"El anterior heredero de la fortuna Smith, Mephiles, fue arrestado esta mañana en sus oficinas tras las evidencias que llegaron a la fiscalía del estado ayer por la noche. Entre sus cargos se encuentra, asesinato y narcotráfico. El señor Smith no emitió comentarios tras el arresto y el juicio se llevará a cabo hoy a medio día. 

Mientras tanto, el  nuevo heredero Shadow ha sido absuelto de los cargos y ha recibido una compensación por su injusto encarcelamiento. Su padre afirma que siempre supo que su hijo era inocente." 

— Te ves guapo en la foto - escuchó la voz de Amy a su costado, el viento levantó sus cortas púas que enmarcan su rostro — estás en la primera plana de todos los periódicos.

— Siempre estoy en las planas del periódico - respondió él con poco interés, ella arqueó una ceja y continúo mientras señalaba el título y las imágenes.

— "Heredero Smith limpia su nombre, el gobierno pide perdón" - citó — Pues sí, pero esta es una buena noticia. Guárdalo, quiero tenerlo enmarcado en la casa.

— Por Chaos, Rose - suspiró y quiso tirar el periódico al cesto de la basura — No necesitas hacerlo.

— ¿Que no? también es prueba de nuestra victoria - ella retiró el papel de sus manos y lo guardó en su bolso sin percatarse de la discreta sonrisa del erizo — Se me antoja comer - lo miró con complicidad mientras sonreía. 

Su pareja hizo una pausa en su andar, miró a su alrededor hasta notar un puesto de hamburguesas del otro lado de la calle por tan solo cinco dólares. Sintió un tirón en su abrigo de invierno y ella se aclaró la garganta para hablar rápidamente. 

— Será deliciosa, lo prometo. 

Unos minutos después, ya tenían una enorme bolsa repleta de hamburguesas y papas fritas. Esta vez, Shadow no se negó a comer. Encontraron espacio en una banca frente a la calle menos transitada y Amy sacó ambas hamburguesas, entregándole una sobre papel para comenzar con el desayuno. 

— Tiene buena pinta - Amy notó el queso derretido en la parte de encima del pan, con los aros de cebolla saliendo de las orillas con un empanizado casi perfecto, la boca se le hizo agua enseguida y a Shadow parecía pasarle lo mismo. 

— ¿Será tan buena como dices? - dió la primera mordida y fue tan glorioso como al primera vez. Ella lo miró con los ojos entrecerrados juguetonamente.

Un grito furioso los puso alerta, confundidos miraron hacia la multitud de personas que se quedaron paradas en la calle observando el edificio con la pantalla gigante pasar el arresto de Mephiles. Shadow sonrió maliciosamente al ver a su hermano tratar de liberarse del agarre de los policías mientras soltaba todo tipo de maldiciones. 

No podía negarlo, le gustaba bastante ver a su hermano caer al fondo de la pirámide, bañándose en la vergüenza con su ego completamente roto. 

Sintió el delicioso aroma de las papas y se llevó unas a la boca, disfrutando de la vista, le hubiera gustado más estar en persona.

— Mhm, si fuera tu hermano, yo me preocuparía más por saber el menú de la prisión - dijo con la mejilla llena de kétchup.

— Él la odiará - respondió entre burla, luego miró a la eriza y pensó en la suerte que tenía, todo por unos juegos de apuestas. Sin eso, quizá él ni siquiera estaría comiendo una simple hamburguesa y probablemente viviría en el vacío de su pasado. 

— ¿Disfrutas esto? - habló orgullosamente, él se inclinó hacia delante para limpiarle la kétchup de su mejilla, haciendo que ella se avergonzara. Se puso rígida y él soltó una carcajada, era demasiado fácil ahora. 

— Sí, me gusta esto - ella lo miró directamente a los ojos, sintió escalofríos cuando él deslizó su mano hasta entrelazarla con la suya, disfrutó la sensación de calidez que desprendía.

— Me entristece que no podamos ir a las Vegas - dijo Amy, el grupo de adinerados que lo ayudó a destapar a su hermano, le habían hecho firmar un contrato para nunca regresar. Seguramente les preocupaba el hecho de que Shadow quisiera reabrir el casino que Mephiles había construido, totalmente alejado de sus planes — quizá otro lugar estaría bien. 

— Yo me encargo del viaje entonces - ambos giraron el rostro hacia Clint, evidentemente sorprendidos por su llegada, él los miró con un traje tan pulcro como siempre junto con una dona glaseada de chispitas — odio admitirlo, pero extrañaba la molesta presencia de Amy. 

— Yo también te extrañé, ¡ven aquí! - se hizo a un lado para darle espacio en la banca —¿Dónde está Migthy?

— Justo aquí - saludó desde lejos con un paquete de latas de café mientras se acercaba — ¿Iremos al juicio? - preguntó tomando lugar junto a Shadow, ahora mantenían una buena relación a pesar de sus diferencias. 

— Sí - dijo Amy con diversión mientras estiraba su paquete de papas hacia él, Clint ayudó a repartir los cafés y Shadow tomó uno para beber — ¿Podemos tener los lugares de enfrente? quiero lo mejor. 

— Siempre tendrás lo mejor - respondió el azabache con orgullo y el par de hombres no pudieron evitar sonreír, todos sabían que el erizo estaba siempre al pendiente de ella. Se hablaron un poco más, actualizando en temas como que Clint se había hecho cargo del sector que antes Shadow trabajaba, y como Migthy se convirtió en su chofer disfrutando siempre de estar tras el volante para disfrutar de los viajes en carreteras. 

Después de un rato, los cuatro simplemente disfrutaron comiendo y bebiendo sin apartar su vista de la pantalla del edificio, Mephiles peleaba ahora contra los elementos de seguridad, haciendo una enorme rabieta acusándolos de no saber con quién se estaban metiendo, y mientras eso pasaba, la cámara también enfocó a dos personas más detrás del erizo, Evan y Sonic eran arrestados por cómplices y otros delitos.  

Amy se sintió tranquila, con la emoción de victoria y probando el sabor de la dulce venganza junto con los chicos. Estaba segura de que Scourge también estaría riéndose del cobarde de Mephiles.