Sala del cristal elemental.

ANFÍTERES: ¡Por fin hemos llegado! Dentro de poco saldremos, mi cabello lo agradecerá. No me gusta estar bajo tierra, eso le va al cenutrio de Furanglong.

VIDAR: Esta habitación está bañada en un bello color carmesí. Pocos sitios he visto tan hermosos como este.

BRISA: Ya te digo, y el calorcito que hay aquí sienta muy bien.

LYA: Ama Leviatán. Puedo ver el cristal elemental desde aquí, pero hay un pequeño problema.

LEVIATÁN: No hace falta que me lo digas. Hay 5 y no sabemos cuál es el original, esto puede demorar el cumplimiento de la misión un tiempo.

ANFÍTERES: Leviatán, aquí hay una inscripción. ¿Puedes leerla, por favor?

LEVIATÁN: Claro, veamos..."Enhorabuena por haber llegado hasta aquí. Si el cristal elemental quieres obtener, bien has de elegir, ya que de no ser así pasarás la eternidad en esta sala".

ANFÍTERES: No me gustaría quedarme atrapada aquí. Hay que elegir correctamente o lo lamentaremos.

LEVIATÁN: No seas estúpida. Disponemos de los brazales teletransportadores en caso de percance imprevisto.

ANFÍTERES: Vaya, es verdad jajajaja...

LEVIATÁN: Sigues siendo una cría, no esperaba otra reacción.

ANFÍTERES: No te pases.

BRISA: Que lástima que estemos tan cerca del cristal y no podamos hacer nada por culpa de estas malditas esposas.

VIDAR: No soporto estar así. Me hierve la sangre.

LYA: Ama Leviatán, según nuestros informes el cristal correcto posee características distintas a los otros. Podemos utilizar esta información para elegir correctamente.

LEVIATÁN: Bien pensado. El que se encuentra en medio posee un color más vivo y presenta cortes más amarillentos que el resto. Estoy convencida de que este es el original.

ANFÍTERES: ¿E-Estás segura?

LEVIATÁN: Sí.

LYA: Confío ciegamente en que toméis el correcto, mi ama.

Leviatán retira el cristal de su correspondiente pedestal. Tras unos instantes no ocurre nada, lo que significa que ha elegido bien.

ANFÍTERES: ¡Qué alivio!

LEVIATÁN: ¿Esperabas otro resultado tratándose de mí?

ANFÍTERES: Misión cumplida. Contactemos con Ómina para darle la buena noticia.

LEVIATÁN: Bien. ¿Ómina, puedes oírme? Aquí Leviatán, hemos conseguido el cristal elemental.

ÓMINA: Excelente noticia. Sabía que lo lograríais, volved cuanto antes. Abagizal está impacientándose.

LEVIATÁN: Entendido. Y debo contaros una cosa más: hemos detectado una entrega de información confidencial a nuestros enemigos, creemos que la responsable es vuestra súbdita Lya.

ANFÍTERES: También hemos atrapado a Brisa y Vidar, ¿qué quieres que hagamos con ellos?

ÓMINA: Eliminadlos de la manera que estiméis conveniente, junto a esa traidora. Cambio y corto.

LEVIATÁN: Qué lástima, sabía que cometí un grave error al salvarte la vida.

LYA: Jamás serviría a los responsables de la muerte de los míos y de la destrucción de mi planeta natal.

ANFÍTERES: Vaya giro de acontecimientos tan inesperado.

VIDAR: ¡No os olvidéis de nosotros!

BRISA: ¡Sí! Reconozco que me ha sorprendido que esa muchacha nos haya liberado de las esposas y ahora podemos pasar al segundo round.

VIDAR: No permitiremos que huyáis con el cristal.

LEVIATÁN: Por más que me gustaría masacraros en estos momentos, y a esa minina traidora sobre todo, debemos marcharnos cuanto antes con este tesoro. Tal vez os interese esto: hay varios explosivos repartidos por el planeta y explotarán en 10 minutos al pulsar este botón. Y para evitar que escapéis destrozaré el brazal que esa traidora lleva, al igual que la única salida de esta sala.

Leviatán dispara al brazal de Lya y a la salida de la sala, ocasionando un desprendimiento que bloquea la salida.

ANFÍTERES: Disfrutad de vuestra prisión el escaso tiempo que os queda de vida. !Antes de saltar por los aires! ¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA! Vámonos Leviatán.

LEVIATÁN: Voy a contemplar con gran placer como el planeta estalla y os reduce a cenizas su inevitable explosión. Hasta más ver, miserables.

Leviatán y Anfíteres se teletransportan.

VIDAR: Estamos perdidos, no hay modo de salir de aquí.

BRISA: Han escapado con el cristal, hemos fallado a todos.

LYA: En realidad sí que lo hay.

BRISA: ?

VIDAR: Explícate, no estoy para bromas.

LYA: ¿Veis mi colgante? En realidad se trata de un rastreador que permite encontrarme a una gran distancia. En breve vendrán a buscarnos con brazales para salir de aquí.

Un tigre humanoide aparece en la sala.

LYA: Ya pensaba que no venías Tiger.

TIGER: Parece que llego justo a tiempo. Démonos prisa, poneos el brazal y pulsad el botón que hay en él, las coordenadas ya están insertadas.

BRISA: ¡Qué bien!

VIDAR: ¡Estamos salvados!

LYA: Ya lo celebraremos luego. A la de 3 pulsad el botón: una, dos y ¡tres!

Todos escapan sanos y salvos de Pyron. Tras 10 minutos de tiempo el planeta Pyron es destruido por los explosivos colocados en su superficie. La explosión es observada por Anfíteres y Leviatán, quienes están a bordo de su nave espacial.

LEVIATÁN: Bonitos fuegos artificiales. Que la ceniza cubierta de pecado de esos desgraciados se esparza por todo el espacio.

ANFÍTERES: Yo casi siento pena por ellos. Brisa es lo más parecido a una hija que tuve.

LEVIATÁN: No puedes hablar en serio. Esos sentimientos no tienen cabida en los dioses como nosotros; esas cosas son propias de los mortales.

ANFÍTERES: No sé en qué estaba pensando. Perdóname, Leviatán

LEVIATÁN: Supongo que estarás agotada después de esto. Te recomiendo que te vayas a descansar, tenemos un trayecto largo hasta casa.

ANFÍTERES: La verdad es que sí. Voy a irme a dormir un rato.

LEVIATÁN: Descansa.

ANFÍTERES: Gracias, hasta luego.

Anfíteres se marcha.

LEVIATÁN: No entiendo la fuerte convicción que llevó a esos dos a venir a este planeta para obtener el cristal que tanto necesitábamos. ¿Será acaso por la lealtad que tienen hacia esa traidora de Lúmina? No tengo necesidad ni interés en saberlo, después de todo esa chusma ya es solamente un recuerdo y no volverán a causarnos más problemas. Yo también estoy un poco cansada, debería de descansar un rato.

La nave parte a toda velocidad hacia su destino.

FIN DEL CAPÍTULO 10

CONTINUARÁ...