DÍA 35: Cuarto día de campamento

Nuestra tarea de hoy consiste en contactar con los pokémon de tipo Fantasma que hay en el bosque. Para ello, saldremos por la noche por parejas del mismo equipo. Tenemos que llegar a las Ruinas Cumbre para recuperar una medalla.

Maya y Aura se han puesto de pareja (Jo! Yo quería con una de ellas dos por Lira puede ser muy pesada!), Lira y yo nos pusimos juntas, pero al poco rato, ella me dijo que era mejor que me pusiese con Silvio, que ella ya se pondría con otro cualquiera. Dice que necesitamos pasar más tiempo juntos y no sé que más. No tuve otra opción, Lira es cabezota como ella sola, y a Silvio no le importa, así que....

Ahora acabamos de almorzar, falta todavía mucho.

Mis compañeras me han pillado escribiendo en mi diario y a Lira se le ha ocurrido poner un pequeño recuerdo (el de la página anterior). Tengo que aprender a ser más disimulada. A mi me ha dado un poco de vergüenza pero ellas dijeron que no pasaba nada y Maya me enseñó también que traía un diario al igual que yo.

Ellas tres son maravillosas, son verdaderas amigas, aunque todas de distinta personalidad.

Ahora Aura ha ido al servicio, Lira está hablando con el tutor sobre lo de esta noche y Maya está afuera. Yo estoy en la habitación escribiendo.

Faltan cinco horas para que salgamos al bosque. Estoy impaciente, le demostraré a Silvio lo valiente que soy. >:D

Estoy que no puedo dormir. Cuento lo ocurrido en la expedición:

Empezamos y cada pareja tiró por un camino del bosque. Silvio y yo no hablamos demasiado y andamos muy juntos. Él mostraba un poco de sorpresa hacia mi voluntad y mi "no miedo", todo lo contrario que las demás chicas.

"-¿No sientes ningún miedo?- Me dijo después de haber caminado un poco.

-No, ¿qué puede haber? Es el mismo bosque pero iluminado por la Luna.

-No debería sorprenderme. Una magnífica como tú no tiene miedo, si no, ¿qué magnífica que sería?- " dijo él con una sonrisa.

Yo lo miré, él me miró, pero no dijimos nada. Yo solo pensaba en llegar a las ruinas....Aunque ese pensamiento se veía turbado por lo que me provocaba la presencia de él al lado mía, tan cerca.

De pronto escuchamos a gente gritar y al cabo de un rato, otras personas también. Incluso pasó un chico corriendo delante de nosotros a toda velocidad.

Silvio, nada alterado y muy tranquilo, notó mi nerviosismo, el cuál yo intentaba disimular. Entonces me cogió de la mano y me la apretó firmemente. Yo miré nuestras manos y le miré a él. Él me dedicó una cálida sonrisa que decía ~No tienes porqué temer, tranquila, estoy a tu lado~. Yo le devolví la sonrisa y seguimos andando. (Ni pensar que fue mi enemigo hace unos días).

Ay Dios mío, ¿sabes como tenía el corazón de acelerado en ese momento? Suerte que mientras andábamos me calmé, pero al principio fue como "¿Qué estamos haciendo?".

"-Si todas las personas se lían a correr sin su pareja, pueden terminar perdidas, ¿no crees?- dije yo al ratito.

-Supongo que el bosque estará vallado. Además, un chico me dijo que había cámaras ocultas.

Al decir eso, me dio mucha vergüenza que nos llegaran a ver a Silvio y a mi cogidos de la mano. ¿Nos habrá visto alguien por las cámaras?

Al final, Silvio y yo llegamos sanos y salvos a las ruinas Cumbre sin haber visto ningún pokémon fantasma.

Allí se encontraba Yenry solo, pero no estaba en buenas condiciones. Silvio se dio cuenta de que estaba hipnotizado porque solo miraba a un punto fijo. Era el círculo de una estatua que estaba en el centro de las ruinas. Yo me preocupé por Yenry e intenté sacarle de ese estado. Al tocarle, él me cogió fuertemente la muñeca y me arrojó al suelo con una gran fuerza. Silvio no lo dudó y se interpuso entre Yenry y yo. Se aseguró de que estaba bien (le dije que sí, pero me dolía mucho la muñeca).

Pero todo esto no es nada. De ninguna parte, salió una niña siniestra...La niña soltó una risita. Sus ojos eran completamente negros y me fijé en que los de Yenry estaban exactamente igual. Entonces, del círculo de la estatua salió un agujero negro que empezó a arrastrar a Yenry. Silvio intentó agarrarlo por la muñeca, pero se quemó. En eso, de repente salió un Duksnoir salvaje que pudo salvar a Yenry. Entonces el agujero negro y la niña desaparecieron.

Yo mientras, estaba en el suelo palideciendo. Jamás en todo lo vivido como Ranger había visto algo tan tenebroso.

Silvio se agachó y me rodeó con sus brazos. Yenry recobró el sentido y se asustó al verse presa de Duksnoir, pero el pokémon solo ayudaba. Silvio cogió la medalla, me levantó, me rodeó con su brazo de manera protectora y nos fuimos de regreso. Duksnoir nos hizo guaardia durante todo el recorrido. Yenry estaba alucinando cuando le contamos lo sucedido.

Cuando llegamos estaban todos, algunos temblorosos de miedo, otros desesperados porque sus compañeros eran unos lloricas, otros contando que habían visto a una niña fantasma...Me acerqué a estos últimos y pregunté. Efectivamente, era la misma niña. Yenry, Silvio y yo se lo contamos al profesor Serbal y entonces el señor recordó lo sucedido no hace mucho.

Mientras trabajaban en una obra más allá de las ruinas, una excavadora por accidente golpeó una pared de piedra y tras el agujero resultó haber una cueva. Los obreros creían que era una entrada al mundo de los espíritus.

Eso fue todo lo que nos contó. A saber qué hay más...¡Menuda pruebecita nos han hecho! Menos mal que Duksnoir se ha convertido en guardián de este bosque.

Después de esto...No puedo dormir y tengo miedo ~_~ Tengo mucho miedo de que la niña fantasma venga a la habitación. ¿Silvio y Yenry estarán igual?

De todas formas ya es hora de que apague la lucecita de mi mesita antes de que las chicas se despierten.

Hasta mañana...

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