LEVIATÁN: Profesor, ¿ha encontrado alguna pista para abrir el pasadizo que conduce al cristal?

PROFESOR: Siento deciros que no, mi ama.

ANFÍTERES: Me lo temía.

LEVIATÁN: No se puede ser más incompetente. Déjame leer las runas.

PROFESOR: C-Como ordenéis, mi ama.

ANFÍTERES: ¿Crees que puedes descifrar las runas?

LEVIATÁN: Por supuesto. Bien, veamos...

VIDAR: Maldita sea. Van a descifrar el acertijo para acceder a las profundidades del templo.

BRISA: Ow...Mi cabeza... ¿Qué ha pasado?

VIDAR: ¡Qué alegría que hayas despertado, Brisa! .Pensaba que habías muerto.

ANFÍTERES: Qué ingenuo eres, el que tu amiga haya perdido el conocimiento es un efecto secundario de la toxina que se halla en las uñas de Leviatán. Hay que reconocer que es una habilidad extremadamente útil para doblegar a los enemigos. Si me disculpáis, debo seguir las indicaciones de Leviatán mientras sigue descifrando las runas.

BRISA: Vidar, yo...lo siento mucho...Por mi culpa hemos fracasado en nuestra misión.

VIDAR: No hace falta que digas nada, teníamos la batalla perdida desde el principio. Yo también lo siento, deberíamos haber planificado una estrategia y así nuestros amigos no habrían muerto de una manera tan horrible.

LEVIATÁN: Si el cristal quieres hallar, 3 pruebas has de superar. Para la entrada poder encontrar, un aura noble en el pedestal has de colocar.

ANFÍTERES: ¿Eso es todo? JAJAJAJAJAJA. Vale, dejad que coloque mi mano y que este pedestal sienta mi nobleza en todo su esplendor.

Anfíteres pone la mano en el pedestal pero no ocurre nada.

ANFÍTERES: ¿Qué significa esto?

VIDAR: Jajajajajajaja, yo es que me parto. ¿Cómo has podido pensar que poseías un aura noble?

LEVIATÁN: Trae a la chica, será nuestro billete de entrada.

BRISA: Me niego, prefiero la muerte.

LEVIATÁN: Tú misma. Anfíteres, dale una muerte lenta, dolorosa y horrible a ese muchacho.

ANFÍTERES: Será un placer.

BRISA: De acuerdo, pondré la mano en el pedestal...pero no le hagáis daño.

Brisa pone la mano en el pedestal y comienza a emitir una luz que baña el centro de la sala para dejar al descubierto unas escaleras.

PROFESOR: ¡Al fin! Seré el primero en visitar estas ruinas arcanas.

El profesor es atravesado por un rayo de Leviatán, cayendo al suelo su cuerpo inerte.

LEVIATÁN: Quien no es capaz de serme útil es indigno de seguir con vida. La muerte es tu disculpa por tu incompetencia, viejo chiflado.

ANFÍTERES: Ya está abierta la entrada. Pero para esas 3 pruebas que hay que superar, lo más recomendable es llevar conejillos de indias.

LEVIATÁN: Buena deducción, me pondré en contacto con la nave principal. Utilizaré el transmisor de mi brazalete, ¿puedes oírme Lya?

LYA: Le escucho. ¿Qué necesita mi ama?

LEVIATÁN: Necesito que aparte de ti vengan 3 de nuestros hombres al templo ahora mismo. El resto han sido asesinados.

LYA: Como usted diga, nos teletransportaremos allí enseguida.

BRISA: ¡Sois despreciables! ¿No tenéis ningún tipo de remordimiento en utilizar a los vuestros sin que os importe lo más mínimo lo que pueda ocurrirles?

ANFÍTERES: Si nos importara el Imperio no habría prosperado tanto.

LEVIATÁN: Nuestra única preocupación es mantener nuestro reinado sobre todo el universo y cumplir los deseos de nuestro Maestro Supremo, el gran Abagizal.

Lya y los 3 soldados aparecen de repente en el centro del templo.

ANFÍTERES: Justo a tiempo, ya me estaba aburriendo de tanto esperar.

LYA: Ama Leviatán, ya estamos aquí. Estamos preparados para seguiros hasta los confines del universo.

LEVIATÁN: Así me gusta, es hora de cumplir nuestra misión.

VIDAR: Cómo me alegro de no estar bajo el yugo de estos malditos demonios.

BRISA: Y yo, todo el mundo tiene derecho a decidir por sí mismo lo que quiere hacer.

ANFÍTERES: Si habéis terminado de cuchillear empezad a andar. Y daos brío o lo lamentaréis.

LEVIATÁN: ¡En marcha todo el mundo!

FIN DEL CAPÍTULO 8

CONTINUARÁ...