16
...
— Yo... yo quiero irme... a casa...
SeokJin miró aterrado a su único pilar, al único soporte y apoyo que tenía en ese momento y jadeó sin poder creer en su traición.
Jimin solo bajó su vista y se aferró a nada más que sus propios dedos con temor.
— Jimin... por favor...
Park pareció titubear ante su inusual súplica y sintiéndose tentado por la repentina vulnerabilidad en la voz de SeokJin, le miró dudoso sin estar seguro en si era mejor ceder o finalmente huir de ahí.
— S-su aroma... — Explicó tembloroso sin atreverse a mirar al alfa furioso un par de metros más allá.
SeokJin fulminó a Hoseok con la mirada.
Por su jodida culpa su Jimin estaba temblando y ahora le quería abandonar.
— Le pediré a alguien que te lleve. — Ofreció Jung intentando hacerse cargo de su fuerte aroma.
SeokJin bufó y cruzó los brazos sobre su pecho sin verse conmovido por su ofrecimiento.
— No confío en...
— N-no es necesario... — Le detuvo Jimin sosteniendo brevemente su cintura. — Yo... alguien me puede llevar...
Jin quiso patalear y exigirle que permaneciera a su lado, pero el temblor en su pequeño cuerpo no parecía ser del todo normal.
— No puedes dejarme solo... — Intentó.
Jimin miró por algunos segundos al alfa antes de regresar la vista a él.
No dijo más.
SeokJin frunció sus labios y utilizó su mejor arma contra él, pero los labios de Jimin comenzaron a temblar también cuando vio la cara de cachorro de su hyung.
— M-mi omega tiene miedo... — Admitió en un susurro.
Y SeokJin quiso lanzarse al sofá y llorar.
No le podía dejar solo.
No podía simplemente irse a su casa y dejarle a él abandonado y a la deriva. Solo a su suerte, tan vulnerable convertido en una presa fácil ante ese jodido y peligroso depredador.
— Le pediré a Tae que me lleve a tu casa... — Le ofreció Jimin después de unos segundos en debate.
Y SeokJin asintió cediendo.
Cediendo solo porque sabía que no tenía más opción que aceptar.
No cuando Jimin parecía a punto de caer de rodillas y comenzar a llorar.
No era lo que Jin quería, pero al menos no dormiría solo esa noche.
— Iré pronto. No tardaré aquí con él. — Le dijo Kim mirando brevemente al alfa avergonzado junto a ellos.
Jimin ni siquiera esperó otra palabra de su parte, pues tan pronto terminó de hablar, salió de esa oficina corriendo sin importarle si parecía huir cobardemente lejos de los dos.
Hoseok suspiró cuando la puerta se cerró.
— Jin...
SeokJin encaró al alfa y retrocedió cuando este quiso acercarse más a él.
No merecía tocarlo.
No aún.
— Lamento haber usado mi voz... — Comenzó Hoseok.
Jin afiló su mirada.
— No es la primera vez. — Le escupió con rencor.
Y Hoseok sabiendo que tenía razón y bastantes motivos para sentirse de esa manera, asintió arrepentido sin atreverse a más.
Realmente no sabía qué ocurría cuándo estaba cerca de él.
— Es solo que no puedo controlar a mi alfa...
SeokJin bufó falsamente divertido.
— ¿Así que solo vas a justificar tu salvajismo con eso?
Hoseok miró sus zapatos antes de responder.
— No hay justificación para usar mi voz contra ti. — Dijo muy arrepentido.
SeokJin asintió medianamente satisfecho y alzó su mentón sabiendo que podría mantener el control de la situación.
— Por supuesto que no la hay. ¿Tú simplemente disfrutas haciéndome esto? — Preguntó dolido.
El alfa le miró fijamente y negó.
— ¿Entonces por qué lo haces?
Hoseok inclinó su rostro sin verse sorprendido y avanzó hacia él.
— ¿Qué por qué lo hago? SeokJin... ¿No lo entiendes?
Jin frunció el ceño retrocediendo un poco más.
— ¿Entender qué? ¡¿Que solo te has aprovechado de mí?!
— Yo no me he...
— ¡Por supuesto que lo has hecho! — Chilló perdiendo una vez más el control.
El alfa suspiró cerrando los ojos y se obligó a mantenerse en calma.
No iba a caer en provocaciones.
No cuando debía arreglar todos los malentendidos esa misma noche.
— De acuerdo. — Se rindió él. — Comencemos de nuevo.
SeokJin le miró como si hubiese perdido la cabeza, mirándole sin entender a qué se refería o a dónde quería llegar con ello.
Hoseok tendió una mano amistosa frente a él y le sonrió.
— No.
Jin no quería caer.
— Soy Jung Hoseok... — Se presentó.
SeokJin sacudió su mano sin gracia ni amabilidad, aceptandola solo por no ser descortés.
Él había recibido la mejor educación. Jamás dejaría a nadie con la mano tendida, iba en contra de su amable y educada personalidad.
Él intento no pensar en la calidez que su fuerte mano le transmitió.
— ¿Cuál es tu nombre? — Preguntó Hoseok repentinamente animado.
— Esto es ridículo.
La sonrisa del alfa no titubeó.
— SeokJin por favor. — Intentó. — Estoy tratando de...
— No. Todo esto es ridículo. Tú sabes mi nombre. — Soltó sin entender el punto de todo. — Tú sabes quien soy. ¡Lo sabes perfectamente!
Hoseok entendió el significado detrás de todo eso y sus defensas se bajaron de golpe.
Su sonrisa solo hasta entonces desapareció.
— Por supuesto que sé quién eres, — Soltó bajo. — ¿crees que es posible no haberlo sabido? No podría ignorarlo aún si quisiera.
Jin sintió a su omega chillar dentro de él y bufó.
— ¿Entonces por qué haces todo esto? — Preguntó cansado. — ¡Me trajiste a tu club con engaños! ¡Y ahora te presentas como si nos acabaramos de conocer!
— Solo quiero hacer las cosas bien...
— ¡Pero ni siquiera te has disculpado por todo lo que me hiciste! — Explotó por fin.
Hoseok suavizó su rostro y asintió dolido por el tono destrozado de su voz.
— Lo lamento. — Susurró lentamente. — De verdad lo siento, SeokJin. Yo no quería lastimarte de ninguna manera... ¿Puedes perdonarme, por favor.
SeokJin ni siquiera lo pensó.
— No. No te perdono.
Él no se sentía satisfecho con ver a su alfa así, aún si es lo único que había deseado desde días atrás.
Hoseok suspiró una vez más y miró a su alrededor. Retrocedió un poco de su omega, dándole un poco de espacio y aire para relajarse y meditar.
No quería verle estallar de nuevo.
— Hola, mi nombre es Jung Hoseok. — Intentó nuevamente. — Tengo 27 años, soy miembro de una banda llamada Dionysus.
SeokJin le miró sin mostrar ni una pizca de interés.
— Me presenté como alfa a los 2 años de edad. Vivo en un apartamento compartido con los otros miembros del grupo. — Continuó al ver la atención de su omega en él. — No tolero el alcohol. No fumo ni consumo ningún otro tipo de sustancia nociva...
SeokJin quería regresar a la seguridad de su habitación.
— Tengo un perro llamado Mickey y él ha vivido muchos años junto a mí... me mucho gusta el color verde... y amo con toda el alma bailar... ¿te gustaría saber mi grupo sanguíneo también? — Bromeó sonriendo.
SeokJin lo miró de arriba a abajo sin verse ni un poco divertido.
Hoseok no ignoró el aroma vulnerable y entristecido emanando de él.
— Debemos...
— Él dijo algo de los regalos.
Hoseok calló.
— Olvida eso. — Pidió firmemente. — Yoongi ni siquiera debió acercarse a ti...
SeokJin juntó sus labios en una línea y asintió solo por no escucharle más.
Decidió entonces que debía tomar toda la información que tenía y analizarla de forma madura y neutral. No verse afectado por un comentario erróneo de ese alfa gruñón. Ni mucho menos por la respuesta pronta y postura defensiva en el alfa.
Si había comprado regalos.
Él había escrito cartas.
El mismo Hunki lo había visto.
SeokJin sintió un nudo formarse en su garganta tan pronto lo entendió.
Había cartas y regalos. Cartas y regalos que claramente no habían sido para él.
— ¿Qué estás pensando? — Preguntó Hoseok ante su repentino silencio.
SeokJin apretó su mandíbula y le miró sin emoción.
Hoseok tenía pareja y le había enviado esos regalos mientras él sufría en su habitación.
Ahora entendía el por qué ni siquiera le importó saber que era su compañero.
— ¿SeokJin...? Por favor dime algo...
Jin sintió su pecho oprimirse y sintiéndose ya sobrepasado por todo junto y a la vez, realmente comenzó a llorar.
Ya no pudo detener sus lágrimas y en completo silencio y con verdadero dolor las dejó salir.
Giró su rostro queriendo irse de ahí.
— ¿Qué ocurre?...
El miedo se apoderó del alfa pero Jin no le permitió acercarse a él.
No cuando por su culpa estaba así.
— Por favor, dime qué ocurre... — Suplicó desesperado. — Estás llorando...
— No te importa... — Intentó decir sollozando. — ¡Yo no te importo! Déjame ya, Jung Hoseok...
— Jin, ¿pero qué estás...
— ¡No me buscaste! — Soltó por fin. — ¡Y me ignoraste todo este tiempo!. Me gritaste mucho! ¡Y siempre me miras con odio! ¡No te importa lo que yo sienta!
Hoseok creyó que cualquier otro dolor experimentado en su vida había sido nada con ver a su omega así.
Él se sintió como el peor alfa de la historia.
— SeokJin, lamento haberte hecho sentir así, déjame explicarte...
— ¡Me estás gritando otra vez! — Chilló completamente destrozado.
Hoseok vio su cuerpo sacudirse en temblores, cubriendo su rostro cuando el llanto empeoró.
A él no le importo que su omega le quisiera lejos.
Se acercó tomándole dulcemente de las muñecas, bajando las manos de su rostro enrojecido y húmedo para poder verle.
SeokJin no tuvo la fuerza suficiente para luchar contra él.
— Perdóname... — Suplicó una vez más.
— ¡No! ¡Déjame! — Intentó huir.
Pero el alfa no se lo permitió.
Viendo en sus ojos el dolor que le consumía, se acercó por completo a su cuerpo para sostenerle.
Para calmar la tristeza de sus corazones, la inseguridad y miedos de sus lobos, y el dolor que en el pecho de ambos creció.
Lo abrazó sin importarle los empujones de SeokJin. Sin importarle si él quiso apretarlo y alejarse de su cuerpo tan pronto lo sintió.
Porque bastó con sostenerle fuerte y firme para que su omega se rindiera entre sus brazos.
SeokJin se aferró a sus ropas y sollozó destrozado contra él, gimoteando con odio y dolor. Enfurecido y triste sin poderse alejar de su cálida protección.
Hoseok lo sostuvo con dulzura, intentando ofrecer todo de si con ello, sintiendo a su alfa odiarle por hacer llorar a su compañero de esa forma.
Él no sabía qué decir para arreglar todo.
Liberó su aroma y recargó su cabeza en él sin soltarle. Ofreciendo un poco su cuello para que Jin enterrara mejor su rostro ahí.
El omega comenzó a calmarse después de algunos minutos, sin embargo, no le soltó.
— Te dije que no me tocaras. — Le reprochó SeokJin lloroso.
Hoseok se sintió un poco tranquilo al no escuchar rencor ni molestia en su voz.
Lo apretó un poco más contra él.
— Lo lamento. — Repitió por enésima vez en la noche. — No volveré a hacerlo sin tu permiso...
SeokJin sonrió satisfecho contra la piel de su cuello asintiendo y permitiendose a sí mismo disfrutar un poco más de ese cálido y seguro escondite recién descubierto.
Ya no quería pelear.
— Quiero irme a casa. — Declaró tragándose el resto de sus recientes sollozos. — Necesito descansar y dormir...
El alfa se separó un poco de él para verle, para asegurarse que la tristeza había desaparecido por completo de su omega.
Asintió recogiendo el rastro de humedad de sus mejillas enrojecidas y sonrió.
SeokJin cerró los ojos cuando los pulgares tocaron su piel.
— Te llevaré a tu casa...
SeokJin se apartó de él acomodando sus ropas y asintió sin atreverse a mirarle a los ojos.
— Bien. — Aceptó.
Era lo mínimo que Hoseok podía hacer por él después de hacerle llorar...
...
...
Envié un reporte con las fallas que siempre tengo al querer actualizar. Así que espero esta situación se solucione pronto.
No he podido subir de nuevo el capítulo de NDPL, intentaré de nuevo mañana.
Muchas gracias por todo, espero les haya gustado ♡
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top