría a nadie que lo aceptara. Casi literalmente. –

– Ya casi no le quedaba dinero para continuar alojándose en el hospedaje en el que se encontraba. Él ya estaba pensando en volver y dejar el sueño de ser aventurero y regresar a la aldea de donde venia. Sin embargo....

"Una última vez", se dijo así mismo.

– Tomo su chaqueta y se la coloco mientras pasaba la puerta. –

– Mientras tanto, Lili, que había entrado en la ciudad fue directamente a un centro de juegos. Uno pequeño, en el que decidió apostar una cien valis, aunque no tenía nada. Su contrincante lo dudo por un momento, pero luego de que ella le sacara una bolsa pequeña en la que ella había echado unas cuantas piedritas para que pareciera algo llena, este acepto sin más. –

– No paso mucho tiempo hasta que ella ganara. Llevándose al final varios miles de valis. –

Nota 3: Los valis solo son considerados en gran cantidad cuando sobrepasan el millón. Si lo viéramos de una manera... 100 valis equivaldrían a aproximadamente $1.

"No volveré a jugar. No volveré a jugar", cada contrincante que termino 3 partidas con ella se negó a jugar de nuevo.

– Su adorable rostro se entristeció al darse cuenta que nadie quería continuar con ella. Se levanto y tomo el bastón que llevaba. Sonrió y agradeció las partidas. Todos la miraron llenos de confuncion por como su molestia se había ido con esa sonrisa que dio. –

– Ya saliendo del pequeño establecimiento de juegos Lili se topó con él. Un niño de cabello blanco, que se cayo al suelo para no golpearla. En pocas palabras, él retrocedió para no chocar con ella, tropezándose y cayendo hacia atrás. –

– Él levanto la cabeza para mirarla. Se encontró con ojos azules que eran profundos. Aunque realmente ella estaba mirando hacia él, de alguna manera también parecía no estar mirándole. –

"Te has hecho daño?", le pregunto Lili.

"S-Solo un pequeño golpe".

– Ella extendio su mano para dársela, y Bell se sorprendió por lo delicada que era. Como un recién nacido. – "S-S-Saludo...".

"¿Saludo?", ella lo miro confundida.

"S-Saludo.... Yo... quise decir hola".

– Dudando sobre cómo debería responder ella cerro los ojos nuevamente para ayudarlo, y cuando él se levantó, se presentó como Lili y él le dijo que se llamaba Bell. –

– Ella le pregunto que estaba haciendo y él dijo que solo estaba viendo la ciudad, e inmediatamente supo que le estaba mintiendo. Lili no le enfatizo ese hecho. –

– Lo acepto y luego por petición de ella caminaron por la ciudad, con Bell ayudándolo a llevar su dinero. –

– Como Lili le había dado todo lo que llevaba para que él lo cargara, él le pregunto si no tenía miedo a que el le robara, a lo que ella contesto, que él no le parecía mala persona. –

– Luego de un rato más, Bell le dijo por que caminaba con los ojos cerrados y ese palo delante como si fuese una ciega, y ella le dijo que era algo que siempre había hecho. –

– Lili le dijo que, a pesar de tener casi siempre los ojos cerrados, ella aun así estaba bastante consiente de lo que pasaba a su alrededor por los sonidos. –

– A pesar de su larga explicación que le pareció tan interesante, Bell no estaba seguro del todo. –

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