15
...
— Su omega estará bien, Sr. Jung. — Dijo una mujer.
Se escuchó un suspiro colectivo y SeokJin se mantuvo atento a cualquier otro sonido que pudieran hacer.
— Muchas gracias. — Dijo Hoseok.
Jin lo supo, porque recordaba muy bien el sonido de su voz.
— Tiene una jodida fuerza que...
Un fuerte gruñido calló al hombre que maldijo, y Jin perfectamente, volvió a identificar al autor de tal sonido casi animal.
Se abstuvo duramente de no inflar su pecho y sonreír.
— Tú tuviste la culpa, Yoongi. — Intervino alguien más.
SeokJin lo reconoció como el omega Munjoon como sea que se llamara.
Escuchó un resoplido y Jin continuó fingiendo seguir muerto mientras los demás hablaban claramente de él.
— ¿Ahora tú también lo vas a defender, Nam?
— Solo fue un accidente, Yoongi. Él no te golpeó. — Intervino Hoseok firmemente.
SeokJin no pudo reprimir más sus ganas de también gritarle a ese alfa por calumniarle mientras agonizaba, y manteniendose todavía firme en su papel de víctima, bajo y ronco comenzó a gimotear para llamar la atención.
Un silencio sepulcral se prolongó a su alrededor, y él, sabiendo que tenía la atención de todos, lentamente comenzó a "despertar".
Él era un excelente actor.
Le abrazó la ola directa de un delicioso aroma antes de abrir los ojos y aún si justo después sintió su calor al inclinarse sobre él, ya había identificado muy bien de quién se trataba.
— SeokJin...
Jin no tuvo que fingir las sensaciones que su voz baja y preocupada provocaron en él.
Se estremeció ligeramente ante el toque suave en su frente y acostumbrándose a la brillante luz del techo, parpadeó rápido para verle justo frente a él.
Su alfa tenía el ceño fruncido y su boca levemente abierta, con tal vez mil y un palabras por decir. Juntó un poco sus cejas y titubeó al verle tratar de incorporarse en su lugar.
Jin tal vez sintió un poco de ternura ver el bonito rostro del alfa deformado en preocupación por él. Actuando torpe sin saber si tocarlo o no.
— ¿Dónde estoy... — Preguntó Jin "débilmente".
El alfa se arrodilló a su lado sin atreverse a tocarle aún.
— Estás en mi... una oficina... — Calló mirando alrededor. — No importa. ¿Cómo te sientes?
Jin llevó ambas manos a su cabeza y presionando sus sienes sólo para darle más peso a su desmayo comenzó a respirar de forma desigual.
— ¿Qué me pasó? — Preguntó de pronto curioso.
Él era muy astuto y sabía que había perdido el conocimiento después de sentirse mal, tampoco había que ser un genio para saberlo.
Sólo que no tenía idea del por qué.
Se alimentaba bien y definitivamente tampoco esperaba ningún bebé.
Tendría que ser un milagro y él, la nueva Virgen María de su generación.
— Perdió el conocimiento debido a un repentino descenso en su presión arterial.
Jin miró a la mujer que hablaba y frunció el ceño al darse cuenta de que era una alfa.
No olía bonito.
— Te desmayaste en la pista y nos asustaste a todos.
SeokJin giró su cuello hasta encontrarse con el dueño de esa chillona voz.
Jimin le miraba con ojos acuosos y sonrisa tímida.
SeokJin sintió su corazón estrujarse solo un poco por él.
— Comencé a sentirme muy mal de pronto. — Explicó mirando a su alrededor.
La pareja molesta estaba mirando le también y Jin bufó bajo al ver al alfa gruñón con un pañuelo enrojecido sosteniendo su nariz.
No parecía rota.
Era una lástima.
— ¡Él tuvo la culpa! — Señaló al alfa pálido.
Hoseok reprimió un bajo gruñido en su pecho y fulminó al alfa con la mirada.
— Yo no le hice nada. — Se defendió Yoongi. — ¡Tú fuiste quien me golpeó a mí!
Jin se enderezó del sillón sintiéndose sumamente ofendido y muy dispuesto a pelear.
— Les dije que no lo molestaran. — Intervino Hoseok, con voz repentinamente tranquila. — Debían cuidar de él, no hacer que se lastimara ni se desmayara.
SeokJin miró a Yoongi desafiante y le sonrió con sorna al saberse defendido.
— En realidad, no creo que él haya causado esto. — Intervino la doctora repentinamente incómoda por el intercambio entre todos.
— ¿Entonces, qué ocurrió? — Preguntó Jin con miedo. — Él me estaba molestando y le dije que me sentía mal pero no se detuvo. Así que él tuvo la culpa.
Él recordaba claramente lo que había sucedido.
— Ya le dije que simplemente su presión arterial descendió, — Tranquilizó ella de nuevo. — y es más común de lo que ustedes creen. Cerca de la epoca de apareamiento el cuerpo sufre cambios hormonales, así que las emociones fuertes o incluso pequeñas discusiones pueden provocar alteraciones en el ritmo cardíaco y hacerle colapsar por ello. Le recomiendo que repose y se prepare para su ciclo de calor.
Un segundo pasó antes de que alguien se atreviera a hablar.
— Si, bueno. Nam mi nariz ya está mejor, vam...
— ¿Ciclo de calor? — Preguntó Hoseok con repentino interés.
SeokJin ardió y quiso chillar para callarle, pero la doctora ya había respondido a la duda de él.
— El joven Kim está por entrar en celo y probablemente usted pronto comenzará a olerlo.
SeokJin fingió desmayarse nuevamente en el sillón.
— ¡SeokJin! — Gritó Hoseok corriendo hacia él.
— Su aroma es muy fuerte señor Jung, debería controlarlo para no afectar más a su omega. — Sugirió la doctora y Jin abrió los ojos para mirarle no tan discretamente. — Él aún no esta marcado y sus peleas cercanas al celo pueden alterar su estado de ánimo e incluso su salud.
SeokJin sintió su cuerpo entero arder en vergüenza pero ya no podía seguir fingiendo que se desmayaba.
Ella no era una buena doctora. Y el aroma de Hoseok definitivamente no le afectaba...
Hoseok intercambió un par más de palabras con la alfa mientras Jimin y Namjoon se arremolinaban junto a él para comprobar su salud.
SeokJin se mantuvo tumbado en el sofá y permitió a ambos omegas acariciar sus cabellos y rostro porque merecía mimos después de casi perder la vida en el club.
— ¿Cómo te sientes? — Preguntó Hoseok tan pronto la mujer se fue.
SeokJin le miró fijamente de pronto recordando algo.
Entrecerró los ojos lentamente y el alfa titubeó.
— ¿Qué...
— Es por tu culpa que estoy así. — Le reprochó.
Hoseok abrió los ojos con sorpresa.
— No me había acercado a ti para no molestarte. — Se defendió consternado.
— No me refiero a eso.
El alfa parpadeó aturdido y lentamente se acercó a él.
Jimin y Namjoon decidieron que era mejor alejarse de los dos en silencio y sin alterarlos más.
— ¿Entonces a qué te refieres? — Preguntó alzando una ceja.
SeokJin cruzó los brazos sobre su pecho y alejó la mirada de él.
— Sabes muy bien a qué me refiero.
Hoseok bufó.
— No, no lo sé. — Respondió firme. — Por eso te estoy preguntando, SeokJin.
Jin cerró la mandíbula con fuerza y le encaró repentinamente molesto.
¿Cómo se atrevía a responderle así?
— No te hagas el inocente ahora mismo porque si lo sabes. — Escupió seco. — Sabes perfectamente la razón por la que ahora estoy aquí, débil y vulnerable. Sabes muy bien lo que me has hecho, Hoseok. Solo soy una pobre víctima aquí.
El alfa parpadeó sorprendido y comenzó a negar sin poder creerlo.
— ¿Lo que yo te hice? ¿Acaso sufres de amnesia? Porque yo no soy...
— ¡No estamos hablando de lo que tú seas!. — Interrumpió SeokJin furioso. — ¡Por tu jodida culpa estoy así y deberías aceptarlo y disculparte!
— Por favor, SeokJin, deja de gritar. — Gruñó Jung. — ¿Tan difícil es para ti expresarte sin ser tan egocéntrico y egoísta?.
SeokJin explotó ofendido alzandose del sofá.
— ¡Yo no soy egocéntrico y mucho menos egoísta! Lo que sucede es que tú eres un maldito alfa que...
Jin tuvo que detenerse cuando un mareo le hizo trastabillar de pie.
Hoseok se acercó de inmediato a él para sostenerle de la cintura.
— ¿Estás bien...
Jin golpeó su mano con decisión.
— ¡No me toques!
Hoseok inhaló profundamente y cerró los ojos por un segundo antes de alzar las manos rendido hacia él.
Jin se sentó lentamente en el sofá y talló su rostro con frustración.
Ese alfa tenía la maldita habilidad de sacarle de sus casillas.
— No debes alterarte. — Recordó Hoseok con suavidad. — No debemos discutir o de nuevo te sentirás mal.
Jin le miró enfurecido.
Él no le iba a decir qué hacer.
— ¿Así que ahora vas a fingir preocuparte por mí?
Hoseok suspiró.
— SeokJin, ¿ahora qué estás...
— ¡Finges preocuparte por mí cuando ni siquiera me buscaste o recordaste que yo existía!. — Le escupió antes de darse cuenta del propio dolor oculto en su voz.
El alfa le miró completa y totalmente anonadado.
Y Jin no pudo detener todo lo que en su pecho se arremolinó.
— ¡Me engañaste para hacerme venir hasta aquí!
Hoseok cerró la boca sin decir nada, sabiendo que Jin tenía un punto ahí.
— ¡Y Jungkook es tu maldito cómplice! — Continuó Kim — ¡Él jamás me dijo que este club era tuyo!
— ¡Porque si te lo decía no ibas a aceptar venir! — Se defendió el alfa desesperado.
SeokJin sintió el nudo en su garganta crecer y sabiendo que estaba a nada de romper en llanto, se tragó sus ganas de gritarle por no ser valiente e ir con él a pedir perdón.
— No me importa nada. — Mintió Jin. — Ya no quiero hablar contigo. Tampoco quiero verte.
Hoseok se congeló en su lugar sintiendo el golpe de sus palabras y actitud de su omega.
¿De verdad estaba haciendo un berrinche?
Jin se alzó nuevamente del sofá y buscando a Jimin con la mirada comenzó a caminar hasta él.
— Jimin, ya no quiero estar aquí.
Hoseok le miró en shock sin saber qué hacer con él.
Se sentía superado por su caprichosa actitud.
— Si no quieres saber nada de él, ¿entonces por qué aceptaste todos sus regalos?
SeokJin se detuvo en la entrada de la oficina y miró hacia Yoongi.
Min le miraba desafiante.
— Yoongi... — Le advirtió Hoseok neutro. Serio y sin ninguna aparente emoción en el rostro.
Jin miró de Yoongi a su alfa y de nuevo hacia él.
El alfa bajito le miraba como si quisiera asesinarle.
— ¿Cuáles regalos? — Preguntó lentamente.
Su omega comenzó a gimotear con miedo.
¿Acaso Hoseok había comprado regalos para alguien más?
— Oh por favor, no te hagas el tonto, Kim. — Le escupió Yoongi incrédulo.
Hoseok giró hacia él y como una baja advertencia le gruñó.
Pero Yoongi no se detuvo.
— Yo mismo le vi elegir todos los obsequios que te hizo. — Le reprochó. — Las flores que te envió y todas las cartas que escribió para ti.
Jin parpadeó confundido y miró hacia su alfa fijamente.
Su pecho se oprimió con dolor y sus ojos ardieron aún más porque Hoseok ni siquiera le miró.
— Min Yoongi ya basta. Tú no debes meterte en esto. — Soltó Namjoon duramente. — No tenemos nada qué hacer aquí. Es mejor que nos vayamos y los dejemos a solas.
SeokJin sintió su labio inferior temblar por la revelación.
¿Hoseok tenía pareja y por eso no le había buscado?
Namjoon tomó la mano de su pareja y luciendo apenado con él y Hoseok, salieron ambos de ahí sin decir más.
Jin alzó la frente y tragó la amarga sensación aguijoneando en el centro de su garganta.
— Nosotros tampoco tenemos nada qué hacer aquí Jimin. — Soltó decidido. — Vámonos ya.
Jimin asintió aturdido y caminó en silencio hasta él.
— No.
SeokJin se detuvo intentando ignorar el temblor dentro de él.
— Si. Me voy. — Repitió.
El alfa dio un par de pasos y Jin solo por orgullo se mantuvo firme y de pie.
— No SeokJin. Tú no vas a ir a ningún lado. — Aseguró el alfa sombrío.
— ¡Te he dicho que..
— ¡Y yo te he dicho que no! — Explotó el alfa completamente enfurecido.
SeokJin empujó a Jimin detrás de él y encaró al alfa con fiereza.
— ¿Qué vas a hacer? ¿Usar tu voz para obligarme?
— Tú no vas a moverte de aquí hasta que hablemos. — Le dijo Hoseok sin verse afectado por su ataque.
SeokJin bufó una risa y comenzó a negar divertido.
A pesar no sentir nada más que furia y dolor.
— No me puedes obligar a eso. — Advirtió Jin. — Hablaremos después. Cuando yo lo quiera.
Hoseok inhaló lentamente y cortó por completo la distancia entre los dos.
— No SeokJin, porque vas a huir y esconderte de mí. — El omega tembló por su aroma enfurecido y Hoseok continuó. — Hablaremos ahora mismo o yo mismo iré a buscar a tus hermanos. Ellos llegan a la ciudad mañana por la mañana, ¿cierto?
SeokJin se congeló y boqueó sorprendido con la guardia baja sin poder decir nada más.
Hoseok se inclinó poderoso hacia él y bufando su furia contra su rostro, le miró duro y fijo a los ojos.
Ambos separados solo por un par de centímetros que ardieron entre los dos.
El pecho de Jin comenzó a subir y bajar sin poderlo controlar.
— Tú decides si hablar conmigo o no. — Advirtió Jung con lentitud. — Porque estoy seguro que tus hermanos si van a querer escuchar todo lo que tengo por decir...
Y una eternidad pasó entre ambos antes de que SeokJin pudiese responder.
— Bien. Hablaremos ahora.
Y Jimin, detrás de Jin y cubriendo su nariz aterrado, jadeó sin poderlo creer.
Él tal vez estaba soñando.
Porque su hyung definitivamente jamás se rendiría ante nadie...
...
...
¿Algún comentario?
¿Quieren saber cuántos capítulos restan?
Espacio para expresar
sus quejas y traumas →
Nos leemos pronto ♡
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top