—¡Malditos mocosos!— protestó Barbamon asustando a todos sus subordinados —¡Quiero que los encuentren y los destruyan!— ordenó

—Pero señor, ellos tienen un ejercito— Mencionó uno de los Devimon que se encontraba en aquella sala

—Nosotros también—

—Pero nuestros enemigos son digielegidos y hay otros que poseen el poder de los antiguos guerreros legendarios—

—Son unos cobardes—

La ira de Barbamon fue en aumento, a tal punto de destruir a aquellos digimones que se encontraban ahí

—No sirvieron para nada más que consumir sus datos— dijo en anciano— Esos mocosos lamentarían haberse metido conmigo—    
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Todos los elegidos se encontraban en el campo de batalla, los únicos que se encontraban ajenos a toda esta situación eran Kouji y Kouichi. Desde que Kouichi regresó a la normalidad se había encontrado en ese estado de sueño profundo. La preocupación de Kouji le había distraído en el campo de batalla, tanto que todos decidieron que se quedara en el refugio.
Las tropas de los elegidos avanzaban, y las fuerzas de Barbamon retrocedían. A pesar de que todo esto era bueno la sensación de que algo no iba del todo bien crecía en Koushiro.

—Tal vez sea un tonto presentimiento— susurró el elegido del conocimiento

—¿Que sucede Koushiro?— preguntó Tentomon

—La extraña respuesta de las tropas enemigas. Son muy fáciles de vencer y se retiran a la más mínima dificultad. Es como si quisieran atraernos a un lugar específico— se cuestionó—Sea lo que sea estaremos preparamos—

En el campo de batalla los digielegidos avanzaban. Sus enemigos huían. Todos se encontraban confiados, su seguían así pronto tendrían otra zona liberada. Todos llegaron a un gran claro y así como llegaron las tropas enemigas, así desaparecieron sin dejar rastro. El ambiente de tranquilidad que se formó en ese instante ponía de los nervios a muchos digimones.

Los digimones malvados aparecieron de la nada. Habían planeado una emboscada tomando desprevenido a todos. El número de enemigos se había multiplicado considerablemente.

—Esto es una trampa— mencionó el guerrero del trueno quien golpeaba a varios digimones

—¿De verdad lo crees? No me había dado cuenta— dijo de forma sarcástica Agunimon

—Dejad de pelear entre ustedes y apoyad a nuestros compañeros— regañó el hada de cabellos lila

Angemon como Ex-Veemon se abrían paso entre los digimones oscuros dejando pasar a los humanos.
El digicodigo de esa zona desapareció, dejando un gran hoyo en el suelo donde tanto aliados como enemigos cayeron hacia el vacío. Angewomon salvó a Hikari, como Aquillamon a Miyako e Iori y Armadillomon. Todos observaron el gran vacío que quedó y el el otro extremo visualizaron una rosa armadura con cintas doradas.

—Cuanto tiempo sin vernos elegidos— Mencionó el caballero real

Sin esperar un movimiento de su enemigo Aldhamon y Betleemon lanzaron sus ataques contra Crusadermon, quien los esquivó con mucha facilidad. Haciendo uso de sus cintas, Crusadermon las lanzó contra sus oponentes.

—Tormenta rosa—

Las rápidas patadas de Kazemon ni siquiera abollaban la dura armadura de su rival, pero ese no era el principal objetivo de la hada, sino distraer a su enemigo.

Después de que la serie de patadas frenara Aldhamon, Angewomon y Flamedramon preparaban sus ataques.
Una flecha luminosa seguida de dos grandes bolas de fuego impactaron en el lugar donde se encontraba el caballero de rosa armadura.

—Necesitaran mas que eso para vencerme— dijo mientras salia de las llama ileso

Una tormenta de pétalos de rosa golpeó a todos.  Crusadermon se acercaba peligrosamente a los elegidos. Aldhamon rápidamente se levantó y encaró al Digimon enemigo.

—El poder de Crusadermon es muy fuerte para nosotros, ni siquiera le pudimos hacer un rasguño— se quejó Mimi

—Hay algo que podemos hacer— dijo la Orimoto observando su digivice para después alzarlo y ver que este desprendía un brillo roza— ¡Viento al fuego!—

El menor de los frontier también imitó la acción. De su digivice el color celeste salio. Ambos ases de luces incidieron en Aldhamon quien rápidamente fue rodeado por un destello rojo. Ante los ojos de todos Kaisergreymon emergió. Blandiendo su espada invocó a varios dragones de fuego quienes atacaron a Crusadermon.

—No podemos quedarnos aquí a mirar, tenemos que apoyar a Takuya también— dijo con entusiasmo la Inoue

Gatomon y Hawkmon se unieron en uno, creando a Silphimon. Las chicas poseedores de los D-3 realizaron una ADN. Takeru e Iori como Daisuke y Ken no se quedaron atrás. Shakkoumon y Paildramon aparecieron. Los tres digimones encararon a Crusadermon. El resto de los elegidos solo observaban desde tierra. El primero en atacar fue Silphimon. Con sus rápidos movimientos golpeaba a Crusadermon, pero sin ovacionar grandes daños. El enemigo lanzó una ves mas las cintas que poseía. Kaisergreymon con un movimiento de su espada destruyó aquellas cintas que amenazaban con atrapar a sus compañeros.
Paildramon lanzó vatios proyectiles desde sus ametralladoras que poseía en ambos brazos, aunque las balas no llegaban mas allá de abollar la armadura rosa. Con su puño Shakkoumon golpeo a Crusadermon. El golpe lo desplazó varios metros atrás. El gran ángel de acero preparaba su ataque. Desde sus ojos, radiantes rayos rojos salían. La agilidad que poseía Crusadermon le servía para evadir aquel ataque. Con sus garras Silphymon se lanzó otra vez para atacar, pero fue detenida. Kaisergreymon atacó una vez más. Tomo si espada a forma de cañón apuntando a su objetivo. El estruendo fue tan grande que se pudo escuchar desde el refugio. Aquel ataque era uno de los mas poderos del guerrero del fuego. Como todos esperaban Crusadermon se derrumbó. Su armadura se empezaba a descascarar, su casco poseía varias grietas y el apenas podía ponerse de pie. Kaisergreymon planeaba dar el golpe final, pero un gran dragón blanco apareció de la nada. Aquella energía era tan grande que desplazó a todos. El destello de luz del área explotando cegó a todos. Kaisergreymon pudo observar a otro Digimon acercarse a Crusadermon antes de que la luz lo envolviera por completo.
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—Ese es el lugar donde se encuentran Takuya y los otros— mencionó Megumi observando desde la distancia

—Estarán bien— dijo Sora calmando a la chica

—Avancemos— dijo Pyro

—Me pueden repetir que hacemos aquí— preguntó Megumi observando la jungla en la cual estaban adentrados

—Buscamos el sitio donde se encuentran las bestias sagradas— dijo Joe

—¿Bestias sagradas?— preguntaron a coro Pyro y Megumi

—Son cuatro poderosos digimones que se dedican a proteger el digimundo— dijo Sora

—Pensé que de eso se encargaban los Tres Ángeles sagrados— dijo Megumi observado a Pyro con duda

—Este es el lugar según las coordenadas de Izzy— dijo Sora observado el digivice que traía en su mano

El sitio estaba en ruinas, las plantas se habían apoderado de todo. Se encontraban en lo profundo de la jungla. Los digivice de Sora, Joe y Megumi reaccionaban a algo.

—Debemos estar cerca— dijo Sora buscando con la mirada algo que mostrara lo que estuvieran buscando

—Miren unas runas extraña aquí— mencionó Pyro

—¿Que dicen?— preguntó Megumi

—No lo se— respondió el chico — Ojala Bokomon estuviera aquí—

El sonido de una rama crujir alertó a Pyro. Al parecer el había sido el único que escuchó aquello. Se alejó del grupo a investigar que había sido aquello.

—¿Que crees Pyro?— preguntó Megumi a su amigo, pero al no encontrarlo se preocupó— Chicos Pyro no está— llamó la atención de Sora y Joe

El sonido de una batalla formándose atrajo la atención de los tres chicos. Rápidamente fueron a la zona donde se realizaba la pelea. Vulpixmon se encontraba batiéndose contra un hombre león. Al parecer el guerrero legendario estaba ganado la pelea, lúes su rival se encontraba algo agitado y con algunas heridas.

—No volveré a repetirlo, ¿quien eres?— preguntó el guerrero del cielo a su rival

—¡Alto ahí!— llamo la atención Joe deteniendo la pelea— El es un aliado— se interpuso Joe entre ambos digimones

El guerrero del cielo dejó su postura ofensiva y se relajó. Se acercó al León Digimon y le extendió la mano, seguido de unas disculpas por haberle atacado

—¿Sabes lo que pasó aquí Leomon?— preguntó Joe

—Un grupo de Digimones empezaron a recolectar datos de diversas zonas, yo y mi equipo tratamos de detenerlos, pero...— hizo una pausa

—¿Pero?—

—Un niño humano nos derrotó— todos quedaron en shock al escuchar eso

—¿Un niño humano?—

—Sí, iba acompañado con un Digimon blanco. El solo derroto a todos mis compañeros y absorbió sus datos. Yo fui el único que escapó —

—Esto es muy graven— habló Megumi alarmada

—Debemos detenerle— habló el gran león

—¿Y si es alguien controlado por Barbamon?— preguntó Sora— También está esa posibilidad

—Sea cual sea la razón no podemos quedarnos sin hacer nada— dijo Pyro— Primero terminemos nuestra misión y después informemos al resto

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—¡Guerrero de la luz! ¡Guerreo de la luz!— gritaba un pequeño Toucanmon mientras se acercaba a Kouji— Tienen que venir rápido— pidió el emplumado Digimon

Kouji salió del refugio siguiendo al digimon. Al llegar al.sitio donde el ave le condujo encontraron a un niño humano a las orillas del río. Rápidamente Kouji le identificó como el extraño chico que conocieron una vez.

—Lo encontré aquí mientras buscaba algunas hierbas— comentó el digimon

—ve hasta el refugio y pídele a Sistermon Blanc que preparé una cama para él— dijo mientras ponía el cuerpo del chico sobre su espalda para cargarlo

Al llegar al refugio la Digimon de blanco preparó todo como se le fue pedido. El chico humano no presentaba muchas heridas y al parecer estaba inconsistente.

—Despertara en un par de horas— habló la encargada de cuidar a los enfermos

El chico de la luz asintió y salió de la habitación. A pesar de estar preocupado por Kouichi también estaba algo ansioso. Sus compañeros no llegaban desde que salieron al campo de batalla. Según el plan era realizar un rápido ataque a las tropas enemigas. Según lo que escucharon de sus informantes estas no traían un gran numero de enemigos, por lo cual seria fácil vencer. Pero había pasado mucho tiempo desde que salieron. El estruendo de una gran explosión en la dirección que se encontraban todos sus amigos le llamó la atención. Algo no iba bien.

—He perdido comunicación con Miyako y los otros— habló Koushiro llegando con Tentomon al lugar donde se encontraba Kouji

—Les tendieron una trampa— dijo Kouji con molestia— ¿Que hay del grupo de las bestias sagradas?—

—Todo va bien ahí. Nos informaron que se encontraban cerca de la ubicación— habló el escarabajo rojo

Eso calmó algo a Kouji.

—¿Cual es el siguiente movimiento?— Le preguntó

—Si nuestros aliados logran vencer a esas tropas estaríamos más cerca de atacar la ubicación donde se encuentra Barbamon— dijo el elegido del conocimiento revisando su computadora— De no ser así estaríamos vulnerables

Una explosión proveniente de la zona donde trataban a los heridos se escuchó. Ambos chicos fueron a ver de que se trataba. El fuego rodeaba todo. Kouichi estaba rodeado de aquellas llamas. Kouji fue a tratar de salvar a su hermano, pero una esfera de luz pasó rápidamente por su costado.

Otra explosión se escuchó. El humo bloqueaba la visibilidad. Pequeñas risillas se escuchaban.

—¿Quien está ahí?— preguntó Kouji

—Pensé que eran mas precavidos— dijo la voz

Kouji y Koushiro visualizaron una figura con varios pares de alas, pero aun así no podían visualizar bien a su enemigo.

—Debería darte las gracias Guerrero de la luz. Sino fuera por ti no estuviera destruyendo vuestra pequeña base secreta— río

Tanto Kouji como Izzy tomaron sus dispositivos digitales preparándose para la batalla. El humo se disipó mostrando a un niño rubio, el mismo que Kouji había traído. La expresión de sorpresa de Kouji alertó a Koushiro.

—¿Luzbel?— preguntó el elegido del conocimiento

—Veo que aun creen que soy humano— dijo el rubio volando hasta acercarse al rostro de Koushiro—Mi nombre es Lucemon—

Con unos altos reflejos Lucemon se separó del chico. La espada láser de Lobomon rosó levemente los cabellos dorados del ángel.

—¿Tan ansioso estas por morir?— le dirigió la mirada a Lobomon quien le miraba seriamente

Lass llamas se avivaban. La madera empezaba a quemarse y partes del techo empezaban a caer. Eso hizo que Koushiro reaccionará. La luz de su digivice rodeó a Tentomon transformándolo en Kabuterimon. El insecto azul voló rápidamente y sacó al gemelo de Kouji. Lobomon al ver eso utilizó su cañón en su brazo para disparar al techo haciendo que varias piedras cayeran sobre el ángel.

Todos escaparon de las llamas. Los pocos digimones que seguían vivos miraban con horror como su refugio se destruía.

—Salgamos de aquí, esos escombros no le retendrán por mucho tiempo— se escuchó la voz de Lobomon
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Un nuevo capítulo para comenzar este mes de noviembre. Lamento mucho el retraso. Disfruten de la historia😉

Zorrito Fuera