Capítulo dedicado a @madelendelcarmen ♡♡ 

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Vee y Marcel en multimedia {manip hecho por mi}

— ¿¡Qué hiciste qué!? – exclamó Jane a su mejor amiga.

—Le conté la verdad a Marcel – repitió Katelyn con fastidio.

— ¿Qué dijo? – quiso saber Jane inclinándose hacia delante apoyando su barbilla en la mano.

— No lo creía, tenía una expresión incrédula en el rostro... —explicó Katelyn – Entonces llegó Harry y lo asimiló moliéndolo a golpes – soltó un bufido al final.

— ¿Marcel peleando? Eso es nuevo – comentó Kenny impactado a un lado de Jane.

—Ya sé, nunca en mi vida lo había visto de esa manera... tan violento – Katelyn abrió los ojos, expectante.

— ¿Y qué más pasó? – insistió Jane.

— Eso fue todo – respondió encogiéndose de hombros, Jane arqueó una ceja.

— ¿Todo? —repitió – ¿No fue detrás de ti? ¿Peleo por ti? ¿Nada? – Katelyn negó con la cabeza.

— Él se fue, y me quedé con Harry... — recordó Katelyn.

—¿Cómo? —preguntaron Jane y Kenny al mismo tiempo.

—Tranquilos, solo atendí su hemorragia nasal y moretones de la cara. Luego lo ayudé con su salud emocional – se apresuró a explicar. Jane chasqueó la lengua en desaprobación.

—Lo hubieses dejado ahí, que se desangrara —espetó Kenny.

—Me dan ganas de golpearte. Te pasas de solidaria con personas que no lo merecen – dijo Jane. Katelyn revoleó los ojos.

—Quizás ya entendí porque odia tanto a Marcel –comentó Katelyn ignorando a su amiga, en su mente analizaba la situación de los gemelos.

— ¿Cómo? —quiso saber Kenny con curiosidad

—Harry es un completo idiota, de eso no me cabe la menor duda... —dijo ella – Luego, Marcel es bueno en muchas cosas, sabe pintar, lee mucho, sus calificaciones son las mejores de su generación, Harry solo se siente frustrado, al ser comparado con Marcel se siente insuficiente – explicó Katelyn, sus amigos la miraban escuchando atentamente sus palabras – Pero es solo una teoría – se encogió de hombros.

—Suena lógico – le apoyó Kenny, Katelyn lo miró sorprendida – Si algo quería, era que Marcel se sienta solo el resto de su vida.

—Exacto y casi lo logra – agregó Jane.

— Son los gemelos más extraños del mundo – comentó Kenny sobándose la rasposa barbilla.
—Lo sé, son un dolor de cabeza – dijo Katelyn con humor, luego se quedó seria alertando a sus amigos. – Al decirle a Marcel toda la verdad, de pronto comencé a sentir empatía por Harry, a pesar que haya sido un idiota, fue como quitarme un peso de encima, al igual que el odio que le tenía – expresó Katelyn.

Sus amigos la escucharon con atención

—Pero también, no siento la necesidad de buscar a Marcel...

—¿Entonces se terminó? – cuestionó Jane. Katelyn asintió con la cabeza.

—No les mentiré, lo sigo queriendo como no tienen idea – aclaró ella – Pero creo que es hora de dejarlo ir, quizás en algún momento la vida se encargara de juntarnos de nuevo.

—Qué así sea – sentenció Kenny haciendo sonreír a Katelyn.

Siguieron bebiendo café, estaban fuera de Le Jolie Café, por ser empleadas podían comer y beber lo que sea gratis por cortesía del señor Chen. El mesero llegó con baguettes para Kenny, Jane no tardó en robarle un poco del plato. Katelyn no podía negar que se divertía con ellos dos, a pesar de ser pareja, no se sentía mal tercio, pero al mismo tiempo resultaban ser tan empalagosos que daban ganar de tener a alguien a su lado.

— Chicos, me tengo que ir – anunció Katelyn de repente. La pareja regresó la vista a su amiga.

—¿Por qué? La estamos pasando genial – preguntó Jane haciendo puchero.

—Tengo que ir al Hogar, a estas alturas Harry ya le habrá dicho la verdad a Alice, si no doy la cara será un problema – explicó colgando el bolso en su hombro.

—Bueno, diviértete – se resignó Jane, despidiéndose con la mano.

—Con cuidado, Kate – dijo Kenny.

Katelyn asintió, se levantó de su asiento y se alejó mientras se despedía con la mano.

*

—No puede ser... — expresó Marcel incrédulo observando la pantalla de la computadora – Me admitieron – dijo releyendo nuevamente el contenido del correo. El remitente... HARVARD.

— ¿Qué cosa? – preguntó Vee entrando a la habitación, cargando con ella dos tazas de té. Marcel giro a ella con una cara llena de emoción.

— Vee, Harvard me aceptó – contestó irradiando felicidad.

—Eso es genial – dijo apoyando las tazas en el escritorio y acariciando las mejillas del muchacho – Pensé que irías a Cambridge – recordó Vee desconcertada.

—Apliqué en varias universidades, fui aceptado en todas, pero no creí que Harvard iba hacerlo también – explicó Marcel, tomando la mano de la chica.

—Pero si vas a Harvard significa que te irás lejos de mí. No estás haciendo esto por Harry, ¿verdad? – analizó Vee con tristeza.

—No, él no tiene nada que ver – negó Marcel sentando a Vee en sus piernas.

—Pero no quiero que te vayas lejos de mí – dijo ella besándolo en los labios. Marcel se quedó pensativo un momento.

—Entonces ven conmigo – propuso Marcel.

—¿A Harvard? Estás loco – respondió Vee incrédula.

—No es necesario Harvard, hay otras universidades cerca donde puedes estudiar psicología, podríamos vivir juntos. Es cuestión de investigar. – sugirió Marcel, Vee se quedó sin aliento. Quizás estaba yendo demasiado lejos.

—No lo sé, Marcel – dudó ella haciendo una mueca – Es una decisión muy difícil.

—Piénsalo – sonrío Marcel comprensivo, Vee asintió agradecida antes de besarlo en los labios – Por cierto... — habló Marcel interrumpiendo el beso – Viajaré a Massachusetts para la entrevista. Solo unos días.

—Está bien, supongo son buenas noticias – aceptó Vee antes de volver a besarlo.

*

Katelyn caminó dos cuadras más después de bajarse del bus, entró al Hogar de la Felicidad, saludó a la señora Derry que estaba en su escritorio como de costumbre. Siguió de largo y subió las escaleras hasta el piso recreativo. Katelyn estaba preparada para encontrarse a Alice de la manera más incómoda posible. En vez de encontrarse a la chica de ojos azules, se encontró con una chica de melena rizada de espaldas.

—Hola – saludó Katelyn confundida, la chica se giró y alzó las cejas sorprendida.

—Hola, tú debes ser la nueva. Kate ¿no? – Katelyn asintió, la rizada caminó a ella – Soy Gabrielle, me puedes decir Gabe – se presentó esbozando una sonrisa – Alice me habló un poco de ti, un gusto conocerte al fin.

—El gusto es mío – respondió Katelyn – Por cierto, ¿Dónde está Alice? – preguntó al no encontrarla en ningún lado, solo a los niños concentrados en sus libros de ejercicios de caligrafía.

—Ella no vendrá en un tiempo – respondió Gabe haciendo una mueca – Su hermana llegó de viaje y estará con ella – explicó, Katelyn no sabía si sentirse aliviada por la situación.

—Bien por ella... — comentó Katelyn, luego se percató de lo mal que había sonado – Digo, que su hermana haya vuelto – rectificó sonriendo nerviosa. Gabrielle asintió con la cabeza y regresó con los niños.

—Vamos, hay mucho que hacer – le dijo a Katelyn invitándola a que la siguiera.

Las siguientes horas en el hogar fueron eternas, al menos para Katelyn, quizás porque Gabrielle no ponía el mismo entusiasmo como Alice, quizás Katelyn estaba más acostumbrada a trabajar con la chica de ojos azules, que comenzaba a extrañarla. Sin embargo. ahora estaba Gabrielle ocupando su lugar, quiera o no tenía que acoplarse.

La jornada terminó con los niños yendo a cenar, ahí los esperaban las demás voluntarias del lugar, que en su mayoría eran monjas. Gabrielle se apoyó en el marco de la al comedor con Katelyn a un lado, ambas observaban a los niños prepararse para cenar.

—A veces este lugar me recuerda a mi vieja escuela, la secundaria St Pauls – habló Gabrielle de repente, Katelyn la miró esperando a que prosiguiera – Era cristiana, había monjas de buen corazón.

—Yo fui a una escuela pública, nada que ver con ese lugar – habló Katelyn con humor.

—No debe ser tan malo, mi escuela era de niñas, era un desastre, lo odiaba – expresó Gabrielle recordando esos tiempos, cuando conoció a sus enemigas, pero luego sonrío, también conoció a sus mejores amigas, entre ellas Alice.

—Bueno, si lo planteas de esa manera, yo igual lo odiaría – contestó Katelyn haciendo reír a Gabrielle.

—Creo que es hora de irnos – habló Gabe y se giró en dirección al vestíbulo, Katelyn la siguió.

—Tienes razón, se hace tarde.

Gabrielle se detuvo en seco, Katelyn igual hizo lo mismo, casi tropezando con ella, y se percató de la razón de su reacción cuando vio a Harry de pie en el vestíbulo.

—Alice no está aquí – dijo Gabrielle de manera brusca.

—Eso ya lo sé – replicó Harry de la misma manera. Katelyn notó la tensión entre ellos – Vine a ver a Mike, con permiso – dijo él pasando a un lado de Gabrielle, ignorando también a Katelyn.

Esta última frunció el ceño confundida, eso fue demasiado raro.

— ¿Se conocen? – le preguntó a Gabrielle, ella asintió respirando pesadamente.

—Es el novio de mi mejor amiga, perdón que hayas visto eso, solo no lo soporto – explicó exaltada intentando respirar tranquilamente. Quizás Gabrielle encabezaba en la lista de personas que odian a Harry.

—Solo ignóralo – opinó Katelyn alzando los hombros.

—Tomaré el consejo, tengo que irme – respiró Gabrielle, tomó su abrigo que colgaba en una percha y salió de ahí sin despedirse.

Katelyn procuró no juzgar esa actitud extraña de Gabe, tampoco quiso hacerse ideas en la cabeza de que Gabrielle tenía un historial con Harry al igual que ella. En lugar de eso, regresó al comedor, y en el umbral de la entrada a este vio una escena conmovedora. Harry agachado a la altura del pequeño Mike mientras le hablaba, por primera vez veía a Harry sonreír sinceramente.

—Alice me dijo que te van adoptar, así que vine a despedirme –hablaba Harry, disimulando la nostalgia en su voz, el pequeño asintió con la cabeza – Te traje esto.

Harry sacó una bolsa de regalo de su abrigo y se lo entrego a Mike, este le agradeció en señas y le dijo algo más que Katelyn no pudo entender, pero había hecho sonreír a Harry.

—Yo igual te voy a extrañar – respondió Harry antes de apoyarse en sus rodillas y reincorporarse. Mike lo abrazo estremeciendo a Harry, después se apartó de él y se fue corriendo de nuevo al comedor con su bolsa de regalo.

—Eso es nuevo – comentó Katelyn sobresaltando a Harry, él aclaró su garganta y su sonrisa desapareció.

—¿Se te ofrece algo, Robinson? – preguntó de mala gana. Katelyn arqueó una ceja sin dejarse afectar por su actitud.

—Tranquilo, Harry, conmigo ya no funciona hacerse el frío y patán – aclaró Katelyn cruzándose de brazos, Harry puso los ojos en blanco – Pero eso fue un lindo detalle de tu parte ¿Qué le regalaste? – Harry suspiro resignado a contestar.

—Una consola Nintendo – respondió yendo al vestíbulo con intenciones de evadir a Katelyn, ella lo siguió.

—Pudiste darle un libro – dijo intentando llamar su atención.

—Gracias por la sugerencia, lo tomaré a la próxima – habló Harry con sarcasmo – Si me permites, me voy, iré a ver a Alice.

—¿Ya le dijipste la verdad? – preguntó Katelyn haciendo que Harry se detuviera en seco y gruñera, se regresó a ella intentando mantener la paciencia.

—Escucha, Robinson, no puedo decirle la verdad a Alice, tenemos suficientes problemas para añadir uno más grande – explicó Harry volteando a varios lados asegurándose que nadie escuche la conversación.

—Bien, tranquilo – habló Katelyn suavemente – Era solo una sugerencia para estar en paz contigo mismo, pero tienes que hacerlo.

—Lo sé – gruñó Harry – pero no ahora. No quiero perderla– confesó en un suspiro.

—Yo perdí a Marcel – reclamó Katelyn.

—Porque quieres, yo tuve que luchar para estar con Alice, tengo que soportar a la malhumorada de su mejor amiga – replicó Harry refiriéndose a la muchacha rizada, Gabe. – Te avisaré cuando Alice esté enterada... — añadió con sarcasmo – Mientras tanto, déjame en paz – le ordenó retirándose en dirección a la puerta.

—Eso me pasa por solidaria ser con quien no lo merece – bufo Katelyn repitiendo las palabras de su amiga cuando estuvo sola.

***

Hola chickys, tardé menos de lo esperado, sus comentarios me inspiraaan ♡

Al parecer Marcel quiere llevar en serio las cosas con Vee, ella esta preparada para eso a pesar de todo lo que hizo para conseguir lo que quiere, o será que el karma hará una inesperada visita. Katelyn y Harry ya hicieron las paces, qué pensará Marcel al respecto.

#FACTSDELANOVELA: 

✔Verónica Jonhson fue de los primeros personajes que cree para esta novela, el nombre me basé en el personaje femenino de Zayn en BSE , aunque no la consideré como novia de Marcel en ese momento.  

✔Publiqué esta novela en Facebook por primera vez, Katelyn era rayita, la típica chica nueva de la escuela, de la cual se enamora Marcel.

✔En la versión de Facebook, Alice y Harry solo eran amigos con derecho, obviamente poco a poco Harry se iba enamorando.

¿Les gustaría más facts así?

No olviden votar y comentar qué les pareció el capítulo. Siempre es un gusto leer lo que piensan de mi novela.

Un beso, M