Estaba nuevamente sobre el piso de hielo, sin embargo con solo un movimiento el hielo debajo mío se resquebrajó. Inmediatamente me quedé quieto, con cuidado ví las líneas que se habían formado y debajo de estas el masivo vórtice que arrastraba todo a su interior. Era peligroso seguir donde estaba. Me recosté en el hielo para repartir mi peso en una mayor área y así poder desplazarme, para mí sorpresa, cada vez que me movía, las rajaduras del hielo se movían conmigo.

Entonces todo se rompió y caí al vórtice, mi cuerpo no pudo oponerse a la corriente. Fui arrastrado mientras mi piel se desgarraba, mis músculos eran separados de mis tendones y estos últimos arrancados de mis huesos. En algún punto lo único que quedó fue mi conciencia pero esta también se quebró.

__----------__

Cuando recobré la conciencia estaba dentro de una ambulancia, mi cuerpo estaba entumecido y no podía coordinar mis movimientos. Entendí en qué fallaba al moverme por lo que logré tomar el control a medias. Me senté en la camilla y miré a mi alrededor. Había dos adolescentes temblando y una chica con prendas blancas que trataba las heridas de esos dos, lo más probable es que sea la doctora o una enfermera.

Al verme se apresuró a ayudarme.

— No hagas esfuerzo, gastaste todos tus puntos de magia.

Al tener un rango superior al mío y una profesión, ella puede ver mis estadísticas sin mi permiso. Pero no podía ver mis puntos de energía.

Pero… ¿Por qué gasté todos mis puntos?...

— … ¿Qué pasó?

— … Un delincuente atacó la escuela-

Mis recuerdos volvieron y detuve a la doctora.

— Mi hermana… ¿Dónde está?

— Él es el sujeto del que le hablamos —Dijo uno de los adolescentes.

La enfermera volvió a verme pero esta vez sorprendida y triste. Con la mirada de tener malas noticias.

— Lo siento-

__----------__

Mi conciencia ya no comprendía la realidad, a veces pensaba que algo era real y a veces pensaba que mi realidad era falsa.

Un "lo siento" sabía amargo, un "gracias" una mentira. En mis recuerdos éramos dos pero ahora solo estaba yo. Hace un momento estaba en la escuela pero ahora estaba en frente de una puerta. Hace un momento el sol estaba encima mío pero la oscuridad me rodeaba hace tiempo. Mis manos estaban manchadas de sangre hace un momento y ahora solo olían a alcohol. Alguien había sido atravesado por dos fierros, pero era yo el que sentía los agujeros en su pecho.

— Esto no es real…

¿En qué momento ingresé a mi casa?

Estaba en medio de la sala cuando una figura tímida se acercó llorando.

Ya recordé… si no fuera por ella… hubiera respondido antes el celular.

Mis manos se sintieron calientes, quería aplastar su redonda cara. El culpable estaba en frente mío, solo debía acercarme más, pero la figura dudaba en acercarse a mí, me agaché a su altura y gateé hasta él.

— … ¿Señor?

Estiré mis manos, solo un poco más y podría soltar todo mi odio. Sin mostrar hostilidad, lentamente mis manos se posaban en el culpable.

— … Tengo hambre señor.

Por fin coloqué mis manos en su cabeza, tan frágil que con solo presionar derramará todo su interior.

— ¿Comeremos carne?

Entonces fue cuando la presioné, la presioné contra mi pecho. Que tonto fui, mi hermana no había ido a ningún lado, ella era mi hermana.

__----------__

Siempre dije que dormir acompañado es mejor que dormir solo. Amaneces con mejor energía y ganas de despertar. Me sorprende que mi hermana haya accedido a dormir conmigo, los últimos años se negó a hacerlo pero por fin parece que la convencí.

Lo malo era que… se orinó en la cama.

— Pero qué…

Después de despertarla y calmar sus llantos por mojar la cama la tuve que bañar y prepararle el desayuno. Escuché que si un niño moja la cama es porque no ha recibido la debida atención de sus padres y baja autoestima, bueno nuestros padres murieron hace poco quizás es por eso. Entonces solo debo de recordarle lo excelente hermana que es y se solucionará.

Llamé al colegio para decirle que mi hermana no podría ir al colegio porque necesitaba más tiempo conmigo y me dijeron que normal, hasta me sugirieron que debía quedarme con ella el tiempo que fuera conveniente. Muy buena atención de parte del colegio. ¡Esto significa más tiempo que podemos compartir!

— ¿Cómo está la hermana más hermosa del mundo? ¿Ya se calmó?

Mi hermana dudó un poco hasta comprender que me refería a ella, lo sé a veces es muy distraída.

— Ya no lo volveré hacer… lo siento…

— Nah no te preocupes, puedes hacerlo un par de veces más, pero no debes dejar que te gane para la siguiente, además es fácil de secar esto.

Ya había dejado remojando el colchón mientras hacía otros quehaceres por lo que se había hinchado.

— Primero hay que quitar el agua excedente. Vamos ayúdame.

— ¡Sí! —Se veía tímida pero dispuesta a ayudar.

— Sé que te lo prohibí antes pero ahora es la solución… es momento de … ¡Saltar sobre la cama!

Inclinó la cabeza a un lado, le queda lindo la expresión pero ella normalmente inclinaba la cabeza para el otro lado…

— ¡Vamos ayúdame! —Sostuve sus pequeñas manos y empezamos a saltar sobre el colchón. —Wiiii.

Estaba confundida pero su expresión cambió a una de alegría, ella se estaba divirtiendo. Saltamos y reímos hasta el cansancio. El colchón ya no desprendía más agua, pero seguía húmedo.

— Waaa que risa, bueno ahora hay que secarlo. —Estiré mi mano dispuesto a quitar cualquier rastro de agua con mi magia.

Pero fue inútil no podía conectarme a la otra dimensión.

— Que raro… creo que estoy cansado. Pero no importa la poderosísima energía solar nunca está de más.

Saqué el colchón al balcón para luego trapear la ducha aprovechando el agua salpicada. La limpieza no era de mi agrado después de todo el servicio militar nos hacían limpiar en todo momento lo cual me dió experiencia pero me quitó las ganas de hacerlo al salir del cuartel. Sin embargo esto era para tener un ambiente limpio y sano. Si quiero que mi hermana aumente su autoestima debe de ver un lugar impecable, después de todo tu cerebro repasa todo lo que ves en el día cuando duermes.

__----------__

Algo anda mal, no sé qué es pero creo que mi hermana… es una impostora.