Brisa y Vidar llegan finalmente a Pyron, donde según parece se encuentra oculto uno de los 4 cristales elementales (valiosas piedras capaces de despertar a los Draco y hacer uso de su enorme poder). Al aterrizar, pueden comprobar que las naves del Imperio Dragón ya se encuentran en la zona.

BRISA: Nos llevan ventaja. Debemos apresurarnos o se harán con el cristal y es algo que no podemos permitir.

VIDAR: No nos lo arrebatarán...Haremos esto por Lúmina.

BRISA: Soldados, sé que tenéis miedo y que estáis asustados. Desconozco lo que nos espera en este planeta pero sí tengo una cosa clara: tenemos que preservar el legado de nuestra noble líder Lúmina de traer la paz al universo aunque tengamos que dar la vida para ello. ¿Estáis listos para la batalla?

SOLDADOS: ¡Siiiiiiiii!

VIDAR: Genial. Vamos a darles a esos estirados del Imperio una lección que jamás olvidarán. Si permanecemos juntos venceremos, adelante.

SOLDADOS: ¡Siiiiiiii!

Con estas palabras, marcharon en busca del cristal. Recorrieron una gran distancia durante varias horas. Finalmente, hallaron un gigantesco templo vigilado por cientos de guardias pertenecientes al Imperio.

BRISA: El templo está muy vigilado...Estoy segura de que ahí se encuentra el cristal.

VIDAR: Eso parece. Lancémonos a por ellos sin piedad ahora que están distraídos.

BRISA: ¿Estás loco? Como vayamos sin una estrategia nos vence...

VIDAR: ¡SOLDADOS! ¡AL ATAQUEEEEEEEEEEE!

BRISA: Nunca me escucha, pero no voy a quedarme atrás y perderme la diversión. Preparaos, porque allá voy.

SOLDADO IMPERIAL: ¡Nos atacan! ¡Contraatacad! (es acuchillado)

Comienza un enfrentamiento entre el escuadrón de Brisa y Vidar contra los soldados del Imperio. Hay continuas bajas en ambos bandos y tras vencer a varios soldados, Brisa y Vidar llegan a las puertas del templo. Sin previo aviso, comienzan a sentir una increíble energía que se dirige hacia ellos y emplean su barrera de aura para protegerse del ataque. A su alrededor pueden contemplar a todos envueltos en una capa de hielo, siendo destrozada al instante junto a sus cuerpos.

ANFÍTERES: Has barrido todo el escándalo que había aquí formado, Leviatán.

LEVIATÁN: Mis poderes de glaciación y de quiebre gélido son extremadamente útiles para limpiar la morralla de los alrededores.

ANFÍTERES: Pero también has acabado con nuestros propios soldados.

LEVIATÁN: Eso es irrelevante, su utilidad era contener a los enemigos para que pudieran ser aniquilados.

ANFÍTERES: Tan fría y despiadada como siempre. Pero mira que tenemos aquí: a dos supervivientes.

LEVIATÁN: Vosotros otra vez...

ANFÍTERES: Cuanto tiempo sin vernos, queridos míos.

LEVIATÁN: Así que las aberraciones vuelven a mostrarse ante nosotras una vez más.

VIDAR: ¿A quién estás llamando aberraciones?

BRISA: Han venido dos Diosas Dragón a por el cristal. Tendría que haber tenido esto en cuenta, dada la importancia de este asunto.

ANFÍTERES: Tan analítica como siempre, preciosidad. Después de todo eres mi obra maestra, hecha para servirme.

BRISA: ¡Ni se te ocurra llamarme así!

VIDAR: ¡No volveremos a serviros jamás! ¡Nos utilizasteis para vuestros intereses como si fuéramos vulgares herramientas!

LEVIATÁN: Es lo que sois. Después de todo nosotros, los Dioses Dragón, os creamos a vosotros y a esos cinco traidores otorgándoos un potencial extraordinario para que constituyerais una parte esencial de nuestro Imperio perfecto, pero renunciasteis a vuestra categoría y huisteis. Mucho me temo que esa Lúmina os influyó de manera extremadamente negativa.

ANFÍTERES: Era la primera vez que intentábamos crear súbditos tan capaces de cumplir todos nuestros planes de conquista y creíamos haber tenido éxito. Era necesario poseer mejores activos, ya que nuestros soldados no son del todo confiables.

BRISA: ¿Y dónde está? ¿Qué le habéis hecho?

LEVIATÁN: No tenemos por qué decíroslo, pero quien desafía al gran Abagizal no sale bien parado jajajajajajajajaja.

VIDAR: Si no estáis dispuestas a hablar, me veré obligado a arrancaros esa información a la fuerza.

ANFÍTERES: ¿Es esa tu versión de una amenaza? Qué adorable. Bien, antes de seguir buscando el cristal tengamos un calentamiento.

LEVIATÁN: Buena idea, me apetece ejercitarme un poco. Esto va a ser divertido.

BRISA: Ten cuidado, aquí vienen.

VIDAR: No es necesario que me lo digas. ¡A por ellas!

FIN DEL CAPÍTULO 6

CONTINUARÁ...