Capítulo 3

Ya en la puerta llamé al timbre y esperé. Cuando se abrió la puerta vi una escena muy graciosa que me hizo que me partiera de risa.

Ahí estaba Nuria en la puerta, con sus pantuflas, una bata verde oliva y un divertido pijama debajo de la bata con estampados de lobos aullando, los brazos cruzados y moviendo su pie derecho dando toques en el suelo rápidamente,... ¡solo le faltaban los rulos!

-¿Qué te hace tan gracioso?_ preguntó refunfuñada.

-¡ T-T-TÚ !_ dije entre carcajadas

-¿A si?, ¿y qué horas son estas de llegar?_ frunció el ceño_ ni siquiera me llamaste.

-Lo siento mamá_ me mofé de ella_ me retrasé un poco, ¿Y puedo pasar o me dejarás fuera?

Entramos y nos dirigimos hasta su cuarto donde había una litera, yo dormiría en la de abajo como siempre.

Le conté todo y me miró escéptica, no es que le cayera mal Damian pero no acababa de fiarse de él, decía que tenía algo raro. Dejamos la conversación para otro momento y nos fuimos a dormir.

" Estaba corriendo por un bosque estaba oscuro y no podí ver nada a mi alrededor, me perseguían, no los veía pero sabía que estaban ahí. Cansada y dolorida a causa de un corte en la pierna izquierda, no podía correr todo lo rápido que me hubiese gustado pero aún así no disminuí la velocidad, seguía dirigiendome hacia adelante y si me caía volvía a levantarme. No podía dejar que me cogieran tenía que llegar hasta él. Tenía que salvarlo. No me podía dejar coger o él moriría y con el lo haría yo. Él era mi vida y sin él moriría."

Me desperté bañada en sudor y con Nuria a mi lado zarandeandome, intentando despertarme. Había gritado en sueño y la había despertado. La abracé sollozando, la pesadilla había sido tan realista que toda yo seguía temblando. Nuria me calmó y me dijo que solo era una pesadilla, que no podían hacerme daño. Aún así le dije que si podía acostarse en la cama conmigo, no quería dormir sola.

La noche transcurrió sin incidentes y las dos dejamos atrás mi pesadilla como si no hubiese pasado, aunque yo siempre recordaría aquella sensación de estar allí.

Al día siguiente llegué a mi casa mi madre me acrivilló a preguntas y después de que consiguiera salir del incómodo interrogatorio desayunamos.

Había quedado con las chicas para salir así que me dirigí hasta el lugar de encuentro y claro está ya estaban todos menos yo. Cuando estuvimos todos fuimos hasta el Macdonals y luego al cine. Después decidimos ir al bar de enfrente y hablar tranquilamente.

-¿Cómo fue?

-¿Te trató bien?

-¿Te lo tiraste?

-Me lo pasé muy bien, me trató de las mil maravillas y no me tiré a nadie.

-Te veo triste, ¿es porque no te tiraste a nadie?, eso puedo arreglarlo tengo unos amigos..._corté a Eli antes de que siguiera.

-¡No!, no es eso y no hace falta._ dije acalorada.

-¿Entonces que es?_ preguntó Cris.

-No es nada de verdad chicas es solo que estoy un poco...._ no sabía que contestar.

-¿En tus días?_ se rió Nuria intentando animarme.

-Que graciosa me ha salido oye_ le saqué la lengua.

Después de la charla nos dirigimos a nuestras casas a descansar. Al día siguiente me desperté nerviosa por si en el instituto me encontraba con Jason... lo aparté de mi mente y repasé las asignatura, preparé la maleta, me bañé y me vestí. Llegada la hora me dirigí al instituto, esperando encontrarme con Damian.

Las clases fueron aburridas y no dejaba de mirar por los pasillos por si me encontraba a alguno de los dos.

A la hora del recreo estaba entre aliviada y decaída, aliviada por no ver a Jason y decaída por no encontrar a Damian, y ni siquiera la conversación que estaban teniendo mis amigas sobre chicos y su exceso de gomina conseguían divertirme. Como no lograba distraerme fui a llevar el libro de lectura a la biblioteca para cambiarlo y coger otro. Elegí el de La emperatriz de los etéreos, y mientras salía de la biblioteca me choqué contra alguien estrepitandome contra el suelo.

-Ay_ me quejé tocandome mis pobres nalgas que sufrieron el impacto._ ¡Mira por donde vas, idiota!_ le recriminé sin siquiera mirar al causante.

-Oye, lo siento, no hace falta insultar_ dijo una voz familiar finjiendo sentirse ofendido.

Me quedé tiesa en es sitio todavía en el suelo. De todas las personas del mundo, ¿porqué tenía que ser él?

Jason.

-Bueno tengo prisa_ me levanté del suelo e intenté esquivarle y seguir mi camino.

-Espera quería hablar contigo, las chicas me dijeron que estabas aquí.

Después de esto no tan amigas....

-Yo no tengo tiempo de verdad_ no quería mirarle a la cara_ tengo cosas que hacer.

-Pero...

-Ya nos veremos._ me despedí.

-Tu no te vas a ninguna parte_.me agarró del brazo deteniendo mi avance.

-¡Sueltame!.

-No hasta que me escuches._ me estaba doliendo su agarre.

-¿Sacha, ocurre algo?_ escuché y me volví viendo a un Damian que taladraba con la mirada a Jason.

-No tranquilo._ dije soltandome por fin._ hola Damian_ conseguí sonreír un poco, me encontraba muy nerviosa ya que notaba la mirada de Jason sobre nosotros.

-Hola preciosa, ¿cómo te fue el día?_ me dió un beso en la mejilla.

¡Qué mono!_ pensé.

-B-Bien _ dije sonrojada._ gracias por lo del otro día.

-No fue nada, yo quería..._ antes de que acabara lo interrumpieron.

-Sacha necesito hablar contigo_ exigió Jason molesto ya que lo ignorabamos.

-Dije que no. estoy ocupada, ya hablaremos más adelante.

-Ya veo con lo que estas ocupada_ dijo alzando una ceja escéptico.

-¿Qué estas tratando de decír? _inquirí enfrentándome a él. Todo esto me dolía.

-Pues que estas muy ocupada coqueteando con "este"_ dijo despectivamente como si le diera asco referirse a él.

-¿Y a ti que carajos te pasa?_ saltó Damian acercándose a Jason lleno de ira.

-Basta ya estamos llamando la atención_ dije mirando a toda la gente que se estaba acumulando a nuestro alrededor esperando a la discusión. ¿Es que no tenían vida propia o que?_ Estoy harta de esto, me voy.

Los escuchaba gritando mi nombre pero los ignoré, cansada y enfadada de tanta tontería. Me dirigí hasta donde estaban mis amigas, pero los chicos me siguieron.

-Lo siento, Sacha_ dijeron los dos a la vez. Pero percatándose de eso se fulmiraron con la mirada.

No contesté.

-¿Te has enfadado?_ Damian miró a las chicas_ ¿podéis ayudarme?

-Se vé que no conoces a Sacha_ dijo Cris riéndose.

-La habéis echo buena, cuando ella se enfada dura semanas sin hablarte, una vez se llevó 2 semanas sin hablarme y no recuerdo el motivo por el que fue._ dijo Nuria.

-Conmigo 10 días._ dijo Lola.

-Conmigo 6 dias_ dijo Eli.

-Si me enfado es por algo que habéis hecho y mi carácter no dura cinco segundos como a las demás, si me enfado me enfado_ dije.

Los chicos no sabían que hacer menos mal que Diego llego al poco con Carlos y Manu.

-Ey, ¿Qué pasa?

-¡Hermanito!_ grité y me lance contra él, abrazándolo y enterrando mi cara contra su pecho para que no me vieran.

-¿Hermanita?_ miró a los presentes esperando una explicación a mi comportamiento.

Nuria suspiró.

-Parece ser que estos trogloditas le han echo algo a Sacha y ahora esta enfadada.

-Oye!_ exclamaron los ofendidos.

Diego los fulminó con la mirada y se le podía ver realmente molesto. Aunque era una persona muy divertida y cariñosa aunque bastante cabroncete... El era muy sobreprotector con sus seres queridos en los que me incluía.

Me abrazó fuerte y luego me alejó un poco para mirarme a la cara.

- A ver Sacha...cuentame lo ocurrido.

-Es que..._ me mordí el labio inferior nerviosa y hable tan flojito que solo el me oía_ son unos idiotas. Jason quería hablar conmigo pero yo con el no y me agarro muy fuerte del brazo. Y luego apareció Damian y empezaron a discutir y la gente nos miraba y ellos seguían como si yo no estuviera.

Mientras lo decía me tocaba el brazo que me había agarrado Jason, todavía dolía un poco. Diego me pidió permiso con la mirada y acepté. Subiendo la manga de la camisa descubrió lo que al día siguiente se convertiría en un feo moratón, ya que ahora solo podía verse la zona bastante enrojecida y unas marcas de dedos.

Todos exclamaron sorprendidos cuando lo vieron.

-Tio te has pasado.

La mirada que le lanzaba mi hermanito a Jason podía calificarse de mortífera. Hasta el punto de hacerlo retroceder.

-Dios Sacha yo no quería hacerte eso, solo quería hablar contigo y me puse nervioso cuando no quisiste y...

-No me interesan tus escusas Jason_ estaba realmente serio_ creo que ya hemos hablado y te advertí que te controlaras y confíe en ti.

No entendía nada, solo veía la cara sorprendida de todos, y sabia que ellos tampoco y eso me hizo tranquilizarme. Pero eso no quitaba que Jason estaba con la mirada hacia el suelo y aguantando la reprimenda de Diego, parecía un perrito apaleado y me daba bastante pena.

-Y es que no...-le corté.

-Hermanito, por favor. Dejalo.

-¡Pero Sacha!

-No, en serio. Esta bien._ mire a Damian porque estaba a punto de decir algo._ Estoy bien y es cierto que se ha pasado pero ya basta. Jason por favor no estoy en condiciones para hablar contigo lo siento. Y Damian tampoco quiero hablar contigo ahora cuando pueda te buscaré. Mientras tanto quiero estar sola y pensar, y de paso hermanito ayudame con esto que mañana no podre ni mover el brazo.

Suspire. Menos mal que sabia de primeros auxilios y sabia de estas cosas.

Con Diego a mi lado dije adiós a todos y nos fuimos a su casa donde me curaría y hablaría con el.
Creo que llego el momento de contarle todo.

SIENTO QUE ESTE CAPITULO SEA TAN CORTO Y HABER TARDADO TANTO EN ESCRIBIR. ESPERO EMPEZAR A ESCRIBIR LAS DEMÁS HISTORIAS PARA QUE NO ME MATEN. BUENO GRACIAS POR LEER Y ESPERO QUE OS HAYA GUSTADO. GRACIAS. XD

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top