Bajamos del auto frente al enorme edificio de los Miller y mientras vamos de camino a su oficina Jade no para de susurrarme lo impresionada que está todo, pasar por la pequeña fuente en la entrada que pareciera tener baño en oro, la lujosa recepción con tonos oscuros y luces cálidas, el enorme recorrido que se debe tomar para llegar al ascensor y por fin subir.

—Esto es como una fantasía, literalmente trabajan con multimillonarios Grace

—Aún no aún no, recuerda que vinimos por el contrato a firmar así que todo puede pasar

Subimos al ascensor en dirección al salón en el que anteriormente nos reunimos todos, la secretaria nos habría dicho que allí estaba todo pero que "lamentablemente" Dalton no se encontraba en la empresa, sin embargo, no encuentro nada de lamentable en eso, por el contrario es perfecto porque así iremos lo antes posible a donde sea que se encuentre Lucas.

Se abre la puerta que da con el enorme pasillo al que nor dirijamos, buscamos detenidamente la puerta enorme que recuerdo de forma borrosa intentando no perdernos entre la multitud de hombres importantes con guardaespaldas que habían hoy en el lugar.

—Empiezo a sentir que vinimos algo informales— Jade les sonríe sin parpadear a los sujetos mientras yo solo empiezo a desear irnos lo más pronto de ahí

—Jade... Creo que me perdí, no recuerdo que puerta es— hago una mueca y camino desesperadamente verificando cada salón abierto

—¡Señorita!— Grita al final del pasillo una chica de algunos 20 años —¡por aquí!—  asumiendo que era con nosotras nos movemos con rapidez hasta el lugar —Supongo que ustedes vienen de parte de la familia Walker, el señor Dalton si me dijo que estaban agendadas para hoy— pasa sus manos sobre la falda que me daba a entender era de las secretarias de la compañía —discúlpenme soy nueva aquí, síganme que les diré donde se encuentra el contrato

La chica parecía apenada pero fue muy amable en guiarnos hasta el lugar correcto, incluso nos habló en el camino y hast nos preguntó si conocíamos a la familia Miller por si teníamos consejos para trabajar con ellos.

—Yo solo se que tienen buenos genes— le guiña el ojo Jade que como era de esperarse menciona lo asombrosamente guapo que "es" Dalton

—Yo solo te deseo suerte —ella se ríe con confidencialidad y me acerca un papel para que firme

—Eso sería todo señoritas, con esto afirmas haber recibido el contrato. Espero haber sido de ayuda, ¡fue un gusto conocerlas!

—El gusto fue nuestro Samantha, te acompañamos hasta el ascensor — ella asiente dulcemente mientras de salida esquivamos nuevamente a unos 15 hombres

<<Que desastre el que hay aquí hoy>>

Separamos caminos con Samantha quien debía atender a ese sin fin de empresarios desesperados que al parecer tenían una reunión con Dalton y su padre lo cual explicaría todo el alboroto, Jade decidió que era oportuno probar el café del lugar antes de irnos porque según ella podría existir la posibilidad de que supiera a ricos excéntricos. Mientras que yo abro la carpeta en la que estaba el contrato solo para ojearla un poco.

—Parece que tienen muy buenos abogados —abre los ojos de par en par mientras come un croissant— este contrato está fríamente calculado, casi perfecto

Jade siempre quiso estudiar leyes pero al ser una carrera tan exigente y potencialmente peligrosa se convirtió para ella en un sueño frustrado.

—¿Tu dices?... es que algo no me cuadra, es como si supieran el siguiente paso que vamos a dar y lo hacen perfecto Jade

—¿Exactamente qué quieres cambiar del contrato o que quieres encontrar aquí?

—Alguna incongruencia, no lo sé, indagar más

—No es raro que te quieras hacer la difícil querida Grace— volteo mis ojos y me río— yo te ayudo pero por favor vámonos— se soba el estómago con decepción— este café es un fiasco

Caminamos entre risitas burlonas, a su vez íbamos en dirección a la salida pero antes de pasar por recepción y despedirnos de las amables chicas que nos atendieron alguien nos chista desde atrás, pese a que yo ignoro por completo tal acción mi mejor amiga no puede evitar voltear a ver.

—Oh mira, aparentemente no somos las únicas vestidas inapropiadamente— achina sus ojos supongo yo para ver con detención de quien se trataba— y viene a nosotras en 3, 2... ¡Diablos! Es el guap-

—Este "guapo" se presenta, Dalton Miller encargado de este edificio como ves— volteo mientras que mi posible socio sujeta la mano de mi (quisiera que no justo ahora) amiga congelada— Necesitaba hablar contigo justamente Grace— nos da empujoncitos hacia la salida

—¿Que haces sin traje en un edificio repleto de gente asfixiante hasta la nariz de negocios?— pregunto con ironía destacando que fuera de ese lugar ya no somos socios y que su vestimenta se veía poco propia de él

—¿Podríamos reunirnos en tu apartamento mejor? Tengo prisa —dice con esa expresión seria característica suya pero algo extraño puesto a que miraba con algo de paranoia hacia los lados

—Si, súbete rápido que tengo algo de prisa— respondo sin darle mucha importancia mientras todos abrimos las puertas del auto

<<Espera... ¿cómo sabe que vives en un apartamento?>>

Camino a casa todo fue silencio, y si, silencio del incómodo. Jade parecía no poder creérselo pero intentaba disimular, Dalton ni hablar con su rostro amargo no se si analizaba cada detalle u odiaba estar allí, yo por mi parte intenté concentrarme en qué le diría a Lucas que compensara lo de hoy como también en llegar lo más pronto posible para acabar con esta incomodidad que cada vez era más tortuosa.

—Pedí comida, probablemente Jeff no demore en traerla —Dalton espera nuestra aprobación, yo asiento en silencio y cierro la puerta tras de él —Me dijo que las conocía, ¿trabajas en un café no es así?

—Ah, yo no esa es Jade...

—Tiene sentido que el hombre de los 10 cafés y buenas propinas trabaje para ti— al escucharla decir eso suelta la primera risita amable desde que lo conozco y pide permiso para tomar asiento en la sala

<<Como sacado de una película, es educado y sabe que decir>>

—Supongo que tendrás dudas del contrato Grace

—En realidad pensamos evaluarlo durante los próximos días si es posible — Jade respondo con tanta seriedad que me quedo pensando unos segundos antes de poner las llaves en la mesa

—¿Abogada?— dice con malicia entrecerrando sus ojos

—Aspiraba serlo pero sé bien como se juega esto

Bien... no se si discuten o coquetean pero la conversación se tornó algo agresiva e incómoda y no estoy segura de en que aspecto. Carraspeo mientras me abro espacio en el sofá frente a la silla en la que está Dalton, Jade por su parte de levanta sacude su envidiable melena y me guiña un ojo.

—Es demasiado atractivo pero puedo entender tu frustración — lo mira de reojo y continúa hablándome al oído —no te dejaré morir en esto, basta con parpadear para ver que se cree más listo que todos... intentaré portarme adecuadamente— ríe para si misma y se va caminando para el baño

<<Y tal vez si sea más listo que todos, es un zorro demasiado astuto>>

—Entonces, hazme tus preguntas mientras llega la comida. Responderé cualquier duda sobre la empresa, nuestra próxima sociedad, todo excepto preguntas personales —entrelaza sus dedos sobre las rodillas —no se habla de eso en los negocios pues ya sabrás tu

—Por lo que sé el dueño es tu padre pero no lo hemos visto en lo absoluto, ¿por qué? La verdad quisiera saber como se impulsó esto de "Empresas Miller"

—Mi padre es un hombre—piensa —enigmático se puede decir, le gusta mantener un bajo perfil pues el dinero te trae enemigos y acosadores por doquier, sin embargo, es un hombre respetable y me dejó a cargo de enlazar los negocios de toda la empresa, si este contrato se llega a firmar seguramente lo verán muy seguido —termina de hablar con mucha seguridad y arrastra por la mesa en mi dirección el contrato bajo sus dedos — por otra parte Empresas Miller fue idea de mi madre, yo solo soy un peón en esto

—¿Entonces tu madre que puesto ocupa en la compañía?

—Nada de preguntas personales Grace— se levanta y revisa su móvil —la comida llegó

No me dejó ni terminar cuando salió a recibir las bolsas que por cierto olían muy muy bien, Jade salió del baño después de eso y se entusiasmó al ver el lugar del que venía nuestra apetitosa cena, como es de esperarse mis ánimos son apaciguados cuando la comida llega justo a tiempo y al ver el nombre Canlis en donde venía la cena mi alegría fue aún mayor.

Servimos la comida y la conversación parece fluir perfectamente, Jade hace preguntas sobre el contrato, todos comemos aunque Dalton parece esperar a que nosotras terminemos de cenar para el hacerlo después cosa que no entiendo del todo, sin embargo lo que es una reunión de negocios se convierte en eso exactamente pero con menos tensión, menos palabras ensayadas o discursos convincentes.

—Entonces tu eres como el encargado de toodo ese edificio, tu papá solo maneja cosas muy específicas según entendí —Jade le hace señas para que comience a comer bien

—Exactamente

—¿Acaso tienes vida?— cuando escucho eso casi me atraganto con el agua

—Parecías estar muy callada —dice con gracia al ver mi reacción —Si esa es tu duda Jade, la gente sabe de mi vida solo lo que yo deseo compartirles

No pareció incomodarle su pregunta pero la respuesta que dio cerró por completo esa conversación, yo mantuve el silencio que instalé desde que Jade empezó con las preguntas, no se si deseo analizar todo, preguntar o no hacer nada, con exactitud no se porque mi intuición me grita y empiezo a estresarme porque no se si es mi desconfianza o si realmente no fallo en esto, no se nada hasta ahora o al menos no se nada de lo que me pueda quejar y acercarme empieza a ser frustrante cuando no se como hacerlo.

—Indaga, investiga que el interés parece tenerlo fijado en ti. Es cerrado y astuto como un libro que no se puede descifrar pero extrañamente espera a que hagas una pregunta, tal vez solo quiere negociar rápido —Jade me dice sus apuntes mentales como si esto se tratara de un caso criminal, Dalton por su parte se había ofrecido a llevar lo que estaba en la mesa a la cocina. Psicología eso fue lo que estudió Jade después de todo, no es extraño que fácilmente pueda deducir uno que otro detalle

—Basta, creo que es suficiente por ahora hablaremos de esto después, prefiero mostrarle lo antes posible el contrato a mis padres y ver que sucede

Desde el umbral se le ve llevando las bolsas a la basura y poniendo una que otra cosa en su lugar o bueno al menos el cree que ese es el lugar correcto...

—¡Oye! ¡¿Eres DALTONico o quee?! ESTOY DICIÉNDOTE QUE ESE NO ES EL BOTE DE BASURA CORRECTO —Jade se escandaliza y grita cuando ve que lanza el plástico en el de color verde— Daltónico... ¿entienden? Dalton- Dalton... ico

Un Dalton confundido me mira y seguramente se encuentra con mi cara de desagrado y vergüenza ante ese comentario aunque ella solo ríe de su propio mal chiste, fue tan malo que al vernos ambos confundidos nos unimos y soltamos una carcajada al unísono.

<<Segunda vez que parece reír como una persona normal lo haría>>

—Espero que no diga cosas así todo el tiempo —dice el mientras termina de reírse y pone el el lugar correcto la basura

—Tienes que oírme, hago chistes mejores sobre el desempleo de Grace— Jade se seca sus lágrimas aunque yo paro de reír inmediatamente. Dos comentarios fallidos e inoportunos casi en una misma oración, ¿qué pasó con el "voy a intentar portarme bien"?. Le doy un empujón y ella se pone seria también al entender lo que acababa de hacer

—¿Desempleada?— arquea una ceja después de su pregunta

—Ser programadora no es nada fácil —respondo cortante mientras que Jade solo decide huir de la pésima situación en que nos sumió

—Ya veo

Él lava sus manos y salimos prontamente de la cocina. Cualquier idea de conversación queda pasmada en el aire cuando Lucas entra al apartamento y recuerdo de inmediato que había dejado eso de lado, ¿qué le iba a decir ahora por mi descuido?. Tras no ser suficiente al vernos se detiene unos segundos en Dalton y me mira, suspira y su cara se tensa pero aún con ese gesto que claramente no comprendí solo dice "Buenas noches" y va directamente a la cocina. Le hago una mueca a Jade para que se encargue pero ella y Dalton ya están bastante concentrados en sus teléfonos así que me voy detrás de Lucas casi que a zancadas.

—Oye, ¡holaa! Te hablo —agito mis manos en el aire para que desvíe su atención hacia mi

—Mamá te manda saludos —abre la nevera sin voltear a verme

—¿Qué sucede porque estás así?, disculpa por lo de hoy se que lo olvidé y todo esta semana ha sido un desastre por mi culpa

—Es el sujeto que atendí por la mañana, compró los mercedes que mencioné —pasa por mi lado aún sin siquiera mirarme

—¿Eso que tiene que ver? No entiendo, ¿Al menos me estás escuchando Lucas?— empiezo a enfurecerme inevitablemente por su actitud odiosa pero parece que a él no le preocupa en lo absoluto

—No tengo nada que decir, no pasa nada Grace yo solo quiero dormir —me mira y señala sarcásticamente "su cara de cansancio"

—¡¿Por qué nunca puedes decirme las cosas?!

—Porque seguro mañana se te van a olvidar, pero tampoco creo que lo entiendas —me quedo parada después de escuchar sus palabras mientras Lucas se da la vuelta, toma su plato de cereal y sale directo de la cocina al cuarto

Con el rostro cambiado, triste, furioso y decepcionado a la vez salgo de ahí pasados unos 3 minutos meditando con vergüenza y frustración si la pelea se habrá escuchado hasta allá, me encuentro con Dalton de pie mirando su móvil y Jade sujetando el pomo de la puerta.

—Ya me iba Grace, Jade fue bastante amable—nuevamente sus gestos serios, amargos y calculados en su medida. Se acerca para despedirse y con ello extiende una pequeña tarjetita—Tal vez ni siquiera lo consideres pero conozco una vacante de programación, la tiene un socio con quien trabajo y seguro te la podría dar a ti—señala el pequeño trozo de cartulina con los datos en el —Avísame si te interesa o solo llama

Asiento en silencio y despedimos a Dalton finalmente, Jade sale poco después de él sin comentar mucho más de lo que pasó para finalmente dejarme sola ahogada en mi propia miseria.

He sido increíblemente cruel con Lucas y eso es una basura por completo pero algunas veces me encuentro ahogada por la falta de comunicación que surge entre nosotros cuando hay un problema. Hablar con alguien no debería sentirse así y menos si se trata de arreglar algo que está mal pero he ahí el gran "pero" entre mi orgullo y su paciencia, es lo que sucede cuando alguien cree que para llevar la paz es mejor callar. La mayoría del tiempo estamos bien pero cuando peleamos realmente me frustro y no encuentro que hacer.

"—Me hiciste falta hoy querida, se que Lucas puede ser exasperante..."

Como si la llamara con el pensamiento la dulce madre de Lucas me escribe...

<<Esto es demasiado para procesar hoy>>

Antes de dejar mi móvil en el sofá veo un mensaje de Zack, parece que como era de esperarse antes de poder decirles que tengo el contrato conmigo las secretarias de los Miller les enviaron un mensaje a mis hermanos y a mi padre diciendo que habían recibido mi firma y que el contrato ya no se encontraba con ellos. Cansada de los negocios por hoy recuerdo que dejé en mi habitación los datos que me envió la chica de recepción, me dirijo hasta allí resignada a encontrarme con Lucas pero debía tener todo en una carpeta para mañana temprano si debo entregarles todo a mis padres.

Abro la puerta y veo a Lucas sentado al borde de la cama leyendo todo pero con cara de horror.

—¿Pasa algo?— carraspeo

—Esto es lo que sucede: ¡te obsesionas con tan poco!—mueve bruscamente una de las hojas frente a mi cara y la pone junto al resto —quiero entenderlo pero no puedo, esto es siempre, siempre es una locura difícil contigo

—¿Disculpa? ¿Acaso yo hago contratos con millonarios extravagantes todos los días?— respondo indignada sin entender del todo su reacción grotesca—Soy yo la que no entiende qué pasa porque no eres capaz de decirlo, y posiblemente sea lo que sea si yo te lo explico tampoco lo vas a entender

<<Oh no, aquí vienenn... se asoman un par de lágrimas>>

—Olvídalo, tampoco se trata de hacerte llorar —frota su cara con frustración —Sea lo que sea resuelve ese conflicto Grace, tu desconfianza nos está matando

—Olvídalo, resuélvelo tú porque tu silencio también—volteo mi cara que seguro está roja y con lágrimas, lo último más humillante que me pudo pasar como cosa rara es llorar por rabia

—Saldré — hace un ademán, agarra se chaqueta y se va.

Como puedo con el estrés encima termino de ponerlo todo dentro de la carpeta y activo la alarma para mañana temprano llevar esto antes de que lo olvide. Me acuesto con la ropa del día, no me quedan ganas ni energía para hacer algo más y pensando mientras me vence el sueño para por fin descansar de toda esta locura me pregunto cómo una persona tan dulce puede ser tan cruel cuando se molesta aún sin decir absolutamente nada hiriente, al menos no en palabras pero soltando cada frase mas afilada que la anterior.