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—Dejen de recordarlo, ¿Quieren? —pero nos e detenían, cualquier mujer hubiera aprovechado la oportunidad para salir con él por su dinero, pero elizabeth no era cualquier mujer y eso que se acostaba con muchos—Solo tuvo otro compromiso, no quiero tener sexo con una desconocida —

—Osea que seguirán viéndose —meliodas abrió los ojos con sorpresa dándose cuenta de que sus palabras fueron usadas en su contra

—Yo...yo...—

—Tira la toalla, sabemos que quieres seguir con ella— suspiro en señal de rendición —Además, de no querer entonces no habrías ido anoche a su casa—

—Touche— murmuró relajando su mirada, en eso tenía mucha razón su querido amigo

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